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Estaba cansada, había tenido una noche movida. Al final, de nada había servido trabajar esa noche que se suponía que la tenía libre; la habían despedido.
Fue directo a la nevera, se sirvió un vaso de leche y agarró de la despensa la caja de cereal; comería un poco y luego se iría a dormir, estaba agotada.
Se dio una ducha rápida y se dispuso a dormir en ropa interior. Tomó su pobre celular y le escribió a su amiga.
Si no tienes tus llaves, ni te preocupes en llamarme, porque me voy a fusionar con mi cama; estoy agotada. 🥱
"Okey, descansa".
Dejó el teléfono en la mesita de noche y se quedó dormida.
...
-¿Con el que dices que va una vez por semana? Estás loca.
--Losé, lo sé, pero... Ay, no, ya no sé nada... Tú sabes muy bien que no soy bailarina, y él pidió un VIP y por más que Harry le ofreció a las otras, él solo me quería a mí, eso... Me hizo sentir importante y deseada.
-Tú sí importas, Bar, y sabes que te quiero mucho; eres mi mejor amiga. -Pero cuéntame más. -La castaña estaba realmente emocionada por su amiga, aunque no por el hecho de que la hayan despedido. -¿Está realmente bueno?
--Noquiero hablar de eso, pero sí, Dios... Ese hombre está de infarto. La rubia abrazó más su almohada, recordando la noche anterior.
Estaban ambas acostadas en la cama de la rubia; su amiga había llegado y la encontró aún durmiendo.
--Admirotu valentía, amiga; tuvo que ser un dios para haber tenido tu primera vez con un desconocido. Pero, ¿Y ahora qué vas a hacer?
--Nosé, hoy solo quiero descansar; ya mañana enviaré algunos currículums a esas empresas encargadas de asignar un trabajo.
- Voy a hablar con mi jefe para que te dé el puesto que está libre...
--No Ale, no quiero seguir trabajando eso; para mí eso fue una clara señal de que no debo seguir trabajando así.
...
Tenía un terrible dolor de cabeza; anoche había bebido como nunca antes lo había hecho y estuvo a punto de caer en un coma etílico si su amigo no lo hubiera sacado de ese club.
--Eresun idiota, ¿cómo se te ocurre ponerte en ese estado en la despedida de soltero de tu hermano?
--Nogrites,Agustín, que siento que se me va a explotar la cabeza.
--Pueses lo de menos ahora, tienes una junta con inversionistas en una hora.
-Me vale la puta junta. No estoy de humor para juntas; que se encargue mi hermano.
...
"No, señor, ella ya no trabaja con nosotros".
-¿Y puedo saber por qué?
"Señor, con el debido respeto, ella no respetó las reglas del lugar; solo las bailarinas que presten servicios VIP pueden intimar con los clientes y ella no era una bailarina".
-¿Y le parece que la suma de dinero que le di por su servicio no fue suficiente?
"Oh,señor, fue muy generoso en pagar por alguien que solo es una bartender".
Estaba perdiendo la poca paciencia que le quedaba hablando con ese estúpido hombre; la habían despedido por su culpa y tenía que hacer algo para solucionarlo. Colgó; no necesitaba seguir escuchando sus estupideces.
...
--Ale ¿a que no adivinas?
--Mmm.. nop, no adivino.
-Tengo una entrevista de trabajo mañana a las ocho.
-¡¿En serio?! Ay, qué emoción, amiga, qué rápido. Me alegro por ti.
-Sí, todo va a mejorar, ya verás. Ahora lo más importante: ¿qué usaré? Digo, no tengo nada que pueda usar para ir a esa empresa; tengo que dar una buena impresión.
-¿Y qué empresa es?
- Empresas Adams.
...
Llego a la hora acordada; estaba nerviosa. ¿Y si no cumplía con los requisitos para trabajar ahí? Ella no tenía mucha experiencia laboral, pero había hecho unos cursos de diseño gráfico y no pudo culminar la carrera de marketing por ayudar a su familia, pero ahora con ese empleo todo podía mejorar; tenía que salir todo bien.
Reviso nuevamente el correo en su celular.
--Buendía, tengo una cita con el señor Eros Adams.
La recepcionista apartó la vista del computador y la detalló. La rubia disimuladamente repasó su ropa y estaba bien; se sentía cómoda y elegante.
- Su nombre, por favor.
- Barbara Ross.
La mujer escribió algo en el computador y le entregó un pase.
- Piso 10, que tenga buen día.
--Gracias señora.
Se dirigió a donde estaban los elevadores, marcó el piso indicado y en poco tiempo ya estaba frente a una joven que estaba concentrada en su trabajo.
--Buendía, vengo a ver al señor Eros...
--Elseñor Adams no está disponible en este momento. Aun con la vista en el computador, le respondió, sin dejar que terminara de hablar.
--Disculpe creo que no me escucho bien. Si puede verme cuando le hablo, se lo agradecería. Verá, tengo una cita con el señor Eros; si es tan amable de comunicarle mi presencia, se lo agradecería muchísimo. --Lesonrió cálidamente.
Suspiro pesadamente. ¿Y este quién se creía que era? ¿Otra más de las que su jefe se había follado y se creían dueñas de todo por haber estado con él una noche? Estúpidas, él solo las usaba para satisfacerse y ya.
--SeñorAdams, la señorita...
- Ross, Barbara Ross.
--BarbaraRoss, dice que tiene una cita con usted... Entendido... Puede pasar.
- Gracias.
Tocó la puerta dos veces y un "adelante" se escuchó. Estaba nerviosa; por segunda vez se repasó su atuendo. Sí. Se veía realmente bien.
Se encontró con dos hombres bien parecidos, pero uno llamó su atención; era él, el hombre a quien le dio su virginidad. No pensó que lo volvería a ver, y ahí estaba, de pie en la puerta de su inmensa oficina; no sabía si salir corriendo o quedarse ahí sembrada.
--Buendía, disculpen, yo esperaré afuera.
-¿-¿Queices? No, pasa, él ya se iba.
Ambos hombres se dieron una fría mirada.
--Hablaremosluego.
--Nohay nada que hablar, Edin.
Sin más salió de la oficina de Eros, no sin antes darle una mirada a la rubia que estaba aún de pie en la puerta.
Mirada que realmente la hizo sentir incómoda.
--Pasey tome asiento, por favor.
--Gra.graciasas -estabaanerviosa, muy nerviosa-noNo sabía que lo volvería a ver.
--Bueno es cuestión del destino. -Marcó un botón en el intercomunicador -. Alicia, tráeme un capuchino y un té negro, por favor. --Acomodó su saco y se sentó.
O en la silla que estaba al lado de la rubia, se veía realmente hermosa; ese vestido rojo le quedaba muy bien, estaba realmente sexy.
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