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4

La boda se realizaría en unas semanas, todo estaba siendo preparado, así lo había dicho Jennie el mismo día en el que Lisa había aceptado.

Lisa fue llevada a una habitación algo alejada de la de Jennie, dormiría allí hasta el día de la boda. La pelinegra no entendió muy a qué se refería, pero prefirió no preguntar. Esa noche durmió cómodo y bajo el calor de las suaves sábanas. No recordaba lo bien que era dormir en una cama.

Pan no había sido separado de Lisa, él dormía junto a ella a un lado, eso había sido por petición de la misma pelinegra. Estaba segura que un enorme cuarto solo para él, se sentiría demasiado solo.

A la mañana siguiente, Lisa dormía tranquila, cuando una extraña sensación de ser observada llegó a ella. Abrió los ojos con pereza y notó con un pequeño susto, a varias sirvientas del palacio frente a ella.

_Es hora de su baño - pronunció una anciana.

_¿Mi qué?

De inmediato fue tomada de la muñeca y se llevaron sin ninguna explicación. Pan estiraba sus patas en un bostezo, cuando su cuerpo se doblo cuando se lo llevaron de un solo jalón.

Para Lisa todo estaba siendo muy extraño y brusco, las sirvientas la bañaban como si estuvieran lavando ropa, no tenían cuidado. Unas en sus piernas, otras en sus brazos, y una en especial que le lavaba la cara con todo el jabón.

En cambio Pan, él estaba relajado en una pequeña tina con agua tibia y bastante espuma dentro. Jennie había pedido que tuvieran especial cuidado con el amigo roedor de Lisa.

Minutos después, Lisa bajaba de las escaleras viendo con agrado el traje que le habían dado. Estaba cómoda, al menos hasta ahora las palabras de la princesa estaba siendo cumplida.

_Vaya, no esperaba que fueras tan atractiva - Jennie estaba saliendo del comedor, viéndola de pies a cabeza. Lisa asintió algo incómoda y se inclinó levemente, era la primera vez que le decían un cumplido - Pan - sonrió - estás muy guapo - la rata sonrió.

_Buenos días, princesa.

_Ya te dije que me digas Jennie- comentó divertida.

_Es que...se me hace un poco difícil - se rascaba la nuca, avergonzada - me parece una falta de respeto hacia usted.

_Está bien, por ahora lo aceptaré. Pero después de la boda, tendrás que llamarme por mi nombre.

_Está bien...princesa.

_¡Quédate quieta! ¡No me metas las uñas! - Rosé llegaba mientras regañaba a su nueva mascota. Al parecer, ninguna se llevaba bien. Lady no estaba acostumbrada a estar sobre un hombro, se iba de un lado a otro cuando Rosé caminaba - ¡Ash! Está bien, sube - mandó con los ceños fruncidos. Lady obedeció y se trepó a su cabeza, allí tenía más equilibrio - buenas días, princesa - Rosé se inclinó y la rata cayó al suelo de panza - pero sujetate bien - estiró su mano para que volviera a trepar.

_Veo que se llevan bien - comentó Jennie.

_Bueno...sigo pensando que no es una buena idea, princesa - respondió incómoda.

_Rosé - mantenía la mirada seria en ella - ¿No vas a saludar a mi prometida?

_Oh, sí. Claro - Rosé suspiró, dudó unos segundos, pero se inclinó ante Lisa - buenos días...dama, Lisa - la rata volvió a caer.

_¡¿Tienes una rata también?! - preguntó Lisa con ilusión, Rosé viró los ojos - ¡Mira, Pan! ¡Tiene una...- giró a ver a su amigo, este tenía cara de bobo mirando a Lady - ¿Pan? - chasqueó sus dedos frente a él - hey, Pan.

Rosé observó extrañada, hasta que siguió la mirada del animal y frunció sus ceños al ver que mirada a su mascota. En cuestión de segundos Rosé tomó a Lady rápidamente y la escondió detrás de su espalda. Veía de manera retadora a Pan. Ni crea que alguien como Lady se va a fijar en un chaparro orejón.

_Lisa, llamé a Rosé para que pueda ser tu guía y enseñarte lo esencial antes de la boda. Pasarás el día con ella y en la noche vendrás a practicar el baile. ¿De acuerdo?

_Sí...- Lisa veía extrañada como la rubia metía a su amigo dentro de su bolsillo - no creo que sea bueno tenerlo allí, le puede dar calor.

_Tú no te metas - respondió distraída, hasta que agrandó los ojos al darse cuenta de su error - Lo siento - bajó la mirada nerviosa, había visto la seriedad de Jennie en ella.

_Bueno...¿Nos vamos? - señaló Lisa, incómoda por la tensión del momento.

_Sí, solo espere unos minutos, por favor - pidió Rosé.

***

La campanilla de la entrada avisó su llegada. Rosé se hizo paso ante tantas gallinas sueltas y nuevamente notó a la vendedora durmiendo con el sombrero de paja tapando su rostro.

_Buenos días.

_Tienda Kim...de la familia Kim...de Jisoo Kim...- respondió Jisoo en medio del sueño, seguía en la misma posición.

_Quería saber si puedo dejar a este animal por unas horas aquí. En la noche vendré a recogerlo - Rosé dejó la jaula con Lady dentro - tengo unos asuntos que realizar y con ella en mi cabeza sería incómodo - Jisoo soltó un ronquido - ¿Hola? - se inclinó un poco para ver sus ojos, estaban cerrados. Suspiró de frustración y se acercó a ella - Disculpe - apenas tocó su hombro cuando fue tomada con fuerza y lanzada de un giro al suelo, sacándole todo el aire.

Jisoo tenía los puños levantados, estaba lista para pelear, pero agrandó los ojos con vergüenza al ver quien era. ¿No era un ladrón?

_¡Lo siento, lo siento, lo siento! - Jisoo se inclinó rápidamente a ella. Rosé tenía la mirada al techo, en shock - ¡Pensé que era un ladrón! ¿Está bien?

_Siento...algo extraño debajo de mí...- pronunció con temor.

_¿Algo extraño? - con total confianza, giró un poco a Rosé y miró debajo de ella, buscando - oh, no es nada extraño - sonrió.

_¿No?

_Solo es popó de vaca - Rosé palideció - debe ser porque traje por aquí a Marcela, es una vaquita. Debe verla, es bien gordita y bien adorable. Hace poco de una hora que ya se fue, solo lo estaba cuidando por un día. Bien traviesa, por más que le decía: "¡Hey, no hagas eso!" Seguía y seguía la vaca. ¿Te gustan las vacas? - sonreía.

Minutos después, Rosé salía avergonzada del baño de la pelinegra. Traía puesto un pantalón algo desgastado y flojos, junto a un camizon blanco. Tuvo que quitarse su uniforme y dejarlo sobre un valde en el suelo.

_Mi ropa te queda bien - Jisoo levantó el pulgar.

_Sí...- forzó una sonrisa - yo...ya me voy...cuide a Lady - se dirigía a la entrada.

_Oiga - apoyó sus brazos en la mesa, observándola. Rosé giró a la espera de sus palabras - ¿Está soltera? - sonrió coqueta. Rosé se mostró sorprendida y molesta por tal atrevimiento.

_Eso no le incumbe.

_Ay pues, yo nomás preguntaba - seguía coqueteando con la mirada - ¿De qué parte del pueblo es? Claro, si no le molesta.

_No soy del pueblo - se cruzó de brazos - soy del palacio. Consejera real de la princesa.

La sonrisa de Jisoo se fue esfumando lentamente, mostrándose sorprendida.

_¡Disculpe por mi atrevimiento!

Se inclinó tan rápido y tan abajo, que su cabeza rebotó contra la mesa, mandando a la pelinegra hacia atrás y al suelo.

Rosé frunció los ceños, la chica no se levantaba.

_¿Hola? - se fue acercando lentamente - ¿Está bien? - logró verla, estaba inconsciente - no puede ser - suspiró.

***

_¿Aun no regresa? - Jennie se acercaba a Lisa, ella seguía esperando en los jardines. La pelinegra negó - que extraño, ella siempre es puntual y responsable. Debe haber un tema importante por el cual esté llegando tarde.

_Princesa - se veía aburrida.

_¿Qué pasa? - sonreía al ver a Pan corretear entre las flores.

_¿Qué hace para no aburrirse? Solo veo a todos andar en silencio que no se escucha ni una voz. Y el palacio es tan grande que parece que estoy yo sola.

_Bueno...no es algo que me haya dado cuenta, así es desde siempre - respondió tranquila.

_¿Ha estado así toda su vida? - Jennie asintió - que aburrido - se tapó de inmediato la boca por sus palabras - perdón - Jennie rió levemente.

_¿Como es que te diviertes? Quizá pueda unirme.

_¿Está segura? No creo que pueda correr con su vestido.

_Puedo ponerme unos pantalones. Dime, ¿Cuál es tu idea?

_Antes, una pregunta, ¿Puedo dar órdenes?

Minutos después. Varios soldados se habían quitado sus armaduras y vestían más cómodamente. Había dos grupos de cinco integrantes, donde en uno lideraba Jennie y en el otro Lisa.

Estaban listos para el juego. Un hombre con barba hizo sonar el cuerno y Lisa tomó el balón de piel de cerdo, comenzando a correr al lado del contrincante.

Para su sorpresa, fue tomada con una sola mano por el soldado que medía más de dos metros y era robusto. La sostuvo de una pierna y caminó tranquilamente hacia su meta, donde la soltó de cara al suelo.

_¡Punto para la princesa Jennie! - la castaña festejaba junto a su equipo.

_¡Oye! - Lisa le levantó con los ceños fruncidos - ¡Eso no se vale! - acusó.

_¿Y por qué no? - Jennie se cruzó de brazos, sonriendo divertida.

_¡Es un gigante! ¡Quitalo, no cuenta!

_¿Quieres que sea más pequeño que tú para que ganes?

_¡Tiene que ser del mismo tamaño! ¡Hombro con hombro!

_Está bien - miró a su soldado - toma asiento - este asintió - Deid, entra tú - ordenó.

El cuerno nuevamente fue sonado. Lisa corrió hacia Deid que tenía el balón y ante su sorpresa, este cruzó por encima de ella con un salto y giro sorprendete. Llegó a la meta y soltó el balón.

_¡Punto para la princesa Jennie!

_¡Eso no se vale! - se quejó la pelinegra.

_¿Ahora porqué no? - Jennie volvía a reír.

_¡No se puede saltar por encima! ¡El juego es en el suelo!

_¿Entonces lo quito?

_Sí - respondió segura.

_¿Algo más, mi princesa? - las mejillas de Lisa se sonrojaron.

_Nada más...solo eso...- desvío la mirada.

_Está bien. Deid, toma asiento - este obedeció - Jael, entra.

Segundos después, Lisa estaba en shock. Ese sujeto había corrido de manera tan veloz, que ni le había dado tiempo de reaccionar.

_¡Punto para la princesa Jennie!

_¡No se vale! - Lisa tiró su pañuelo al suelo - ¡A ver, ¿porqué no juega usted?! - señaló.

_¿Crees que por ser una princesa, soy fácil de vencer? - mantenía una sonrisa arrogante.

_Pues no la veo esforzarse mucho, princesa - provocó.

_Todos salgan de la cancha, ahora - ordenó seriamente.

Lisa sonrió con arrogancia también. Tomó el balón entre sus manos y se preparó para correr. El cuerno avisó el comienzo, los soldados de Jennie la alentaban y aun lado de ellos, Pan hacía barra para Lisa.

Lisa iba a esquivar a Jennie, pero esta se salvó a sus piernas, haciendo que caiga de frente y soltara el balón. Jennie logró sostenerlo y correr al lado contrario, estaba por llegar a la meta, cuando todos jadearon de la sorpresa y de los nervios al ver a su princesa ser tacleada.

_¿Decía usted, princesa? - Lisa sonrió divertida al sostener el balón, Jennie tenía la cara enterrada en el lodo.

Lisa caminó tranquila al lado contrario, sabía que Jennie no se iba a levantar, pero para su mala suerte, Jennie levantó la cabeza, mostrando sus ceños fruncidos lleno de lodo.

La pelinegra gritó del susto cuando Jennie saltó a su espalda. El balón salió rodando cuando ambas cayeron al suelo en medio de una pelea. Los soldados comenzaron a retroceder lentamente al ver la molestia de la princesa, incluído Pan.

_¡Princesa! ¡Princesa! - Lisa trataba de quitarla de encima - ¡Así no es el juego! ¡Vaya por el balón! - Jennie hundió su cara en el lodo, Lisa levantó su cabeza con fuerza - ¡Ay, no se pique, princesa! - volvió a hundir su cara - ¡Una más y no respond-! - nuevamente la hundió - ¡Ya se fregó! - anunció con molestia.

Eso ya no era un juego.

Minutos después, ambas mujeres ingresaban al palacio con la ropa pesada por la cantidad de lodo. El cabello estaba desastroso y la cara endurecida porque el barro se estaba secando.

_Así ya no juego con usted - murmuró Lisa.

_Tacleaste a la princesa - respondió Jennie, ofendida.

_Era un juego.

_Pues que bruscos tus juegos.

_¿Y usted no? Casi me ahoga - acusó.

Jennie desvío la mirada, avergonzada.

_Solo te respondí de la misma manera.

_¿Misma manera? Ya casi se iba a quedar viuda antes del matrimonio - siguió su camino - siga así y no me caso con usted - avisó a lo lejos.

Jennie la observó incrédula por su atrevimiento. Notó a Pan ingresar y cruzaron miradas.

_¿Escuchaste lo que dijo? - preguntó a Pan. Este le giró la cara y se fue ofendido por haber tratado así a Lisa. Jennie quedó boquiabierta - ¿Ahora la mala soy yo? - se cruzó de brazos - ella comenzó - vió a los soldados que iban llegando. Ellos la miraban negando - ¿Qué? ¡¿Yo qué hice?! ¡Fue ella, no yo!





Corrección de los capítulos anteriores: la rata de Rosé de llama Lady. Había puesto Leidy sin querer porque me confundí con el nombre de mi amiga xD

Voten ❤️

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