—Su majestad— sonrio Dilaşud

—Te he estado esperando— beso su frente— ven vamos a cenar— le sonrió y ambos comenzaron a comer

—Madre —dijo Hürrem llegando al jardín

—Ven—sonrió

—Ya se lo que quiere hacer Ahmed— dijo viéndola— ¿por que?

—No quiere repetir lo mismo que pasó con Esmehan—suspira—pero no lo hará

—Eso espero, quiero pasar todo el tiempo posible contigo

—Y yo cariño, pero quiero nietos de parte de ti, eres la mayor —la miró

—Lo se pero ya llegará el tiempo para eso

—Esta bien —sonrió y fue a ver las flores cuando Beyhan y Ayşe llegaron

—¡Madre!—dijeron ambas

—Hijas —sonrió—¿que las trae por aquí?

—Mi hermano ha decidió casarme— dijo Beyhan y Atike se giró para verla

—¿Que? El no me dijo nada eso, me habló de Hürrem  pero de ti no

—Dice que escogerá al indicado y luego vera si lo hace o no— suspiró Beyhan— aún no quiero madre, no quiero sufrir lo que sufrió Esmehan

—No lo harás Beyhan—dijo Ayşe— lo convenceremos

—Por allah que si— dijo Atike—ahora vamos Hürrem esta jugando con Mustafa  y Demir

—Madre, Halime no deja que veamos a murad —dijo Ayşe y a lo lejos Raziye caminaba con Mahidevran

—Esa mujer me sacará de quisio- suspiró— tu eres la hija de la valide sultán, tu puedes ir a sacar al pequeño cuando quieras, tienes derecho a salir con el,ella no es nadie—dijo sentándose en el pequeño diván— Nilüfer, ve a traer a mitad si Halime hatun se mete ignorala o castigala.

—Entendido— dijo yéndose cuando Zeynep  llegó feliz

—Madre Sultana, Sultanas—sonrió

—¿Por que tan feliz?—dijo Beyhan

—La señorita Dilaşud esta en cinta— sonrió

—Allah me ha escuchado, reparte oro en el harén, haz una gran fiesta— sonrió— manda a hacer un collar para Dilaşud, el más hermoso

—¿Madre Halime esta hundida? —dijo Hanzade

—Claro que si— dijo Turhan sonriendo

—Felicidades Dilaşud—sonrió Dilruba

—Gracias —dijo sentándose en la cama—allah me ha bendecido—miró a Kösem— tendras un nuevo hermano pequeña

—¿Hermano?—dijo la pequeña de apenas dos años

—Si— sonrió Dilaşud y el sultán ingreso a sus aposentos

—Dilruba, Dilaşud—les sonrió—iremos a edirne unas semanas— las miró— para que nuestros hijos disfruten de la paz de ese lugar, Esra hatun, dile a Handan, Hümaşah y tu Dilruba alisten a mis hijos y ustedes, quiero que mis hermanas también vayan, buscan a Murad y Mahidevran quiero que ellos también pero no su madre.—Dilruba y Dilaşud rieron a lo bajo.

—Entendido— dijo Esra yéndose

—Alistate para la fiesta— dijo Dilruba sonriendo

—Halime estará muy feliz —dijo riendo y levantándose de la cama

—Oh si— le siguió—iré por mis hijas para la fiesta — sonrió