El entrenador Pokémon vuelve a casa tras ganas la liga,una gran cantidad de gente le celebra de camino y la gente que lo acompañó se separa al fin.

Los rivales del camino lo saludan,la noche cae y el día sale,la mañana es cada vez más corta mientras el campeón vuelve a casa..

En esta ocasión su nombre es Zilver,un joven algo reservado y calmado,no suele hablar mucho pero es gracias a esa personalidad que pudo pasar muchos retos al pensarlo todo en frío...

Hoy por fin, volvió a su pueblo natal,envuelto de bosques y montañas que de lejos lucen de un hermoso color azul,al llegar a su hogar la gente del pueblo lo han recibido con emoción,una enorme fiesta se celebrará y es que gracias al joven el pueblo comenzará a recibir más reconocimiento y con ello,pronto habrán más ganancias por la popularidad del campeón.

En la fiesta se encuentra con su padre quién está orgulloso de su hijo,no da crédito aún a la situación, él sabía que su hijo era buen entrenador pero a pesar de que no dudo,en cierto punto no se imaginó tal recibimiento a su hijo,como si fuese un héroe de leyenda..

¡Hijo! ¡Hijo mío! ¡Felicidades! ¡Estoy muy orgulloso de tí.!!-

-Mu-muchas gracias papá,estoy feliz de estar de vuelta..-Dijo Zilver respondiendo al abrazó de su padre.

¿Y dónde está tú equipo estrella?-Pregunto el padre sonriente.

-Ellos están ahora mismo en la ciudad,se han quedado unos días en tranferencia hacia el campo de entrenamiento del profesor,supuse que sería bueno un descansó para todos..-Él sonrió y luego suspiró al ver a todos celebrar y el pueblo iluminado por las luces tenues de la festividad.

-¡Oh! Bueno,en ese casó te prestaré uno de los míos, para que no andes por allí a solas,no quiero que te pase nada malo..-

¿Tienes Pokémon? Eso es nuevo papá,pero de todos modos gracias..-Él miró a su padre y tras unos momentos de silencio.

¿Dónde está el Pokémon?-Pregunto Zilver.

En casa..-Su padre respondió -No quiso salir de casa hoy,parecía algo somnolienta,pero de todos modos... Tú acabas de llegar ¿Que tal si vas y te pones cómodo? Cuando te sientas listo puedes venir y comer y festejar un poco..-

-Jaja, gracias... Y gracias a todos en realidad,pero estoy muy cansado,voy a dormir probablemente toda la noche..-

Zilver camino a su antigua casa no sin antes detenerse frente a la fuente de deseos que hay en el pueblo,fue aquí donde vio a su madre por última vez hace mucho tiempo.

Los pasos se volvían más pesados conformé se dirigía a su hogar,se daba cuenta entonces de que las luces estaban encendidas.

-¿Papá volvió a dejar todo encendido para que no se metan a robar?-Dijo Zilver lago risueño,como si le trajera recuerdos de su niñez,sin embargo al llegar a la puerta e intentar abrir se dió cuenta de que estaba cerrado con llave y no solo eso,si no que se podía ver a alguien dentro.

¿¡Acaso se metieron?!-Dijo él golpeando la puerta fuertemente -¿Quien está allí?! ¡Sal ahora mismo!-Dijo alterado,no quería que se fuesen a robar algunas cosas que aún guarda de su madre en su habitación.

La puerta se abrió frente a él y de repente apareció una Gardevoir,a secas,sin más solo era eso,una Gardevoir frente a él..

¿Q-quien es ese poke -Él sacó su pokédex-N-no te muevas...-Él la escaneó pero su pokédex no la detectó,por lo que activó una de las funciones nuevas de la pokédex,no fue entonces hasta que al activar la opción y conectarse a la red internacional que un dato fue tirado en la pokédex.

-Gardevoir: No duda en proteger a su adorado maestro. Su vestido de color blanco puro, que recuerda al de una dama, es la vestimenta de aquel que está dispuesto a arriesgar su vida. Cuando siente que su entrenador está en peligro,utiliza todo su poder psíquico para defenderlo,siendo capaz de crear un agujero negro con todo su poder..-

-Por Arceus....-Zilver alzó la mirada algo aturdido y luego saco una pokeball sin pensarlo mucho,sin embargo...

Gardevoir lo miró y luego de guardarse el silenció por unos segundos,le habló directamente..

-¿Es usted el amo Zilver,no es así?-Dijo ella para luego hacerse a un lado-Su padre me ha hablado muy bien de usted durante todo este tiempo,me temo que él salió pero estará feliz de verle en cuanto vuelva..Por favor,perdone mi grosería y pase adelante..-Dijo ella sonriendo.

-.... ¿Eres el Pokémon de mi padre?-Dijo él ahora más confundido,pues según recuerda,a su padre le gustan los tipo bicho o los tipo eléctrico,no está clase de Pokémon..-

-Asi es,su padre es quien me ha adoptado realmente,pero ha insistido en que no le llamé "amo" o algo por el estilo,así que diré que tú padre es más como un compañero.-

...Espera..-Dijo Zilver quitándose su suéter y dejando su bolso en el sofá.-¿Co-como demonios estás hablando?!!-Dijo él mirando a Gardevoir.

He estado estudiando el idioma,además es más fácil ya que me puedo conectar psíquicamente a las personas y así aprender más rápido ..-Ella sonrió y luego hizo una reverencia -Disculpe si le he asustado ... Permítame ayudarle con sus pertenencias..-

Zilver guardó silencio y la miró tomar sus cosas para luego subir al segundo piso,no podía oír sus pisadas. ¿Está levitando?....

Él se dirigió a la cocina y vió todo muy arreglado,estaba todo muy limpió y además olía delicioso,la comida en la estufa se veía muy rica,además podía notar uns esencia a "mujer" en el ambiente,olía dulce..

-¿Que clase de Pokémon consiguió mi papá?-Dijo Zilver avergonzandose-¿Porque no solo te pusiste a lavar los platos tú solo anciano? Entrenar un Pokémon...¿Para limpiar? Eso sí es algo vil...-

-¿Vas a subir?-Dijo una suave voz casi espectral,ella se estaba asomando por las escaleras esperándole.

El joven caminó hacia las escaleras para luego subir lentamente,se acercó a ella y algo incómodo le miró.

¿Eres el Pokémon de mi padre?-

-¿Hmm? Bueno,eso tiene algo de cierto,pero no soy un Pokémon de peleas... Al menos no fue para lo que me entrenaron.-Ella sonrió y luego lo guío en su propia casa hacia el bañó.

No sé cómo te gusta el agua,así que la deje tibia para tí,traere una toalla limpia para cuando estés listo. ¿Has cenado? Supongo que no,así que iré a hacerte algo de cenar..-

-... N-no tienes que hacer todo eso,enserio... Yo lo haré,no te preocupes..-Él se inclinó pidiendo una disculpa-Mi padre es tan flojo que te entreno para ser una sirvienta,me disculpó y espero poder arreglar esto pronto..-

Gardevoir se quedó en silencio y luego sonrió algo apenada..

No,no.. tú padre no me ha entrenado para eso,a mi me gusta hacerlo,me encanta mantener todo aseado y muy limpió,además de eso, tú padre es muy amable conmigo, él me adoptó en un viaje que hizo hace un tiempo... Mi antiguo entrenador no era una buena persona..-Ella guardó silencio algo decaída al recordar su pasado,luego sonrió y sus ojos volvieron a la vida-Pero tú padre me trajo con él y desde entonces mi vida es algo que jamás pensé disfrutar tanto..-

-¿Tienes nombre?-Preguntó él sin decir nada más.

-Hmmm... ¿Te gustaría ponerme alguno?-Dijo ella mirándole fijamente.

¿No tienes nombre?..-

Aún no...-Ella dió un paso hacia atrás y parecía querer irse.-Date un bañó,yo iré por la toalla...

Zilver la miró marcharse bajando las escaleras lentamente.

Continuará..