III.- Este lugar es agobiante para un vampiro como yo.
En el capitulo anterior: Yo Clarence estaba almorzando en este insufrible instituto cuando de pronto llegó el insoportable Manuel Millnigth.
Mientras comía mi apetecible y sabrosa comida roja, Manuel Millnigth se sentó al lado mio al instante. Al ser una vampiro muy especializada no me asusté pero me sobresalté un poco. Su almuerzo era, macarrones, los cuales yo me hubiera comido si fueran con salsa de tomate no con el espantoso ajo.
-¿Despues de la hora del almuerzo que clases te tocan, Clarence?- me preguntó el muy bobo con la boca llena de macarrones. Aunque me ha sorprendido que haya dicho bien mi nombre. Después se metió en su boca un montón de macarrones que seguramente estaban asquerosos. Después cuando quiso pinchar uno de su macarrones, que estaba pegado en el plato, le salto a la cara y se manchó de grasa toda la cara. Yo solté una pequeña sonrisa al ver la estupidez de la gente que venía a estudiar a este insoportable instituto. Para limpiarse la cara, se le ocurrió la genial idea que limpiarse con la camiseta. Encantador.
-Tecnología y luego toca Naturales- le dije.
-Que bien. La profesora de Naturales, la profesora Carla es la misma que la tu profesora asi que nos tocará en la misma clase, ¡Es estupendo! Empezó sus clases después de que el profesor Sleepon se largase de este instituto.
-(Normal que se largase de este instituto tan horrible)- pensé.
-¿Irse?
-¿Por que razón, aunque este instituto fuese insoportable, no es normal que un profesor se large sin más, sin ninguna razón?
-Se mudó- me comentó-Se esfumó. Las clases del profesor Sleepon eran demasiado faciles, al contrario que la señorita Carla, que hace unas clases muy complicadas -se volvió serio al instante y negó-. Seguro que encuentras antes algo perdido en tu casa, que aprobar en su insoportable clase.
-Despues de comer tengo Educación Física, que se me da fatal, lo odio. Nunca llegare a ser el mas fuerte y agil del instituto. Eso si ahora he mejorado un montón y corro más rapido que mi amigo Pecas que antes era más rapido que yo y eso que era uno de los más lentos de la clase. Seguro que lo he conseguido gracias a que mi amigo se lesionó la pierna hace mucho y por eso no a podido entrenar al igual que yo. Durante el verano descansaré a tope y nada de futbol, ni atletismo, ni nada de deporte.
De pronto se le cayó los pocos macarrones del plato que aterrizaron en sus pantalones blancos, que cambiaron de color blanco a un color grasiento. -Eso si que era una obra de arte jejeje- pensé-.
Madre del amor ermoso, ¿que pena de chico?¿A que quería engañar? Quise leerle la mente pero estaba tan bacia como la del bobo profesor de Lengua. Nosotros los vampiros podemos leer la mente de todos los humanos, es una gran percepción además de util. También podemos manejar a los demás pero tienen que ser normalmente personas adultas porque tienen que ser cerebros desarrollados. Por lo tanto no podia manejarle, además de que era demasiado tonto. A lo lejos logre ver a la estupida de mi vecina, la recordais, la del gran matojo de pelo que le quedaba horrible, además de su manía de comer piruletas, con olores que no podía soportar. Se acerco rapidamente a nosotros con cuatro amigas que eran demasido chulas y que venían riendose como unas tontas.
-¿Como va tu primer día de instituto Clara? -pregunto con una voz poco natural y vacilante. Simuló una sonrisa intentando que yo se la devolviese como si fueramos amigas, deseaba eliminar esa sonrisa de su estupida cara, que se creia esa chula que iba a conseguir que la siguiese a todas partes como sus amigas que la seguían como si fuera la diosa del instituto.
¡Clarenceeeee! ¿Cómo se había atrevido a llamarme por ese nombre tan horroroso? Estoy segura de que a ella no la gustaría que la llamen matojo o que la llamen engreida. Estoy deseando ser una vampiro chupasangre como los vampiros de las peliculas para arrancarle de cuajo esa sonrisa de esa estupida cara. Pero no quería que me viese enfurecida, entonces la dirijí una sonrisa tan falsa como los jugetes de los veinte duros.
-Soy Clarence- la corregí malamente, pero manteniendo mi sonrisa.
-Claro es cierto- esa niña era una combinación bastante mala de chulería, bastante pelo y su insoportable manía de comer piruleta en la cara de los demás.
Como reaccionara esta variopinta niña en el siguiente capitulo que subire mañana, espero que os guste mi historia. Comentar si os ha gustado y decirme que os parece, votar si os parece buena.
¿Conseguira Clarence integrarse en el instituto?
¿Pasará algo especial en la clase de Naturales?
¿Conocerá Clarence a su futura enemiga?
Este capitulo se lo dedico a mi amiga miriam4ever seguirla y leean su historia.
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