No es un sentimiento superficial, es la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común, es decir, el bien de todos y cada uno para que todos seamos realmente responsables de todos.
Aunque en la sociedad actual no existe ninguna de las dos, la gente ayuda buscando premio, recompensa o sentirme mejor, nadie ayuda de forma altruista. Lo único que los mueve es su egoísmo. Me hablan de altruismo, de generosidad y de amor... pero eso no son más que ilusiones de la inventiva humana que huye de la dolorosa realidad.

"¿Qué sea buena persona?,
Entonces, define lo que es el bien,
¿No puedes?
Ni el bien ni el mal existen,
¿Cómo pretendes que actúe según tal quimera?
No hay mayor necedad de los que no quieren ver la verdad, por más dolorosa que ésta sea."

Por más que queremos ser solidarios o generosos no podemos... Ya que la maldad es algo que todos llevamos dentro, la cuestión es si la despiertas o no.
Yo no me considero solidario, pero tampoco egoísta... ya que soy solidario según mi estado de ánimo... Y no siempre es bueno.
Hay quien ayuda a quien sufre por verdadera solidaridad y hay quien solo lo hace por lástima...
esas son las personas HIPÓCRITAS.

"La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo."

No es difícil hacer lo correcto, lo difícil es saber qué es lo correcto.
Podemos ayudar a cualquiera, pero si no lo sentimos entonces... ¿Estamos haciendo lo correcto?. Es fácil, pero a la vez complicado. No hay que ser inteligente para saber que si tú eres generoso y ayudas a cualquiera eres de buen corazón, pero... Si en realidad eres una persona codiciosa, maligna e ingrata, entonces... ¿Tienes buen corazón?. Ahí se torna difícil la pregunta.
Cualquiera diría que no... Pero, si la persona amable no ayuda y la persona egoísta si lo hace. ¿Quién es el impostor?