Otro día más en la ciudad de nerima, iba como de costumbre Hapossai escapando, de una turba de molestas jovencitas, víctimas de los robos constantes de sus prendas íntimas.
El anciano iba de lo más feliz cargando lo que él consideraba sus tesoros.

–¡Nunca me alcanzarán estos son mis tesoros!  – Happosai. 👴🏽😁

El viejo iba corriendo seguro de que nunca lo alcanzarían, pero no vio venir a dos jóvenes que venían peleándose, chocó contra ellos y fruto del impacto sus preciadas prendas salieron volando en el aire. Hapossai quedó horrorizado viendo, como se les escapaban de las manos las prendas, que con tanto amor había sustraído de muchas casas.

Los jóvenes sin darles importancia al choque después de levantarse siguieron en lo suyo, pero no escaparon de la mirada del viejo pervertido. No le tomaron atención al aura maligna del anciano pervertido, que empezaba a elevarse a grandes proporciones.

Sin previo aviso el anciano, fue golpeado hacia al piso por la turba de las jovencitas, lo golpearon hasta cansarse diciéndole todo tipo de insultos al anciano. Cuando Hapossai, se quedó solo tendido en el piso, dijo sus últimas palabras antes de desmayarse, por todos los golpes que recibió.

–¡Juro que me vengare de ustedes dos Ranma y Ryoga! – Happosai

A lo lejos la anciana Cologne sintió un mal presagio en su viejo corazón y sintió temor.