Cap. 8: La Ultima Cita
Llegado el momento de mi ultima cita yo ya estaba arreglada, pero los nervios me estaban matando, realmente me costo mucho reflexionar y ya estaba clara de mis fallas, no se porque era necesaria la quinta cita.
¿nos vamos?- oigo la vos de Santiago preguntar mientras toca la puerta. Mire en su dirección y el vestía un bonito traje oscuro una camisa blanca y corbata, aunque al Dr. Todo lo que vestía se le veía bien, debo reconocer que estaba mas guapo que nunca, me preguntaba a donde me llevaría, vestido así- si claro listicima- respondí mientas salia de mi habitación.
Salimos al estacionamiento y nos fuimos en su auto rumbo a no se donde.
Luego de conducir durante unos 15 minutos aproximadamente se detuvo en la puerta de un lindo restaurante, esta me parecía ser la cita mas normal de todas -
¿y que hacemos aquí?- pregunte, la verdad es que el siempre me salia con sorpresas así que ya estaba a la defensiva por decirlo de alguna manera.
vamos a cenar- responde mientras sonríe.
¿es enserio? ¿No esta bromeando o si?- pregunto claramente sorprendida.
no claro que no- niega con la cabeza.
Durante la cena se sentía mucha tensión, yo estaba tan nerviosa, el parecía que quería decir algo pero no se animaba.
Oye Marina, tengo que decirte algo- dice muy nervioso, la verdad eso no era común en el siempre a sido un hombre tan espontáneo.
-¿Si dime que sucede?- respondo claramente curiosa.
-Se que vienes de una mala situación, y no quiero que te sientas comprometida con lo que te voy a decir si.
-vaya Dr hable de una ves que me pone muy nerviosa.
Creo que estoy sintiendo cosas por ti, no se me gusta tanto tu compañía, eres tan bella y gentil que no lo puedo evitar, se que no es nada profesional de mi parte pero es que es algo que se me escapa de las manos.
-yo me puse colorada, aunque debo confesar que me encantaba oír eso, "PERO" como no todo puede ser bello, yo me había divorciado hace menos de seis meses era muy resiente aun, aunque mi ed marido creo que no le importo eso, bueno que le va a importar asta un hijo tiene-
hay Dr que le puedo decir- dije sorprendida pero dichosa, espero que eso no se me note.
-No tienes que decir nada, se que no es correspondido- dijo mientras veía como como se apagaba ese brillo que siempre tenia en su rostro.
-la verdad yo también disfruto mucho su compañía, pero como usted dice vengo de una situación difícil, y en este momento estoy confundida solo puedo ofrecerle mi amistad.
-Esta bien entiendo, solo necesitaba decírtelo.
Desde ese momento comencé a enderezar mi vida, volví a la iglesia de donde nunca debí salir, cada día pedía perdón por mi falta, puse una contra demanda a mi ex-esposo, para exigir lo que por derecho me correspondía de nuestro matrimonio, al principio me deje llevar por el dolor de su traición y sus abogados me destrozaron en el juicio pero esta ves fue diferente, había encontrado la fortaleza en mi interior después de la gran lección que me dio una pequeña niña de 8 años, considerando que el era el adultero, fue mas fácil ganar la demanda.
Con el dinero de la demanda ayude a expandir la labor de Mario, realice una serie de gestiones para crear un centro de apoyo para las personas que viven en la calle, Alex es ahora un exitoso cantante de alabanzas en la iglesia, me hizo muy amiga de Kelly, cada ves que tenia tiempo iba a visitarla y trataba de hacer alegres sus días. Ella murió luego de tres meses.
Con el tiempo en Dr y yo nos volvimos cada ves mas cercanos, era evidente que el me gustaba tanto como yo a el, no pasaron seis meses cuando eramos novios, un año después nos casamos y tuvimos una hermosa hija llenada Kelly Esperanza, en honor a la memoria de aquella pequeña nona enviada por dios para darme una gran lección, y esperanza, porque mientras estemos vivos y de la mano de dios no hay noche oscura.
Fin...
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