Cuando llegué a donde se encontraba ella, esta al verme me detuvo plantándose en medio.

-¿Por qué?- preguntó -¿Por qué tú? ¿Por qué no yo?

-¿Qué?- dije confusa.

-¿Por qué Marc te eligió a ti?- vuelve a preguntar -Cuando por fin estaba a su lado, después de que Amy se fuera de su lado, del lado de Kyle y Marc.

-¿Amy?- dije sin comprender.

-Antes, todo era Amy, los tres eran los mejores amigo, luego ella se distanció y se mudó a vivir sola, fuera de la manada- empezó explicándome.

Cuando dijo eso me vino a la cabeza el momento en el que Amy se mudó con Tyler y conmigo a la casa.

-Luego yo ocupé su lugar, quería llamar la atención de Marc, pero él solo pensaba si había hecho algo mal para que Amy se fuera de la manada- me sigue contando -Así que me tinté el pelo de rubio como el de Amy para que así se fijara en mi. Cuando ya todo estaba casi bien entre nosotros, apareciste tú estropeándolo.

-¿Yo?- no sabía como reaccionar a lo que me decía.

-Marc empezó a verte a ti y ahora ya no me hace caso, no me mira, ni se fija en mi- finaliza.

-Tal vez, solo tienes que ser tu misma- le explico despacio y con tono suave -Tiene que verte cómo eres tú en realidad y no pretendiendo ser otra, creo que así se fijaría en ti.

-Ya me da igual, solo quiero que no me aleje de él- dice al borde del llanto.

-Yo no voy a alejarte de él, si eres su amiga lo respeto, pero se tú misma.

-Creo que tienes razón lo intentaré, graci...- no terminó la frase pues se puso alerta y eso me preocupó.

La chica miraba atenta a todos lado, pero no le dio tiempo a reaccionar cuando alguien se puso detrás de ella.

-Cui...- no pude avisarla pues alguien detrás de mí me tapó la boca.

Intenté liberarme pero no pude, miré a Nina y ella estaba inconsciente en el suelo. Un hombre la revisaba, este tenía un trapo en la mano. Yo seguía removiéndome intentando escapar. Conseguí liberarme, pero no pude huir de ahí.

-Maldición es clorofor...- no terminé la frase pues caí al suelo inconsciente como Nina.

Cuando recuperé la conciencia estaba en una especie de furgoneta o algo parecido, pues notaba que me movía. Miré a mi alrededor y vi a Nina desmayada. Fuí hacia ella, pero cuando iba a ver si estaba bien vi que tenía las manos atadas. Nina también las tenía atadas. Intenté despertarla llamándola.

-Nina- susurré -Nina, despierta.

Esta se removió y cuando abrió los ojos se levantó de un salto sentándose en el suelo junto a mi.

-¿Pero qué ha pasado?- pregunta alarmada.

-Nos han atacado unos hombres, llevaban cloroformo, por eso nos desmayamos- le dije.

-¿Qué hacemos?- dice preocupada -Necesitamos ayuda pero, ¿cómo la pedimos? No nos van a encontrar- dice a punto de darle un ataque de pánico.

-Primero relájate- la intenté tranquilizar -Mis amigos nos encontraran, incluso Marc que es un lobo podrá encontrarnos.

-Lo tendrán difícil- dice un poco más calmada -Yo soy la que rastrea a las personas y sin mi, tardaran bastante.

-Amy es rápida, puede alcanzarnos si encuentra pistas- le digo pensando.

-No podemos dejar pistas- dice ella mirando alrededor -Kyle es bueno observando pero debemos dejar algún mensaje, si salimos. A lo mejor lo encuentra.

-Pero no llegaran a tiempo- digo poniéndome ahora yo nerviosa.

-Tu magia- dice ella -Usa tu magia.

-No controlo del todo mis poderes y no sé qué hacer con mi magia.

-¿Romper las ataduras de nuestras manos? ¿Abrir la puerta?- dice intentando pensar.

-¿Pero por qué nos han raptado?- pregunto sin entender -¿Qué quieren de nosotras?

-No quiero saberlo solo quiero salir de aquí- dice ella elevando la voz.

El vehículo se detuvo y la puerta se abrió, sacándonos a empujones. Avanzamos lentamente, mirando alrededor, había algunas instalaciones y personas, era una guarida.

-¿Es ella?- pregunta un hombre.

-Sí- le contesta otro.

El hombre era castaño y nos miraba a Nina y a mi, como si nos estuviera revisando. Al parecer era el jefe, pues todos esperaban a sus palabras.

-¿Cuál es?- pregunta el hombre.

-Esta- dicen empujándome hacia delante.

-Así que tú eres la última bruja que queda- dice sonriendo.

Este hombre me daba muy mala espina, como sabían que era una bruja y que era la última, sin contar a mi madre.

-Las noticias vuelan, pequeña- dice como si me hubiera leído la mente -Bienvenida a la guarida de los cazadores- dice extendiendo los brazos.

El hogar de Tyler, estaba en su casa. Él nunca hablaba de este sitió, al parecer tenía recuerdo malos de él. Ahora sí que quería irme a casa.

-Amy, Tyler- susurré, pero al parecer el hombre me escuchó.

-¿Conoces a Tyler?- pregunta curioso.

-Yo...sí- dije nerviosa, pues todos me miraban.

-Ese chico- dice el hombre frunciendo el ceño -¿Por qué tiene que ser tan rebelde?

-Lana- dice Nina pegándose a mí -No le hables al enemigo.

-Oh, no te preocupes pequeña- dice el hombre -Es bueno saber que mi hijo esta bien.

-¿Hijo?- dije confundida.

-Tyler es mi hijo, pero se fue- dice como si fuera normal.

-Tyler es el hijo del Jefe de los Cazadores- dije sorprendida al darme cuenta.

-Sí, pero se fue, dejó de ser un cazador, después de todo el entrenamiento que le puse para que me sustituyera como nuevo jefe- dice apenado.

-¡Tú!- grite furiosa.

Tyler tenía muchas cicatrices en el cuerpo cuando lo conocimos, algunas ya habían sanado, pero eran horribles. Amy y yo no sabíamos de qué eran, él siempre intentaba quitarle importancia, pero parecían dolorosas. Por eso huyó Tyler, porque odiaba a su padre, sus entrenamientos, ser cazador. Intenté alcanzar al hombre, pero los otros me detuvieron tirándome al suelo. Nina solo miraba asustada sin saber qué hacer.

-¡Maldito!- grité inmovilizada en el suelo -¡Tyler ha sufrido por tu culpa!- dije con mucho odio al hombre.

-Tranquila brujita- dice agachándose -Estarás muy cómoda aquí y puede que hasta traigas de vuelta a mi hijo- dice con una siniestra sonrisa.

Después de eso, Nina y yo fuimos encerradas en una especie de calabozo. Ahora entendía a Tyler y porque no quería ver a su padre, era odioso. Ahora entendía porque se vino con Amy y conmigo, él porque no quería regresar a su casa.

-Tranquila, nos salvarán- le dije a Nina igual de asustada o peor que ella por culpa del padre de Tyler.

-Eso espero- me contestó.

-Chicos, socorro- dije por el enlace esperando a que Amy me escuchara.