Más de 600 mil televidentes que estaban viendo WCW Nitro, cambiaron de canal para ver WWF Raw y presenciar cómo el sueño de Mick Foley se hacía realidad, en un intento fallido de WCW por ganar audiencia.

A partir de este momento, WCW Nitro nunca más volvió a derrotar a Raw en ratings, y la guerra de los lunes por la noche ya estaba sentenciada con un claro ganador.