Tercera Persona P.O.V.

Al entrar en el armario ambas se giran y miran por una pequeña apertura que dejan para seguir escuchando, y caminan hacia atrás para cubrirse con la penumbra del armario. Sin embargo, Lucy nota algo diferente al llegar a lo que sería el fondo del armario

L: ay! -se queja al pincharse la mano, al girarse ve un árbol nevado

Andrea: leonci -se corta al ver cómo ante ella se erige un bosque nevado a medida que la sigue hacia el interior de este- Lucy? pellízcame estoy soñando! -dice asombrada por el paisaje ante ellas. Ambas miran hacia la entrada del armario y siguen hacia delante alejándose más de su mundo y entrando en el nuevo que se erige ante ellas

L: vale -le pellizca el brazo

A: oye! era una forma de hablar, peque. Ahora verás -se agacha y recoge algo de nieve entonces se la lanza a la Pevensie

L: Andrea!-grita divertida

A: esto es la guerra! -se ríen a medida que avanzan por el bosque y se tiran nieve la una a la otra- nunca me rendiré -Andrea se agacha y Lucy aprovecha y salta sobre su espalda

L: ríndete ante la gran reina! -se ríe mientras se aferra a su espalda mientras Andrea gira sobre sí misma intentando alcanzarla

A: oh, no! -cae de rodillas y se tira sobre la nieve. Lucy la suelta y se ríe de su dramatismo- oh gran reina me inclino ante tí, eres la mejor guerrera de la nieve de toda la historia -se levanta y le hace una reverencia

L: gracias, gracias -hace una reverencia torpe intentando imitarla

A: ahora hablando seriamente, Lucy. Sabes dónde estamos? -mira a su alrededor

L: no en realidad -se encoge de hombros- sigamos por aquí -se adentra aún más en el bosque

A: oye, no! Lucy! -la sigue de cerca y frena y se pone a su ritmo cuando se encuentran con una farola en mitad de la nada entre los árboles en un minúsculo espacio abierto- pero qué?... -se extraña de la presencia de tal objeto en medio de la nada

Lucy y ella caminan hacia la farola y apoyan su mano en ella sintiendo la calidez que se aferra a ella junto a la propia escarcha que mancha su estructura. Es entonces cuando escuchan pasos acercándose a la par que ramas rompiéndose, Andrea esconde a Lucy detrás de ella misma mientras giran su campo de visión hacia donde escuchan los ruidos.

A: quédate detrás de mí -le susurra en una advertencia a Lucy, quien simplemente se aferra fuertemente a Andrea y esta agarra un palo cercano y lo blande como si fuese una espada

Cuando ambas se giran nuevamente hacia el camino del ruido, se encuentran cara a cara con un ser desconocido para ellas y se retiran de un salto mientras los tres gritan asustados unos de otros. Las humanas se esconden tras la farola mientras se asoman un poco y ven al ser asustado tras el tronco de un árbol

Ambas comparten una mirada y salen de detrás de la farola y comienzan a acercársele, Andrea lanza el palo fuera de su mano pero cerca por si llegase a ser necesario, pues no pondría en peligro a Lucy. A medida que avanzan notan paquetes tirados por el suelo y al ser asomando también la cabeza por el lado. Juntas se agachan a recoger los paquetes envueltos

X: ah... es-espera -dice mientras ve como ambas ser agachan a por sus pertenencias y sale de detrás del árbol. Ambas se le acercan, y en ese momento ambas notan que no es completamente humano, pues además de sus extrañas orejas tiene piernas de cabra

Andrea: estabas huyendo de nosotras? -le tienden los dos pequeños paquetes

X: no... -agarra los que le ofrecen- bueno... yo es que... yo... no, no... yo es que no quería asustaros -cierra la boca en una mueca. Los tres se sonríen divertidos porque resultó que se asustaron todos entre todos

Lucy: disculpa que te pregunte pero, qué eres?

A: es un fauno, me equivoco?

X: no, estáis en lo correcto -asiente con la cabeza a la mayor- y vosotras qué sois? debéis ser una especie de enana sin barba y de espíritu del bosque -dice hacia Lucy y Andrea respectivamente

Lucy: yo no soy una enana -dice divertida- soy una niña

A: y de hecho la peque es la más alta de toda su clase -le pasa el brazo por los hombros y la abraza a ella tras recoger un último paquete y tendérselo al fauno- y yo bueno pues otra niña, algo especial pero una niña al fin y al cabo -se encoge de hombros

X: queréis decir que sois unas hijas de Eva? -dice nervioso mientras recoge el paquete de las manos de Andrea

Lucy: bueno mi madre se llama Helen, y la de Andrea, Marie

X: sí, sí. Pero sois... unas auténticas humanas?

Lucy: sí, pues claro... -dice extrañada por la pregunta, mientras Andrea ahora mira algo desconfiada al fauno por el tono que usó al preguntar y esto aumenta por la mirada nerviosa que da a los alrededores

X: y qué hacéis aquí?

A: estábamos escondidas en el armario de tación de invitados y -

X: tación de invitados? eso está en Narnia?

L: Narnia? qué es eso?

X: bueno pequeñas, es donde estáis. Todo lo que hay desde la farola hasta el Castillo de Cair Paravell en el Mar Oriental, cada rama, cada piedra que veas, cada carámbano. Es Narnia -sonríe ante el asombro que muestran las dos humanas a medida que siguen su paraguas señalando y ven la extensión del reino- Perdonad, permitidme que me presente. Me llamo Tumnus -inclina la cabeza

Lucy: mucho gusto, señor Tumnus. Yo soy Lucy Pevensie -le extiende la mano y ve como el fauno la mira extrañada

Andrea: tienes que darle la mano -dice divertida

T: por qué? -pregunta sin comprenderlo

L: pues... no, no lo sé. Es lo que hace la gente cuando se conoce -explica más o menos lo que ella misma entiende y ve a menudo. Tumnus agarra todo en un brazo y extiende el izquierdo y agarra su mano y la mueven de un lado a otro divertidos. Luego se sueltan y este se gira a Andrea

A: yo soy Andrea Labonair, mucho gusto señor -repiten la acción anterior y se estrechan la mano algo raro. Mientras el trío se ríe de sus payasadas

T: bueno, pues Lucy Pevensie y Andea Labonair, de la magnífica ciudad de Armarío en el maravilloso país de Tación de invitados -pone una voz divertida lo que hace las dos más jóvenes se rían divertidas- qué os parece si os invito a cenar conmigo -ofrece amablemente mientras abre su paraguas cubriéndose con él de la nieve que cae

Aquí Andrea está indecisa pues siente que es alguien inofensivo pero no terminaba de cuadrar el tono usado cuando les preguntó por su especie humana

Andrea: bueno se lo agradezco mucho pero... creo que deberíamos que volver ya -mira hacia el camino por el que vinieron y Lucy la imita

T: pero si es aquí muy cerca -se apresura- y la chimenea estará encendida y habrá... eh tostadas, y té, y pasteles. Podríamos hasta abrir las sardinas

A: es que no sé... -Lucy agarra su mano

T: vamos -dice entre divertido y pidiendo- no todos los días hago unas nuevas amigas

L: y solo por un ratito -alza la mirada hacia Andrea, esta al ver el brillo en sus ojos suspira y le sonríe a la menor y se gira al fauno

A: bueno supongo que no pasa nada por ir un ratito -se estira y agarra algunos paquetes de los brazos del fauno

L: y si tienes sardinas... -sonríe al fauno mientras se pone a su lado y agarra su brazo y este los cubre lo mejor que puede a los tres con su paraguas

T: latas y latas -les sonríe, mientras se ríen y avanzan en la nieve por el camino guiadas por el fauno- la nieve que cae -dice divertido cuando Andrea se tropieza con un montón