Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

La tierna basquetbolista (1)

Tzuyu se encontraba recargada en la pared enfrente del salón de clases de Nayeon, la estaba esperando a que saliera de la clase para ir a comer algo.

Solo faltaban unos minutos para que saliera su omega, así que no tenía que esperar mucho, en una de sus manos traía una malteada de fresa que era la favorita de Nayeon.

Siempre que iba por la rubia le llevaba aquella malteada o un postre que ella misma preparaba.

Alguien se paró en frente de ella, por ello alzó su mirada y vio que era una chica, le regaló una sonrisa.

— Hola, Chewy — la saludó con una sonrisa.

— Hola — le devolvió el saludo.

— ¿Qué haces aquí? — le preguntó con su voz dulce.

Tzuyu, hizo una mueca y se preguntó si no era algo obvio — Estoy esperando a Nayeonie — le dijo dirigiendo su mirada hacia la puerta de enfrente.

— ¿La omega problemática? — el ceño de Tzuyu se frunció al escuchar como le dijo a su novia — ¿De verdad es tu novia? — le volvió a hacer otra pregunta al ver que la alfa no le contestaba la primera pregunta que le hizo.

Tzuyu iba a responder de no ser por otra persona que lo hizo por ella.

— Sí — respondió con una ceja alzada — ¿Algún problema? — Nayeon le preguntó.

— ¿Cómo puede andar con alguien problemático? los omegas tienen que ser sumisos, tienes que ser alguien delicado y tienes que hacerle caso a todo lo que te diga Tzuyu — le comentó — No que ella te haga caso a ti.

Tzuyu era quien iba a hablar, pero Nayeon le dio una mirada que hizo que guardara silencio. Su omega daba miedo cuando estaba enojada.

— Bueno, sí soy alguien problemático y ¿Qué con eso?, no voy a ser sumisa ante nadie solo porque soy una omega — tomó aire — No porque Tzuyu sea mi alfa, tengo que hacerle caso y cumplir con todo lo que ella me pida, que Tzuyu haga lo que yo pido es cosa de ella no mía — le dijo ya enojada.

La omega iba a hablar, pero Nayeon la interrumpe.

— El hecho de que Tzuyu no te haya hecho caso no es mi culpa, que yo sea una omega problemática pero muy hermosa y que le haya gustado yo y no tú ya es otra cosa — le volvió a decir.

Chou sonrió un poco al ver que su omega dejaba sin palabras a la omega que estaba enfrente de ellas.

Bajó su mirada al sentir que alguien tomaba su mano y vio que era la mano de su omega, quien empezó a caminar hacia la cafetería.

— Está loca esa chica — escuchó decir a Nayeon — Omega sumisa mis ovarios — la mirada de Nayeon se dirigió hacia Tzuyu al escucharla reír.

— No le prestes atención a lo que dijo, solo son comentarios locos de la gente, bebé — le dijo para alzar su mano y extenderle la malteada a la rubia.

— Gracias, alfa — le dio un beso en el cachete para después darle un trago a su malteada.

— Nayeonie — la llama.

— Mande.

— ¿Te vas a quedar a ver el entrenamiento o quieres ir a tu casa a descansar cuando salgas de tu clase? — le preguntó algo nerviosa y apenada. No quería que Nayeon pensara que la quería 24/7 a su lado.

— Voy a llegar un poco después de que empiece tu entrenamiento, ya que tengo que organizarme con unos compañeros por el trabajo que te comenté — le informó — Espero y no tardar mucho hablando con ellos.

— ¿Entonces sí vas a venir? — preguntó con una emoción en su voz.

— Claro que sí, bebé — le dijo con una sonrisa — Sabes que en muchas ocasiones intento no perderme ningún entrenamiento o partido tuyo — le comentó haciendo un puchero al ver que su malteada se había acabado.

— Pero los entrenamientos son un poco aburridos y no quiero que te aburras en ellos — murmuró — A los que me gustaría que no faltaras son a mis partidos. Aunque entiendo que no a menudo vas a poder asistir a ellos — un puchero se instaló en sus labios.

— No pienso perderme ninguno, ni tus entrenamientos y ni tus partidos — le aseguró — A menos que esté en celo o me sienta muy mal.

Llegaron a la cafetería y compraron lo que querían comer. Ya en una de las mesas de esa cafetería se sentaron en esa mesa.

— ¡Eres muy tierna, Tzu! — exclamó Nayeon apretando una de sus mejillas.

— ¿Por qué lo dices? — algo avergonzada le preguntó.

— Es que cuando comes tus mejillas se inflan y haces unos tiernos pucheros, aunque eres esa mezcla de tierna y sexy — le dijo y vio que Tzuyu alzó una ceja — Como ya te dije como eres tierna, sexy es cuando estás sudada y tus músculos a veces me dan ganas que me ahorques con ellos — le comentó con una sonrisa.

— ¡Nayeon! — exclamó una avergonzada Tzuyu.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro