Naruto se para entre Minato y Sakura mientras revisa el ungüento que recibió de Hinata. Desenrosca la tapa y agarra un pellizco con la yema del dedo. Luego, se lo frota en el brazo, donde están los rasguños. Como por arte de magia, su herida se cura instantáneamente con un chisporroteo y vapor.

–Vaya, esta cosa que me dio Hinata trabaja rápido. –Naruto cierra el contenedor y lo mueve hacia adelante y hacia atrás hacia Sakura, Minato y Haku– Ten, Sakura-chan. ¿Quieres ponerte un poco? –Minato con la cara palmada. No tiene idea de que le gusta a Hinata...

Sakura parpadeó como una lechuza, mirando el medicamento –¿Hmm?

Naruto se lo muestra a la hanyou nuevamente, pero ella niega cortésmente con la cabeza –No lo necesito. Soy iryō-nin, así que ya me cure.

Detrás de ellos, Kakashi tiene las manos en los bolsillos y mira al chico rubio puntiagudo –«Sólo tus heridas se curarán así de rápido, Naruto. No es el ungüento. Es el poder del Kyūbi. Nunca deja de sorprenderme. Ni Minako-hime con su alto conocimiento de ninjutsu médico.»

Hinata camina las escaleras hacia abajo. Cuando finalmente llega abajo, ven a los médicos acercándose a ellos con Kiba y Akamaru. Hinata da unos pasos hacia su compañera de equipo.

–¿Uh, Ki-Kiba-kun? –Los médicos dejan de moverse cuando Kiba levanta su cabeza encapuchada hacia ella confundido– Ten... un poco de ungüento curativo. –Ella muestra el mismo recipiente que tenía Naruto– Para ti y Akamaru.

Kiba la mira detenidamente hasta que le guiña un ojo con una sonrisa tranquilizadora –Ja, no te preocupes por nosotros. Mejor comienza a preocuparte por ti, Hinata.

–¿A qué te refieres?

Kiba respira, tratando de superar su dolor –Solo quedan siete. Solo tú, Choji, Neji, Lee, Haku, y ese de Oto y esos dos de Suna. –Su rostro se pone serio– Escúchame, sé astuta. –Hinata lo mira sorprendida– Si te ponen con ese tipo de Suna, deberás darte por vencida. Lo mismo con Neji. Sé astuta y aléjate de esto. Enserio, no te tendrá misericordia. Él te destruirá.

Con eso, la chica regresa escaleras arriba, sin darse cuenta de la mirada amorosa de Kiba hacia Minato. Él apoya la cabeza en la camilla con un suspiro y cierra los ojos, imaginándola en su mente. Con los médicos, todos se sonreían irónicamente, sabiendo lo que él estaba sintiendo.

Minato nota la mirada de Kurenai y ve que los médicos se llevan a Kiba y Akamaru.

–«Kiba...» –Pensó Minato.

–Muy bien, ahora elegiremos los nombres para el próximo partido. –Dijo Gekko. Minato se giró para mirar la pantalla una vez más con todos. Los nombres seguían hojeando los nombres restantes de los genins. Hubo un silencio sonoro cuando los nombres se detuvieron:  

Hyuga Hinata
VS
Hyuga Neji

Hinata mira fijamente sus nombres, sus ojos lucen horrorizados y puede sentir que su corazón deja de latir. Minato nota que sus ojos tiemblan y su respiración se acelera, por lo que le da un abrazo reconfortante, frotándole los brazos de manera maternal. Tanto la mirada de Kurenai como la de Kiba se endurecieron al ver el nombre de Neji.

–«Hinata...» –Leyó mentalmente Kurenai.

El tercer Hokage fuma su pipa mientras piensa –«Hm, está podría ser una pelea muy interesante.»

–Está bien, Hinata, mírame. –Minato empuja suavemente su espalda con los brazos extendidos y la mira fijamente a los ojos– Sé que tú puedes hacer esto. No dejes que Neji-san te afecte y cálmate. ¿Bueno? –Hinata asiente en voz baja, todavía sintiéndose asustada– Está bien, ven aquí, un abrazo más para el camino. –Ella le da un apretón fuerte, sintiendo que su corazón está a punto de romperse al ver su pelea nuevamente.

Aparentemente, su abrazo tardó un poco más en terminar porque Hinata tartamudea –¿U-Um Minako-san? Debería bajar ahora.

Minato alza sus brazos al aire, con un rubor de avergonza por su acción –¡Ah, cierto!

Una vez que finalmente mueven sus brazos, Hinata corre apresuradamente escaleras abajo. Los brazos de Minato todavía están en el aire mientras soltaba un suspiro.

–Vamos, niña. Crees en ella, ¿no? –Le preguntó Zabuza.

–Sí...

Kakashi siente su dolor por la chica y le revuelve el pelo –Entonces, ella estará bien. Obtuvo lo necesario y entrenó toda su vida para esta prueba.

–Bien. –Dijo cabizbaja.

–Está bien, vamos. Regresemos y animémosla, ¿vale? –Él tira de ella pero ella no se mueve– Oh, estás haciendo esto más difícil, ¿eh? Oh bien. –Luego la levanta y pasa junto a Zabuza con una mirada de suficiencia en los ojos.

El ex-asesino pone los ojos en blanco y se le sale la vena mientras los sigue. Tan pronto como ladeja con los demás, Haku rápidamente la abraza con la esperanza de ayudarla a sentirse mejor.

–Vigílala. –Zabuza le instruyó, ganándose un leve asentimiento.

Naruto le sonríe –Vamos Mina-chan, animémosla.

Ella asiente sutilmente, todavía mirando a Hinata.

Luego, sus ojos se dirigen a los de Neji. Al captar su mirada, él la mira, sólo para verla moviendo susdos dedos de sus ojos a los de él con una mirada furiosa. Él le devuelve la mirada antes de volverse hacia Hinata. Los dos Hyugas se miran fijamente cerca del supervisor.

La mirada de Neji se volvió aún más oscura –Nunca creí que tú y yo tuvieramos que enfrentarnos... Hinata-sama.

–Ni yo Neji-niisan... –Ella lo mira entristecida.

Los ojos de Sakura se abrieron con desconcierto –¿Cómo lo llamó? –Preguntó en voz alta.

–¡¿Nii-san?! ¡¿Esos dos son hermano y hermana?! –Naruto se agarra con fuerza a las barandillas.

–Ambos son descienden del clan Hyuga, una de las familias más ancestrales y honorables de Konoha. –Explicó Kakashi– De hecho, no son hermanos.

La pelirosa se vuelve hacia él –Bueno, tienen alguna relación, ¿no? –Minato miró fijamente a los dos miembros Hyuga, con Hinata temblando como si preferiría que la tierra se la tragara.

–Sí, así como la rama de un gran árbol está relacionada con su tronco. Técnicamente, ellos son más como primos. –Respondió Kakashi después de considerarlo un poco.

Naruto lo mira confundido –¿El tronco de un árbol?

–¡Sí! –Lee se dio la vuelta y levanto el dedo– Hinata-san pertenece a la cuna principal de la familia, es descendiente directo de la cabeza del clan. Mientras que la familia de Neji es más bien de una rama del clan.

Sakura lo enfrenta –Aun así, son familia. Y ahora tendrán que pelear uno contra otro. –Se vuelve hacia los primos con lástima– Lo lamento por ellos. Debe ser duro.

–No tienes idea. –Minato pensó con sus labios formando un ceño profundo.

Lee se pone un nudillo en la barbilla –Sí, pero... –Haku, Minato, Naruto y Sakura miraron inquisitivamente.

–¿Pero qué? –Sakura parpadea.

–Tal vez no sea tan duro como parezca. He oído esto por muchas generaciones entre sus dos familias siempre ha existido rencor. –El chico del corte abombado terminó su explicación.

Naruto cierra los ojos y tararea pensando profundamente –¿Y eso por qué?

–Nunca he conocido los detalles, pero tú sabes sobre los rasgos sanguineos de los grandes clanes ninja como los Uchiha y los Hyuga. Técnicas especiales y habilidades unicas de esas familias. La primera generación del clan Hyuga hizo todo tipo de reglas y decretos para favorecer a la rama principal de la familia. Y hubo algunas ramificaciones de la familia que rompieron esas reglas.

–¿Eh? –Ambos lo miran con curiosidad.

Lee regresa al campo de batalla –Como sea, eso que ha habido rozes entre las diferentes ramas del clan.

–Entonces esta rivalidad familiar ya tiene historia. –Sakura lo simplificó en un tono vacilante.

De repente, Kakashi habló, llamando la atención de Minato, Haku, Naruto, Sakura y Lee. 

–Miren, van comenzar. –Les informó Kakashi, refiriéndose al encuentro. Los genin se giraron para mirar hacia la arena. Minato frunció el ceño y miró a los dos familiares.

–¿Listos? Pueden comenzar cuando quieran. –Dijo Gekko mientras caminaba hacia donde estaban Hinata y Neji. Minato observó cómo Neji inmediatamente se ponía en posición, con los pies en posición. Su estructura era impecable, al igual que Hiashi. Miró a Hinata.

–Antes de hacerlo, una advertencia. Hinata-sama, escúchame. –Habló Neji, haciendo que Hinata lo mirara– Retírate ahora. Tu destino nunca fue ser ninja. –Su mirada se vuelve fría, lo que hace que los orbes lavanda de Hinata se encojan de miedo– Eres muy suave y amable. Tu buscas la armonía y evitas el conflicto. La gente te influencia fácilmente. –La kunoichi evita su dura mirada sintiéndose aún más mal consigo misma– Admítelo, tú no tienes confianza. Te sientes inferior a todos aquí. Lo que realmente te hubiera convenido era quedarte como genin, pero para registrarte en los exámenes chunin, necesitabas un equipo de tres. Tú jamás quisiste tomar parte de estos exámenes, pero Shino y Kiba sí, y no podías defraudar a tus compañeros de equipo, ¿tengo razón? –Una sombra amenazadora se proyecta sobre sus ojos.

Minato frunció el ceño al pensar en eso. Cerró los puños con fuerza. Sus manos temblaban, a punto de penetrar su piel con las uñas.

Hinata niega con la cabeza –No, no la tienes. No es cierto. Yo quería, yo tenía que encontrar, lo hice porque quería ver si podía cambiar. –Ella vuelve a mirar hacia abajo, con ganas de llorar en un rincón.

Una sola gota de sangre goteó del puño cerrado de Minato.

Los ojos rubí de Kurenai tiemblan mientras mira a su estudiante –«Hinata...» –Luego, recuerda su encuentro con el padre de Hinata.

《Flash Back》

El padre de Hinata, llamado Hiashi, sostiene un bastón y está de pie junto a una niña llamada Hanabi. Está de rodillas, a punto de desplomarse por el cansancio. Cerca de ellos está Kurenai que lleva su chaleco Jonin. En la mano de Hanabi hay un kunai.

–Levántate, Hanabi. –Dijo con autoridad.

Los brazos de la pequeña tiemblan mientras intenta enérgicamente levantarse.

Kurenai mira a Hiashi –Bien, entonces yo me encargaré de Hinata. Pero ¿está seguro de desear eso? –Él no pestañeó ni le respondió– Ella es su primogénita y la heredera de su casa. La vida de un genin puede ser peligrosa y muy breve.

Hiashi frunce el ceño y sin ningún sentimiento le dice –Haz lo que tengas que hacer. –Kurenai jadea en voz baja por lo desalmado que sonó– Ella es menos digna que su hermana, cinco años menor. –Hanabi se levantó pero todavía estaba encorvada, respirando con dificultad– Al clan Hyuga no le sirve un heredero así. –Sus ojos carmesí lo miran enojados mientras Hanabi levanta la cabeza con su cuchillo kunai cerca de su pecho– Si ya no tienes nada que decir, tenemos trabajo que hacer. Puedes irte.

–Entiendo. –Ella sale por la puerta abierta, pero una vez que llega afuera, nota a Hinata sentada contra la puerta corrediza, escuchando cada palabra que dicen– Hinata ha luchado para convertirse en lo que ella desea. 

《End Flash Back》

Al ver que ella aún no se ha rendido, la mirada de Neji aumenta –Hinata, eres la descendiente sobreprotectora de la rama principal de los Hyuga. –Minato frunció el ceño profundamente. Ahora, eso fue simplemente de mala educación. Hinata no era una persona sobreprotectora...

–¿Q-Qué? –Preguntó Hinata mientras lo mira con los ojos muy abiertos, claramente molesta por lo que Neji estaba diciendo, tocando cada punto sensible.

–La gente no puede cambiar sin importar cuanto lo intente. –Sus duras palabras hieren su corazón, dejándola sin palabras– No pueden separarse de su autentica naturaleza. Un paira siempre será un paira.

–Esa es la cosa más estúpida que he oído jamás. –Murmuró Minato. Junto a ella, Naruto estaba tan enojado como ella mientras escuchaba. Minato podía entender eso. 

Naruto gruñe fuertemente detrás de sus labios cerrados –«Oigan a ese tipo.»

–La gente es juzgada por su autentica naturaleza. Así es el mundo. Por eso existe tanto la élite como los pairas. –Hinata se estremece– Podemos cambiar nuestra apariencia física, mejorar nuestras habilidades con estudio y entrenamiento, pero finalmente seremos juzgados por lo que no podemos cambiar. Tenemos que soportar en no poder cambiar. Somos quienes somos, Hinata-sama. Y tenemos que acostumbrarnos, así como yo debo vivir sabiendo que tú naciste en la élite de nuestro clan mientras que yo soy de una rama menor.

Tanto Naruto como Minato gruñen aún más con las venas formándose en sus sienes.

–Entiendo esto, porque veo el mundo con clarida, con mi Byakugan. –Dijo Neji. Todo esto estaba desmoronando la fuerza mental de Hinata A pesar de lo que digas, lo que realmente pienso es que quieres salir corriendo, alejarte de aquí tanto como puedas.

Se miró la mano ensangrentada antes de finalmente hacer contacto visual a la pelea verbal –Eso no es cierto. Ella puede cambiar... Yo lo sé...

–¡No! ¡Estás mal! –Hinata respondió en voz baja– Yo no quiero hacer eso...

–¿Byakugan? –Preguntó Sakura mientras miraba a su sensei.

–Es el kekkei genkai o rasgo del linaje de los Hyuga, un jutsu visual como el Sharingan de Sasuke. –Dijo Kakashi, atrayendo la atención de los genins– De hecho, dicen que el Sharingan del clan Uchiha se derivó del Byakugan hace mucho. Pero por puro poder de percepción, el Byakugan es el más fuerte de los dos. Pero existe un kekkei genkai más poderoso y peligroso que esos dos y es el Seishin no Me del clan Monozono. El cual has visto en Minako-sama.

–¿También posees un kekkei genkai? –Preguntó Lee, sorprendido mientras miraba a Minato. La chica de pelo blanco asintió con cierta torpeza.

Hinata está hiperventilando al ver a Neji a punto de realizar su jutsu.

–¡Byakugan! –Dijo Neji, activando su Kekkei Genkai y mirando directamente a Hinata.

Hinata está gimiendo y teniendo un ataque de pánico al mirar sus despiadados e intimidantes ojos activados. Mueve los ojos hacia arriba y hacia abajo, todavía temblando bajo la piel. Ella rápidamente evita su mirada girando la cabeza hacia un lado con el dedo en la boca.

–No puedes engañar mis ojos. –Ella gira su cabeza hacia él– Hace un momento, en un leve movimiento, tu volteaste a la esquina superior izquierda del salón. Yo te vi en ese momento, estabas pensando en tu pasado, tu pasado amargo. Luego, casi de inmediatamente volteaste a ver hacia la derecha bajo, fue un mero parpadeo, pero me revelaste todo tu sufrimiento físico y mental. –Hinata continuó mirándolo– Estás viendo a la vieja Hinata y preguntandote si estas preparada para este momento. Estás visualizando el desenlace de la batalla. –Entrecierra sus ojos venosos– Te ves derrotada. –Ella hace una mueca conla boca abierta.

Naruto aprieta con fuerza el medicamento, visiblemente hirviendo de ira. Minato pudo sentir sus ojos rosa black baccaro brillar de manera exótica mientras se tornaron en forma de rendijas iluminados un poco con furia.

–¿Y la manera en que formas tus brazos así, frente a tu cuerpo de esa manera? Me dice que estás intentando construir una barrera entre nosotros, para mantenerme al margen. Quieres evitar que invada lo más profundo de tu mente. ¿Por qué? Porque sabes que todo lo que he dicho es cierto. ¿Continúo? –Estaba furioso.

Minato se mordió nerviosamente el labio inferior mientras que Naruto temblaba fuertemente a su lado, su mano apretada con fuerza alrededor del frasco de ungüento que Hinata le había dado. La propia Hinata estaba mirando a Neji como si hubiera visto un fantasma.

–Ese hábito familiar de ponerte el dedo en los labios, lo haces para intentar suprimir tu creciente pánico, pero te desespera más porque sabes que es inútil. Todo es inútil, Hinata-sama. Tú eres quien eres. –Las duras palabras de Neji habían provocado que Hinata derramara algunas lágrimas– Lo admitas o no, lo sabes.

–¡¡¡Ya basta!!! –Tanto Naruto como Minato gritaron.

Neji gira ligeramente la cabeza, mirándolos por el rabillo del ojo. Hinata los mira ansiosamente.

–¡¿Quién te da el derecho de decirle lo que puede o no puede ser?! ¡Vamos, enséñale a ese tarado que está en un error! –Naruto le gritó con el puño en alto.

–¡Hinata, no debes dejar que nadie defina tus límites por tu origen! ¡Tu único límite es tu alma! –Minato la mira severamente.

Neji gruñe entre dientes.

Hinata los escuchó con asombro –«Naruto-kun, Minako-chan...»

Sakura y Lee también los miraron, sintiéndose en shock. Kakashi y Zabuza ambos hmph con sonrisas ocultas por sus fuertes arrebatos.

Naruto gruñe, continuando con su discurso –¡Hinata! ¡¿Vas a quedarte ahí parada oyendo eso?! ¡Haz algo! ¡Me sacas de quisio!

Hinata inclina la cabeza hacia abajo, su flequillo cubre sus ojos cerrados mientras reflexiona sobre sus palabras –«Ambos tenían razón.»

–«Pequeños parásitos.» –El Hyuga pensó con odio y encaró a su prima.

Su cara todavía está pegada al suelo, pensando –«Tenían razón, Naruto-kun, Minako-chan... gracias.» –Finalmente levanta la cabeza con valentía y pone su cara de valiente.

Neji está mentalmente tomado por sorpresa –«La mirada de sus ojos ha cambiado.» –Él la mira– Si no te das por vencida, tú sabes lo que pasará.

Hinata vuelve a cerrar sus ojos color lila y comienza a formar varios signos con las manos –«No voy a huir. Jamás... No voy a esconderme.» –Una vez que termina, abre los ojos con venas alrededor– ¡Byakugan!

Naruto jadea de sorpresa mientras Minato tiene una sonrisa de satisfacción adornada en su cara.

–¡Muy bien, Hinata! ¡Esa es mi chica! –Ella le silba.

Hinata separa tranquilamente los pies y abre las manos, con las palmas hacia afuera –Defiéndete... ¡hermano mío!

Lee mueve la cabeza hacia atrás con un grito ahogado –«Eso es...»

Neji también adoptó su postura, similar a la de Hinata –Pues así lo quieres.

–Por supuesto, el estilo Hyuga. Es por eso que sus poses son iguales. –Lee parpadea al darse cuenta.

Sakura le da una mirada de reojo –¿El estilo Hyuga?

–Es el tipo de Taijutsu más eficaz encontrado en nuestra aldea. –Su puño se curva aún más– Ya lo dije antes, yo tengo en mi equipo al hombre que probablemente sea el genin más fuerte que haya salido de Konoha, ese hombre, es Hyuga Neji. –Sus espesas cejas se muevenmientras se concentra en su rival.

Después de un par de agonizantes minutos más de silencio, ambos primos saltan y se lanzan unocontra el otro. Hinata golpea primero su palma llena de chakra, pero Neji usa su muñeca para bloquear su mano. La Hyuga lanza algunos golpes más, pero él sigue esquivandolos a gran velocidad. Luego, aprovecha la oportunidad de atacar, pero Hinata es tan rápida como él. La intensa batalla continúa mientras el público escucha la fuerte fuerza de sus lanzamientos y golpes de palmas.

Al encontrar la oportunidad, desliza el pie hacia atrás y retira la mano –«¡Ahora!» –Ella lo mueve hacia adelante haciendo que Neji abra mucho los ojos.

En cámara lenta, cuando su mano se acerca al contacto, Neji mueve su cuerpo hacia un lado, evitando por poco su ataque.

–¿Si le dio? –Sakura cuestionó frenéticamente.

Naruto está nervioso, rechinando los dientes nerviosamente –Temo que no, apenas lo rozó.

–Aun así, con una simple mirada bastará. Eso es lo que hace que el clan Hyuga sea los guerreros más formidables. –Lee sermoneó.

Sakura fija sus ojos color menta en él con preocupación –¿Qué dices? ¿De qué estás hablando?

–Su Taijutsu es único que pasa de generación en generación. –Guy esta vez le respondió– No es el tipo de Taijutsu que Lee y yo empleamos. Nosotros nos concentrarnos en causar un daño externo. Usamos ataques aplastantes para causar contusion y romper miembros, a través de golpes. El estilo Hyuga es atacar los órganos internos de su oponente y la red de chakra a través de la cual fluye su chakra. Su estilo es más... sutil. Tal vez no sea visual tan emocionante, pero tiene un efecto gradual con resultados devastadores.

Debajo de ellos, los dos Hyugas están dando vueltas uno sobre el otro.

–Verán, no pueden fortalecer sus órganos internos, no importa cuanto entrenen. –Añadió Kakashi– Aun el ninja más duro es vulnerable a ese tipo de ataque. El cual me recuerda el de cierta técnica similar de agua de los Hyuga. –Acuso a Minato por lo sucedido en su primera prueba.

–En mi defensa, tú eras demasido escurrizo y Hina-chan me dio la idea cuando entrenabamos juntas. –Se defendio Minato.

Ambos dan un paso más, mirándose con tanta intensidad como pueden. Se lanzan nuevamenterealizando los mismos ataques ofensivos.

–«Puedo hacerlo.» –Hinata golpea cerca de su hombro pero falla.

A Shino le aparecen gotas de sudor en un costado de la cara –«Está atacando hasta donde puede.»

–«Hinata...» –Kurenai la mira con asombro.

Naruto comienza a animarla –¡Hinata, bien hecho!

–¿Atacan la red de chakra? Esa gente es sorprendente. –Dijo Sakura.

–Sí. –Dijo Minato.

–Y que lo digas. –Continuó Naruto– Y a todo esto, ¿qué es la red de chakra?

Ambas chicas suspiran en voz alta por su olvido.

–¡Ay! ¿Necesitas que te explique todo? –Sakura le preguntó retóricamente.

Lee levantó el dedo índice –Mira, yo te lo explicaré. Es el complejo sistema de canales circulatorios que distribuye chakra por todo el cuerpo. Similar al sistema vascular de las personas, las venas y arterias que llevan sangre.

El chico bigotudo se cruza de brazos –Entiendo. ¿Sólo que estas venas llevan chakra, no sangre?

–¡Ding, ding, ding! ¡Tenemos un ganador! –La chica de cabello blanco extiende los brazos y le estrecha la mano de manera deslumbrante.

–Uh, algo así. –Dijo Lee– Pero más allá de eso, la red de chakra está tan estrechamente entrelazada con los órganos internos más vitales que habitualmente son uno solo. Es por esto, que cuando atacan la red, estos órganos sufren daño también.

Naruto le sonríe –¡Vaya, Lee! ¿Cómo le haces para ser tan listo?

Minato le sonríe a Lee, sintiéndose cautivado por su conocimiento. Lee se da cuenta y al instante se enfrenta a la batalla con las mejillas sonrojadas.

Sakura mira acaloradamente a Naruto, asustando al pobre chico –¡Idiota! ¿Cómo pudiste convertirte en genin? –Ella le golpea fuerte en la cabeza.

–¡Ay! –Se pone ambas manos en la cabeza por el dolor.

Guy nota que el puño de Lee tiembla –«No me sorprende que se moleste. Está viendo a su antiguo competidor y rival, Neji.»

–Pero Sensei, ¿cómo saben en dónde atacará su oponente? Digo, la red de chakra es invisible a la vista, ¿no? ¿Cómo saben dónde golpear? –Preguntó Sakura.

El Hatake responde –¿Ya olvidaste su Byakugan? Hay pocas cosas invisibles a esos ojos. –A través de los ojos de Hinata, puede ver el chakra de Neji alrededor de su abdomen– Lo que es más, cuando ellos dan un golpe, ese golpe es diferente a un ataque normal. Una pequeña pero intensa explosión de su chakra es liberado de su mano. La cual penetra el cuerpo del oponente, atacando directamente su red de chakra.

–¡Oh, lo recuerdo! ¡Era la misma técnica que Mina-chan uso contra Kakashi-sensei en la prueba del cascabel! –Dijo Naruto. Minato asintió. Lee pareció bastante sorprendido pero no dijo nada.

Hinata lanza su último golpe hacia él y todo se vuelve silencioso.

–¡Eso, Hinata! –Gritó Naruto.

–«¿Ya le dio?» –Shino se pregunto.

Minato se apoya en la barandilla, sus ojos tiemblan por lo que sucede entre ellos. Los dos están congelados en sus lugares, lo que hace que las personas de arriba se sientan aún más tensas. Eso es hasta que se escucha un fuerte latido del corazón de uno de ellos.

Neji habíallegado a Hinata al final, quien tosió sangre. 

–¡Hinata! –Grito al ver quien había caído.

Los nudillos de Minato se están poniendo blancos al juzgar con qué fuerza se aferra a las barandillas de metal. Con Hinata, siente que los latidos de su corazón se aceleran hasta que inesperadamente escupe salpicaduras de sangre. Parte de su sangre se derrama sobre la mano de Neji que toca su pecho cerca de su diadema. Minato jadea al ver esto, sintiéndose melancólica por su querida amiga.

–¿Eso es todo? ¿Eso es todo el poder de la rama principal? –Él le pregunta, sin ningún remordimiento mientras Sakura jadea.

–¡Alto! ¡¿Qué está pasando?! ¡Yo vi perfectamente cómo Hinata golpeo a Neji! –Protestó Naruto.

Hinata mira enojada a Neji con vetas de sangre en ambas comisuras de su boca –«Aún no estoy acabada.» –Ella apartó el brazo de Neji y lanza la palma con un grito.

Los ojos Byakugan de Neji se abrieron un poco antes de agarrarla por la muñeca y golpearla con dos dedos debajo del brazo.

Lee aprieta los dientes al ver esto.

Kakashi tiene una gota de sudor en la mejilla –«¿Qué pasa a ese chico?»

–«No puede ser.» –Pensó Kurenai espantosamente.

El Hokage inclina ligeramente la cabeza hacia abajo, lo que hace que sus ojos arrugados queden completamente ensombrecidos –«Vaya, ahora se por qué dicen que es el más dotado que ha surgido del clan Hyuga.»

Todo el mundo guarda un silencio sepulcral, viendo que los dos que están allí abajo no se mueven ni un centímetro. Hinata respira con dificultad y su vista se vuelve borrosa. Neji levantó la manga de su chaqueta y la retira revelando pequeños puntos rojos por todo su brazo.

Hinata jadea al notar su brazo –Pero, osa que tú... Todo este tiempo...

–Así es. Yo he podido ver tus puntos de chakra todo este tiempo. –Él la interrumpe con malicia.

–¿Eh? ¿De qué está hablando? –preguntó Naruto en voz alta.

–En la red de chakra, hay 316 centros de energía o puntos de chakra. –Kakashi le dice– Y cada uno de esos tiene más o menos el tamaño de la cabeza de un alfiler. Si se golpea uno directamente puede afectar el flujo de chakra. Disminuyéndolo o aumentándolo, dependiendo de cómo sea atacado el punto de chakra. En teoría, haciendo eso, un ninja obtiene el control completo sobre el flujo de chakra de su oponente. Pero esos puntos de chakra son indetectables hasta mi ojo Sharingan. Sakura parpadea y respira profundamente Y aun más allá de ver los puntos de chakra, sin importar lo intenso de la batalla, el ataque puede ser muy certero.

De repente, Neji saca su mano y la golpea contra el pecho de Hinata, haciéndola volar de regreso al suelo.

–No... –Minato se cubre la boca abierta y niega con la cabeza.

Neji se acerca a la kunoichi de pelo negro antes de detenerse –Escucha esto, Hinata-sama. estoy fuera de tu alcance y eso no cambiará. Esto es lo que separa a la élite de los fracasados. –Él la mira fríamente mientras ella respira con dificultad sobre sus rodillas– Puede que no te guste, pero es un hecho. Desde el momento en que dijiste que no vas a huir, tu destino fue sellado. Tú estás destinada al fracaso. Y ahora estás acabada sin esperanza. –Da unos pasos más– Esta es tu última advertencia, Hinata-sama. Date por vencida.

–Yo, yo... –Una gota de sangre salpica el suelo a través de sus gritos de dolor– Yo jamás... retrocederé... –Dijo mientras se ponía de pie vigorosamente. Neji la miró.

Naruto está lleno de preocupación por ella –«¡Hinata!»

–...mi palabra... –Repitió las palabras de la persona que le gustaba y se giró con la boca ensangrentada– Porque este es mi nindo, mi camino ninja. –Ella se mantiene completamente erguida y con valentía le lanza a su primo la misma mirada dura. Luego, mira a Minato y a Naruto con una pequeña sonrisa, sabiendo que escucharon cada palabra que dijo.

Naruto tiene ambas manos en las barandillas, todavía concentrándose en la kunoichi de pelo corto debajo de él –No tenía idea... de que Hinata fuera tan fuerte como ella.

–Oh, ella es más que eso, créanme. –Minato dijo con una cálida sonrisa.

Lee se vuelve hacia ellos con una sonrisa –Se parece mucho a ustedes dos.

Minato le levanta la ceja –¿Sí?

Sakura asiente, estando de acuerdo con él –Sabes, ahora que lo pienso, ella siempre está viéndote. –Dijo, refiriéndose a Naruto.

Él la mira sorprendido –¿Eh?

La chica de pelo largo también asiente –Así es. Eres una gran influencia para ella, Naru-chan, y estoy muy feliz de que seas tú.

El chico de ojos cerúleos la mira sonrojado y con la boca bien abierta, notando que ella no lo está mirando pero tiene una pequeña sonrisa en sus labios. Sintiéndose sin palabras, él y Lee regresan a la batalla.

–«Hinata...» –El Uzumaki luego la ve girando su Byakugan nuevamente.

–Llego la hora. –Neji gruñó.

De repente, un dolor repentino surgió de su corazón. Ella grita, se lleva las manos al pecho y escupe más sangre. Sus compañeros se inclinan sobre la barandilla preocupados por su estado.

–«Hinata ya no resiste.» –Un reflejo de los dos aparece en su pupila roja– «Un golpe más y estará acabada.»

Neji prepara su postura, esperando que continúe la batalla.

Kakashi lo mira, especulando mentalmente –«Los golpes de Neji a los puntos de chakra de Hinata han detenido por completo su flujo de chakra. Eso significa que ya no puede enviar chakra al cuerpo de su oponente para luchar en su estilo de Jyuuken. Este encuentro será tan bueno como breve. Jamás imaginé que habría alguien tan poderoso aquí. Temo que alguien tan fuerte como Sasuke, sería un rival para Neji.»

–«Parece que Neji va a ganar este encuentro. Esa niña no tiene lo que se necesita para derribarlo.» –Guy pensó con el ceño fruncido.

El cuerpo de Gaara comienza a temblar junto con sus ojos color espuma de mar al mirarlos.

Ino se siente mareada por sus ojos estoicos –Wow, ¿viste esa mirada? ¿Realmente crees que va a intentar matarla? No podría.

–¿No creen en la diferencia de fuerza lo haga un poco injusto? Él es mucho más fuerte. Eso no es parejo, en serio. –Dijo Sakura sin lugar a dudas.

Junto a ella, Naruto cierra los ojos y se estaba agitando por todo lo que había estado sucediendo, apretando el ungüento con fuerza nuevamente.

–¡Vamos, Hinata! ¡Tu puedes hacerlo! –Gritó Naruto.

Queriendo entrar en el espíritu de ánimos, la hanyou también grita –¡Sí, niña, no dejes que gane! ¡Golpéalo directamente!

Hinata los mira, sin aliento –«¡Naruto-kun, Minako-chan!»

Neji parpadea desconcertado –«La fortaleza ha regresado a su mirada.»

Hinata corrió hacia él –«He estado observándote.» –Ella le da un golpe en la cabeza, pero él lo evade y le devuelve los golpes– «He estado observándote de cerca por muchos años. Me pregunto por que.» –Mientras sigue esquivando y lanzando sus palmas sin darse por vencido, recuerda haberle deseado suerte a Naruto para la lección de Transformation Jutsu en la academia– «No sé por qué, pero...» –Aparece otro recuerdo de Naruto gritándoles a los demás participantes antes del primer examen– «Cuando yo te veo, Naruto-kun...» –Ella gira y le da una patada baja hacia sus pies, pero él salta– «Cuando yo te veo, me siento llena de valor. Siento que puedo seguir adelante, que puedo triunfar. Hasta valgo un poco.» –Ella lanza un grito de batalla mientras extiende su mano, pero Neji se mueve y la esquiva.

Cuando ella está a punto de caer, él le golpea brutalmente la barbilla con la palma de la mano. Su sangre carmesí vuela por todas partes después de ese golpe, haciendo que todos jadeen de horror.

–¡Hinata! –Tanto Minato como Naruto la llamaron.

Ella retrocede del duro golpe con polvo y escombros nublando sus pies. Neji entrecierra los ojos con burla cuando ella todavía está de pie. Un eco de su tos insoportable resuena por la habitación, dejando que el corazón de la hanyou se rompa aún más.

–Hinata... Hinata solía ser tan derrotista, pero ahora veo que ha cambiado. –Kurenai tiene un flashback de su estudiante practicando sus ataques con la palma en uno de los puestos de entrenamiento.

《Flash Back》

–¡Se acabo Hinata, es hora de volver a casa! –Le grita Kiba, que estaba esperando con Shino y Akamaru.

Excepto que Hinata seguía golpeando el poste. Pequeñas gotas de sudor salían después de cada golpe.

–Ella puso cada gramo de su ser en su entrenamiento. Lo vi con mis propios ojos, pero aun así, continuño fallando todas sus misiones. Ella perdió el control se enfrento en una competencia real y se desanimó fácilmente.

《End Flash Back》

–«Pero esa no es la Hinata que vi el día de hoy.» –Ella entrecierra los ojos– «Nunca antes la había visto con esa imagen de ferocida en su mirada.»

Hinata vuelve a correr hacia Neji –«Naruto, hasta ahora yo he sido la observadora. Pero en este momento, finalmente, tú estas observandome a mí. ¡Y voy a demostrarte lo que puedo hacer, Naruto-kun!» –Neji sutilmente abre los ojos cuando Hinata entra en contacto y está a punto de lanzar su ataque.

Al mismo tiempo, la golpeó con su poderoso chakra penetrando su espalda.

–¡¡¡Nooo!!! –Minato pudo sentir sus gotas de lágrimas saladas cayendo por sus mejillas palidas.

El aire se volvió aún más denso alrededor de los dos, y sus ojos color lavanda se movieron antes de toser más de su fluido corporal rojo. Luego, incapaz de mover su cuerpo, cae boca abajo al suelo con un fuerte ruido sordo. Sakura jadea, la boca de Lee se abre y Minato se cubre los ojos llorosos por el dolor. Haku la rodea con sus brazos, ocultando su rostro en su pecho y susurrándole palabras tranquilizadoras al oído. Naruto hierve visiblemente, furioso con Neji. 

–No lo entiendes, ¿verdad, Hinata-sama? Tus golpes fueron inofensivos desde el principio. Estás acabada. –Desactivó su Byakugan mientras la miraba sin ningún remordimiento y se alejaba.

Kurenai piensa lastimosamente –«Hinata, ya hiciste suficiente. Perdiste el encuentro, pero en el proceso te convertiste en una nueva persona.» –Ella cierra sus orbes rojos– «Lo hiciste muy bien.»

Naruto recuerda las palabras de Hinata desde el comienzo de su partido. Inclina la cabeza hacia abajo y mira con nostalgia el ungüento.

–Estaba mal después de ese golpe al corazón... Hinata es... historia. –Guy dijo gravemente, causando que Naruto y Minato rechinaran los dientes.

Naruto gruñe entre dientes y aplasta el medicamento aún más fuerte, creando una grieta en el recipiente. Abajo, Hinata todavía está en la misma posición de nocaut en el suelo, sin moverse ni un ápice.

Hayate da unos pasos hacia ella y le echa un vistazo –Debido que la combatiente no es acta para continuar...

–¡¡¡No!!! –La voz de Naruto resuena fuerte en sus oídos– ¡No detenga el encuentro!

Sakura se vuelve hacia su compañero de equipo con severidad –¡Naruto! ¿Qué rayos estás haciendo? ¡Se acabo para Hinata! –Luego nota su cambio de expresión facial– ¿No te das cuenta que está inconsciente? –Se vuelve hacia Hinata.

De repente, todos parecen desconcertados y se quedan sin aliento ante lo que están viendo en estemomento. Minato mueve su cabeza de Haku a Hinata. Minato amplía sus orbes al ver a Hinata luchando por volver a ponerse de pie. Escucha sus silenciosos gemidos mientras Hinata siente que le duele el cuerpo, rogándole que deje de pelear. Sin embargo, la chica de pelo corto pensó lo contrario y todavía se mantiene erguida vigorosamente. Con un movimiento de sus pies, finalmente recupera el equilibrio y se agarra la costilla izquierda.

Neji la observa jadeando pesadamente –¿Qué crees que estás haciendo? Si continúas peleando, vas a terminar muerta.

–«No importa. No voy a defraudarme a mi misma. No ahora.» –Pensó Hinata con la cabeza gacha.

Neji entrecierra sus ojos sin pupilas –«¡¿Por qué hace esto?!»

–«No enfrente de la persona que más admiro, la cual finalmente ve a la verdadera Hinata.» –Ella inclina un poco la cabeza hacia arriba con una mirada ardiente en sus ojos.

Naruto ve esto y le da un gesto de apoyo. Neji por otro lado, frunce profundamente el ceño y activa su Byakugan. Las venas alrededor de sus ojos están a punto de estallar por su ira.

Hinata avanza cojeando laboriosamente –Te falta mucho para acabar conmigo.

–Deja de fingir ser la niña fuerte. Apenas puedes mantenerte en pie. Has estado cargando un peso muy grande, habiendo nacido en la rama principal del clan Hyuga. Y te has culpado y maldecido a ti misma por ser débil. Pero entiende, la gente no puede cambiar la forma en la que es. Así son las cosas. Sola acepta que te vencí y no tendrás que sufrir más. –Neji remató con actitud pesimista.

Hinata niega un poco con la cabeza –No, estás muy mal, Neji-niisan. Las cosas son al revés. Neji abrió mucho los ojos en shock Verás, te diré... Te diré que tú... estás sufriendo mucho más que yo.

–¿Soy que? –Susurró para sí mismo.

–Tú eres el que realmente está sufriendo por el asunto de las ramas principal y secundaria del clan Hyuga. –Ella jadea entre sus palabras.

El Hyuga gruñe enojado mientra miró a Hinata con odio y corrió hacia ella con un grito de batalla. Los ojos de Gekko se abrieron como platos.

–¡Neji, no! ¡El encuentro se acabo! –dijo Gekko. Pero eso no detuvo a Neji mientras corría hacia Hinata para darle un último golpe y acabar con ella para siempre. Gekko corrió para intervenir– ¡Diablos!

Una vez que Neji está a unos centímetros de la chica, se detiene abruptamente con el brazo de alguien alrededor de su cuello y la mano de otra persona apuntando con dos dedos a su protector de frente. El polvo se disipa a su alrededor, lo que demuestra que el chunin y los Jonins llegaron justo a tiempo. Hayate tiene sus dos dedos en su frente, Guy tiene su brazo alrededor de su cuello, Kakashi está en el lado derecho sosteniendo el brazo de Neji en su lugar, Zabuza está en el lado opuesto quien tiene su mano extendida sobre su pecho, y Kurenai está sentada en el suelo que se agarra del otro brazo.

–¡Neji, contrólate, ¿quieres?! Me prometiste que no dejarías que todo este asunto de la familia principal te desquiciará. –Guy lo regañó.

Los ojos de Neji se giran ligeramente hacia la izquierda para intentar ver a su sensei –¿Por qué se entrometen tú y los otros Jonin interfieren? –Neji dijo enojado– La familia principal merece un trato especial, ¿eh?

Dentro de Hinata, su corazón late dolorosamente contra su pecho, haciéndola toser por la presión en su corazón y arrodillarse en vano.

Tanto Minato como Kurenai miran alarmadas a la chica herida.

–¡Hinata/Hina-chan! –Ambas gritaron y corrieron a su lado.

La chica tímida comienza a toser con fuerza mientras su sensei le pone una mano en la espalda Hinata.

Por instinto, la apariencia de Minato cambio y rápidamente salta sobre las barandillas, ondeando su cabello plateado con la parte inferior roja.

–Vamos Hina-chan, respira profundamente para calmarte. –Hakuyasha le dice urgentemente y ayuda a la kunoichi de ojos rojos a acostar a Hinata boca arriba.

–¡Hinata! –Naruto salta al suelo.

Sakura, Lee y Haku también saltan desde el balcón y lo siguen.

–Hinata, ¿estás bien? –El chico de ojos cerúleos se arrodilla cerca de ella– ¡Oye!

Hinata dirige sus ojos entrecerrados hacia la persona que le gusta –N-Naruto-kun. –Naruto la mira preocupado– Yo solo, yo, tú... –Sus ojos parpadean lentamente mientras piensa– ¿Tú crees que cambié? –Se inclinó un poco– ¿Aunque sea un poco? –Con ese último pensamiento, sus ojos se cierran completamente por el cansancio.

Minato cierra sus propios ojos llorosos, sintiendo que su corazón se hunde. Naruto todavía la mira con preocupación hasta que alguien los llama.

–Oigan vosotros, fracasados. –Naruto se vuelve hacia Neji confundido mientras Minato lo enfrenta con furia– Tengo dos comentarios para vosotros dos. El primero, si tienen la intención de llamarse a vosotros mismos shinobi, olvidense esos estupidos festejos. Son lamentables y más viniendo de otra margina princesita heredera que su aldea desterro y, en segundo, un fracasado siempre será un fracasado. No puedes cambiar eso.

La chica de cabello blanco se levantó –¿Es lo mejor que tienes que decirme? En verdad eres más imbecil que el Uchiha, y eso que el más amable con nosotros. ¿En verdad crees que me conoces, ¡grandicimo imbecil!? –Estaba a punto de tirarsele encima cuando tanto Haku como Sakura le impidieron hacerlo.

–¡Eso ya lo veremos! –Naruto le exclama audazmente a Neji.

Neji le envía una sonrisa atormentadora y Naruto le devuelve el grito en voz alta.

Sakura jadea cuando Naruto va a toda velocidad hacia Neji. Excepto que Lee se interpone en su camino con ambos brazos extendidos. Naruto grita sorprendido cuando la sonrisa de Neji vuelve a fruncir el ceño.

–¿Qué estás haciendo? –El rubio le preguntó acaloradamente a Lee.

–Naruto-kun, entiendo tu sentir, créeme. –dijo Lee, sin mirarlo– Pero las reglas dicen que todas las peleas deben ser oficiales en un encuentro. El que pierde golpea al genio virtuoso a través de la fuerza de la voluntad pura, ¿eso no sería un encuentro emocionante? Aun asi yo fuera el que tuviera que enfrentar a Neji. Por supuesto, si tú terminas peleando con él.

–Lo cual hará. –La comisura de los labios de Hakuyasha se curva de forma escalofriante.

–Está bien también. –Finalizó Lee.

Naruto les gruñe fuertemente a los dos chicos, pero luego mira hacia otro lado con un resoplido –De acuerdo. Tú ganas, Lee. –Él camina de regreso hacia Hinata, se desabrocha la chaqueta y se la pone encima de la cabeza de Minato y ella entendió su mensaje.

Tan pronto como ambos miran hacia otro lado, Lee gira la cabeza hacia Guy con un gran pulgar hacia arriba y una sonrisa –¿Qué tal eso, Guy-sensei? –Sus blancos nacarados brillan.

–Muy bien, Lee. ¡Así se hace! –Guy, a cambio, levanta su pulgar con un guiño y una sonrisa brillante y orgullosa.

Un repentino sonido ahogado de la Hinata llega a los oídos de todos. Hinata tose manchas de sangre espesa, derramándolas sobre el suelo y su chaqueta.

Sin tiempo que perder, Kurenai le desabrocha la chaqueta y presiona su mano sobre su pecho, comprobando los latidos de su corazón, preocupándose cada vez más por su estudiante –No, va a entrar en paro cardíaco. –Ella gira su cabeza hacia– Neji ¿Realmente intento matarla?

–Yo no desperdiciaria el tiempo con miradas de odio, cuando en realidad lo que importa es atenderla a ella. –Le dijo Neji a la Yuhi, sin ningún rastro de culpa, quien le hizo una mueca. 

–¡Traigan al médico y rápido! –Ella gritó.

Los tres médicos corren rápidamente –¡Aquí venimos!

Hakuyasha inmediatamente llama su atención –Espera, Kurenai. Puedo ayudarla.

Sus amigos y los adultos la miran con emociones encontradas. Algunos tienen esperanzas, otros están preocupados por su chakra y uno está lleno de odio. En lo cual es obvio a quién pertenece.

–Minako-hime, ¿está segura? –Ella la mira fijamente a los ojos para confirmarlo.

–Niña, no, todavía tienes un poco bajo de chakra, ¿recuerdas? –Zabuza se acerca a ella.

Hakuyasha levanta la cabeza, mostrándole sus ojos oscuros y aterradora –¿Acaso te quieres morir? –Lo dijo en un tono muy makabelico, que le helo la espalda y le recorrió por todo el cuerpo al ex-asesino.

El tuerto Jonin estaba a punto de estar de acuerdo con Zabuza hasta que vio los ojos de asesina le hicieron cerrar la boca de mala gana, al saber que no era con Minato con quien hablaba, sino con Hakuyasha.

Sacude la cabeza con un suspiro –Estoy de acuerdo con él, pero conociendo las intensiones obstinadas de hime-sama, lo harás de todos modos. Sólo sé cuidadosa. –Zabuza instantáneamente lo mira con furia.

–Sino lo hago, la otra yo se pondrá a triste. –Le dijo tosca, pero sintiendo la esperanza de salvar a la niña. Rápidamente vuelve a mirar a Hinata, se corta las muñecas y posa sus manos ensagrentadas con garras en x sobre su pecho. Respira hondo y nota que todos sus compañeros la miran ansiosamente.

Su ojos brillaron azul mientras su chakra verde se filtraba a través de las yemas de sus dedos y gira alrededor de la chica inconsciente. Hakuyasha cierra los ojos, rezando internamente por su salud y su corazón para comenzar a funcionar. Naruto y Sakura se sientan de rodillas cerca de su amiga, creyendo en su habilidad. Sus rostros brillan con el mismo tono de su energía resplandeciente. La boca de Kurenai se abre al ver su poder por primera vez. De hecho, Guy, Hayate, Dosu, los médicos y los hermanos Sabaaku estaban igualmente asombrados. Los penetrantes ojos de Neji se centran en la parte posterior de la cabeza de la hanyou, queriendo detenerla. Muy pronto, el lento giro de la peliblanca-rojiza desciende hasta el área más cortada de su corazón.

–«Vamos, Mina-chan.» –Naruto mira nerviosamente a su concentrada amiga.

Haku se muerde el labio, igual de nervioso, lanzando una mirada a su antiguo sensei. El tercer Hokage levanta las cejas asombrado cuando Hinata finalmente respira aire de regreso a sus pulmones sin matarse a machetazos. Finalmente, la curación termina haciendo que el chakra verde desaparezca en pequeñas partículas.

–Creo que eso debería bastar. –Hakuyasha comentó con voz débil.

Se hace a un lado mientras la joven se arrodilla y coloca la palma de su mano sobre su pecho –«Su corazón está empezando a latir con regularidad, pero todavía es lento. Ella lo hizo.» –Sus ojos carmesí recorren a los de Hakuyasha– Gracias, Hime-sama. –Sus ojos se llenaron de felicidad por la milagrosa recuperación de su estudiante.

–No agradezcas aun. –Hakuyasha le recordo que el peligro aun no a terminado y mira a Hinata.

Los médicos de antes salen de su estupor y corren en su ayuda –La llevaremos a la sala de emergencias ahora y la curaremos desde allí. Atrás todos. –La colocaron en la camilla blanca y salieron corriendo hacia la salida.

Hakuyasha mira a Hinata con nostalgia, hasta que Sakura se sienta a su lado y duda en colocar o no su mano sobre su hombro y al final no lo hace, por temor de su reacción –Ella estará bien, hiciste lo mejor que pudiste.

–¿Eso crees? –La mira como a una niña perdida.

La pelirosa se ríe entre dientes y la envuelve en un cálido abrazo lateral –Sí. 

Hakuyasha instantáneamente se aleja de su abrazo, todavía concentrándose en la chica Hyuga.

Naruto los sigue con ojos aliviados –Hinata... –Luego mira hacia el suelo donde están los charcos de su sangre color burdeos. Se inclina y extiende la mano, tocando la sangre y hace cinco rayas con los dedos– «Hinata, te doy mi palabra.» –Cierra su mano en un puño, dejando caer una gran gota de su nudillo. Se puso de pie y se volvió hacia Neji, proclamando con determinación con su puño ensangrentado– ¡Juro que triunfaré!