Narra Aria.

- Bonita... Arriba.

Abri mis ojos asustada.

- ¿Que pasó?

- Ya llegamos. Vamos a casa así duermes un rato.

Bajamos del avión. Caminamos hasta adentro del aeropuerto y casi me quedo sorda. Griterío a mas no poder. Varias decenas de mujeres llamaban a Juan. En menos de dos segundos las teníamos a todas encima.

- Quedate atrás mio y sostén mi mano... O donde puedas, pero agarrate de mi.

Apenas llegue a sostener el gancho de su pantalón. Vi que las chicas le preguntaban cosas y él asentía mientras se ocupaba de las fotos, vídeos y autógrafos. No escuchaba nada en realidad, de tantos gritos y demás.

- Bonita, vamos ya.

Juan me sostuvo del brazo y nos alejamos de ese tumulto de chicas que lo rodeaban.

- Me sentía ahogada.

Juan rió.

- Yo mareado. Quería estar con todas, pero no podía. No me dejaban mejor dicho.

Justo cuando empezamos a caminar mas tranquilos, escuche otra vez el griterío.

- ¡Es la princesa de España!

Escuche a un chico gritar. Cuando me di vuelta, tenia a mas gente que la que tenia Juan encima.

No sabia que podrían reconocerme tan lejos de mi país. Es extraño.

- Vamos señorita.

El guardaespaldas de Juan me llevó con él. Juan se había alejado Un poco.

- ¿Todo bien?

- Si, me aleje porque se juntaron mis fans de nuevo y bueno... ¿Vamos ya? Tengo hambre.

- Siempre tienes hambre.

- Es Ley.

Reí caminando al lado suyo. Subimos a un coche y este se puso en marcha.
Despues de un largo rato, ya estábamos en la casa de Juan. Yo estaba acostada en su cama y él daba vueltas.

- ¿Que te pasa?

- Que no encuentro mi ropa. Quiero irme a dormir y no encuentro mi pantalón.

- ¿Donde piensas dormir?

- Hay otra habitación, pero es muy chica y no quería que estés ahí. Así que voy yo.

- Pero... Puedo dormir en la otra cama.

- No. A menos que... Quieras dormir conmigo.

Me miró de una forma extraña, haciéndome  poner colorada.

- No se... Ya dormimos juntos.

- Dime si quieres, no tengo problema en dormir en el otro cuarto.

Se acercó a mi, sentándose en la cama.

- Me da igual... Como sea esta bien.

- Mas tarde vere que hago. Por ahora seguiré buscando mi pantalón.

Se dirigió a su armario nuevamente y yo me acosté. Obviamente, no tardé nada en dormirme.

(...)

- Quedate aquí y mira mi ensayo.

Juan besó mi frente y se fue hacia el escenario. Me senté en una butaca a esperar que empiece su ensayo.

- Veo que te Prendiste del muchachito.

Una chica de pelo castaño se sentó al lado mio.

- Hay muchos como para que...

- Juan Luis, él -Lo señalo, estaba de espaldas- Te aconsejo que te alejes, terminara lastimandote.

La mire mal.

- ¿Por qué? ¿Que tiene de malo? Es mi amigo además.

- Ja, si claro -Carcajeó- Tu follamigo.

Me levante y me puse adelante de ella.

- ¿Quien te crees para hablar así de él?

- Eso no te interesa.

- Puedo hacer que te deporten.

Ego ante todo.
Sabia que era de otro país. De hecho, la había visto antes. Hasta Rihanna me hablo de lo bruja que puede ser.

- Eso es valido en tu pais, princesita.

Me empujó.

- Te lo advierto, Juan Luis es mio.

Me empujo de nuevo y se fue. Mire a Juan, este ya estaba a punto de cantar. Pero al ver mi cara, se bajó del escenario.

- ¿Que paso? ¿Por que esa cara, bonita?

- Nada... Una chica me molestó, es todo.

Se acercó y besó mis labios.

- Cualquier Cosa acercate a Dani o A Lean. ¿Si?

- Esta bien.

Me beso otra vez y se fue. Sentí mi cara quemar, todos nos estaban mirando.

- Dejen de mirar así y ponganse a trabajar.

Juan no podía hablar. Estaba igual o peor de rojo que yo.

- Ay si, ahora le pintó el apuro al señorito.

Se burló el chico de la batería.

- Tití, ya basta. Empezamos con Borro Cassete.

Empezó su ensayo.