//Capitulo 2//
Caminaba tranquilamente mientras observaba el paisaje, la verdad, no tenía mucha prisa por regresar.
Con las manos dentro de los bolsillos suelto un suspiro y mi detengo, el aire caliente de la exhalación empieza a subir y con sorprendente velocidad se pierde en las alturas, sacudo mi cabello y checo mi celular; una llamada.
Sé que no es de Splendid ni de algún "amigo", este sólo lo uso para el trabajo.
Miro a ambos lados revisando con prisa que ningún coche estuviera cerca, al haberme asegurado de eso cruzo la calle a paso más o menos lento y entro a un pequeño parque. Camino un poco más hasta una banca cerca de un pequeño lago, ahora congelado.
Me estiro, en un acto no tan anormal en mí, saco un cigarrillo y lo prendo. El humo se aleja de mí cuando lo suelto desde lo más hondo de mis pulmones.
Vuelvo a mi celular y marco el número, mientras espero giro un poco mi cabeza y fijo mis ojos en la pequeña bolsa de compras.
Sonrío un poco, es apenas una mueca y aun así me causa más sentimientos de los que desearía. No puedo evitar pensar que, si estuviera con Splendid... tal vez está sería una linda escena en vez de una deprimente y solitaria.
No importaría si discutiéramos, no dejaría de ser algo digno de postal...
»»»»»»»»»»»»»»»»»««««««««««««««««
--- ¡Ya volví!--- Grito mientras limpio las botas con nieve en la entrada. Doy un paso y cierro la puerta, colocando el abrigo en perchero.
---Ya era hora. --- Me dice una voz familiar mientras se asoma desde la cocina, su flequillo cae en dirección al suelo y sus ojos azul cielo me miran de arriba abajo con intriga, seguramente preguntándose la razón de mi tardanza.
Le doy una pequeña sonrisa y me acerco, entregándole la bolsa.
---Lo siento... es sólo que afuera la nieve está cayendo y yo... simplemente me pare a contemplarla un rato. --- Me mira sorprendido, al parecer he adivinado lo que iba a preguntar.
Unos segundos después de encoje de hombros y se dirige a reanudar su tarea inconclusa, tarareando una canción en un idioma que no entiendo.
Eso es algo que sin duda resulta bastante atrayente o curioso cuando menos; a Splendid le encantan los idiomas.
No importa que tan difícil sea o cuánto tiempo le tome, se empeñará en aprenderlo.
Yo, siendo sincero, no tengo esa paciencia o... ¿Cómo le podría llamar? ¿Perseverancia? Sí, es perseverancia.
»»»»»»»»»»»»»»»»»««««««««««««««««
Ya han pasado alrededor de 45 minutos y aún no está la comida, creo que moriré hoy...
---¡Cuánto falta!--- Grito, moviendo con impaciencia mi pie de arriba abajo.
No obtuve respuesta por un par de segundos, estuve a punto de levantarme del sofá cuando Splendid entra en la sala, con una porción de lasaña en la mano.
---Ya está. --- Se limita a decir mientras enciende la televisión, sin dirigirse a ningún canal en particular.
Asiento con la cabeza, dirigiéndome a la cocina por mi propia porción de lasaña... que sean dos.
Al final, terminamos mirando la tele hasta que dio un poco pasadas las dos. Cuando me levanté, dispuesto a ir a mi habitación, siento un ligero peso en mi hombro. Al voltear, simplemente quedé embobado por la escena.
Recuesto al dormido peli-azul en mis rodillas, empezando a acariciar con cuidado su suave cabello.
Tal vez pueda ver la tele una hora más...
¡Sigo viva! Y la verdad, no tengo escusas, soy floja y olvidadiza... además de que la escuela me trae de aquí para allá.
Puede que los personajes estén un poco fuera de sí (mucho, diría yo) pero si no actualizo hoy no me verán hasta semana santa o tal vez más.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro