—Pronto nacerá un nuevo príncipe—  dijo Handan viendo a Halime

—¿Por que me vienes a decir esto? ¿Acaso a ti no te duele?— dijo acercándose a ella

—Ya he aceptado mi destino, Dilaşud es la que tiene al príncipe mayor, luego Hümaşah y de último tu —le sonrió—prefiero quedar fuera de este juego que ya tiene ganado Dilaşud, espero ella te aplaste.

—Estas amenazando a la madre de un príncipe — le amenazó

—No te he amenazado Hatun— sonrió ante su reacción— solo dije que espero que ella te haga sufrir así como haz hecho sufrir a cada chica aquí.

—¿De que hablas?—bufo

—De la criada que apareció muerta aquella vez que la madre Sultana fue de visita dónde el príncipe Selim, como era que se llamaba, Raşa solo porque no te cumplió tu capricho.

—Estas mintiendo

—Puede ser o no— dijo susurrando— solo cuidate, tu día va a llegar y verás como todas te pasan pisando, puede que el futuro sultán no mate a sus hermanos, pero pueden pasar otras cosas.

—El fratricidio quedo de lado la ley se va a abolir— dijo viendola mal— ¿o estas amenazando a mi hijo?

—Nunca tocaría a un niño, en cambio tu si, pobre şehzade Azad—la miró —ya se todo

—Yo no lo mate—tomo su brazo

—Jamás dije eso— sonrió— pero descuida no te delatare, sufrirás cada lágrima de Dilruba, cada grito de Raşa, cada humillación de Hümaşah—se soltó— mi boca estará  cerrada pero mis ojos verán tu sufrimiento y me regocijare con eso circaciana— paso empujandola.

Tiempo después

—¿Dónde  estabas? —dijo Hanzade a Turhan

—Hablando con Ahmed, iré a koutaya a ver a Cihangir

—Dile que lo extraño —sonrió

—Dijo que puedes ir a ver a Selim

—Gracias— la abrazo— ahora vamos al harén mi madre nos espera

—Madre  —sonrieron todas

—Pueden sentarse, estamos aquí para celebrar el casi nacimiento de mi nieto— sonrió— ¿ya tienes ocho meses?

—Así es madre sultana —sonrió Dilaşud

—¿Handan como ha estado mi nieta?

—Está muy sana y cada día aprende una cosa nueva—sonrió la rubia

—Allah la bendiga con una gran belleza y sobre todo con inteligencia

—Amén—  dijeron todas

—Hümaşah, mi Príncipe, ¿como Esta?

—Muy bien valide, es bien curioso, le encanta pasar tiempo con sus hermanos

—Allah lo bendiga y le de mucho amor a su corazón—  Dilruba mis hermosas Sultanas,¿Nurbanu y şirin?

—Son la alegría de mi vida valide, cada día crecen y crecen, están muy sanas

—Allah las mantenga felices siempre

—Halime —todas la vieron —¿como esta Murad y Mahidevran?

—Murad es un niño muy fuerte, le gusta ver a los guardias luchar con sus espadas

—Allah lo haga buen guerrero¿ y Mahidevran?—alzó una ceja

—Esta muy bien valide, cada día más grande —le sonrió y Raziye la vio mal
allah cuide de ella—suspiró—Zeynep, iremos todas al jardín, cada criada recibirá sol en dos días en una gran fiesta, quiero ir a la Fundación después del nacimiento de mi nieto, junto a las Sultanas, Handan, Hümaşah, Dilruba y Dilaşud— Halime sintió rabia, jamás la incluía.

—Parece que tendrás un ejercito—dijo Dilruba

—Allah que no, pesa mucho— ríe— quiero una niña

—Es lo mejor, pero debes de tener un şehzade para tener fijado tu futuro

—Que sea lo que allah quiera, seré feliz con un niño o niña—sonrió y sintió dolor

—Allah ya viene—grito Dilruba— aghas llamen a la partera tu ayúdame a llevarla a sus aposentos