"Rengoku San, por favor... Por favor despierte... El huyó, todos están bien, usted ganó, no me deje, no... Usted no..."

"Toujuro... Puedo hacer una última cosa?"

-N-No... M-Mi.. mi chico..

-Oye

-Mi chico... Aquí estoy...

-Te estoy hablando hombre!

-Kamado, mi chico... Mi chico..

-FRANCO!!

El chico abrió los ojos viendo la mirada enojada de su padre

-Otra vez soñando con eso? Tienes 23 años y aún estás con eso, desde que cumpliste 15 es casi todos los días lo mismo! Ahora levántate! No pienso pagar por otro vuelo

Cuando su padre por fin se fue se miró al espejo acariciando la marca de nacimiento que tenía, era como una especie de agujero en su estómago, jamás lo entendió, pero mirarla le generaba una inquietud que nunca imaginó sentir

Se levantó y se fue a bañar, tarareando ritmos de Estopa y Gypsy Kings, fue y se tomó un jugo de naranja y tostadas con queso y huevo

-Hijo, come despacio

-Come como la gente hombre! Al menos hoy que es la última vez que te veremos comer aquí

-Papá, no me voy a ir de por vida

-Esto dices ahora, pero ya verás que te quedas allá, todo por qué no soportas a tu viejo

-Mi amor, Franco estará por última vez aquí, al menos se más suave

El hombre mayor guardo silencio y se levantó, poniéndole una mano en el hombro

-Cuidate hijo... Lo que hagas por favor que sea pensado con la cabeza y el corazón,no con uno solo, nunca sabes que puede ocurrir

Le sonrió a su familia y la Abrazo

-Me pueden despedir de Pablo?

-Hermano!!

El niño se lanzó a los brazos de su hermano, con lagrimitas en los ojos

-Me vas a dejar todo solo aquí

-Pablo, no hay forma de que pase, hablaremos menudo si? Te lo prometo

El chico asintió y cuando se iban a soltar lo abrazaron de manera grupal, y dándole los mejores deseos lo despidieron dejándolo en el taxi que le llevaría al aeropuerto, También, rumbo a Japón