La emoción me recorría el cuerpo entero y no podía dejar de sonreír

- Hija- me sonrio mi madre poniendome una corona en la cabeza- por favor calmaté, cuando acabemos de arreglarnos iremos a esperar la llegada de tu padre de la campaña

- Seguro que su primera orden será darles las provincias- le dije a mi madre- mi padre espero tanto tiempo porque no quería enemistarlos sobre quién irá a Manisa pero ya no se puede hacer nada, a parte de que sin provincia no podran tener un harén y es importante que tengan decendencia, mira a Orhan, 20 años y sin harén

Mi madre me sonrió y iba a contestarme cuando llego Rana Hatun seria y dijo:

- El sultán ha llegado a palacio

Mi madre sonrió todavía más y le dio a la agradecida Rana (Mi sirvienta principal) una bolsa de oro que ella después de reverenciarse se guardó en el escote

- Vamos, Kösem- me dijo mi madre y después de nosotras nos siguian nuestras criadas- Tus hermanos ya se verán como hombres después de 1 año

 Para esperar a mi padre nos fuimos a los desabitados aposentos de la madre sultana. Ahí ya estaba Hurrem Sultan con mi hermano en brazos. Me acercé a ella y le pedí a Bayaceto

- Mi pequeño- dije- mientras lo alzaba y el reía- ¿Cómo ha dormido hoy?

- Muy bien, sultana- me respondió Hurrem- parece que fue ayer cuando nació

En ese momento por la puerta entraron Handan, Mahidevran, y Hatice y me indigne cuando Mahidevran me miró con superioridad

- Kösem y Kara - exclamo hablandonos como criadas- No seais insolentes y hacerme reverencia

Mi madre la miró con odio y yo sabía que no era solo por eso.  Mahidevran había provocado un aborto en ella y le había dejado infertil como otras sultanas a otras sultanas

- ¿Quién te crees que eres para hablar así a la única hija del sultán y la madre de esta, otra sultana?- exclamé furiosa

- Soy la madre del heredero y eso nadie lo podrá cambiar- me repondío con arrogancia y altanería- soy digna de respeto

- No me importa que seas la madre del heredero-le respondí con desprecio- Yo soy una sultana de sangre y tu una esclava, suficiente hago en que tu no me hagas reverencia

Iba a responderme cuando anunciaron a mi padre y hermanos y nos pusimos en fila y hicimos reverencia en orden:  Mahidevran, yo, mi madre (mi padre así lo deseaba aunque mi madre era solo madre de una niña), Handan, Hatice y Hurrem con su hijo

- Mahidevran- dijo con semblante serio mientras la anteriormente mencionada le besaba la mano y se la llevaba a la frente- Espero que hayas estado a gusto

- Padre- dije haciendo reverencia- Todo el mundo aquí estaba seguro de que volvería con la victoria

- Mi amada hija- dijo mientras le besaba la mano y me la llevaba a la frente y después él me besaba también la frente- En un año has crecido mucho

- Su majestad- dijo mi madre  después de besarle la mano a mi padre- ¿Cómo se encuentra?

Mi padre le dio un beso el la frente lo que provoco las miradas de celos y envidia de las otras aquí presentes

- Mi amada Kara, muy bien

- Su majestad- se reverenció Handan besandole la mano y su majestad sonrió complacido

- Hatice- dijo con desprecio mi padre rechazando que esta le besara la mano provocando el enfado de esta

Cuando Hurrem era una favorita y estaba embarazada Hatice había intentado atentar contra la vida de Hurrem lo que mi padre no había perdonado jamás

Ahora Hurrem le besó la mano y mi padre asintió con la cabeza y rapidamente cogió en brazos a Bayaceto

- Que mayor esta- dijo abrazandolo- debes cuidarlo bien- dijo a Hurrem y ella asintió con una sonrisa

Mi padre se fue a sus aposentos después de hablar mucho con cada una dejando vía libre a mis hermanos para ir con sus madres y después de eso yendo ellos a saludarme y abrazarme

Dicho y hecho, pero al revés, ante las miradas de desconcierto de sus madres ellos, mis querido hermanos fueron antes a saludarme a mi con una sonrisa. Entonces si fueron con sus madres pero después volvieron conmigo y hablamos de todo, de la campaña, vida en palacio...y sobre quién acabaria en Manisa ya que mi padre decidió un año antes que después de la campaña militar decidiria a que provincias iria cada uno y esa charla acabó en discusión lo que me precupó mucho