Tercera Persona P.O.V.

Al día siguiente Boggs va en busca de Katniss y Peeta y los vuelve a guiar a través del Distrito 13 y siguen miran extrañados las cosas que ven y como muchas de las personas se mueven de forma automatizada como si repitieran el mismo patrón una y otra vez durante días. Al llegar a un hangar ven a la nave comenzar a ascender para su abordaje, y Katniss distingue a Gale junto a la pasarela para entrar y acelera un poco para llegar hasta él y lo abraza

G: no puedo creer que vayas a hacer esto -dice mientras la suelta del abrazo y luego le da otro más corto a Peeta pues a pesar de sus diferencias y de que este estuvo en algún momento enamorado de Katniss, le agradecía como siempre mantuvo viva a Katniss y luego se separan con un asentimiento mutuo

K: tengo que verlo por mí misma -dice mientras se gira hacia la pasarela

Boggs: por aquí -señala la pasarela y los dos jóvenes siguen a Katniss a la nave, el Coronel se aleja de la nave a medida que preparan la pista para su despegue y al llegar al ascensor por el que llegaron se gira y mira como la nave comienza a salir del hangar

La nave entonces despega y al salir de este se encuentra rodeada por extensas zonas verdes e incluso un río no muy lejos de allí. Continúan su viaje hasta llegar al Distrito 12 donde comienzan a abrir la pasarela para su aterrizaje

Gale: el 13 lo ha barrido todo, podéis estar tranquilos -les dice a los antiguos tributos mientras estos se afirman en sus agarres y miran hacia el suelo- ¿seguro que no quieres que te acompañe? -pregunta ahora a Katniss

K: sí, sé seguro

G: no os perderemos de vista desde arriba -les indica mientras estos comienzan a bajarse de la nave

Al tocar tierra ambos ven impactados la situación del 12, mientras la nave vuelve a alzarse en vuelo, todo destruido lleno de polvo y escombros por doquier. Juntos los tributos caminan por las zonas que recordaban según su estado anterior, cuando al pisar tierra blanda Katniss mira hacia abajo y ve una pequeña calavera y se lleva la mano a la boca ahogando así un jadeo y Peeta aprieta los puños lleno de rabia. Katniss ayuda a subir una pendiente a Peeta y al llegar a la cima ambos miran aún más impactados la cantidad de esqueletos que se amontonan en lo que fue un barracón (no sé si era eso pero pongamos que sí, vale?) hasta lo largo de la extensión al completo de este. Katniss cae de rodillas mirando frente a ella, y Peeta patea una pequeña roca que tenía a sus pies mientras grita fundido en rabia.

P: iré a mirar mi antigua casa... o lo que quede de ella... -dice furioso a la vez que triste

K: yo iré a la mía -dice sin girarse a mirarlo mientras se levanta y caminan en direcciones opuestas

Peeta camina más a lo largo del 12 mientras sigue viendo la destrucción causada por Snow, al llegar a su antiguo hogar ve su panadería destruida cayéndose un poco por uno de los lados, empuja la puerta con fuerza y al entrar ve lo que fue su hogar lleno de escombros. Avanzando por ella se deja bañar en los recuerdos vividos allí durante unos minutos y luego parte hacia la casa que le otorgaron como Vencedor.

Mientras tanto Katniss había llegado a la casa de los Vencedores mientras miraba a su alrededor avanzando más y más en la casa y agarra su vieja chaqueta y con un bolso comienza a recoger las cosas que creía que serían útiles hasta que se asusta por el sonido de los objetos caerse y se gira para ver al gato de su hermana aparecer por la ventana. Continuando con la búsqueda de objetos llega hasta una mesa donde se encontraban las rosas blancas que en su momento Snow le envió, y se guarda la foto de su padre, y al mirar entre ellas se encuentra con una intacta y nada marchita como el resto de ellas

K: increíble -dice soltando la rosa, se gira y vuelve a agarrar al gato de su hermana y lo guarda en la bolsa quien se resiste- venga no quieres ver a Prim? -dice mientras arrulla al gato- como lo siento -se disculpa mientras lo guarda

Por otro lado Peeta, hace lo mismo que ella y recoge los objetos de valor de su casa de Vencedor mientras lo mete todo en una bolsa, cuando se encuentra con un libro de unos dibujos que hizo Isabelle de las personas que conoció cuando protegió a Gale y los guarda en la bolsa. Oye ruidos fuera cerca del cobertizo y sale agarrando el cuchillo más cercano que tiene a mano en la cocina, al caminar hacia la fuente del sonido se para mientras ve a los arbustos moverse espera pacientemente y de ellos emergen dos grandes lobos negros del tamaño de caballos que le recuerdan a los que usó Cinna para tirar del carro de Isabelle en los Juegos del Hambre, al mirar sus ojos lo confirma pues uno, el más bajito aunque no por mucho, tiene los ojos azules y el otro, de mayor tamaño, los tiene diferentes uno ámbar y otro azul. Se queda petrificado mientras los lobos gruñen y se le acercan y lo olfatean reconociendo el olor familiar de la vez que tiraron los carros y de una chaqueta que su madre llevó una de las últimas veces en que la vieron. Peeta sorprendido estira las manos y deja que estos se acerquen a ellas y felizmente se dejan acariciar

P: no sois más que unos cachorritos gigantes no es así -sonríe un poco mientras pasa sus manos por el pelaje de los lobos quienes gruñen jugando, al tocar algo alrededor de sus cuellos gira uno y luego el otro para descubrir grandes collares con dos botones en ellos, una placa con nombre y una nota enrollada en el lobo más grande- veamos que tenemos aquí -gira la placa del más pequeño- Nix... eres una chica? -intenta mirar su parte trasera pero la cola del grande le golpea la cabeza- está bien, está bien -se queja y se gira hacia el macho- Morfeo... nombres relacionados con la noche enserio? muy original -resopla con sarcasmo, luego estira la mano y agarra la nota que hay enrollada en el collar de Morfeo- veamos... 

A quién esté leyendo esto, me dirijo directamente a ti, para pedirte que si conoces a Isabelle Snow personalmente y estos lobos te reconocen como amigo, por favor cuida de ellos, y si se te acercan pero no conoces a Isabelle deja ir a los pobres animales ellos pasarán de largo si tú no les atacas. Seguiría cuidándolos yo misma, pero me temo que mi tiempo es limitado, el Presidente Snow nos ha convocado a mí y mi familia para despedirnos de Isabelle, y los tres sabemos lo que eso significa... pero no podemos dejarla marchar sin verla una última vez, si logra salir viva de estos Juegos dígale por favor que lo que nos ha ocurrido no es culpa suya. Los tres sabíamos a lo que acogernos de una forma u otra, y la amaremos siempre como una hija y una hermana y que sea donde sea que estemos siempre cuidaremos de ella. Atentamente Martha, Albert y Cameron.
Posdata, en el collar hay dos botones para convertir a los lobos en pequeños cachorros, E de encoger, y otro para devolverlos a su tamaño natural, A de agrandar. Cortesía de uno de los tributos, un señor con gafas

P: vaya... -se queda reflexionan sobre lo que hacer, pues recuerda una conversación antes de los Juegos donde Isabelle le contaba sobre estos lobos cuando tiraron del coche en la presentación y que eran como sus hijos. Cuando escucha la nave comenzando a acercarse, es entonces cuando rápidamente toma una decisión. Toca los collares y busca el botón E y los presiona y tal y como describía los lobos se convierten en pequeños cachorros- impresionante -rápidamente los agarra y mete en su bolso- ahora tenéis que estar muy callados, los lobos miran hacia arriba y dejan escapar un quejido que Peeta interpreta como un sí. Entonces vuelve a su casa y sale por la puerta principal al mismo tiempo que Katniss

Ambos tributos corren hacia la nave que ha a aterrizado y desplegado la pasarela, y con cuidado de los animales abordan la nave y se sientan pasando de largo a todos y juntos el uno del otro

Gale: estás bien? -pregunta a Katniss quien se ve más afectada con los ojos rojos y mira las manos de Peeta quien tiene señales de sus uñas en las palmas

K: sí -dice mientras Peeta asienten y ambos comienzan a ponerse los cinturones de seguridad, entonces los lobos olfatean al gato de Prim y comienzan a maullar y aullar muy bajito entre ellos mientras se mueven dentro de las mochilas de los tributos en sus regazos

Gale: aseguraros de ocultarlos, no creo que se lleven muy bien con los gatos y los perros en el 13 -dice mientras mira a los tributos- Katniss, no tienes que hablar sobre ello, pero dime que viste lo que tenías que ver

K: sí, lo hice

P: más que suficiente -ambos dicen mientras se miran entre ellos y vuelven la mirada al frente