POV Magnus

Mi Alec siempre pensando en vez de actuar, tenía razón pero por muy extraño que paresca necesitaba besarlo, sentirlo nuevamente, besarnos de esa forma tan necesitada pero llena de amor que solo nosotros sabíamos.

Con un suspiro y una sonrisa lo dejé ir, sus manos sosteniendo la sábana, sus hombros un poco rojos por lo que acababa de pasar.

Tomé una toalla que estaba cerca y la enrolle en mi cintura.

Aún con la sonrisa en mi rostro salí a buscar mi celular, cuando lo ví la sonrisa comenzó a cambiar por nervios y temor, muchas ideas se me vivieron a la mente tal vez me regañarian, me dejarían de hablar, preguntarían que pasó, me alejarian de Alec.

Aún con temor marqué el número de mi casa y al segundo timbre contestaron.

-¿Bueno? -la voz de mamá era tranquila y eso asustaba.

-Mamá, emm soy yo... Magnus emm yo... -no sabía que decir exactamente.

-¡Magnus! -su voz cambió y se escuchó la voz de Raphael diciendo ¿es tu hijo?  Esto no me gustaba- ¿Donde rayos se supone que estás?

-Yo... Pues... Sigo con Alexander -solté por fin.

-Así que con Alec -había cierto tono en su voz que no supe descifrar y luego la voz de Rapha con un te lo dije con el mismo tono.

-Si, yo... Nosotros estábamos viendo películas y no medimos el tiempo -y no era todo falso era un poco de verdad con partes ocultas- y no se en que momento nos quedamos dormidos

-Está bien -su voz ya era tranquila y eso me relajó, comencé a caminar hacia la habitación, al llegar me senté en la orilla de la cama- ¿vas a venir ya? -no sabía si era pregunta capciosa o que debía contestar.

-Pues... -suspire y giré al rededor de la habitación, la puerta del baño estaba abierta y por un espacio ví a mi Alec lavándose los dientes aún con esa sábana en su cintura- aún quedaban algunas películas que ver -mi vista estaba fija en su torso desnudo- y me gustaría verlas

-Esta bien pero cuando llegues debemos hablar -la voz de mi madre me hizo regresar- Rapha y yo saldremos, te aviso cuando lleguemos a la casa

-Ok los quiero -dije y colgué rápidamente, mi vista pasó a sus hombros y como estos se contraian por los movimientos, de un momento a otro ya me encontraba caminando hacia dentro del baño.

No dije nada, solo puse a su lado y me enjuague la boca; podía verlo en el reflejo del espejo, estaba terminando de lavarse los dientes.

Cuando terminó besó mi hombro, después mi cuello, solo cerré los ojos y ladie mi cabeza para darle acceso.

-¿Que tal todo? -susurró aún en mi cuello.

-Bien -suspire- mejor de lo que imaginé

-¿Debo irte a dejar ahora? -habló en mi oído, sentir su pecho desnudo junto al mío estaba Volviéndome loco.

-No -hablé en un susurro.

-Entonces me baño y te hago el desayuno -besó mi hombro y se alejó.

-Alexander... -mi llamado fue como de necesidad, aclaré mi garganta; no volteé solo lo veía por el reflejo del espejo, regreso y acarició mi brazo.

-¿Qué pasa amor? -besó mi mejilla.

-Nada... -comenzó a trazar caricias en mi espalda- es solo que... -un beso en mi nuca- yo... -su respiración en mi cuello- no puedo más...

Lo sentí tensarse pero antes de que dijera o hiciera algo lo giré dejándolo recargado en el lavabo.

Comencé a besarlo, sus labios eran mi paraíso, nuestros labios se acoplaban de una manera extraordinaria, los besos que empezaron tiernos comenzaron a tomar un ritmo diferente, se convirtieron en besos llenos de deseo y necesidad.

Sus manos trazaban un recorrido de mis hombros a mi espalda baja, me mandaban sensaciones y escalofríos, poco a poco con mis piernas comencé a separar las suyas, con mi muslo comencé a hacer una pequeña fricción con su miembro provocando un gemido por parte de Alec y que sus besos se volvieran más desesperados.

Ahora fue él quién pasó sus manos por mi cuello y me atrajo a él, daba pequeños tirones de mi cabello y eso solo me hacía incrementar la fricción.

-Mmm... Así... -gemía Alec en mis labios, comencé a recorrer su torso desnudo, mis manos llegaron a sus muslos y con ayuda de él lo levanté hasta sentarlo sobre el lavabo.

Me hice espacio entre sus piernas quedando así enmedio, continúe acariciando sus muslos y subiendo mis caricias al nudo de la sábana; Alec de un momento a otro mordió mi labio inferior haciendo que mis manos actuaran con mayor rapidez despojandolo de la sábana, un sonido de sorpresa salió de sus labios pero yo los atrapé con los mios.

Mis manos sin pensarlo se dirigieron a su miembro, iniciaron a acariciarlo lentamente.

-Aah... Mm...Magnus -escucharlo gemir mi nombre me volvía loco.

POV Alec

Estar en esta posición era excitante, ahora sin la sábana me sentía liberado, sentir su mano cerca de mi miembro me hacía estremecer y querer más.

Los besos continuaban, nuestras respiraciones eran agitadas, nuestras caricias dejaban rastros calientes por donde pasaban, su mano lentamente envolvió mi miembro masturbandome lentamente, se sentía de maravilla pero necesitaba que incrementara el ritmo, necesitaba que esto durara pero con un ritmo y posición diferente.

Bajé mis manos a su cadera y quité la toalla de ahí, ahora solo estábamos él y yo sin nada que estorbara.

Magnus abandonó mis labios y comenzó un recorrido por mi cuello deteniéndose solo en zonas frágiles que él aprovechaba para succionar y morder; mis manos se enterraban en sus hombros o en sus brazos.

Comenzó a descender por mi pecho, su mano seguía incrementando el ritmo Volviéndome cada vez más loco.

-Ah Magnus -solo su nombre salía de mis labios y es que solo él estaba en mi mente, nadie más.

-Me gusta -seguio besándome pero ahora con su mirada fija en mi- como suena -su lengua recorriendo mi estómago- mi nombre de esa manera -mi respiración era irregular pero quería esto más que nada.

-Magnus... -no lograba articular otra cosa.

-Así -sonrió excitandome de sobremanera y aún con su mirada fija en mi fue introduciendo mi miembro en su boca.

-Ahh... -sentir su boca me hacía explotar de placer, se me nublaba la vista y solo el deseo era el que estaba al mando.

Mi mano derecha se enredó en su cabello y la otra se aferró a la pared, comencé a sentir mis piernas sin control, las sentía livianas pero a la vez tensas, mi respiración era irregular y alterada, solo gemidos salían.

Magnus seguía en esa labor mientras yo me sentía desfallecer.

Necesitaba sus labios así que con el poco autocontrol que tenía comencé a levantar su barbilla tratando de alejarlo de su labor, dos últimas acciones y Magnus dejó mi miembro y volvió a mis labios.

Los besos eran más desesperados, nos necesitabamos, tal vez yo más que él.

Enrede mis manos en su cabello, sus manos aferradas a mis hombros, nuestras lenguas en un duelo amistoso, solo el aire era capáz de separarnos y dar paso a los jadeos.

-Te... amo -hablé entre ellos- te amo

-Y yo... Te amo a ti -una vez dicho nuestros labios se juntaron otra vez, pero ya sin tanta lujuria, ahora predominaba el amor que nos teníamos.

Pero quería seguir y que no parara así que lentamente me fuí bajando hasta quedar frente a él; con mi pierna comencé a ejercer una pequeña fricción en su miembro provocando que soltara gemidos de placer que yo acallaba con mis labios.

Sus manos descendieron por mi espalda hasta mi cadera haciendo pequeños apretones provocando sensaciones nuevas en mi.

Fuí descendiendo mi mano derecha por su torso desnudo, pasando a su cadera, su vientre bajo hasta encontrar su muy grande erección y la envolvi en mi mano comenzando a masturbarlo de poco a poco.

-Ahh... Mm... Alec... -no me gustaba que él ocupara mi diminutivo, amaba mi nombre completo en sus labios porque solo él lo decía, solo él me llamaba así, era una manera inexplicable, pero solo porque lo deseo más que nada no pararé esto.

Mordió mi labio y con una mano imitó lo que yo hacía pero con mayor ritmo haciendo que yo lo aumentara, lo necesitaba, lo necesitaba ahora.

-Te... Necesito... -logré decir y Magnus bajó el ritmo.

-¿Estas... seguro? -preguntó un tanto confuso.

-Más que nada -succione su labio inferior.

-¿No nos ibamos a bañar? -habló divertido, no creo que sea capáz de parar esto y si lo era no se lo permitiría.

-Tienes razón -comencé a besar sus pómulos y descendi por su cuello realizando succiones y mordiendo de vez en vez, cuando ladeó su cabeza sabía que lo tenía pero para asegurar incremente el ritmo de mi mano.

-Ahhh... Mm... -gemidos sin control comenzaron a salir de sus labios enterrando sus dedos en mi espalda.

Sin parar comencé a caminar llevándolo a la regadera, su respiración era más agitada de lo normal, por un rabillo del ojo pude notar su cara llena de placer, sus ojos cerrados disfrutando la acción.

Así con base a besos entramos en la ducha y con la mano libre comencé a abrir la llave del agua.

Volví a sus labios pero él succionó mi lengua provocando que perdiera el control recargadolo en la pared del baño.

-¡ALEXANDER! -gimio, mordió mi labio y enterró sus uñas en mi espalda.

El agua comenzó a caer llenando el baño con vapor, Magnus comenzó a caminar llevándome al chorro de agua.

El agua comenzaba a caer por nuestros cuerpos, sus manos comenzaron a bajar colocándose en mis glúteos apretando suavemente, nuestros besos eran constantes y húmedos hasta que sentí un dedo dentro de mi.

-Ahhh... ¡MAGNUS! -mi respiración se disparó, mi mano dejó el miembro de Magnus dirigiendo ambas a su cuello y cabello volviéndo el beso más salvaje.

Me acostumbre a la intromisión hasta que sentí el segundo y como Magnus me preparaba, yo lo atraía más a mi, juntaba nuestros labios aunque ya no fuera posible.

El agua nos empapaba completamente haciendo más fácil el recorrido de nuestras manos y que la preparación fuera más rápida.

-Te Amo -susurró a mi oido y mordió mi lóbulo.

-Mm... -gemi al sentir sus dientes tirar de mi lóbulo y sus dedos más dentro de mi.

-Lo se -sonrió y fue sacando lentamente sus dedos de mi.

-Debemos bañarnos -hablé un con la voz entrecortada y separándome lentamente de él.

Giré por el shampoo pero sentí sus labios en mi cuello, su pecho pegado a mi espalda, sus brazos alrededor de mi pecho y su miembro cerca de mi entrada.

-Deberiamos -susurró en mi cuello y sentí como poco a poco el agua dejaba de caer- pero yo también te necesito -no dijo más y mordió mi cuello, pasé mis manos alrededor de las suyas como si estuviera abrazándome a mi mismo y entrelace nuestros dedos.

-Hazlo -susurre aún con los ojos cerrados, sentí como una mano me iba soltando y su pelvis se alejaba un poco.

Inconscientemente me incliné hacía el frente y fue ahí que lo sentí, Magnus colocó su miembro en mi entrada entrando lentamente en mi.

-Mmm... -apreté su mano y al instante la otra llegó a mi otra mano entelazando nuestros dedos mientras entraba más en mi.

Una vez dentro esperó a que me acostumbrara besando mi cuello y mi espalda.

-Si quieres que pare... -habló contra mi hombro.

-Muévete -cambié la platica porque lo quería y no pensaba detenerme.

Lento salió y volvió a introducirse en mi, el ritmo iba subiendo volviendo sus embestidas más rápidas.

Dolía pero el placer cegaba el dolor y dejaba paso al deseo; gemidos por parte de ambos y los choques llenaron el ambiente.

Dejé sus manos cuando golpeó mi punto.

-¡Por el Ángel! ¡Magnus! -llevé mis manos y frente a la pared.

-Me gusta esa expresión -comenzó a succionar en mi nuca.

Sus manos llegaron a las mías entrelazandolas y haciendo sus embestidas más certeras y duras.

-Ahh... Mmm...  -no era capáz de articular una palabra coherente- más... Ohh... -mis caderas comenzaron a llevar su ritmo, heche mi cabeza hacia atrás- más rápido... -sus manos abandonaron las mías y se colocaron en mi cadera tomándolas para impulsarse.

-Alexander... -susurró y volteé a verlo, sus ojos cerrados disfrutándolo tanto como yo.

-Te amo -susurre tan bajo por mi respiración acelerada, sus embestidas seguían dando en el punto exacto.

Lo sentí estremecer y yo comencé a sentir ese cosquilleo en mi vientre bajo.

Magnus bajó el ritmo pero las embestidas eran más profundas, gemidos por parte de ambos se hicieron presentes.

-Te amo... -se abrazó a mi- me encantas mi amor -su voz y sus palabras me hacían estremecer.

-Magnus yo... -estaba a punto de terminar, de llegar a la cima.

-Yo también amor -lo dijo en un jadeo.

Tres estocadas más y Magnus terminó en mi y yo contra su mano y la pared.

Nuestras respiraciones eran irregulares, Magnus aún estaba en mi y no me importó, giré mi cabeza para besar a mi Magnus a la persona que me hacía sentir completo y así lo hice lo besé con cero pasión solo amor, un amor tan grande y correspondido.

Poco a poco fue saliendo de mi y me giró para continuar el beso.

-Te amo -hablé en sus labios- te amo tanto

-Y yo te amo a ti mi amor -habló y el beso continuó.

-Creo que ahora si es tiempo de bañarnos -hablé pegando mi frente a la suya.

-Estoy totalmente de acuerdo -sonrió y abrió la llave de la regadera.

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Hola! ¿como estan?

🎶No andaba muerta estaba de parranda 🎼😂

Disculpen la ausencia que no se si se notó pero fue la actualización que más tiempo tardó.

Fue una semana ¡Una semana! 😱lo lamento en verdad pero pasaron tantas cosas...

1° Aquí en México tembló con intensidad de 8.2 el Viernes.

2° Sábado y Domingo tuve temperatura, juraba que moriría pero no, aún ando por acá.

3° Estuve en semana de exámenes, fin de parcial, primer parcial en Universidad, proyectos, lecturas, actividades, etc.

4° Y creo que la más importante, no tenía imaginación para crear el capítulo, me había quedado en 800 el Jueves pasado y hoy lo terminé; pero sobretodo estaba pensando en el destino de esta historia y creo que ya está a punto de acabar. ¿Por qué? Porque siento que ya son muchos capítulos y l@s estoy aburriendo.

Espero entiendan las razones y una disculpa, l@s extrañé y espero la semana que entra volver al ritmo diario.

También aprovecho para agradecer por el apoyo que me han brindado y por hacer crecer esta historia que inició como algo "x" pero que ustedes convirtieron en algo especial.
🎊¡Ya somos 13.3k vistas! 🎉

Gracias por todo.