La noche siempre le causaba temor, al punto de sentarse en algún rincón de su habitación luego de que su cliente se haya retirado satisfecho, para llorar amargamente, encerrandose en su propia mente, creando mundos llenos de fantasías, anhelando aquél dia dónde todos sus ahorros ya sean suficientes para poder largarse y experimentar cosas que nunca tuvo el privilegio de tener.

Dirigio su mirada azulada a sus pies descalzos, luego subió a sus piernas bien formadas, hasta llegar a sus brazos marcados. Ahora podia entender el porqué era el más solicitado durante las noches junto con Sakura, era extraño encontrar prostitutos con un gran atractivo, pero a pesar de eso, le desagrada la idea de tener que cumplir cada uno de los caprichos de aquellos hombres y a la vez pena de pensar que más de uno de ellos tenia una familia detrás, que lo amaban, hijos y una hermosa esposa que lo espera ansiosa durante la noche, mientras que su amado esposo se encontraba con él, anhelando entre suspiros en que se entierre en él.

Se abrazo a si mismo en un intento de apaciguar aquellos pensamientos para nada agradables, pero los tres toques en su puerta, llamaron su atención. Sabiendo perfectamente quién era la persona que lo estaba buscando, corrio rápidamente a atenderle, Taehyun muy pocas veces venia a visitarlo.

—— ¿Qué sucede? ¿Por qué te vez tan asustado? —— Esas fueron las primeras palabras de Soobin al verlo.

El pelirojo no lucia para nada bien, su rostro se encontraba pálido y leves espasmos recorrian por todo su cuerpo, cómo si hubiera visto al diablo mismo.

—— El principe Yeonjun...—— Musito en voz baja, llamando aún más la atención del rubio.—— A..Solicitado tu servicio, Soobin.

Sintió cómo un balde de agua fría caia por sus hombros, sintiendo escalofríos con tan solo escuchar aquella noticia. ¿Que hacia un aristócrata en un lugar como esté? ¿No se suponia que no se mezclaban con los pueblerinos de París? O a caso ¿A cometido algún error judicial frente a los ojos de su padre? ¿Y su le aplican cualquier tipo de torturas?

Sentia miedo, demasiado miedo.

—— Tienes que arreglarte, trata de tapar aquellas marcas que te han dejado en el cuello y las marcas de uñas de tu espalda.—— La voz de Taehyun nuevamente se hizo presente en aquella habitación.—— Sabes que odio con todo mi ser a aquellos aristócratas, pero me obligó a aceptar el dinero que me ofrecia por ti para esta noche, perdóname Soobin, espero que no te hayas metido en ningún problema.

Y con esas últimas palabras, se retira de aquél lugar, dejando en completa soledad a Soobin, el cual aún se mantenía en estado de shock por aquella situación. Cuándo finalmente reaccionó para arreglarse y verse presentable ante al futuro monarca, este apareció frente a su puerta, sin ser acompañado por sus típicos guardias. Soobin no pudo evitar ahogar un suspiro por el susto al tenerlo frente a frente, esos ojos felinos oscuros lo analizaban como si se tratara de un animal hambriento acorralando a su presa.

—— ¿Soobin? Eres mucho más lindo de lo que me han llegado a contar de ti.—— Su voz mantenía un tono sarcástico y aniñado, eliminando por completo aquellos rumores de que el heredero era un hombre bastante mayor que seguia sin comprometerse por ser un amargado y sin gracia.—— Quiero de tus servicios está noche.

Soobin se limito a asentir, observando atentamente cada movimiento del contrario, el cuál se sentó en la cama, esperando de forma ansiosa algún movimiento exquisito por parte del pelirubio que tenia al frente. Estaba a punto de ponerse entre sus piernas, tratando de darse ánimos asi mismo con que era el último cliente que tendria está noche, pero Yeonjun lo detuvo y rápidamente lo tomo entre sus brazos, sentandolo sobre su regazo.

—— ¿Tu cabello es natural? Es extraño encontrar en París personas tan..lindas.—— Sus delgados y largos dedos tocaban sin vergüenza alguna el cabello de Soobin, mientras que su otra mano mantenia un agarre firme en su cintura.

Debido al contacto y la cercanía, no pudo evitar cerrar con fuerza sus ojos, deseando que aquel principe dejara de tocarlo tanto, no estaba acostumbrado a tener este tipo de cercanías con sus clientes, generalmente siempre era el de arriba, sintiéndose afortunado que ninguno haya decidido profanarlo más aún. Soobin habia imaginado que correria la misma suerte con aquél heredero al trono, lo juzgo mal, se veia mucho más intimidante de cerca.

—— El color de tus ojos también son muy hermosos..—— Varios escalofríos pasaron por su espalda, al sentir como el aliento caliente del azabache chocaba contra su oreja.—— Estoy comenzando a sentir mucha envidia de tu belleza, no tengo mucho que destacar ¿Verdad?

El rubio no respondió, seguia en su posición rígida y sus ojos fuertemente cerrados, molestando un poco al hombre que lo tenia preso entre sus brazos. Yeonjun rápidamente tomo su mandíbula y la apreto con fuerza, obligando al contrario a mirarlo. Soobin no pudo evitar quedar hipnotizado ante los ojos oscuros de Yeonjun, los cuales tenían leves toques rojizos de tono vino.

—— Tus ojos también son lindos.—— Respondió casi por inercia, dejando satisfecho al contrario.

Un largo silencio se formó entre ellos luego de aquella respuesta, Soobin se esperaba cualquier otra escena desagradable, dónde aquél aristócrata decidia reclamarlo cómo suyo y él no poder negarse, ya que debia de cumplir cada uno de los caprichos de sus clientes, pero Yeonjun no se movia ni mucho menos mostraba señales de hacerlo, simplemente se dedicaba a acariciar su cintura, sacándole más de un suspiro por aquellas caricias.

—— ¿Por qué..has venido? —— La curiosidad le había ganado, sin mantener ninguna especie de formalidad ante su pregunta.

Grave error.

El azabache reaccionó ante su falta de respeto, que no dudo en lanzarlo sobre la cama y apresar sus brazos con fuerza, sacándole varios quejidos al rubio. A pesar que Yeonjun por su voz, parecia ser menor que él, tenia demasiada fuerza.

—— No puedes dirigirte a mi con tanta confianza, puto asqueroso.—— No pudo evitar temblar ante aquél insulto, sintiendo que el agarre de sus brazos eran cada vez más fuertes.

Deseaba escapar de aquella situación, pero su cuerpo no reaccionaba.

Luego de unos largos minutos, sus brazos fueron liberados. Soobin de forma desesperada se miro sus brazos, sorprendiendose de aquellas marcas que habian quedado debido a la presión ejercida, seguramente, muy pronto aparecerían moretones.

"Genial, Taehyun me va a regañar." Pensó de forma sarcástica, mientras acariciaba sus brazos lastimados.

Yeonjun observó cada movimiento de Soobin luego de soltarlo, sintiéndose mucho más intrigado por aquel plebeyo pobre.

—— No lo entiendo.. porqué él está tan obsesionado contigo.—— No se percató que habia soltado aquellas palabras en un tono tan fuerte, extrañando por completo al muchacho frente a él.

Pero decidio callar sus preguntas, de seguro aquel azabache no duraría en atacarlo para lastimarlo, por haber dañado su ego de persona rica por tan solo hacerle una simple pregunta.

—— Ja! Es un idiota, ni siquiera te a tocado.—— Llevo una de sus manos peinando su cabello hacia atrás, causandole temor al rubio.—— Puto ciervo de dios.

Y con esas últimas palabras, Soobin logro averiguar por su cuenta a quien se refería, aquél sacerdote que lo visitaba sin falta para simplemente observarlo, ni siquiera tocarlo y hacerle preguntas sin sentido sobre su persona. Estuvieron un largo rato asi, Yeonjun insultando sin parar a aquel creyente mientras que Soobin simplemente lo observaba, sin saber que pensar o que hacer, con el temor presente en su cuerpo.

—— Bien..ya lo eh decidido. —— Sus ojos rojizos se fijaron nuevamente en el cuerpo de Soobin.—— Eres de mi propiedad, cada movimiento que hagas, cada palabra que sueltes en el día, lo sabré, estaré atento a ti y más te vale ser obediente con lo que te pida.

Se puso de pie sin dedicarle ninguna palabra más al rubio, saliendo de la habitación, siendo seguido inmediatamente por un soldado que se encontraba esperando afuera, Soobin ni siquiera se había percatado de su presencia, pero no le tomo importancia, se permitió soltar la suspiro cargado de alivio al ya encontrarse solo, tratando de relajar su mente, no podía entender el porqué estás cosas le estaban sucediendo a él.

—— ¿Y qué tal señor? ¿Ya se encuentra mucho más tranquilo?—— Beomgyu soltó aquella pregunta, una vez que vio ingresar a la carroza  al futuro rey de Francia.

Yeonjun simplemente se limito a chasquear sus dedos, haciendo una señal a qué ya se podían retirar de aquel moribundo lugar.

—— Taehyung tiene gustos bastante desagradables.—— Desvío su mirada a la ventana, siendo descubierto en su mentira.—— Fijarse en un prostituto siendo un leal súbdito de dios ¿Puedes creerlo? Le ofreci a una de mis grandes bellezas y me lo rechazó de una forma tan descarada.

Beomgyu no pudo evitar soltar una corta risa nasal, ver a Yeonjun molesto cómo un niño le causaba bastante gracia, estaba haciendo un berrinche por un simple rechazo. Tal vez sus padres lo tenian bastante mimado, algo que muchos pensarían con ver al muchacho de 17 años recién cumplidos, pero la verdad era que es todo lo contrario, el azabache decidió estar en su ego cómo un método de defensa a su soledad.

—— No seas cruel con el muchacho, Yeonjun.—— Reprimió Beomgyu, recibiendo una corta mirada fulminante por parte de su acompañante.—— Si quieres desahogarte, para eso tienes esa colección de mujeres hermosa en Versalles.

Yeonjun simplemente asintió, dándole la razón al castaño rizado, después de todo esa era la función de aquellas mujeres, complacerlo y cumplir sus caprichos, era lo de menos que podían hacer, luego de sacarlas de lugares muy cuestionables, peores que de un burdel.

—— ¿Te gustaría hacerme compañía, Beomgyu?—— El castaño rápidamente negó ante aquella propuesta tan tentadora.

—— Ya no es posible, recuerda que mi padre ya quiere comprometerme, debo de aparentar ante la alta sociedad.

Yeonjun no pudo evitar rodar los ojos al escuchar la palabra "compromiso", que horrible sonaba, lo que menos desea es llegar a casarse con alguna mujer que no piensa y simplemente derroche dinero por montones, preferia seguir siendo un simple príncipe a pesar de ser el único heredero al trono, pero estaba consciente de que el matrimonio llegaria a su puerta tarde o temprano, por qué cuál debia de mantener su mala imagen.

—— Que desagradable.—— Murmuro para si mismo, regresando su atención al paisaje frívolo de las calles de París.

Beomgyu se limito a quedarse en silencio durante todo el trayecto, a él tampoco le agrada la idea de contraer matrimonio con una simple desconocida.