Hola, ¿cómo están? yo me siento de lo peor, ¿la razón? bueno, soy la sombra de una gran estrella de un show, y lo peor es que nadie me toma enserio. Oh, cierto, no me he presentado, soy el Pato Lucas y soy uno de los personajes de la serie más popular llamada Looney Tunes. Serie creada por el estudio Warner Bros, si, ya sé que muchos dirán: "Oh dios mío, qué suerte tienes" "Trabajas para el mayor estudio que existe" Pues déjame decirte, amigo mío, que es una completa pesadilla...al menos para mí...Siempre estuve en segundo plano en las escenas en las que me emparejan con la "estrellita" que ¿quién es? pues el conejo Bugs Bunny, para todos es el mejor y el favorito tanto para los niños como adultos que lo ven en televisión, a él le pedían autógrafos y pedirle hacerse fotos con ese conejo estrella, mientras que Bugs recibía premios y fans, yo era su sombra, al que nadie toma enserio, el que recibe las peores críticas, al que siempre recibía los disparos de Elmer Gruñón en unas escenas...

Estoy harto de todo, por una vez en la vida me gustaría ser querido y respetado, no quiero seguir siendo la sombra de nadie, si me dieran la oportunidad les demostraría lo que puedo hacer la aprovecharía al máximo sin dudarlo.

Cada noche sueño que estoy en la Gala de Premios, todo era muy hermoso, lleno de luces y decoración inigualables y todos estaban vestidos elegantemente para la Gala. Estando sentado en los mejores asientos junto con mis compañeros de rodaje, mirando al frente con una amplia sonrisa y justo cuando dicen mi nombre para darme un Oscar al mejor actor del mundo, siendo felicitado por todos y estando aplaudiéndome sin parar...Al despertar veo que todo era una fantasía que nunca se hará realidad...ni un solo premio al que admirar, ni a nadie a mi lado con quien compartir mi felicidad que era solo producto de mi loca imaginación...Me quedaba horas tumbado en la cama mirando el techo de mi habitación, pensando: ¿Para qué sirvo? ¿Quién soy? ¿Soy un simple pato con un sueño imposible de alcanzar? ¿O solo soy uno más del montón, que lo que hace es estar a la sombra del personaje principal a esperar a que le den una escena y recibir la peor parte?

Sin embargo, otros de mis compañeros, por ejemplo Silvestre y Piolin son más queridos que yo. A ellos mucha gente los quiere ya que los hace reír. Silvestre trataba de comérselo todos los días y también recibe "daño" por parte del canario escurridizo, y digo daño entrecomillas porque los objetos no son reales sino de un material blando para que nadie sea lastimado y luego sea modificado cuando ya lo grabaron. Lo mismo pasa con el coyote y el correcaminos.

Por una vez me gustaría ser el centro de atención y que todos me admiren y me quieran, ¿es mucho pedir un poco de amor?

Pues sí, amigos, este es mi día a día...