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| propuesta tres |

YoonGi caminó junto a Jimin nuevamente por aquel edificio donde estuvieron el día anterior con el oficial de migración, siendo nuevamente su oficina el lugar de destino.

Tras unos pequeños golpes en la puerta y un "pase", ambos muchachos entraron en el cuarto donde les esperaba el castaño con aquella misma carpeta azul en mano de ayer y un grabador de voz, de aquellos medio antigüillos, en su otra mano, sonriéndole a ambos de aquella manera que hacía que ambos se sintiesen unos grandes criminales.

En parte lo eran.

 Buenos días, señor Min y futuro señor Min El castaño de la verruga les hizo una venia y ambos correspondieron imitando su acción.  Como sé que ambos son personas trabajadoras y muy atareadas con sus tiempos, pasaremos de inmediato a las entrevistas, para ello ayudará un compañero y viejo amigo mío; Kai, amigo, pasa a saludar Un moreno pelinegro fornido y alto se hizo paso saliendo de una habitación que ni Jimin ni YoonGi habían visto ayer ¿Y es qué de adónde había salido esa puerta?  Jimin, YoonGi, él es Kim JongIn, mejor conocido como Kai. Kai, ellos son Park Jimin y Min YoonGi, nuestro nuevo caso

El moreno se acercó a ellos y Jimin se hizo un paso hacia detrás de YoonGi por puro instinto de miedoso, y este último sólo analizó cuantas pesas levantaba aquel gorila ¡Es decir! Muchacho, sí.

 U-Un gusto, K-Kai Jimin extendió su mano suspicaz hacia el moreno con una sonrisilla nerviosa.

El moreno simplemente observó la mano del peliplateado para luego mirarle de pies a cabeza al igual que con el rubio que le acompañaba, guardando silencio y haciendo un gesto con su mentón hacia arriba en ¿Saludo? Algo así pensó Jimin mientras volvía su mano sin corresponder a su bolsillo.

 YoonGi irá a la habitación de en junto con Kai para que le haga la entrevista y yo me quedaré con usted, señor Park Explicó el oficial a su vez que se sentaba en la silla giratoria de detrás de su escritorio.

 ¿Yo? ¿Con él? YoonGi seguía observando al moreno con ligero terror, pero haciendo el intento de verse intimidante si le sostenía la mirada, incluso si tenía que levantar un poco la cabeza.

<< ¿Mide dos metros acaso el cabezón? >> YoonGi lo estaba pensando demasiado y Jimin en cualquier momento le partiría el florero que había en la oficina en la cabeza.

— Por favor, prosigamos de inmediato, no quiero quitarles tiempo valioso A esas alturas Jimin ya no distinguía el sarcasmo o la buena fe que el oficial tenía.

YoonGi fue tomado del brazo y prácticamente arrastrado a aquel cuarto por el moreno que llevaba una carpeta azul también en su otra mano junto a un grabador, pidiendo ayuda con la mirada al peliplateado que le miraba irse.

Jimin sólo quería que todo ese ajetreo terminase de una vez o le saldrían verdaderos cabellos grises ante tanto estrés.

 Bien, Jimin Carraspeó, abriendo la carpeta azul y encendiendo aquel pequeño grabador, y Jimin repasó por quién sabe qué vez el listado de las cosas sobre YoonGi.  ¿Podrías relatarme cómo se conocieron tú y YoonGi?

Y aquel listado se fue a la mierda de viaje con aquella pregunta.

 ¿C-Cómo nos conocimos YoonGi y yo? El castaño asintió, prestando toda su atención en el peligris frente a él. Jimin tragó duro y rió algo nervioso, jugueteando con el borde de su suéter amarillo pastel.  Bueno... YoonGi y yo nos conocimos en la empresa, obviamente Rió ligero, intentando calmarse a sí mismo. Recuerdo que el tenía el cabello verde menta en aquel entonces, bastante escandaloso debería decir, le quedaba horrible Entornó sus ojos al recordarle.

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 En ese entonces yo tenía el cabello verde menta, amaba ese bendito color, me quedaba genial ¿Sabes? Bromeó -o hizo el intento- YoonGi a su vez que se estiraba en la silla con una ligera sonrisa.

 Siéntate bien Ordenó el moreno frente a él con una mirada filosa y YoonGi obedeció al instante, sentándose como correspondía.

 Vale... Jimin ese día recuerdo que llevaba traje, creo que fue una de las pocas veces que le vi en estos tres años con traje, le resaltaba bastante el culo, sep El moreno arqueó una ceja ante aquel comentario.  Llegué a la empresa desde Daegu buscando ser un gran artista, había grabado un mini sencillo y estaba dispuesto a que el mismísimo jefe de la gran BigHit lo escuchase. Así que ese mismo día que llegué me fui hacia la empresa, hasta el último piso, y ahí fue cuando me encontré con él YoonGi de alguna no pudo evitar sonreír por lo dual que fue aquella situación. — Ahí conocí a Jimin, fuera de aquel ascensor

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 Cuando le vi, pensé que era el nuevo conserje o algo por el estilo El oficial alzó sus cejas hacia él sin comprender.  ¡Es que llevaba unos pantalones que estaban tan rasgados que parecía que le habían agarrado unos cuarenta perros salvajes! Aparte de una fea camisa a cuadros roja que tenía una mancha de caramelo en el cuello, ugh Jimin sacudió sus hombros del escalofrío por pensar en aquella cochina camisa.  En fin, YoonGi fue hasta a mí para preguntarme si conocía al jefe de la compañía y bueno, estaba frente a él

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 Jamás creí que un mocoso pudiese liderar una compañía Agregó YoonGi, riendo luego.  Es que parecía un niñito de cinco años, tan bajito y de cabellos castaños que le tapaban casi por completo los ojos y le hacían ver las mejillas más regordetas, aparte de lo agudo de su voz; A veces es demasiado irritante ¿Sabes? Cuando está de malhumor se le desafina la voz y parece hiena gritando El moreno -Kai, se llama Kai, por favor- le miró impaciente porque dejase de desviarse del tema antes de que le diera un puñetazo en la cara.  Jimin me preguntó qué es lo que buscaba, le mostré el pendrive con lo poco que tenía de una canción que había compuesto y ambos fuimos a su oficina para que la oyese

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 ¡La letra era horrible! Hablaba de un chico que le gustaba el pollo o algo así, no sé ¡Pero era horrible! Jimin se tapó el rostro con ambas manos, negando con la cabeza horrorizado.

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— ¡La letra era genial! Le había puesto el alma y mi sudor a esa composición YoonGi apretó su dedo índice contra la mesa que estaba entre ambos, como si ahí estuviese aquel pendrive.

— ¿De qué hablaba la letra? Cuestionó K a i.

 De la cobardía, por eso el pollo

Kai suspiró, cerrando por unos momentos sus ojos ante lo estúpida que estaba siendo esa entrevista.

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 Le dije que era pésimo, no soy alguien que ande con vueltas. YoonGi me insultó y dijo que sólo era un mocoso come mocos. ¿Cómo le dices "mocoso" a otra persona si usas ese insulto infantil de "come mocos"? Jimin resopló, peinando su gris cabello hacia atrás.  A los días volvió diciendo que necesitaba un empleo de lo que fuese porque no podía volver a Daegu porque no tenía ni un centavo

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— Así fue como terminé siendo su asistente por los siguientes... Tres años, sí YoonGi suspiró, masajeando su nuca con una de sus manos ante el dolor de esta por estar tanto rato sentado.  Se podría decir que con el tiempo me convertí casi como en su mano derecha. Jimin me pedía a mí que le acompañase a reuniones importantes, a exhibiciones, presentaciones...

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 YoonGi estaba conmigo casi todo el día prácticamente Jimin sonrió ladino sin darse cuenta.  ¿Supongo que eso terminó enamorándome? El estar tanto tiempo junto a él a solas en tantas cosas... Vaciló, tal vez realmente pensándolo. 

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 Supongo que así nos enamoramos Concluyó YoonGi, bostezando.  ¿Ya está con eso? Cuestionó al ver como el moreno se levantaba de su silla una vez terminó de escribir en la carpeta azul.

Este hizo una especie de ¿Gruñido? Y YoonGi le tomó como un "sí" por lo que salió de aquel cuarto tras ver al moreno salir.

Jimin se giró al escuchar la puerta y YoonGi fue al primero que vio, este le regaló una leve sonrisa junto a un asentimiento, por lo que Jimin finalmente suspiró largo, soltando todo el aire que retuvo ante los nervios.

 ¿Han terminado? El moreno asintió hacia el oficial y este sonrió.  ¡Muy bien! Entonces pueden ya retirarse señores El castaño cerró aquella carpeta azul a su vez que la guardaba en el segundo cajón de su escritorio junto a la grabadora.

Ambos muchachos asintieron y con una venia pronunciada se despidieron.

 Y, señores Ambos detuvieron sus pasos hacia la puerta para girarse y mirar al oficial.  Pasen una linda semana en familia en Daegu

Jimin sonrió amplio forzosamente y YoonGi siquiera se forzó a ello; Ya hasta eso le daba flojera a las diez de la mañana.

Finalmente salieron del edificio que estaba repleto como el día anterior. YoonGi no tardó en prenderse un cigarro apenas estuvieron en el borde de la acera esperando a por un taxi.

 ¿Por qué fumas? Jimin se abrazó a si mismo ante la fría brisa que vino de repente, alejándose del humo que el rubio desprendía de su nariz.

 ¿Realmente es de tu interés? Arqueó una de sus oscuras cejas hacia él, divertido.

Jimin resopló.

 Debería saberlo si es que me preguntan alguna vez ¿No creés? Respondió con obviedad, alejando el humo con su mano agitándose en el aire.

 Tienes un punto ahí YoonGi soltó el humo entre palabras. — Si te pones de este lado no te dará el humo, genio YoonGi jaló del abrigo al peligris para colocarle a su derecha y este gruñó ante la acción.

 Contesta Insistió mientras afianzaba el abrazo a su propio cuerpo, casi tiritando.

YoonGi entornó sus ojos y tiró al suelo la colilla del cigarro, apagándola con su pie.

 De alguna manera me desestresa, el tener algo en la boca para mantenerla ocupada me distrae YoonGi se apoyó en el farol que tenía detrás, rebuscando taxis con su mirada.

Jimin no lo había notado hasta ahora, pero YoonGi tenía un lindo perfil. Su nariz era pequeña y adorable y sus labios eran delgados pero no del todo, además de su suave tono rosáceo que contrastaba a la perfección con lo pálida de su piel.

YoonGi sintió la mirada contraria sobre él por lo que se giró y Jimin dio un pequeño saltito de sorpresa, girándose de inmediato para mirar al frente y tapar el rosa de sus mejillas con el cuello de su abrigo.

YoonGi rió por lo bajo y gritó un "taxi" cuando divisó uno vacío. Una vez el coche paró frente a ellos, se subieron a este, pero YoonGi no pidió ir a la compañía, sino que a una cafetería.

 ¿Qué haces? Hay trabajo que hacer allá ¿Recuerdas? Jimin frunció su entrecejo para mirarle con molestia.

El rubio bufó.

 Sí, lo recuerdo, porque la mayor parte de ese trabajo debo hacerlo yo Arqueó una ceja ante el ceño fruncido del peligris. Jimin entornó sus ojos, cruzándose de brazos. — Además de que tengo hambre, hoy no alcancé a desayunar, demasiado con trabajar hasta los sábados ¿Sabes? Agregó, golpeando ligeramente su abdomen.

— Tss ¿Y porqué me arrastras a mí a tu "desayuno"? YoonGi entornó sus ojos exageradamente para burlar al peligris.

Si seguían así se les saldrían los ojos de las cuencas cual caricatura.

 Porque tú eres el que me da trabajo y si estás aquí conmigo no puedes darme nada Sonrió burlesco, revisando su móvil.

Jimin resopló una vez más, quitando un molesto mechón de cabello de sus ojos.

 Anímate YoonGi codeó suavemente en el costado de Jimin.  Te compraré una porción de pastel de chocolate, sé que te gusta

Jimin suspiró por lo bajo.

— Vale, pero con doble crema YoonGi sonrió ladino y asintió.

Llegaron finalmente a la cafetería que tenía una pinta horrible por fuera según Jimin, pero por dentro era acogedor. Habían bastantes personas por la hora y de fondo sonaba tenue una canción de Frank Sinatra en aquel viejo tocadiscos que había en un rincón entre las mesas del lugar.

YoonGi tomó lugar en una mesa algo aislada que estaba junto a la ventana, era su lugar favorito desde que había descubierto aquel lugar. Jimin se sentó en la silla libre frente a la contraria y respiró hondo el olor a café que emanaban las mismas paredes, sonriendo ladino apenas.

 ¿Te agrada? Cuestionó el rubio una vez se les fueron entregadas las cartas con los menús. 

Jimin ladeó su cabeza, pensándolo un poco.

 Tal vez Murmuró apenas y ocultó una sonrisa detrás de la carta, leyendo el listado de platos para el desayuno.

 ¿Pedirás tu porción de pastel?

Jimin asintió.

 Si puedes pagar tres mil wones por la porción y otros dos por el té de menta, pues sí YoonGi entornó sus ojos.

 No eres el único con dinero aquí, Jiminnie

Jimin arqueó una de sus cejas, bajando la carta para mirarle.

— ¿Qué quieres decir con eso, YoonieCuestionó burlesco con un tono de voz agudo para aquel apodo.

YoonGi se carcajeó.

 ¿"Yoonie"? ¿En serio? Jimin asintió indiferente y el rubio negó con su cabeza.  En fin, sí, pagaré tres mil wones por tu porción de pastel y el té, debo ser un buen prometido Jimin resopló a lo que dijo.  Pensé que pedirías tu café extra cargado

Jimin jugó con una pajita que había allí, doblándola y desdoblándola.

 El té de menta me desestresa Murmuró, haciendo un nudo con la pajita.

 ¿Estás estresado? YoonGi alzó su mano para que una mesera les tomase el pedido.

Jimin entornó sus ojos y le tiro la pajita al rubio sin responder a aquella tonta pregunta.

Llegó una mesera a tomarles su pedido unos minutos después; Como le había dicho, YoonGi pidió una porción de pastel de chocolate con doble crema junto a un té de menta para Jimin y un capuchino con unos brownies para él. La mesera no perdió tiempo en darle miradas coquetas a YoonGi mientras este le dictaba los pedidos, y YoonGi tampoco se quedó atrás en cuanto a regalarle un par de sonrisas traviesas. Jimin miraba la escena con una ligera molestia, asqueado un poco por el descaro de aquella rubia tonta.

La rubia tonta regresó con sus pedidos y Jimin pudo fichar al instante como esta le tendía un pequeño papel doblado a YoonGi, el cual no alcanzó a tomar porque la pequeña mano de Jimin lo tomó antes, desdoblándolo ante la mirada de aquellos dos.

— Oh, es tu número de teléfono ¿No? La rubia asintió casi orgullosa y descarada, abrazando la bandeja vacía a su pecho.  Que pena El rubio puchereó falsamente, arrugando el papelito y tirándolo a suelo.  No creo que él pueda llamarte -Agregó, apoyando su mentón en su palma con su codo sobre la mesa.

 Já ¿Y porqué no lo haría? La rubia arqueó su gruesa ceja oscura desafiante hacia Jimin y este se carcajeó divertido.

 Mira lindura, él no podrá llamarte porque está felizmente comprometido conmigo y si te sonreía es porque sentía penita por ti, además de que él es así con todo el mundo Jimin suspiró, estirando su mano hacia la de YoonGi que descansaba sobre la mesa, entrelazándolas.

YoonGi alzó sus cejas, tal vez algo sorprendido por aquella reacción del peligris, y la rubia tonta gruñó por lo bajo y se dio la vuelta para irse de inmediato, meneando sus caderas exageradamente para que aquella falda roja se le subiese y unos cuantos hombres presentes se girasen a verle. Jimin arrugó su nariz con desdén y desvió la mirada de donde se había ido la rubia tonta para posarla en YoonGi, quien le miraba divertido, imitando su pose del mentón sobre la palma.

 ¿Qué es tan chistoso? Refunfuñó con su entrecejo fruncido.

 ¿La escena de celos que te acabas de montar tal vez? YoonGi sonrió ladino ante el rosa que comenzaba a pintar las mejillas del peligris.

 N-No fue ninguna escena de celos, no te creas Jimin soltó la mano de YoonGi que no había percatado que aún sostenía hasta ese momento, y tomó la taza con su té de menta para darle un pequeño sorbo luego de soplar.  Tan sólo me comporto como un buen prometido Sonrió burlón, imitando aquella frasesita que YoonGi estuvo usando esos últimos días como excusa para hacer de las suyas. Además de que esa rubia era horrendamente tonta Agregó, arrugando su nariz.

YoonGi se carcajeó, dando un par de aplausos.

 Me sorprendes, Jiminnie Agregó una vez detuvo sus carcajadas, dándole un sorbo a su capuchino.

Jimin se encogió en su lugar, sintiéndose repentinamente cohibido ante la sonrisa de YoonGi y aquel apodo que ahora usaba para él.

Terminaron cada uno su desayuno y YoonGi pagó la cuenta, siendo golpeteado en la mano por Jimin cuando intentó dejar una propina para aquella mesera rubia tonta.

Tomaron un taxi y regresaron a la compañía. Aún para los empleados del edificio era raro ver a aquel par junto ahora que se sabía que se "casarían". Aún las secretarias y otras cotilleaban ante lo repentino de la noticia y como eran ambos de diferentes y que no congeniaban para nada, diciendo que Jimin era demasiado guapo para alguien como YoonGi y otras pensaban lo contrario, que YoonGi era demasiado para Jimin.

En fin, donde iban se escuchaban los cotilleos y murmullos sobre ellos por la aún fresca noticia.

 ¡Jimin-ah! El de cabellos grisáceos se frenó junto a Yoongi y se giró al escuchar su nombre de una voz grave y bastante llamativa, encontrándose con el castaño del que tanto había hablado.

 J-Jaehyun-ssi ¿Qué haces aquí? Pensé que estabas en Japón por negocios Jimin fue ligeramente abrazado por el castaño cuando llegó hasta él y Jimin no presentó disgusto ni rechazo, por supuesto que no. Incluso llegó a reprimir una sonrisa que amenazaba con salir.

YoonGi se apartó de aquellos dos por el abrazo y frunció su entrecejo un poco al ver como Jimin aceptaba aquel abrazo al poner sus manos sobre los brazos del castaño.

 He vuelto de imprevisto, ha salido todo bien allí Se separaron finalmente y el castaño alto le regaló una suave sonrisa de hoyuelos.

 ¿En serio? ¡Felicidades! Jimin hizo ademán de abrazarle, pero la mirada que YoonGi tenía en ambos de alguna manera le hizo detenerse, además de su subconsciente que le gritaba que no hiciese el ridículo y le recordase el pánico que le tenía al contacto excesivo; Por lo que simplemente dio una pequeña palmada en su brazo ya que su hombro estaba casi fuera de su alcance por la altura del castaño.  E-Ehm, entonces... 

Jaehyun rió suavemente ante el rosa de las mejillas del más bajo.

 ¿Vamos a tu oficina? Quiero contarte todo el chisme de las reuniones

Jimin suspiró con pequeña livianez y asintió con una ligera sonrisa.

Ambos comenzaron a caminar y Jimin vio por el rabillo del ojo como YoonGi se daba la vuelta e iba en sentido contrario a quién sabe donde. Jimin por alguna razón se sintió incomodo y llegó a preguntarse si a YoonGi le había sucedido algo, que porqué no le había seguido, pero sus pensamientos se esfumaron cuando la mano del castaño a su lado se posó en su espalda baja ligeramente, sin invadir mucho, cuando entraron finalmente a la oficina de Jimin.

YoonGi salió del cubículo del baño y se dirigió hasta el lavabo para lavar sus manos.

 ¿Vimis i ti ificini? Quiri cintirti tidi il chismi... Cara de manopla YoonGi gruñó, secando sus manos con el papel del rollo colgado a la pared.

 Parece que te andan robando el puesto, bro El de cabellos castaños, casi anaranjados ahora, se encontraba saliendo de unos de los cubículos del baño, yendo hacia el lavabo para lavar sus manos.

 No sé de qué hablas El castaño anaranjado se carcajeó, secando sus manos mientras le veía.

 Deberías preguntarselo a Jaehyun-ssi Felix agudizó su voz en burla y YoonGi volvió a gruñir al escuchar aquel nombre.

 Ese estúpido de Jaehyun siempre fue eso, un estúpido Masculló, apoyándose en el mesón con los brazos cruzados sobre su pecho.

El otro se carcajeó, golpeando ligeramente su brazo.

 Tranquilo, tienes a Park agarrado ya El castaño hizo una seña apuntando a su dedo anular, donde se supone va el anillo de compromiso.

YoonGi resopló.

 No te amargues, lo único si es que deberías prestar un poquito más de atención cuando ese Jaehyun esté cerca de Jimin, tampoco te digo que un anillo es una barrera contra cualquier persona Le guiñó un ojo antes de salir de los baños y dejarlo allí solo.

— Tampoco es que me interese lo que haga... Todo es una farsa al fin y al cabo ¿O no? Se cuestionó a si mismo en voz alta.

Resopló una vez más, golpeteando su mejilla un par de veces y despeinando un poco su cabello, verificó que su camisa estuviese bien dentro de su pantalón y salió finalmente de los baños en dirección a la oficina de su jefe, bastante decidido a lo que haría para divertirse un poco.

¿Jimin le hacía showcitos? Él también podía joderle un rato.

 Cariño YoonGi habló apenas entró por la puerta casi como una luz.

Jimin desvió su mirada aturdido hacia el rubio al igual que el castaño que frenó su hablar.

— ¿Cariño? Cuestionó Jaehyun, frunciendo su entrecejo.

Jimin sonrió nervioso.

 A-Ah... ¿Pasa algo, YoonGi? Estoy ocupado hablando con Jaeh-

 Ya te extraño, eso pasa YoonGi estiró su labio inferior hacia afuera cual niño pequeño.

Jimin abrió sus ojos de par en par al escucharle y apretó el agarre que tenía en el bolígrafo de su mano izquierda.

En los ojos de Jimin parpadeaba en grande un "Voy a degollarte y a tirarte a los perros" que para YoonGi no era más que su trofeo de victoria.

 Uh, ustedes dos... ¿Son algo? Cuestionó el castaño tras unos segundos de incomodo silencio.

 N-No, e-él y yo no- Jimin se apresuró a hablar, pero fue interrumpido por YoonGi.

 ¡Por supuesto! ¿Jimin no te contó acaso? Jaehyun negó con la cabeza, demasiado confundido con todo.  Jimin y yo nos casaremos ¿Increíble verdad? Lo mejor es que él me lo pidió, muy romántico, justo en la acera frente al edificio frente a los que pasaban Sonrió con sorna YoonGi ante el apretón de Jimin en el bolígrafo que se volvía más fuerte ya que sus nudillos estaban prácticamente blancos.  Debo admitir que hasta a mí me sorprendió Agregó una vez se posicionó detrás de la silla de Jimin y posó sus manos en sus hombros, dándole un leve apretón divertido.

Jimin sacudió sus hombros para quitárselo de encima con la sangre hirviéndole de molestia.

Jaehyun carraspeó un poco antes de sonreír levemente.

 Te felicito entonces, Jimin-ah, espero sean muy felices juntos Hizo una pequeña venia con su cabeza y Jimin sonrió forzosamente cuando YoonGi exclamó un "gracias".  Yo... Debo irme ya, dejé un par de cosas pendientes antes del viaje y ahora debo hacerme cargo de ellas Rió suavemente, levantándose del asiento. Fue un gusto verte y espero hablemos pronto sobre ese proyecto que mencionaste Y sin esperar que Jimin pudiese decir algo, se retiró de la oficina con otra pequeña venia.

 ¡¿Me puedes decir que mierda fue este espectáculo que te montaste?! ¡Era Jaehyun, maldición! Masculló Jimin, levantándose de su silla para girarse a mirar a YoonGi el cual le sonreía divertido.

— ¿Recuerdas tu show de los celos en la cafetería? Jimin abrió su boca pronto para objetar, pero YoonGi colocó su dedo indice sobre sus labios, indicándole silencio.  Estamos a mano ahora Chasqueó la lengua antes de separarse de él.

Jimin permaneció inmóvil y pasó el dorso de su mano sobre sus labios bruscamente en busca de borrar aquel odioso tacto.

 Tú maldito idio-

 Mañana a las ocho sale nuestro tren a Daegu, sé puntual, cariño~ Le guiñó un ojo risueño antes de cerrar la puerta y desaparecer tras ella.

Jimin tomó su abrigo que descansaba sobre el pequeño sofá de allí y tapó su rostro, ahogando un grito de frustración entre las telas del abrigo.

Su móvil sonó en su bolsillo y sacó este de mala gana, contestando la llamada de un número privado.

 ¡¿Qué?! Jimin infló sus mejillas a punto de explotar.

 Deja de gritar que arruinarás tu preciosa voz; Me olvide de decirte que tienes una mancha de chocolate en tu mejilla derecha ¿Creés que Jaehyun-ssi la haya notado? frunció su entrecejo al escuchar la voz de YoonGi al otro lado de la línea y miró hacia la ventana, viéndole de lejos con uno de los teléfonos de la compañía mientras le miraba divertido apoyado en una pared.

Jimin gruñó y su dedo de en medio fue alzado hacia el rubio quien se carcajeó en silencio aún con el teléfono en su oreja.

— Nada propio de ti, eh, cariño Habló entre risitas al teléfono.

 Tampoco será propio de mí cuando te patee el culo por idiota, cariño Cortó la llamada y apretó el móvil entre sus manos, ahogando entre dientes otro gritito para luego refregar su mejilla izquierda en busca de limpiar aquella mancha de chocolate de la que habló YoonGi.

La cual no existía realmente, YoonGi solo quería divertirse viendo como el peligris se refregaba con molestia la mejilla.

YoonGi una vez más se ahogó en risotadas incluso si otros empleados le quedaban viendo y dejó el teléfono donde estaba, dándole una ultima mirada al peligris que le miraba con sumo odio a lo lejos por la ventana. YoonGi llevó una de sus manos a sus labios lanzándole un beso y Jimin cerró las persianas de su ventana apenas le vio.

 Que dramático eres, Jiminnie Murmuró divertido el rubio a su vez que caminaba hacia su respectivo cubilo, echándose en la silla giratoria y sonriendo victorioso.





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LA PROPUESTA YA ENTRÓ EN DOS RANKINGS 😭 😭

gracias de verdad:((((( xfavor disfruten mucho esta historia que disfruto escribir, voten y comenten que leo todo, y compartan con sus conocidos yoonmin shippers<3333

gRACIAS OTRA VEZ :((( <33


— MinJi

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