Me desperté y sentí que me encontraba volando; nunca había estado entre unas sabanas tan suaves y una cama tan cómoda en mi vida. Me levanté y caminé por los pasillos, pasillos de lo que sería mi castillo si hacía todo bien. De pronto, me agarran del hombro y me meten en una habitación: era Shura.

Shura: "¿Qué carajos tramas, Mila? ¿Por qué continuamos aquí?"

Mila: "De aquí nunca saldremos, Shura."

Shura: "Pero ¿qué dices?"

Mila: "Pienso enamorar al príncipe, mataré a la reina y me quedaré con todo, así de sencillo."

Shura: "Esta no eres tú hablando; por dios, Mila."

Mila: "Mira, me dolería mucho que te fueras, pero yo no te estoy obligando a quedarte; si quieres irte, vete; pero si no, tendrás que seguirme la corriente y hacer todo lo que te diga."

Abrí la puerta, salí de la habitación y regresé a la mía para vestirme con uno de los trajes que habíamos robado, me puse regia y me asomé por la ventana; Nadeen se encontraba practicando con su espada en el jardín.

Bajé rápidamente las escaleras, fui hacia donde él y dije: "No te visualicé como un príncipe de espadas"; sorprendido, volteó hacia mí y respondió: "Desde pequeño mi padre me dio lecciones cuando lo que deseaba era jugar; veo que ya te encuentras mejor, princesa."

"Por favor, soy Mila para ti, y lamento oír eso", le dije provocándole una sonrisa; con rapidez fui, agarré una espada y coquetamente lo reté a que me enfrentara. Comenzamos a jugar y mientras lo hacíamos, no veía a su padre en su rostro; pensaba que sería una persona egoísta y malvada igual que el rey, pero Nadeen era muy diferente. Me distraje con mis pensamientos, hasta que sentí su espada sobre mi cuello: "Estás muerta, Mila", dijo; "Me rindo, piedad", respondí, ambos reímos.

Al culminar nuestro juego en el jardín, me invitó a mí y a mi "hermano" a desayunar; no sabía mucho de la realeza, pero trataba de aparentar y se me daba bastante bien. En el comedor se encontraba la reina Toena que ya no estaba de luto, lo primero que dijo fue:

Toena: "Nadeen, las invitaciones ya fueron enviadas; tendrás que estar listo, en estos próximos días vendrán grandes propuestas."

Nadeen: "Basta, madre, sabes que no me interesa nada de eso."

Toena: "Princesa Mila, durante las próximas semanas el castillo será visitado por varias princesas de diferentes reinos; el príncipe Nadeen se encuentra en busca de una esposa, espero que ya estés mucho mejor para que puedas abandonar el castillo lo antes posible."

Nadeen: "Mila es una princesa, ella no tiene por qué irse."

Toena: "Mila es la princesa de un pequeño reino del que nunca habíamos escuchado, y que no beneficia a Avaden en absoluto; ella no es adecuada para ti, no sirve."

"Vieja cabrona, pronto te pasaré por encima y pagarás por todo; pero lo más importante ahora es cómo me
desharé de esas princesas zorras."