Todos nos observábamos en silencio, no podíamos estar seguros si los "Silencios" se encontraban cerca o cuantos eran, la noche estaba cayendo sobre nosotros y no teníamos idea de donde podría estar Linar. 

Decidimos esperar un momento en el mismo lugar, sin quitarle la mirada a Lial, pero este no parecía tener interés en huir, retomó su lugar en el suelo juntó a su Nereida, parecía mantener una conversación casual con ella.

—¿Intentaras huir? —Krist ya lo estaba abordando.

—Krist —intenté silenciarlo —baja la voz.

—No pueden estar tan cerca Reinar, ya estarían sobre nosotros. —volvió a voltear hacia Lial y su Nereida —.  ¿Entonces? Tienes algún plan.

—Si vuelvo con los de mi sector, ellos me mataran con tal de tener un competidor menos, no tengo interés, al menos aquí con ustedes su deber es mantenerme con vida —sorbio por su nariz —. Aparte me agradan, creo que pueden ser un gran equipo en esta purga, prefiero estar de su lado, mientras estén ganando, claro.

—Eres asqueroso —Avalon parecía tener ganas de golpearlo.

—Debes calmarte Avalon —Andrómeda intentaba calmarla —. No vale la pena.

Pobre Andrómeda, no sabía que la Amazona le molestaba que le ordenaran, estaba esperando que se le dejara ir a golpes o reclamara, pero, por el contrario.

—Tienes razón, mejor alejémonos de él, si vamos a trabajar juntas necesito ponerme de acuerdo contigo en algunas cosas —. Avalon y Andrómeda se alejaron un poco de nosotros.

—Pero... Avalon... Tú odias. —estaba consternado.

—Mientras no nos estorbes, no me interesa si quieres hacer una alianza o no, el encargado de forjar las alianzas es Reinar, así que en su momento tendrás que hablar con él. —Krist se mostraba tajante.

—No tengo interés —respondí a prisa mientras Lial parecía decepcionado de mi respuesta —. Si quieres ganarte una alianza, tendrás que ayudarnos con esto ¿Quiénes son los otros dos Carneros? Tienes que contarnos.

—No sé quiénes son, yo solamente sé que tu mataste a Iron, no estoy seguro quienes siguen con vida.

—Está bien —respire hondo —. Avalon y yo matamos a Durgan el desollador, tú te encargaste de Iron, tú estás aquí, solamente son cinco de cada sector, quedan dos con vida.

—¿Mataron a Durga? —parecía sorprendido —. El desollador, él en verdad me asustaba.

—Sí claro Lial el destripador, me siento cómodo contigo —Krist sacaba su sarcasmo.

—Está bien, dejemos los estatus para después señor Diamante —. Parecía que estaban por comenzar una discusión, pero Lial se apresuró a continuar hablando. —Los que quedan es Krock el que mutila y Gargonte el degollador, lo sé, tienen buen estatus para una purga, pero no se dejen llevar por sus nombres, en realidad son muy inteligentes. Krock es de complexión grande, no es rápido, pero tiene una cierra.

—Una ¿Qué? —Krist estaba confundido.

—Es una máquina que corta árboles, imagínate lo que hace con los humanos —tomó aire—. Y Gargonte le gusta arrancar la mandíbula de animales o Carneros, también le gusta irse directamente a la tráquea, ya sea con sus manos o cualquier arma, la última vez que lo vi, tenía una ballesta y un machete, primero inmoviliza a su presa con la ballesta y con el arma ataca.

—Uno es de ataques a larga distancia y el otro a corta, ambos hacen un buen equipo. —Avalon estaba detrás de mi hablando, no la esperaba así que me sorprendió.

Al parecer eso le complació pues me abrazo por la cintura y puso sus labios en mi oído.

—No te tocaran mi eros, no te preocupes —. Sus labios provocaron escalofríos por toda mi columna. —Necesitamos pensar en un plan.

—Sin plan —Kirst intentó callarla.

—No comiencen a discutir, ni siquiera sabemos dónde se encuentran. —esperaba mi comentario hubiera sido suficiente para interrumpir la conversación.

Seguramente mis palabras habían sido escuchadas por Artemides o la ciudad blanca pues del suelo emergieron unos pequeños faros y alumbraron un camino por delante de nosotros.

—Comenzó el juego de la conquista —mencione para mí.

—Antes de comenzar necesito entender el terreno, Lial hazme un favor. —Avalon estaba comenzando a mostrar su lado de Amazona —. Necesito que te muevas rápido a quince metros lejos de nosotros, no preguntes solo hazlo.

Krist levantó su lanza apuntándolo.

—Por si acaso —su sonrisa fue fría.

—Están locos —fue todo lo que dijo Lial pero corrió lejos de nosotros.

Las luces del suelo se escondieron nuevamente bajo tierra y comenzaron a salir haciendo una nueva línea hacia Lial, estas lo seguían a donde el fuera.

—Eso es, Lial es un GPS para esas luces.

—Avalon a veces no te entiendo en verdad —le dije sin más.

—No necesitas entender, solo observa, a donde Lial se mueva las luces se moverán juntó con él, eso significa que las luces nos guiaran a Linar sin importar a donde lo muevan.

—Pero también atraerá a los Carneros a nosotros —Andrómeda hablaba juntó a Avalon.

—Y debemos estar preparados para eso —Krist se mostraba seguro.

—No lo estarán si no saben lo  que les espera. —Avalon se dio un tiempo antes de continuar—. Presten atención que esto dependerá todo sobre si ganamos los próximos combates, necesitaremos crear mentes de soldados y para eso necesitan entenderla. Debemos atacar, sentiremos miedo, su cerebro y sus mentes entraran en modo supervivencia, el valor no es la ausencia del miedo. Valor es la capacidad que tienen para controlarlo y convertirlo en otra cosa; ira, compasión, concentración, lealtad a una causa mayor que uno mismo. No pueden paralizarse y para eso necesitan entender que sentirán y como será eso, para que no se congelen en la batalla. En cualquier situación donde su vida este en riesgo, no importa si es por un "Silencio" u otro humano percibirán lo mismo. Sentirán la necesidad de huir o luchar, su cuerpo intentara calmarlos, pero no pueden detenerse. Para eso deben tener preparada su mente, conocer lo que pasara con su cuerpo es una forma útil de estar preparados para lo que vendrá.

—¿Está bien si escucho esto? —Lial preguntaba incomodo.

—Eres uno de los nuestros mientras estes aquí —Krist contestaba lo que yo mismo pensaba.

—Gracias.

—Entonces —. Avalon prosiguió. — Creerán que se paralizan, es normal, pero eso no es lo importante, es como controlan esto, si pueden controlarlo y usar esto para concentrarse más podrán ir por delante de su enemigo.

—Reinar a veces lo logra —Krist me señalaba asentando con la cabeza.

—Si, pero no siempre es así, he peleado junto a él y puede llegar a paralizarse el tiempo suficiente para que lo maten. —Avalon me había arrebatado el orgullo en un santiamén.

—Tienes razón —No tenía forma de no reconocer eso.

—Por eso deben controlar su mente, para eso tendrán que saber que sucederá con ustedes, en cuerpo y mente, así no les sorprenderá, no tengo tiempo suficiente para darles un entrenamiento real, pero esto será mejor que ir sin nada. —Avalon había cambiado su postura completamente, ahora podía ver su lado de guerrera.

—Comienzan a caerme bien —Lial sonreía de manera suspicaz —Tal vez me convenga no ser rescatado.

—No me interesa —Avalon le arrebato rápido el orgullo a Lial y se notó al ver como perdía su compostura —. Todos desciframos el miedo de forma distinta, las emociones serán un cumulo de cosas; podrán sentirse emocionados.

—Ese es Zusure —Reí, aunque únicamente Krist entendió mi chiste.

—También podría ser una concentración intensa o ansiedad paralizante —Avalon remetió contra mí, preferí agachar la mirada —. Todos eso es normal, podrán sentir que quieren defecar, esto es debido a que su cuerpo querrá desechar todo lo toxico por si existe algún golpe considerable en el abdomen y no se filtren e infecten las heridas, pueden soltarse del estómago por estrés. Su cuerpo se prepara para todo ante una situación de riesgo, su sangre será enviada fuera de la superficie de su cuerpo para absorber su daño, a esto se le llama vasoconstricción, el flujo se cierra de forma mecánica y su cuerpo comienza a retener el doble de sangre, eso podría hacerlos ver pálidos, no se asusten si ustedes o alguien se ve así.

—No estoy entendiendo nada —Lial se veía mareado.

—Lo entenderán cuando estén en la batalla, solo escuchen —Avalon respiro para continuar —. El flujo de sangre si es redirigido a otras partes en su cuerpo los ayudará a terminar un combate, su cerebro estará coordinando sus movimientos simples. Antes de intentar ayudar a alguien más, sus propias ideas podrían llevarlos a buscar preservarse a sí mismos con vida, esto es una respuesta normal. Puede que no tengan pensamientos racionales, su cerebro actuara según su entrenamiento.

—Nulo —Krist se veía afligido.

—A pesar de no haber entrenado antes —Avalon le sonreía —. Han tenido las batallas suficientes para aprender cómo actuar, su parte instintiva tomara el control. Cada contienda que sobrevivan ustedes habrán aprendido de forma instintiva a defenderse, al menos lo suficiente para neutralizar la amenaza.

—Si estoy entendiendo bien —estaba recapitulando todo —. Mientras más peleemos mejores eros nos convertiremos.

—Con un entrenamiento previo seria más seguro, pero si —Avalon volteaba al cielo, parecía intentar acomodar sus ideas —. No intenten gritarle a otros no sirve, pocas veces podrán entenderles, en un combate los oídos y el ruido tienden a perderse, estarán enfocados más en todo el movimiento de la batalla, no olviden alejarse para ver todo el entorno, pues algo pueden pasar por alto, no pueden perder el objetivo de todo el campo de batalla. La percepción de la distancia y profundidad puede afectarse, hay muchas formas para responder al combate y muchas otras al asesinato. Pueden sentirse satisfechos de matar a alguien, no dejen que la culpa los limite, es bueno sentir la euforia de sobrevivir, no puedes sentirte mal por hacerlo. Si existe una herida significativa, cúbranla, hagan torniquetes sobre la herida, una vez relajándose su cuerpo la herida comenzara a sangrar más, si no la cubren con tiempo, se desangrarán, esa es la diferencia sobre seguir vivos o morir después de la batalla.

—Es demasiada información, no sé si me acuerde de todo —comenzaba a sentir mareo.

—La herida en la batalla que no se desangró, lo hará después, entiendan la importancia de eso, la verdadera lucha, vendrá pasando la euforia y la culpa quiera comenzar a entrar, su instituto de supervivencia no sentirá culpa por hacerlo, pero su parte racional posiblemente sí, no olviden que es correcto sentirse bien sin importar las situaciones que sucedieron. —Avalon parecía tener prisa en explicarnos —. Después de la batalla; la intensidad, el miedo y los sucesos pueden regresar en algún momento, es natural, pero si intentan enterrar los recuerdos se volverán locos, es normal que quieran evitar rememorar cosas traumáticas, pero solo irán directo a la locura, tendrán que aprender hacer las paces con los recuerdos y separar sus emociones de lo que vivieron, irlas apagando.

—Creo que estarán bien Avalon —Andrómeda intentaba apaciguarla al vernos a todos con un rostro desencajado.

Avalon se acercó y me sujeto del hombro, su mano me reconfortaba, me hacía sentir acompañado.

—Debemos prepáranos —Avalon se veía preocupado. —Algo se acerca.

Krist comenzó a rondar sobre Lial.

—No será necesario —Entendía aquello que Avalon había reparado.

—Todo está en silencio, no hay ruido en el ambiente —Krist también había entendido.

—Guarden silencio, no son Carneros lo que tenemos de visita —Avalon se movía con sutileza en círculos buscando algo.

Un bruxismo comenzó a inundar el ambiente a nuestro alrededor, dos "Silencios" eran audibles, tres, cuatro... Estábamos rodeados. Avalon desfundo las catanas, sostuve la espada dentada, Lial se acercó y le extendió una de sus hachas a Krist mientras Andrómeda se posicionaba a sus espaldas juntó a Shyllphie.

Siguiente capitulo; "¿Me matarías?"

Gracias por seguir hasta este punto.  Buena ventura y espero verlos pronto.