Los Genin estaban tensos, nadie movía un músculo por la presión que sentían en sus hombros después de la İlegada del adolescente llamado Gaara. El aura asesina a su alrededor asustando a cada uno de ellos en el fondo. Los ninjas de Suna son los que más lo sienten.

Aunque Minato podía sentir un escalofrío recorriendo su espalda y gotas de sudor cayendo por su espalda y rostro, también había algo más que no podía comprender.

Había una sensación de familiaridad como si estuvieran conectados de alguna manera. E incluso con todas las banderas de advertencia corriendo por su cerebro, su alma se sintió tranquila.

Gaara ignoró a todos los demás frente a él, dirigiendo su única atención a su compañero de equipo masculino.

–Estás avergonzando a nuestra aldea. –Dijo con voz aspera el pelirrojo teniendo los brazos cruzados al pecho– ¿Ya olvidaste la razón de por qué venimos hasta aquí? –Miro a Kankuro directamente a los ojos.

–U-Uh... Lo sé. Es que ellos nos retaron. Ellos empezaron esto, en serio, yo no suelo... Ya sabes que soy muy... –Dijo Kankuro señalándolos con el dedo, su tono completamente diferente al anterior.

–Cállate. –Dijo Gaara deteniendo a Kankuro cuando comenzaba a poner otras excusas– O te mato. –Enfureció su mirada. Kankuro trago saliva.

Kankuro levantó las manos en señal de protesta –Uh, claro... me salí de control... Lo lamento, Gaara. Perdóname, de verdad lo lamento.

La kunoichi rubia se movió a su lado con las manos levantadas en señal de rendición.

Sin importarles, Gaara se volvió hacia los ninjas de Konoha con calma, parte de la oscuridad en su tono y ojos desapareciendo –Me disculpo por los problemas causados. –Dijo con calma, como si no acabará de amenazar con matar a su compañero.

Sasuke lo estaba mirando fijamente –«Este chico tiene una mirada perversa.»

–«Aplastó una roca con su fuerza y ​​lo hizo parecer fácil. Este chico es importante. Él y esa chica en el suelo... Detuvo el ataque de Kankuro sin necesidad de pensar en ello.» –Los ojos de Gaara se clavaron en Minato antes de que estallara en una nube de arena y se rematerializara en el suelo junto a sus compañeros de equipo– Andando, no vinimos aquí para jugar.

–Claro, sí, entiendo. –Respondio Kankuro temeroso, mientras los tres se alejaban.

–Sho tto matte. Oigan. –Sakura los detuvo apresuramente, caminando hacia adelante.

–¿Qué? –Preguntó la chica rubia sin mirar.

–Por sus hitai-ate, puedo reconocer que vienen de Sunagakure. Hi no Kuni y Kaze no Kuni son aliadas, pero ningún shinobi puede entrar a otra aldea sin un permiso explícito. Así que expliquen su visita y háganlo bien. –La mano de Sakura se movió hacia su bolsa kunai.

–¿En serio? –La chica se dio la vuelta– ¿Acaso vives debajo de una roca o qué? No tienes idea de lo qué sucede, ¿verdad? Tenemos permiso. –Levanta una tarjeta de identificación.

Sasuke estaba observando a Gaara atentamente mientras él y Haku saltaban desde donde estaban encaramados en el árbol.

–Claro que tienes razón, somos genin de Sunagakure. Nuestro hogar es Kaze no Kuni y estamos aquí para hacer los exámenes chuunin. –El chico de pelo blanco continuó por la chica.

–¿Los exámenes chunnin? –Naruto entrecerró los ojos, sin tener idea de lo que se suponía que significaba– ¿Qué es eso? -Preguntó en voz alta confundido- Yo nunca he oído de los exámenes chuunin, dattebayo.

–Hah. Lo que noto "dattebayo" es que es un despistado. –Dijo la chica de nuevo, con una sonrisa en su rostro.

–Jefe, son los exámenes que todos los genin deben presentar para graduarse y convertirse en un completo chuunin, kore. –Konohamaru explica amablemente cuáles eran estos exámenes cuando la niña no lo hizo.

–Ay, ¿y por qué no me dijiste? Ahí estaré. –Naruto declaró en voz alta, emocionado.

Gaara resopló y comenzó a alejarse con su equipo.

–Oye... tú... identifícate. –Gritó Sasuke mientras saltaba del árbol y aterrizó entre Haku y Minato.

La chica rubia se dio la vuelta tímidamente con las mejillas rosadas –¿Eh? ¿Me hablas a mí? –Preguntó, señalándose a sí misma.

Minato entrecerró los ojos levemente hacia ella –«¿Por qué me sintió incómoda? Nunca solía molestarme cuando las chicas coqueteaban con Sasuke.» –Pensó enfadándose consigo misma.

Sasuke no le dio importancia mientras mantenía sus ojos en la espalda del adolescente de cabello carmesí.

–No, a él. Al de la calabaza en la espalda. –Aclaro.

–Mi nombre es Sabaku... no Gaara... Tú también me das curiosidad. ¿Quién eres? –Cuestionó dándose la vuelta.

–Uchiha Sasuke. –Respondió Sasuke sonriendo.

–¿Y la chica? –Preguntó Gaara.

–¿Y-Yo? –Sakura tartamudeó mientras se señalaba a sí misma.

–No, ella. –Gaara miró a Minato.

–Senju Minako. –Dijo sin entender en su tono de voz.

El viento sopló con más fuerza cuando se enfrentaron, la intención de derrotar al otro se destacaba en sus ojos, lo que obligó a los demás a contener la respiración.

–¿Qué tal? –Naruto llamó, dispersando la presión al instante– De seguro se mueren por saber mi nombre. –Sonrío mientras se señalaba a sí mismo.

–Créeme que no. –Gaara dijo antes de darse la vuelta con su equipo detrás de él.

Los cuatro shinobi de Suna saltaron lejos de la escena en un abrir y cerrar de ojos. Todo rastro de ellos se ha ido.

–«Mmm... Esto se pone interesante.» –Sonrío Sasuke, queriendo, aún más, pelear con alguien tan fuerte como creía que debía ser Sabaku no Gaara. Solo sabía que era incluso más fuerte de lo que había sido Haku.

Detrás de ellos, un aura deprimida cayó sobre Naruto mientras se agachaba junto a los tres niños con el líder al frente.

–Oye, Konohamaru, ¿qué no me veo como alguien genial, dattebayo? –Preguntó Naruto con tristeza.

–Bueno, comparado con Sasuke-niichan y Anego, sí, eres patético, kore. –Dijo Konohamaru con sinceridad, lo que hizo que Naruto se refurruñara.

–No se me compara con Sasuke. –Gritó Naruto.

–Retrocede, tonto. –Dijo.

Sin que ellos lo supieran, tres figuras, una mujer y dos hombres, los observaban desde un árbol muy atrás. Su chakra y presencia completamente ocultos a los genin.

En el otro extremo estaba la mujer con una mano en su cadera con arrogancia. Uno de los hombres, probablemente su líder que tenía toda la cara vendada, sentado a su lado con calma. Y en el lado más cercano al baúl al lado del líder estaba el segundo hombre, la malicia goteaba de su lengua.

–¿Qué piensas, Dosu? –Preguntó, apoyando en un árbol mientras miraba al grupo.

–Los clasicos debiluchos, nada especial, pero a ese chico del clan Uchiha, esa chica del clan Senju y esa rata del desierto, debemos observarlos cuidadosamente.

–Vaya, este año si será emocionante.

El grupo miro hacia la voz masculina y vieron a un chico frente a ellos.

El aura que el hombre le había parecido familiar a Minato. Pertenecía a alguien de su pasado.

–¿Te conozco? –Preguntó Minato, mirando a la persona cuyo rostro estaba ligeramente oculto por la sombra de la capucha que llevaba puesta.

–Por supuesto que sí. Simplemente no me has visto en más de ocho años. –Dijo el hombre antes de quitarse la capucha y Minato jadeó.

–¿Ka-Kazekaya-kun? –Preguntó Minato con los ojos muy abiertos.

–Ha pasado un tiempo, ¿no es así, Minako? –Kazekaya preguntó con una sonrisa.

Minato estaba absolutamente sorprendida de ver a Kazekaya, su viejo amigo de la infancia. Se veía más mayor ahora que cuando era niño.

–¿En verdad...? –Preguntó Minato, cristalizándole la mirada e llevando su mano a su mejilla.

–Sí, soy yo. Ha pasado tiempo, mi pequeña neko. –Dijo sonriente mientras tomaba su mejilla haciendo que Minato sintiera su calor.

Al sentirlo y saber que no era una ilusión, saltó hacia él y lo abraza por el cuello mientras escondía su rostro en su cuello y sus lágrimas caían.

–Eres tú... En verdad estás vivo. –Murmuró.

–Sí, lamento la espera, neko. –Le regreso el abrazo y la estrecho fuertemente contra sus brazos mientras los demás veían la escena sorprendidos por la actitud extraña de la albina hacia el extraño.

–¡¿Quién eres tú y por qué estás abrazando a mi Ane-ue?! –Grito Naruto haciendo que ambos deshicieran el abrazo y le vieran.

–Él es Momozono Kazekaya-dono. Nieto de la daimyo de Taiyo no Kuni. Y el invitado que debo escoltar por un tiempo. –Explicó Ryuunosuke caminando hacia ellos con las manos en los bolsillos del pantalón y sin portar su máscara ANBU.

–Un placer, Uzumaki Naruto-san, Haruno Sakura-san y Uchiha Sasuke-sama. –Saludo.

–Sabes nuestros nombres. –Dijo sorprendido Naruto mientras Sakura le veía toda embobada.

–Yo les hable de ustedes. De la pequeña familia de la pequeña Mina. –Dijo burlón Ryuunosuke.

–¡Ryuunosuke-niichan!

–¡Ryuunosuke-sama! –Dijeron Sakura y Naruto al verle.

–Hola, chicos. –Saludo Ryuunosuke con una leve sonrisa– Debió reportarse con el Daimyo en cuanto llegó y no ir a buscar a la enana. –Le reprocho.

–¡Oye! –Se quejo la albina.

–¿Importa? –Dijo encorvándose de hombros.

–Igual de descarado como siempre. –Dijo serio– No me sorprende que Mina sea igual de descarada que tú.

–Somos familia. Algo tenía que pegarsenos. –Dijo abrazo a la albina sobre sus hombros.

–Cierto, cierto. –Asintió de acuerdo con él– ¿Y obaa-chan? ¿No está con ustedes?

–No, viene hasta iniciar los exámenes. Y si Kakashi no esta con ustedes... quiere decir que esta en reunión con los demás y el Hokage. –Dijo no viendo por ningún lado al Hatake.

–¿Tú también estás enterado, Nii-chan? –Preguntó Naruto.

–Claro. Es de lo único que se escucha últimamente.

–Cuando llegue, vi a otros shinobis de otras aldeas llegar a la aldea.

–La mayoría ya lo esta haciendo. ¿Los shinobi de Taiyo vienen?

–No lo creo. Creo que este año no participarán. –Dijo dudoso.

–¿Y por qué, Momozono-dono? Si se puede saber. –Preguntó curiosa Sakura.

–No te incumbe. –Dijo gélida, fría y cortante Minato.

~

–Bueno, llego el momento de escoger a nuestros candidatos para los exámenes chuunin. Para empezar, den un paso al frente los encargado de los novicios gennin. Kakashi, Kurenai y Asuma. –El Hokage dijo serio desde su escritorio.

Los tres Jonin dieron un paso adelante mientras hablaba, de pie uno al lado del otro en el mismo orden que sus nombres fueron llamados de derecha e izquierda.

–¿Qué dicen? ¿Hay alguien en su escuadrón que recomienden? ¿Quiénes están listos para los exámenes a pesar de su inexperiencia? –Preguntó el Hokage, con la pipa colgando de sus labios– Como saben, cualquier genin que haya cumplido ocho o más misiones, técnicamente es elegible para los exámenes. Aunque solo ustedes pueden decidir cuando están listos. Por supuesto, la mayoría de los genin requieren mucho más entrenamiento; más del doble de las misiones.

Iruka asintió desde dentro de la multitud, escuchando atentamente junto con todos los que lo rodeaban –«No hay necesidad de decir todo esto, es muy pronto para sus equipos.»

–Kakashi, tú empiezas. –Dijo el Sandaime.

Kakashi levantó su dedo medio y puntiagudo cerca de sus labios –Yo encabezo al equipo 7, Uchiha Sasuke, Uzumaki Naruto, Haruno Sakura, Senju Minako-hime. Yo, Hatake Kakashi recomiendo a estos cuatro genin para los exámenes de selección chunnin.

Iruka jadeó, una gota de sudor corrió por su rostro.

–Además, también represento a Yuki Haku, quien creo que también está listo para participar en los exámenes, a pesar de su falta de tiempo en Konoha. –Kakashi terminó.

Kurenai levantó su dedo medio y puntiagudo cerca de sus labios –Mi equipo es el número 8, Hyuga Hinata, Inuzuka Kiba, Aburame Shino. Y yo, Yuuhi Kurenai, recomiendo a los tres.

Asuma levantó su dedo medio y puntiagudo cerca de sus labios –Y mi equipo es el número 10: Yamanaka Ino, Nara Shikamaru y Akimichi Chouji... Y ahora yo, Sarutobi Asuma, recomiendo a los tres.

Estallaron susurros entre la multitud detrás, un alboroto que los cuatro habían estado esperando en el momento en que tomó su decisión. Ninguno de ellos habló ante el clamor.

–Ey, sho tto, matte kudasai. –Iruka gritó, saliendo de la multitud.

–Sí, ¿qué pasa, Iruka? –Preguntó el Hokage serenamente aunque ya tenía una idea de lo que su subordinado estaba a punto de decir.

–Hokage-sama, con el debido respeto... Diez de los once nombrados que acaban de darle fueron alumnos míos en la Academia, conozco muy bien sus habilidades y aptitudes. Cada uno de ellos son gran promesa, pero es muy pronto, necesitan más experiencia antes de que ser probados. Si lo hacen ahora, seguramente reprobarán el examen. –Iruka protestó, la preocupación prevaleciendo en su exhibición.

–Cuando yo me convertí en chunin, era seis años más joven de lo que es Naruto y Hime actualmente. –Kakashi le recordó.

–Naruto y Minako-hime no se parecen a ti. –Intervino Iruka, su lado protector hacia sus estudiantes salió adelante– ¿Estás tratando de destruirlos?

–Bueno, siempre están quejándose de que no tener retos a su nivel. Tal vez ser incluidos en los exámenes le enseñará una lección. Un poco de dolor es bueno.

–¿Qué...? ¿Qué estás diciendo? –Exigió Iruka, dando un paso más cerca.

–Oh, nada fatal por supuesto. En serio, Iruka, relájate. Escucha, entiendo cómo te sientes, es algo muy personal para ti, y te molesta, pero...

–Basta Kakashi, ya dijiste suficiente. –Kurenai lo miró con severidad.

–Al contrario, Kurenai. Iruka necesita oír esto. Necesita darse cuenta que ya no son sus alumnos. Son míos.

Iruka gruñó con ira.

–«¡Uf! Ya... se acabó.» –Asuma pensó mientras Kurenai suspiraba.

–Pero esos exámenes podrían destruirlos, y tú lo sabes. –Exclamó Iruka.

–Iruka... –El Hokage interrumpió- ya expusiste tu punto y lo entiendo.

–Hokage-sama...

–Acorde a eso, he decidido que lo más recomendable es esperar un examen preliminar especial.

–¿Un... examen preliminar?

~

A la mañana siguiente, Naruto, Minato Sasuke y Sakura esperaban a Kakashi en el puente durante las últimas horas. Sakura apretó los puños y parecía enojada. Su cabello estaba ligeramente mojado mientras que Minato, Naruto y Sasuke se veían como si estuvieran limpios y renovados. Al principio se quedó en silencio hasta que Sakura gritó de ira.

–¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? –Se quejó Sakura– Siempre es lo mismo. Pone la hora y luego tenemos que esperar por horas.

–Sí, no es justo. –Naruto estuvo de acuerdo, levantando su puño en el aire.

–Y mis sentimientos, ¿qué? Tenía tanta prisa, que ni siquiera tuve tiempo de secarme el cabello. –Sakura aprieta el puño con fuerza.

–Haruno, ya deberías haberte dado cuenta de que Kakashi tiene la costumbre de llegar tarde, ¿verdad? –Preguntó Minato.

Sakura entonces se puso rígida al darse cuenta.

Minato supo fácilmente que Sakura estaba enojada con Kakashi porque no tenía tiempo para arreglarse el cabello.

–Al menos nos arreglamos y desayunamos a tiempo, Naru-chan. –Dijo Minato.

–Sí. –Dijo Naruto con los brazos detrás de la cabeza.

Kakashi apareció en una bocanada de humo en un póster sobre el puente junto con dos personas.

–Ya, ohayo a todos, disculpen el retraso. –Kakashi saludó casual, levantando la mano– Temo que me perdí en el sendero de la vida.

–Sí, ¡como no! –Naruto y Sakura gritaron al unísono mientras señalaban a Kakashi.

Kakashi los ignoró, saltó del poste y aterrizó frente a ellos.

–Se que esto es algo repentido, pero los recomendé para los exámenes de chunin, a los cinco. Estas son las solicitudes. –Sacó e extendió cinco tarjetas.

–Espera, eso quiere decir... –Dijo iluminada Minato.

–Sí, estaré en el mismo equipo que ustedes y Zabuza-san serán nuestros sensei. –Le explico Haku.

–¿Estaremos en el mismo equipo pero con senseis diferentes? –Preguntó la chica.

–Así es. –Dijo Zabuza– Así se evitarán muchos conflictos.

–Entiendo.

–¿Son las solicitudes? –Repitió Sakura, volviendo al tema inicial.

–Estas repitiéndome, Sakura. –Dijo Kakashi– Todo esto es voluntario, depende de cada uno de vosotros. Si no se sienten listos, pueden esperar hasta el próximo año. –Explicó, mientras les entregaba los formularios.

–Súper, –Naruto vitoreó– Kakashi-sensei, usted es genial. –Saltó y enrollo sus brazos alrededor del cuello de Kakashi.

–Oye, oye, no babees mi chaleco. –Dijo Kakashi, bajando a Naruto– El que quiera presentar los exámenes, firme la solicitud y vaya al salón 301 en la academia. A las 3 de la tarde, dentro de cinco días, es todo. -Después de eso, desapareció de la misma manera que apareció.

–Hahaha. Exámenes chunin, exámenes chunin. –Naruto se río, mirando el formulario de recomendación en su mano.

~

–Exámenes Chuunin... –Dijo Naruto con entusiasmo mientras él y su equipo se alejaban del puente– Me enfrentaré a muchos ninjas realmente fuertes. –Luego recordo a Kankuro– «Como el chico que traía la momia en la espalda.» –Pensó antes de mirar a Sasuke– «Y por supuesto... "don sangron".» –Pensó, perdiéndose en su fantasía de vencerlos a todos y convirtiéndose en el mejor Hokage.

–«Espero poder pelear contra ese tipo.» –Pensó Sasuke, refiriéndose a Gaara.

Minato notó que Sakura se estaba quedando atrás con una mirada abatida.

–«Esto es inútil.» –Sakura miró fijamente su formulario de recomendación. No creía que tuviera la fuerza o las habilidades para participar en los exámenes. Lo más importante, el coraje de participar– «No puedo estar al nivel de Sasuke-kun, o vencer a Naruto... y ni siquiera estoy a la altura de Minako-sama, cuyas habilidades son mucho más avanzadas que las mías.» –Volvió a mirar a Sasuke, Naruto y Minato– «Jamás aprobaré estos exámenes.»

–Sakura-chan. –La chica miró para ver a Minato caminando a su lado- No te estreses. –La animó con una sonrisa- Yo sé que puedes hacerlo.

La pelirosa sonrío –Tienes razón. Gracias, Minako-sama.

Mientras tanto, había muchos ninjas de diferentes tierras y aldeas que ingresaban a la aldea de Konoha como candidatos para los exámenes chunin.

~

Minato esta en los campos de entrenamiento, sentada en uno de los postes de madera relajándose cuando escucho un sonido agudo de shurikens siendo lanzados.

Los atrapo con sus dedos sin ningún problema alguno.

–Sal, si no quieres morir. –Lo amenazo con voz fría Minato.

De repente, una persona desconocida apareció entre los arbustos y se dirigió directamente hacia Minato. Desde el punto su vista, parecía un bandido. Fue extraño cómo logró pasar a los guardias de la aldea. Probablemente los pasó mientras dormían.

El hombre sacó un kunai y corrió hacia Minato. Los dos comenzaron a pelear con sus espadas, sin retroceder. Inesperadamente, Minato corrió hacia el bosque con el extraño siguiéndola. A mitad de la persecución, el extraño perdió de vista a Minato. Miró hacia arriba y vio a Minato lanzándose frente a él y echó el brazo hacia atrás. Golpeando con la palma de su mano, golpeó al hombre justo en la cara. Su cabeza se echó hacia atrás. Minato apareció detrás de él, le agarró su mano y lo tiró con fuerza, el hombre pasó volando junto a Minato cuando se hizo a un lado. Minato luego agarró su otra mano y estiró su brazo hacia atrás hasta que le dolió. El hombre estaba en el suelo en un instante, de rodillas gruñendo de dolor. Minato se aferró a su brazo, sin mostrar signos de soltarlo.

–S-Suéltame... –Exigió el hombre, cada vez más enojado.

–Eres patético. –Dijo aburrida Minato, pero aún así no lo soltó.

–¡Déjame ir, ya! –Gritó el adolescente enojándose mucho. Minato se detuvo de repente. Sintió que algo venía de él. Vio un aura oscura envolviendo su forma. Sus poderes se estaban activando. Escuchó sus pensamientos: 'Estoy preocupado por mis estudiantes'. Ella vio su pasado; todos estaban reunidos en una habitación. Los tres Jonin de su generación y él estaban discutiendo sobre si estaban listos o no para los exámenes chuunin.

Minato soltó al hombre y se agarró la cabeza –«Está pasando de nuevo...» –Pensó sin dejar de sostener su cabeza, que ahora palpitaba de dolor. ¿Qué esta pasando? Cada vez que toca a alguien, siempre tiene esas visiones y siempre se siente débil después. Sabía que era buena para sentir las emociones de los demás, pero esto era demasiado.

–¿Iruka? –Minato lo llamo y le tendió la mano. Él lo agarró y ella tiró de él para que se pusiera de pie.

–¿Cómo supiste que era yo? –Iruka cuestionó mientras se quitaba el sombrero disfrazado.

–Puedo sentir auras, recuerda. –Minato le recordó.

–Cierto. –Iruka se frotó la nuca– Olvidé eso.

~

Naruto caminaba por la calle, pensando en el examen chunin. Tenía la sensación de que este examen sería más difícil que el de la academia. Probablemente más peligroso. Pero Naruto tenía un buen presentimiento de que él y su equipo lo harían bien.

–Naruto-no-niichan.

Naruto se giró al oír la voz y miró por encima del hombro para ver a Konohamaru y sus amigos corriendo hacia él.

–Ven a jugar a los ninjas con nosotros, kore. –Konohamaru le recordó.

–Claro. –Naruto se dio cuenta y les sonrío a los tres– No tengo ninguna peligrosa misión ninja hoy, así que no hay problema.

–Muy bien. –Vitorearon los tres niños.

De repente, un hombre apareció detrás de Moegi y la cogio como rehén.

–Naruto-no-niichan... Konohamaru-chan, auxilio.

–¿Qué estás haciendo con Moegi, papanatas, kore? –Exigio Konohamaru.

–Déjala ir, ¡ahora! –Ordenó Naruto.

El tipo solo se subió al puente y se río antes de irse corriendo del lugar.

–Hay que seguirlo, Konohamaru. –Le dijo Naruto hiñendo tras él.

–Estoy contigo, jefe. –Konohamaru lo siguió.

–Esperen. –Dijo Udon hiñendo tras ellos.

~

Sakura estaba sentada en el porche de su casa pensando en el examen chuunin.

–Oi. –Saludo "Sasuke".

–Sasuke-kun. ¿Qué hay?

–Vayamos a caminar, solos tú y yo. –Dijo Sasuke.

–No es cierto. ¿Hablas en serio? –Dice Sakura sonrojada.

~

El ninja de la hierba había tomado el Moegi haciendo que Naruto y compañía fuera tras él, el enemigo la había atado a un árbol.

–Oye, tú. Sí, tú, viejo panzón. ¿Qué crees que estás haciendo con Moegi, dattebayo? –Preguntó Naruto.

–¿Qué estoy haciendo? –Repitió el "enemigo"– ¿Esa es tu pregunta? ¿Realmente quieres saber? –Le apunta el kunai al cuello de Moegi.

–¡Ah! –Naruto se iba a acercar.

–No te mueves, acabo con la mocosa. –Lo amenaza.

–Oe, ¿por qué haces esto? Es una niña, déjala tranquila. –Dijo molesto Naruto.

–Quiero el pergamino del sello del Shodaime Hokage. Tráemelo y dejaré ir a la niña.

–El pergamino... del sello. –Repitió Naruto.

~

–Ano, Sasuke-kun... –Llamo Sakura– ¿Por qué de repente quisiste, ya sabes, caminar conmigo?

–Porque necesito decirte... que deberías renunciar a los exámenes chuunin. No hay manera de que puedas pasarlos, Sakura. –Dijo "Sasuke".

–Tenía miedo de eso... Tienes razón. –Dijo cabizbaja Sakura.

–Esos ninjas son muy avanzados y no tienen piedad. Si intentas enfrentarlos, podrías perder la vida. –Le dijo.

–Pero, pero Sasuke-kun... estás dándome a entender que te preocupas por mí. –Dice emocionada Sakura.

–Yo... creo que sí. –Dijo "Sasuke".

En eso, el "enemigo" aparece detrás de ellos parado encima en uno de los troncos.

–Dos enamorados... qué emotivo. –Dijo burlón.

–Piérdete, a menos que quieres morir. –Amenazó "Sasuke".

–Es fácil hablar.

El ninja de la hierba lanza shurikens hacia Sasuke, quien se defiende.

–Ahora sí estoy furioso. –"Sasuke" va hacia él.

–Cuidado, Sasuke-kun. –Advirtió Sakura.

El ninja de la hierba saca su paraguas y se lo lanza hacia Sasuke.

–No, señor.

Sasuke lanza un kunai, pero el paraguas se abre con muchos kunai hacia Sasuke, golpeándolo.

–¿Sasuke-kun? –Sakura corre hacia él– ¡Sasuke-kun! ¡Sasuke-kun!

~

–No te quedes parado ahí como un tonto. Date prisa y trae ese pergamino. –Demando el ninja de la hierba.

–Sí, ¿cómo no? ¿Y qué pasa si digo que no? –Lo reto Naruto.

–Eso significa que no te importa lo que le pase a esta chica. –Preguntó el ninja de la hierba.

–¿Qué niña, eh? Yo solo veo a dos montones de paja; uno en tu cerebro y el otro a tu lado en forma de muñeco. –Se burló Naruto.

–¿Qué? ¿A dónde se fue? –El ninja de la hierba levanta la mirada.

Naruto tenía a Moegi a su lado, usó la sustitución para salvar a Moegi.

–Está aquí, con el mejor ninja del mundo. –Dijo.

–Sí, ese eres tú. Eres mi héroe, jefe. –Dijo Moegi.

–El Bunshin no jutsu, te acabaré, insecto. –Murmuró molesto el ninja de la hierba.

–No sabes reconocer cuando te superan, ¿verdad? –Naruto tomó la red y se la arrojó al ninja. Él usa su Bunshin para detenerlo.

–Oye, jefe, aquí estamos. –Grito Konohamaru, cuando él y Udon se acercaban.

–Sí, aunque ya es muy tarde, chicos. –Les dijo Naruto.

–Konohamaru-chan, en serio tenía tanto miedo. –Dice Moegi abrazándolo.

–Ya, todo está bien. –Dijo Konohamaru consolándola.

–Lo atrapaste, jefe, ¿podemos verle la cara? –Le pregunto Udon.

–Claro, aquí esta. Les mostraré lo que... –Naruto se da cuenta de que el tipo ya no estaba– ¡Ahh!

–Oye, uso el kawarimmino jutsu en ti, kore. –Le dijo obvio Konohamaru.

–Copión, eso le hice yo a él. –Reclamo Naruto.

–Dejaste que se fuera, jefe, kore. –Le recrimino Konohamaru.

A lo lejos , el ninja de la hierba se escondía mirando a Naruto, que discutía con sus amigos.

–Ya veo. –Dijo.

~

Sakura estaba llorando encima de Sasuke, el ninja de la hierba se acerca a ella.

–Está acabado, y así es como tú terminarás si presentas los exámenes chuunin. –Le advirtió.

–Sasuke-kun... ¡Ja! No soy tan tonta. –Dijo Sakura, pero ella le da una sonrisa en los labios y mira al enemigo– Vi a través de ese genjutsu barato desde el primer momento.

–¿Qué? –Dijo confundido.

–¿Sasuke-kun invitarme a salir? Y luego de repente, se preocupa tanto por mí. Sí, ¿cómo no? Ese fue un error muy tonto. No me hagas reír. ¿Creíste que caería con eso? –Dijo Sakura.

–¿Estás llamándome tonto? –Le pregunto.

–Lo haría si realmente estuvieras aquí, pero solo eres una ilusión, el ninja real escapó, como un cobarde. Así que eres una ilusión de un cobarde. –Dijo Sakura.

–¿Estás segura de que no soy real? –El "ninja" deja caer el paraguas y va hacia ella.

Sakura sabiendo que era solo un genjutsu, va en la dirección en la que estaba atacando y no fue golpeada.

–Sí, estoy segura. –Se burló de él.

–Justo lo que esperaba de una kunoichi entrenada por Kakashi, –La felicitó– pero los exámenes chuunin serán más que ilusiones, veremos si puedes con ellos. –Desaparece.

–No me asustas. Ilusiones o no, estoy lista. –Dijo determinada Sakura– Los exámenes chuunin. Los temidos exámenes chuunin. De hecho, si estoy preocupada por ellos. –Dijo decaída.

~

El tipo estaba peleando con Sasuke y patea al enemigo en la cara haciéndolo volar e cae al suelo.

–Aléjate de nuestra aldea. –Dijo Sasuke.

~

Ya era de noche, Kakashi estaba en el techo de una casa hasta que aparece una persona.

–¿Y, que tal les fue? –Preguntó Kakashi.

–Todos los lograron, tu equipo, y los otros. Los diez genin probaron estar listos para los exámenes. –Dijo Iruka, quitándose el disfraz– Tenías razón, Kakashi, son hábiles. Todos desarrollan habilidades impresionantes.

–Pero los exámenes chuunin pueden romper a cualquiera. Claro que existen excepciones a esa regla. –Se refirio Kakashi al clan Momozono– Veremos si pueden salir adelante.

~

Una chica de cabello castaño atado en dos moños, vestía una blusa rosa y pantalón verde arrojó unos tres kunais hacia el centro que estaba en el tronco del árbol.

–¿Ya oíste que vamos a tener novatos en los exámenes? Genin recién graduados, eso no había pasado en cinco años... –Dijo un niño que vestía un mono verde y tenía el pelo brillante y cortado como un cuenco, ojos redondos y cejas muy pobladas.

–No te fijes. –Dijo la chica, jugando con un kunai– Todo esto es cosas de algunos Jounins que quieren elevar sus egos.

–No, y hay algo más para la historia. Cinco de ellos son del equipo de Kakashi.

–Ah, conque la ohime de los Senju... Suena interesante. –Murmuró un chico de largo cabello castaño y ojos claros.

–Ay, no tanto. –La chica arroja un kunai hacia el centro de nuevo.

–Sea como sea, es una lástima para ellos. –Dijo el pelicastaño, quien se encontraba sentado debajo del centro, con una sonrisa arrogante.

La chica soltó una risa.

~

Al día siguiente, los miembros del Equipo 7 estaban esperando que llegara su otro miembro del equipo donde se estaba realizando el examen Chunin.

–¡Sakura-chan! Oye, se te hizo tarde. –Declaró Naruto.

Sakura levanta la mano a modo de saludo –Ah... Cierto, lo siento, chicos. –Se quedo mirando a sasuke y lo enfrentó con una mirada cautelosa– Ohayo, Sasuke-kun.

–Sí. –Él la mira por el rabillo del ojo, entrecerrando sutilmente los ojos– «¿Qué se trae? Está diferente.»

~

El equipo ingresó al edificio y se dirigió al segundo piso. Vieron una gran multitud de genins rodeando la puerta de una habitación en medio del pasillo. Decía "301". Un niño con un corte de pelo tipo cuenco fue empujado al suelo después de que una de las dos personas que vigilaban una puerta le propinara un puñetazo.

–Habla de los exámenes chuunin, pero ¿ni siquiera pueden pasar sobre nosotros? –El que golpeó al chico que tenía el pelo de punta y espadas en la espalda se burló.

–¿Por qué no se rinden de una vez antes de que salgan lastimados? –Dijo el que estaba a su lado, poniendo sus manos en sus caderas.

–Sí, creo que sus mamis los estaban llamando. –El primer chico se río entre dientes.

–Por favor, déjenos pasar. –Una niña con moños estaba arrodillada junto a un niño con un mono verde– Se supone que debemos entrar. –Le rogó, la preocupación estaba grabada en su rostro. La niña se puso de pie y uno de los guardias le dio un puñetazo en la cara, pero el primer chico la abofeteó y la hizo caer al lado de su amigo.

–Ay, qué cruel. –Gritó entre la multitud.

–¿Dijiste "cruel"? –Repitió sarcástico– Escucha, estamos haciendo amables a comparación. Los exámenes harán que parezca un día de campo. –El chico respondió, su voz resonando a través de la habitación.

–Algunos de ustedes no sobrevivirán a los exámenes. Otros quedarán truncados de por vida y algunos se volverán locos. Para un chunin, siempre es vida o muerte. –El otro dijo a la multitud.

–¿Creen que es una broma? Los chunin están calificados para liderar misiones, lo que significa poner las vidas de sus equipos en sus manos, así que mejores sean duros para poner tomar el riesgo. Las niñitas delicadas no pertenecen a este lugar. –Miró a la chica en el suelo.

–Queremos evitar sufrimiento innecesario. Así que váyanse a casa a jugar con sus muñecas. –El otro bromeó.

–Que buen discurso. –Sasuke se acerco a los dos chicos con las manos en los bolsillos con su equipo detrás de él– Ahora, los dos, quitense y déjenme pasar.

–Deshacer el genjutsu en la puerta. Queremos llegar al tercer piso. –Ordenó Minato.

Los murmullos de la multitud se extendieron detrás de ellos.

–¿A qué se refiere? Estamos en el tercer piso.

–Lo sé.

–Vaya, vaya... –Uno de los chicos se inclinó más cerca de Minato, estudiándola de cerca.

–Así que notaste el genjutsu, eh. –Preguntó el otro, frotándose la barbilla.

–Adelante, diles Sakura. –Sasuke de repente se giró para mirarla, sonriendo levemente– Estoy seguro de que tú lo viste antes que nadie.

–¿Eh? –Sakura lo mira interrogantivamente.

–Tienes las mentes más brillante y las mejores habilidades analíticas de nuestro equipo, tú debiste haberlo sospechado un kilómetro atrás.

–¿Debí hacerlo? –Sakura dejó de hablar sorprendida antes de sonreír– Sí, claro, por supuesto. Sí, yo me di cuenta enseguida, este es tan solo el segundo piso.

–Claro. –Naruto asintió, con una sonrisa pintada en su rostro.

Entonces la ilusión desapareció y volvió a su forma original. El letrero en la puerta volvió a su número correcto, '201'.

–Por lo visto, son de los inteligentes, pudieron notar nuestra ilusión. Ahora veamos cómo enfrentan esto. –Uno de los guardias se abalanzó hacia Sasuke, con la pierna levantada, mientras que Sasuke tomó represalias, levantando su propia pierna para devolverle la patada. En un instante, el chico que vestía el mono verde estaba entre ellos, sujetando sus piernas en el aire.

–«¿Cómo lo hizo? Detuvo el ataque de Sasuke y del chuunin al mismo tiempo.» –Minato se preguntó, sus ojos rosa black baccaro se agrandaron. Intercambió una mirada con Haku, quien solo asintió con la cabeza.

El Chunin saltó y el chico de verde dejó escapar un suspiro de alivio cuando soltó la pierna de Sasuke.

–«Él detuvo mi patada, que gran cantidad de chakra tiene en el brazo.» –Pensó Sasuke, mirándolo con sospecha.

–Oe, ¿qué pasó con el plan? –El chico castaño y ojos claros se acercó al chico, junto con la chica de cabello castaño– Tú dijiste que debíamos pasar inadvertidos y no dejar que nadie viera nuestro nivel de habilidades.

–Lo se pero... –El primer chico miró a Minato, con el rostro sonrojado.

–Olvídenlo. Se acabó, ya todo es historia. –La chica negó con la cabeza.

–«Pero... ¿qué paso con las heridas que tenía antes? Ya no están. ¿Eran falsas?» –Sasuke lanzó una mirada de muerte al chico de cabello de tazón y comenzó a apretar los dientes.

El chico del mono verde se acercó a Minato –Mi nombre es Rock Lee. Usted es la princesa del clan Senju que fundo la aldea, Minako-san, ¿cierto? –Le pregunto.

–Sí. Así es. Es un placer. –Se presentó haciendo una leve reverencia de saludo.

–Por favor, sé mi novia. –Él sonrío, su rostro sonrojado mientras le daba un pulgar hacia arriba– Yo me avocaré a protegerte con mi vida.

–¿Eh? –Minato mira a Lee sin comprender– «¿Me acaba de pedir que sea su novia?»

–Mako no está interesada. –Sasuke se paró frente a Minato, fulminando con la mirada al chico.

Lee volvió la cabeza hacia Sasuke –Quiero escuchar la elección de Minako-san... No la tuya.

Lee volvió la cabeza hacia Minato y le dedicó una brillante sonrisa.

–No necesitabas responder por mí, Sasuke. –Minato entrecerró los ojos hacia Sasuke antes de inclinarse ante Lee y darle una sonrisa de disculpa– Lo siento mucho, Lee-san. Tengo que rechazar tu oferta, pero espero que podamos ser amigos.

Lee asintió con tristeza –Entiendo, Minako-san. Perteneces a otra persona.

Naruto estalló en carcajadas, mientras Lee se enfurruñaba por ser friendzoneado por una chica que en realidad ni siquiera era su amiga.

–¿Eh? –Minato parpadeó hacia él– ¿Lo tengo? –Se encogió de hombros antes de apoyar su cabeza en el hombro de Sasuke– No me extraña este tipo de declaraciones. Incluso si no siento lo mismo que él. Por cierto, si fueras tú, Sakura-chan habría dicho que sí en menos de un segundo. –Levanta la vista y le dedicó una linda sonrisa.

El rostro de Sasuke se puso rojo y rápidamente desvió la mirada –¡N-No estoy interesado en ella! –Protestó.

–¿Eh? ¿No lo estás? –Minato lo miró e inclinó ligeramente la cabeza hacia la derecha, lo que no ayudaba a que su sonrojo disminuyera.

–N-No, no lo soy. –Tartamudeó Sasuke– «¡Si tan solo tuviera las agallas para decírtelo...!» –Pensó malhumorado.

–Oye, tú, por aquí. ¿Cómo te llamas? –Dijo el chico de pelo largo mientras se paraba frente a ellos.

Naruto los miró a los dos y los miró con ira y llama de ira en sus ojos –«¡Ay! ¿De nuevo? Siempre todo es por Sasuke.»

–Es una cortesía muy común dar tu nombre antes de preguntárselo a alguien más. –Dijo Sasuke, volviendo a su estado normal.

–Oe, tú eres un novato, ¿no? ¿Cuántos años tienes? –El chico de cabello castaño largo cuestionó.

–No estoy obligado a contestar. –Sasuke respondió.

–¿Qué dices? –El chico de largo cabello castaño entrecerró los ojos mientras se enojaba. La chica de antes se río entre dientes ante la respuesta de Sasuke.

–«Lindo...» –La niña pensó.

Sasuke agarró la mano de Minato. Minato sujetó la mano de su acompañante entrelazando sus dedos, sonriente, acto que sorprendió al muchacho provocándole un leve rubor en las mejillas.

–Vamos, que se hace tarde. –Sasuke estiró su mano y siguió caminando.

Observó sus dedos entrelazados, sonrío para sus adentros y envolvió más la pequeña mano de la chica, su corazón nuevamente estaba acelerado, solo ella logró sacarlo de su zona de confort y su típico carácter, solo con ella actuaba de manera diferente, solo ella.

Pronto pasan junto a Naruto y Lee, que están apoyados contra la pared avergonzados.

–Rechazado. –Lee gime de tristeza.

–Nadie quiere saber mi nombre. –Naruto dijo igual de triste.

–Oigan, Naruto, Minako-sama, Haku, Sasuke-kun, hay que irnos. –Sakura agarró la mano de Naruto y Haku, y siguió a Sasuke y Minato antes de dirigirse al tercer piso.

–Está bien. No tienes que sacarme el brazo. –Naruto gimió.

–«Sasuke, del clan Uchiha. Y Minako, la del clan Senju. Qué rara combinación.» –El chico de cabello largo castaño pensó mientras observaba al equipo de cinco alejarse y desaparecer de la vista.

–Se ve muy audaz. ¿Vas a retarlo? –La chica puso una mano en su cadera pensativamente.

–Mmm. –Neji dijo en un tono de voz que expresaba lo poco que le importaban ellos.

Neji y Tenten pasaron junto a Lee. Se detuvieron y lo miraron confundidos.

–Lee, ¿qué estás esperando? Debemos ir a inscribirnos! –Tenten le recordó.

–Estaré con un ustedes en un minuto. No tienen que esperarme. Solo quiero verificar algo. –Lee respondió, con los puños aún cerrados.

La chica se encogió de hombros –¿Qué se traerá entre manos? –Le susurró a Neji.

–No tengo idea. Un consejo: si esa niña es quien creo que es, ten cuidado. Ya que proviene de Taiyo. –Respondió, continuando por el pasillo.

A lo lejos, los dos niños estaban viendo al equipo 7, se convierten en dos Chuunin.

–Así que esa es la bola de inadaptados que son estudiantes de Kakashi y Guy. –Dijo el de gorra.

–Creo que ya pasaron el primer examen: conseguir sus solicitudes. –Dijo el chico de cabello puntiagudo.

–Cierto. –Asintió el otro– Parece que los exámenes van a ser divertidos este año, ¿no?

–Para nosotros sí, pero no para ellos.

Mientras el equipo 7 subía las escaleras, Sasuke no pudo evitar pensar en a quién se enfrentaría durante este examen.

–«Así que esto son los temidos exámenes chuunin, ¿eh? ¡Ja! Es un show de fenómenos.» –Pensó Sasuke con una sonrisa.

Mientras se dirigían hacia las escaleras que los llevarían al tercer piso. Esperaban que no hubiera más retrasos en el examen.

–Oye, tú... el de la pose. Sho tto matte. –La voz de Lee gritó desde atrás.

El equipo 7 se dio la vuelta para ver al chico parado en el balcón.

–Hola. ¿Necesitas algo? –Haku preguntó cortésmente, golpeando una mano sobre la boca de Sasuke antes de que pudiera decir algo grosero u ofensivo.

–Quiero pelear... justo aquí y justo ahora. –Respondió Lee.

–¿Quieres pelear conmigo, justo aquí y ahora, eh? –Repitió Sasuke.

–Sí. –Lee salta y se deja caer completamente en cuclillas– Mi nombre es Rock Lee. Tú dijiste que era una cortesía muy común para tu contrincante el decir tu nombre primero, ¿no...? ...Uchiha Sasuke-kun. –Preguntó, señalando a Sasuke.

–Hm. Así que me conoces. –Sasuke entrecerró sus ojos.

–Ahora, te reto... –Lee tomó una posición de pelea– Todo el mundo se la pasa hablando del clan Uchiha y de lo grandioso que es. Yo quiero comprobarlo. Creo que tú serás una buena prueba para mí, y además... –Hizo una pausa y desvió la mirada hacia Minato– Quiero pelear contigo para ver quién gana el corazón de Minako-san.

El cuerpo de Minato se encogido al instante mientras se dibujaba una mueca de disgusto en la cara por su confesión.

Naruto, Haku y Sakura jadearon sorprendidos –¡¿Q-QUÉ?!

Sasuke y Minato jadearon –¿Q-Qué?

–¿Te gusta Minako-san o no? –Lee dijo, haciéndolo obvio– ¿Ella no es tu novia?

–¡¿QUÉ?! –Sakura gritó mientras la cara de Minato se sonrojaba a diez colores rojizo.

–«¡¿Este chico cree que ella es mi novia?!» –Lo cuestionó Sasuke.

–¡MINAKO-SAMA NO ES SU NOVIA! –Sakura lo regañó mientras rechinaba los dientes de un lado a otro.

–¿Ella no lo es? –Lee finalmente se dio cuenta– Oh, pensé que lo era.

–¡P-Por supuesto que no! –Minato tartamudeó tratando de aclarar las cosas.

–¡Ane-ue no le pertenece a un bicho raro como tú! –Gritó Naruto. Haku colocó una mano sobre su hombro para calmarlo.

–¿Tú sabes sobre el clan Uchiha y aún así me quieres retar? –Preguntó Sasuke, cambiando de tema– Debes estar más loco de lo que te ves... si se pudiera. ¿Quieres saber más sobre mi clan? Yo te enseñaré... por las malas.

Minato se movió para agarrarse del brazo de Sasuke sin siquiera saber que lo estaba haciendo. Minato tenía miedo. Miedo de cómo terminarían las cosas. No quería ser obligada a amar a alguien que no quería. De solo pensar eso, el agarra al brazo de Sasuke aumento, sintiéndose automáticamente más segura cerca del Uchiha. Sasuke se dio cuenta, una pequeña sonrisa se formó en sus labios.

–Puede que no sea mi novia, pero pienso protegerla. –Dijo sin verla a ella o los demás.

–¿Sasuke...? –Minato pronunció suavemente su nombre mientras miraba sorprendida al Uchiha.

–Si no te gusta, solo dilo. –Le dijo.

–No me disgusta, solo que me tomaste de sorpresa. –Dijo avergonzada y sonrojada– Aun así con todo, se que siempre me protegeras. Arigato. –Le agradeció feliz abrazando su brazo para luego soltarlo.

–Adelante. –Lee sonrío con confianza, levantando la palma de la mano en su típica postura de lucha– «Qué bien... Un enfrentamiento contra el novato número 1. Haré que se desinhiba y revele su técnica... y me probare ante ti, Gai-sensei.» –Pensó mirando a su contrincante.

–Matte. –Gritó Naruto, pisoteando el suelo con el pie– Yo me encargo antes. Ese fenómeno es mío.

–Adelante. –Le dijo Sasuke.

–Naruto. –Sakura le llamo la atención.

–¡Naru-chan, no lo hagas! –Suplicó Minato.

–¿Qué? Me tomará 2 minutos hacer que me ruege misericordia. –Gritó, señalando a Lee desde el otro lado de la habitación.

–No, muchas gracias. –Se opuso Lee– Por ahora solo quiero enfrentarme a Uchiha Sasuke-kun. –Declaró, sus ojos fijos en Sasuke.

–¿Sí? Pues te tengo una noticia... Sasuke no se compara conmigo, ¡dattebayo! –Naruto gritó, cargando hacia él como un loco. Le dio un puñetazo a Lee, pero con un simple movimiento de su mano, Lee tiró a Naruto al suelo. Rápidamente, Naruto tomó represalias, girando sobre sus manos mientras intentaba enviar una patada en dirección a Lee, pero él la esquivó, girando a Naruto mientras lo enviaba volando hacia una pared.

Los ojos de Minato se agrandaron –¡Naru-chan! –Gritó preocupada.

-«Es mejor de lo que se ve.» –Pensó sorprendida Sakura.

–Aceptalo, Uchiha, no tienes oportunidad contra mí. Tus habilidades son inferiores. ¿Y sabes una cosa? Después de los grados, genin de Konoha, yo soy el mejor... Enfréntame y te lo probaré. –Lee dijo, sin molestarse en volver a mirar a Naruto.

《Flash Back》

Uno de los guardias se abalanzó hacia Sasuke, con la pierna levantada, mientras que Sasuke tomó represalias, levantando su propia pierna para devolverle la patada. En un instante, el chico que vestía el mono verde estaba entre ellos, sujetando sus piernas en el aire.

El Chunin saltó y el chico de verde dejó escapar un suspiro de alivio cuando soltó la pierna de Sasuke.

–«Él detuvo mi patada, que gran cantidad de chakra tiene en el brazo.» –Pensó Sasuke, mirándolo con sospecha.

《End Flash Back》

–Hmph. Esto será divertido. Hagámoslo. –Se dirigió a Lee, quien asintió con una sonrisa.

Sakura y Haku voltean la cabeza hacia el reloj, viendo que tenían menos tiempo para registrarse.

–No hay tiempo, Sasuke. –Haku le recordó con calma.

–Es verdad. –Dijo Sakura– Tenemos que registrarnos antes de las 3, y nos queda menos de media hora. –Dijo con una mirada de inquietud grabada en su rostro.

Sasuke cierra los ojos con un suspiro –Tranquilos, esto acabará... en cinco segundos.

Sasuke corrió hacia Lee y le lanzó un puñetazo. Lee desapareció en el último momento y evitó el ataque.

Sasuke gruñe, deteniéndose en el lugar hasta que Lee reaparece arriba.

–¡Konoha Senpū! –Lee realiza una patada redonda sobre la cabeza de Sasuke.

En el último segundo, Sasuke evita el ataque, haciendo que Lee caiga al suelo y vuelva a dar una patada redonda.

–«No me estoy moviendo suficientemente rápido, debo bloquearlo.» –Se reprocho a sí mismo.

De repente, tan rápido como un relámpago, Sasuke recibió una patada en la cara.

–¡Sasuke-kun/Sasuke! –Gritaron Sakura y Haku desesperados.

Sasuke cayo de espaldas y tardó en volver a ponerse de pie.

–¡SASUKE! –Minato corrió hacia él y saltó a su lado, la preocupación prevaleciendo en su exhibición– ¿Estás bien?

Cuando Sasuke se estrelló contra el suelo, Lee se puso de pie viéndolo luchar.

–¿Qué sucede? –Sasuke jadea pesadamente, ignorándola.

–«Tenía su guardia arriba, pero Lee-san pudo atravesarla.» –Analizó Sakura lo que vio.

–Esta usando alguna técnica contra mí, pero ¿qué es? ¿Un ninjutsu o un genjutsu? –Se pregunto Sasuke.

–«Como lo supuse, viene de vuelta por más.» –Penso Lee.

Eventualmente Sasuke se puso de pie lentamente –«Sí, que suerte, lo tengo justo donde quiera. Es mi oportunidad.» –Sus ojos ocultos en las sombras– Había estado esperando para probar esto. –Él sonrío.

–«¿Acaso será...?» –Preguntó Sakura ansiosamente. Sasuke le dio la razón cuando reveló su Sharingan rojo sangre– «¿Es el...? ¡El Sharingan! ¿Dónde aprendió? Sus ojos... Los tiene en ambos.» –Pensó fascinada.

–«Así que ese es el Sharingan.» –Penso Lee al ver el Sharingan por primera vez.

–«Uno nunca sabe qué hará Sasuke después, es sorprendente. Si es como el Sharingan de Kakashi-sensei, él podría leer los jutsus de ese muchacho y vencerlo.» –Pensó Sakura, embobada observando detenidamente el Sharingan de Sasuke.

–«Ninjutsu o genjutsu... Sea cual sea la magia que esté usando, ahora lo veré.» –Ahora que Sasuke tenía el Sharingan podía ver que técnica usa Lee y corre de nuevo hacia Lee.

–«Sasuke-kun se fortalece cada día más. Tal como se esperaba de un Uchiha. Sasuke-kun jamás perdería ante un chico como este. No, señor.» –Se dijo Sakura.

Lee pasó por debajo de Sasuke y le lanzo una patada en la barbilla, lo que lo hace volar por los aires.

–«Pudo rodear mi guardia, ¿pero cómo? ¿Qué clase de jutsu es ese?» –Se pregunto Sasuke.

–¿No lo ves? Mi técnica no es ninjutsu ni genjutsu.

Lee corrió hacia Sasuke y comenzaron un combate cuerpo a cuerpo, pero Lee claramente tenía la ventaja.

Cuando Lee lanza una patada de nuevo, Naruto grita –¡Sasuke!

Lee terminó con un golpe en el estómago de Sasuke usando su codo, fue el mismo lugar donde lo golpeó antes.

–¿Ya entiendes? –El lado de Lee lo mira– Estoy usando taijutsu, lo que significa que "no hay truco", Uchiha Sasuke-kun. –Dijo de un momento a otro estaba detrás de Sasuke– Son artes marciales justas, nada más.

–Eres un... –Sasuke se da la vuela, balanceando su puño.

Lee salta, esquivando el ataque –Ya conozco tú técnica. Olvídala, no funcionará, no señor. No en mí. Sé que puedes ver a través del jutsu de tus oponentes. Ese Sharingan te da la habilidad de leer su chakra y definir sus posiciones de mano y sus movimientos. Tú puedes adivinar qué es lo que él va a hacer casi antes de que lo sepa él mismo. El problema es que el Taijutsu es un poco diferente.

–Sí, ¿y a qué quieres llegar? –Sus ojos rubí miran a su oponente.

–Yo no trato de esconder ni disfrazar mis movimientos. No tengo la necesidad. Aunque tú puedas leerlos, no puedes detenerlos; eres demasiado lento. –Lee respondió en un solo suspiro– Tus ojos pueden ser tan rápidos como para estar un paso delante de mí, pero si tu cuerpo no coopera, ¿en qué te beneficia? ¿Sabes algo? Yo creo una cosa: hay dos diferentes clases de ninja. Los que, como tú, nacieron con un talento y no tienen que trabajarlo... –Sasuke gruñe de frente, queriendo terminar esta batalla de una vez por todas– y los que, como yo, que tenemos que entrenar y trabajar por toda la vida. –Mientras Sasuke lanza sus golpes, Lee continúa– El hecho es que tu Sharingan es la peor combinación para mi taijutsu extremo. ¡A esto me refiero!

–«Tengo que detenerlo.» –Se exigio así mismo Sasuke.

Lee vuelve a darle una fuerte patada en la mandíbula.

En el aire, Sasuke gira la cabeza para encontrar a Lee justo debajo de él.

–Kage Buyō... (Sombra de Hoja Danzante)

–Qué buen ojo. Ahora te probaré mi punto. –Lentamente, se quita las vendas de la mano– Ese trabajo duro supera al talento natural. –Los ojos rojos de Sasuke se agrandaron– El trabajo duro derrota al talento natural.

–«¿Cuál es su siguiente movimiento?»

–Estás acabado.

De la nada, un molinete rojo sale disparado y clava el extremo del vendaje contra la pared.

–Esto es malo.

Aparece una gran tortuga roja.

–Ya basta, suficiente, Lee. –Él dijo.

Unos segundos después, Lee y Sasuke comienzan a caer al suelo.

Lee aterrizó en el suelo de forma segura mientras caía. Minato desapareció y apareció junto a él, justo a tiempo para atraparlo y aterrizar con seguridad en el suelo. Sakura y Haku corrieron hacia ellos y se arrodillaron.

Se sento correctamente, junto sus manos y una luz verde salía de éstas mientras le aplicaba ninjutsu médico.

–«Venció completamente a Sasuke, algo pasó mientras estaba inconsciente. ¿Qué le hizo, dattebayo?» –Naruto lo demostró desde el otro lado de la habitación con preocupación.

Lee aterrizó frente a una tortuga.

–¿Daijo bu? Sasuke-kun. –Preguntó la chica de cabello rosa con preocupación.

Él no respondió. Simplemente estaba mirando a Lee.

–«Esta muy impactado... Ni siquiera pudo caer bien.»

–Usted... ¿estuvo viéndome todo el tiempo? –Lee preguntó nerviosamente, estaba arrodillado en el suelo, mirando al suelo.

–Por supuesto, esa última técnica está prohibida y lo sabes. –Le dijo con severidad.

Naruto miró con los ojos muy abiertos –«¿Está... hablando con una tortuga, y le está respondiendo?»

–Sumimasen, no tenía la intención. –Se disculpó el genin con vergüenza, inclinando la cabeza.

–«Ahora se está disculpando con la tortuga...» –Pensó Naruto– «Un minuto... ¿Acaso será... su sensei?»

Lee miró a la tortuga, pero solo recibió una mirada fulminante.

–No tenía planeado usar un jutsu prohibido, es solo que estaba a la mitad de una pelea y... digo, usted entenderá, ¿o no lo entiende?

–Tenía razón... realmente es su sensei. –Dijo Naruto mientras se ponía de pie, confundiendo a sus compañeros– Oigan, ustedes.

–¿Qué, Naruto...? –Preguntó Sakura mientras Minato terminaba de curar a Sasuke y la luz verde desaparecía de sus manos.

–Esa cosa rara con la que está hablando es una tortuga, ¿cierto? –Naruto inclinó la cabeza mientras señalaba a la criatura.

–Obvio, ¿qué creíste que era? –Sakura le gritó exasperada.

–¿Y eso significa que una tortuga también puede ser sensei? –Preguntó.

–¿Y pretendes que yo sepa si es normal? –Dijo.

–Eres una desgracia. –La tortuga gritó, haciendo que Lee se estremeciera y mantuviera la cabeza baja– ¿Crees que te vas a zafar con una bola de excusas patéticas? Un shinobi jamás revela sus técnicas a menos que sea absolutamente necesario. Es una regla básica, ya deberías saber eso.

–Perdóneme, señor. –Lee cerró los ojos.

Una vez que estuvo de pie, Sasuke se limpió la sangre seca de la cara y miró a Lee –«¿Cómo pude perder ante ese anormal?» –Pensó enojado, apretando los dientes.

–Sasuke... –Salió de sus pensamientos y miró a Minato, quien tenía una mirada de preocupación– ¿Realmente estás bien?

Su mirada se suavizó y le dio a ella una mirada tranquilizadora –Estoy bien, Mako. –Dijo suavemente.

–¿Estás preparado para el castigo por tus acciones? –Preguntó la tortuga.

–Yo... Sí, señor. –Dijo Lee, dócilmente.

–Muy bien, por favor, aparece... Guy-sensei. –Tan pronto como dijo eso, apareció un humo sobre la tortuga y un hombre, su cuerpo contorsionado en una pose atrevida. Se parecía a Rock Lee en 20 años, pero vestía un chaleco jonin.

–Hola, ¿qué onda? ¿Qué cuenta todo el mundo? ¿La vida los trata bien? –Preguntó.

Las mandíbulas de los cinco genins cayeron y sus ojos se salieron de las órbitas al ver al hombre –¡¿QUÉEEEEEE?!

–Él tiene aún más grandes las cejas. Casi tienen vida propia. –Señalo Naruto.

–Yo, Lee. –Saludó Guy, mostrando un pulgar hacia arriba y sus dientes brillando.

–Es más raro. –Dijo Sakura con algunos mechones de cabello sobresaliendo.

–Así que de ahí se inspira Lee. El mismo corte de jícara y las mismas cejas de azotador. –Exclamó Naruto.

Una marca apareció en la parte posterior de la cabeza de Lee. Se dio la vuelta y gritó –Oye, no insultes a Guy-sensei. Él es uno de los hombres más grandiosos del mundo.

–Ay, discúlpame por no ver su magnificencia, estaba muy ocupado viéndolo gatear para salir de debajo de la tortuga. –Naruto replico.

–Él no estaba gateando. –Exclamó Lee.

–Tranquilo, Lee. –Guy dijo y Lee inmediatamente lo obedeció.

–Sí, señor. –Lee saludó.

–Ahora, como reprimenda... –Guy aprieta el puño- Pequeño tontuelo. –Le dio un puñetazo al genin justo en la mejilla, haciéndolo escupir sangre.

Una vez más, el equipo 7 observó a los dos con la boca abierta y los ojos desorbitados. Lee aterrizó unos metros delante de ellos.

Guy luego se arrodilló frente a Lee mientras el chico luchaba por levantarse.

–Lo siento, Lee, pero tú me obligaste a esto. –Dijo, mientras ríos de lágrimas corrían por su rostro.

–Se-sensei. –Lee tenía el mismo vapor saliendo de sus ojos.

–Oh, Lee... –Guy sollozo.

–Oh, sensei. Lo siento, perdóneme. –Lee sollozo.

–Bueno, se acabó... no sobran las palabras. –El tipo se atragantó. Luego, la escena cambió a una puesta de sol donde estaban en un acantilado y las olas rompían contra él.

–Sensei. –Lee gritó, saltando a sus brazos en un gran abrazo.

–Lee. –Los dos se abrazaron y lloraron dramáticamente.

–«¿Cómo pude perder ante alguien tan patético?» –Pensó Sasuke con incredulidad.

–Rápido, denme algo para sacarme los ojos. –Dijo con repulsión Minato.

–Tranquilo, tranquilo, solo fue un pequeño lapsus. –Guy abrazó a Lee más cerca de su pecho.

–Perdóneme, sensei. –Lee se estremeció. Guy suelta a Lee de sus brazos y ambos se pusieron de pie.

–En realidad, la manera en que se abrazan es un poco dulce. –Naruto dijo con una sonrisa.

–Debes estar bromeando, ambos están completamente locos. –Gritó Sakura, apuntándolo con un dedo.

–Estás atrapado entre dos etapas. –Guy colocó una mano en el hombro de su alumno– Eres muy grande para ser un niño, pero no tanto para ser un adulto.

–Es tan bueno conmigo, Guy-sensei. –Lee sollozó.

–Bueno, ya basta, quiero verte darle 100 vueltas a la cancha de entrenamiento, muéstrame de que estás hecho. –Guy señaló hacia una dirección aleatoria con su dedo índice, con la otra mano en la cadera.

Lee mira la dirección que señala su sensei con una mirada de determinación –Hai, señor, por supuesto.

–Corre hacia el atardecer, corre y sufre, pero no te despeines... eh. –Guy le sonrío, sus dientes brillando.

Lee le devolvió la sonrisa.

–Andando.

–Claro. –Lee saludó antes de que él y Guy comenzaran a irse.

–Oigan, un momento, no hemos acabado con esto, no puede terminar con todo así como así. –Naruto les gritó.

–¿Y qué hay de los exámenes Chunin? –Preguntó Sakura– No hay tiempo para tonterías. –Les recordó.

–¿Hm? –Dijo Guy– Muy bien, se me había olvidado eso. –Se frota tímidamente la nuca, se aclara la garganta y miró a Lee– Lee, no solo desobedeciste las reglas durante una batalla; también te distrajiste de los exámenes chunin. Creo que eso reprimenda ligeramente más severa, ¿no crees?

–Sí, señor. –Lee saludó.

–Digamos, 500 vueltas... ¿Qué tal suena eso? –Guy dijo mientras hacía una pose extraña.

–Inmejorable, señor. –Dijo Lee.

Los cuatro genin y el ex-ANBU observaron la escena con gotas de sudor en la nuca.

–...Están locos. –Dijo Haku.

–Probablemente, pero olvídate de ellos. ¿Qué hay de esa tortuga que habla, Haku? –Dijo Naruto. Entonces Guy se volvió hacia ellos. El equipo 7 se estremeció cuando notaron que los miraba fijamente.

–«Ellos deben ser del equipo de Kakashi. Voy a echarles un ojo.» –Pensó Guy.

–¡Ay, mamá! Nos está viendo. –Susurró Sakura, asustada por su mirada.

–Díganme... ¿Cómo está Kakashi-sensei? –Guy pregunto a los cinco niños.

–¿Lo conoce? –Preguntó Sasuke.

–¿Qué si conozco a Kakashi? –Preguntó Guy retóricamente. Puso una mano en su barbilla y se río entre dientes– Bueno, la gente dice que... seremos archienemigos eternamente.

–¡Claro que no! –Exclamaron Naruto y Sakura, retrocediendo con incredulidad. Sasuke todavía parecía molesto como siempre.

–¿Cómo se atreven? –Lee se enojo– Si Guy-sensei lo dice, es por que es cierto.

–Que se te resbale. –Guy dijo tranquilizadoramente– Las acciones de un ninja siempre hablan más fuerte que las palabras.

Sasuke estaba mirando a Guy. Pero cuando parpadeó, desapareció.

–Mi marca son 50 victorias, 49 derrotas. Que, por cierto, es mejor por 1 que la de él. –Guy proclamó con su pecho hinchado cuando apareció detrás de ellos, tomándolos por sorpresa.

Todos gritan, girando hacia él.

–¿Qué?

–«¿En serio?» –Sasuke pensó con incredulidad.

–¿Cómo venció a Kakashi-sensei? –Naruto preguntó en estado de shock.

Guy sonríe y guinea un ojo con un gran pulgar hacia arriba –El hecho es que yo soy más fuerte que Kakashi, y más rápido...

–«Su velocidad es increíble, definitivamente es más rápido que Kakashi. ¿En serio es humano?»

–¿Qué dicen ahora? Guy-sensei es el mejor de todos. –Lee proclamo con confianza.

Sasuke gruñe con desagrado.

–Lamento el problema que les causó Lee. Vean dentro de mis ojos y acepten mis sinceras disculpas. Y ya de paso, reciban mi varonil y atractiva belleza. –Dijo el hombre de spandex verde. El equipo 7 sudó.

–«Él dice ser mejor que Kakashi. ¿Podrá ser cierto eso? No creo que lo esté inventando.» –Sasuke cerro los puños, molesto.

–Lee, deberías acompañar a estos refinados jóvenes ninjas al salón de clases. –Guy arrojó un kunai al shuriken del molino de viento, haciéndolo caer de la pared.

Fue entonces cuando Naruto notó las manos de Lee. Había numerosos moretones que cubrían su piel, un testimonio de lo duro que estaba entrenando mientras Lee se envolvía los brazos con las vendas.

–Recuerda, da lo mejor de ti Lee... Chaito. –Dijo el tipo.

–Claro. –Lee saludó una vez más.

Guy desaparece en una bocanada de humo, llevándose a la tortuga con él.

–Oye, Sasuke-kun, la verdad es que no fui totalmente honesto contigo. –Admitió Lee, captando la atención de dicho chico– Te dije que quería probar mis habilidades, y de hecho, no mentí, pero tú no eres la persona con las que quiero probar. Hace rato, mientras peleábamos, te mentí. Te dije que era el mejor genin de aquí, pero hay un ninja de altura, alguien de mi propio equipo.

Sasuke le devolvió la mirada desafiante.

–Y vine aquí para vencerlo a él. Tú solo fuiste una práctica. Pero ya eres un objetivo, y voy a aplastarte. Ya te lo dije. Considérate advertido. –Con esa última declaración sale corriendo y salta al balcón.

Sasuke apretó el puño con fuerza y ​​apretó los dientes. No podía creer que Lee fuera capaz de derrotarlo. Casi parece que Lee lo estaba subestimando. Nunca se había sentido tan humillado. Especialmente frente a Minato. Probablemente pensó que él era débil y arrogante. No podía creer que había perdido contra un usuario de taijutsu. Pero ahora, tenía otro oponente al que quería derrotar. Quería mostrarle a Minato que él era el novato más fuerte y que ella le pertenecía a él y ningún otro chico podía tenerla.

–Sasuke-kun. –Sakura dijo preocupada.

–¿Qué le pasa? –Dijo Naruto, con los brazos cruzados detrás de la cabeza– Parece que el clan Uchiha no es tan grandioso como todo el mundo lo cree. -Se burlo, volviéndose hacia ellos.

–Naruto. –Sakura lo regañó.

–Cállate, ¿quieres? –Sasuke murmuro sombriamente– La próxima vez, lo pondré de rodillas.

–Sí, claro... ¿a quién acaban de patearle el trasero? –Naruto mira hacia otro lado con indiferencia.

–¿Qué? ¡Oye! ¿Qué tanto dices? Mejor párale, Naruto. –Sakura exclamo enojada.

Sasuke gruñe, mirándolo fijamente.

Naruto mira hacia abajo pensativo –¿Viste sus manos? ¿Las viste cuando se quitó la venda? Creo que don "cejotas" ha estado entrenando hasta desfallecer, día, tras día, día tras día. Entrena más duro que tú. Y eso que Ane-ue aún no muestra todo su poder. Lo de la última vez fue solo el 10%. Eso es todo lo que digo.

–«Sasuke-kun.» –Sakura se detuvo cuando vio la cabeza de Sasuke bajada, su flequillo cubriendo sus ojos.

El pelinegro sintió que alguien le agarraba suavemente la mano. Miró hacia arriba para ver a Minato asintiendo hacia él. Su mirada se suavizó de nuevo y respiró hondo.

–Bien. –Dijo con una sonrisa– La cosa comienza a ponerse interesante. Los exámenes chunnin: no puedo esperar a ver qué sigue.

–Bien. –Estuvo de acuerdo Naruto, sonriéndole.

Sakura, Haku y Minato le sonrieron.

–Comencemos... Mako... Haku... Naruto... Sakura. –Dijo y todos fueron al tercer piso