POV JONGIN

El último par de semanas había sido cansado, jamás creí que la editorial tuviera tantas cosas por resolver. Los trabajadores eran capaces y trabajadores pero no había tenido un buen guía para sacarlos adelante, me había estado yendo a casa tarde, estaba cansado y sentía que las noches no me rendían pero todo estaba dando fruto.

Me acostumbraba rápido al ambiente de trabajo, las personas eran buenas y muchas veces me encontrar riendo con más de uno mientras teníamos charlas amenazas. Se podría decir que todo iba bien, o casi todo.

No tenía que ver con el comportamiento de los demás, mi comportamiento y mi cabeza eran los que estaban en este momento dándome problemas. Me había descubierto a mí mismo observando a Kyungsoo durante el día, si estaba hablando con sus compañeros, si reía, si estaba concentrado leyendo, mientras comía y sobre todo mientras chupaba sus típicas paletas de dulce que sabía Jimin le obsequiaba.

Me estaba desquiciando el verlo todo el tiempo, el estar interesado en él. Era muy bueno en su trabajo y se podía decir que todos lo amaban pero de mi cabeza no podía salir esa imagen de el en el club hace un par de semanas, sus mejillas sonrosadas y sus labios hinchados. Sus labios, si, demonios. Me estaban volviendo loco. Y cuando llegaba a casa en las noches esa imagen solo se avivaba más.

Eso contando con el hecho de que Taemin había estado saliendo con Minho últimamente y el tener que ver a Do diario afectaba mis neuronas y mis patrones de sueño. Justo ahora estaba como en la escuela, justo estaba reviviendo cosas que creí que no volverían a pasar, demonios justo recordaba cómo me di cuenta de que era Bisexual.

-Kai, vamos a comer – Me llamo Sehun asomándose a la puerta. – Muero de hambre.

Caminamos hasta la cafetería de la empresa y compramos algo ligero, Sehun se dirigió de inmediato a una mesa, fue tarde cuando me di cuenta de donde estábamos. Luhan y Kyungsoo nos inspeccionaban mientras estábamos de pie frente a ellos.

-Hola hyung.- saludo Sehun a Luhan.- Hoy vine a ayudar a Kai con algo, que coincidencia encontrarlos aquí – claro, coincidencia.- ¿Podemos? – descarado.

-Claro – Luhan estaba encantado y Kyungsoo sonrió viéndonos a Sehun y a mí, dios, que sonrisa.

Kyungsoo y Luhan eran ruidosos y juntándose con Sehun lo eran aún más, estuvimos entretenidos platicando mientras comíamos. Reí más de una vez por la imitación de Kyungsoo con un campesino, podía sentir mi cara partida por una sonrisa cada que veía a Kyungsoo reír.

Cuando habíamos terminado Sehun y Luhan nos dejaron solos a Kyung y a mí, caminamos hasta el ascensor y guardamos silencio en el trayecto, la tensión en el aire era palpable y mi corazón latía rápido.

-Creo que esos dos deben estar justo ahora en un cuarto de limpieza – susurro y solté una pequeña carcajada con la cual el me acompaño. – Sehun parecía un poco urgido ¿No? – volví a reír.

-Así es Sehun, nada cuidadoso y se nota que le gusta Luhan – asintió.

-Es bueno tenerlo por aquí, Luhan a veces es molesto – bromeo y sonreí. – A quien no he visto es a Chanyeol ni al Ken – se cubrió la boca después de decirlo como si hubiera salido sin querer.

-¿Quién?

-Oh, el chico del club – asentí en comprensión.

-Es Taemin – dije y asintió.- Él es un amigo.

-Sí, él- las puertas del ascensor se abrieron y cada uno se dirigió a su lugar.

Cuando en la noche fui por mi auto al estacionamiento no creí que me toparía con un Kyungsoo esperando el transporte público, me pareció extraño porque el siempre llevaba su auto, aunque puede estar esperando a alguien.

-¿Te llevo?- pregunte y el brinco del susto.

-No, gracias. Ya llamé a un taxi – negué.

-Sube.- Lo pensó un momento pero asintió.

Cuando este entro en el carro de inmediato pude sentir su aroma característico llenar el pequeño espacio, mis pulmones se llenaron del aroma.

-¿Te dejaron plantado?- El rió bajito.

-No, mi carro de averió esta mañana y por salirme tarde Luhan me dejo.- Miraba hacia enfrente.

-El mejor amigo – dije riendo – Ya es muy tarde.

-Sí, es que quise llevarme algunos escritos- señalo a la bolsa en su mano.

-No trabajes más de lo debido ¿Ok? – Sonrió y asintió- ¿Sigues viviendo donde mismo? – el negó.

-No, vivo solo ahora – le pase el celular para que teclear su dirección.

El camino fue en silencio por un rato, Kyungsoo estaba hecho un ovillo en el asiento y juro por dios que se veían jodidamente adorable, quería apachurrar sus mejillas.

-¿Tu mama está bien? – salió de su ensoñasen y asintió.

-Sí, ella tiene un pequeño negocio de flores y vive de eso. Nos vemos cada fin de semana.

-El recuerdo, era una mujer enérgica. Recuerdo cuando golpeo a uno de los maestros de la escuela por insinuar que eras malo en matemáticas – reí para mis adentros.

-¿Lo recuerdas? – asentí. - ¿Cómo no recordarlo?

-Bueno yo quería olvidarle, todos me veían raro después y algunos me odiaron más- levante una ceja.

-No creo que nadie te odiara.

-Me hacían bullying – comento serio y asentí.

-Eran unos tontos- susurre y me miro guardando silencio.

-Pero tú también me odiabas ¿no? – me miro pensativo, lo mire yo sorprendido a él.

Un montón de memorias se vinieron a mi mente ¿odiarlo? En mi vida se me había pasado esa idea por la cabeza.

.-Tus amigos se burlaban de mí y tú me mirabas con odio, nunca me dirigiste la palabra, Chanyeol menciono la otra noche que tu cambiaste equipo con el cuándo me tocó trabajar contigo – pase saliva ¿Que le iba a decir? Todo eso lo había dejado en el pasado.

-¿Y eso te hace pensar que te odiaba? – Llegamos a la dirección y pare el auto, Kyungsoo aún me veía.

-Si no era eso ¿Qué más seria?- Él no me estaba haciendo esto justo ahora, reí para mis adentros- Yo lo entiendo, sé que tal vez era desagradable a la vista y además cuando te le ibas a declarar a Krystal ella se me declaro, también me odiaría - ¿Qué? No podía procesar eso.

-Yo no te odie nunca - susurre, mi estómago estaba hasta el suelo.

-Enserio lo entiend...- No lo deje terminar.

-No, diablos no te odiaba Kyungsoo – se quedó callado y se mordió el labio. No, tu no había hecho eso justo ahora- Si todo eso pasó no fue porque te odiaba, demonios me gustabas – lo solté y su semblante cambio a uno de sorpresa.

-¿Q Qué?

-Me gustabas, no era ni Krystal no eran los demás, me gustabas tú y joder yo estaba tan confundido en ese tiempo.- mis manos estaban temblando porque solo Chanyeol sabia sobre esto y pensé que ya había pasado, que equivocado estaba.