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Flashback
Estaba comienzando invierno, mi época favorita del año, me encanta el invierno pues puedo estar en casa con un libro frente a la chimenea y un chocolate caliente.
Eran los últimos días del colegio y todos estaban como locos buscando libros, profesores, actividades y papeles; me daba risa verlos así, por eso yo me mataba todo el semestre para que al final nada fuera difícil.
Caminaba con mi libro favorito en manos, perderme en ese mundo era increíble, leer y hacer que tu imaginación viaje a mundos que no puedes visitar, no todo es imposible.
Yo no veía pero sabía a donde iba, ese lugar lleno de paz, a ese hermoso jardín que me permitía estar sola, sola pero con un sinfín de naturaleza que ver.
Contaba con todo menos con que un tipo se interpusiera en mi camino.
-Disculpa -dijo al momento de chocar conmigo.
-Solo deberías fijarte -dije levantando la mirada y encontrándome con unos ojos un poco rasgados y gris platinado, jamás había visto unos ojos así- yo... Perdón
-No tienes razón -rasco ese cabello platinado que tenía, viendolo bien estaba un tanto más alto que yo, complexión delgada, su sonrisa era calida y sincera, se veía tranquilo pero sobretodo muy guapo- por cierto me llamo James, James Carstairs
-Theresa Gray -extendí mi mano pero él negó divertido y se acercó a mi para depositar un calido beso en mi mejilla.
No sabía que hacer estaba nerviosa y mis manos sudaban, pero me gustaba su presencia.
-Bien Tess ¿a donde te dirigias? -pregunto después de un rato en silencio.
-Yo... A... El jardín -me sentía tonta al no poder articular nada coherente- ¿y tú? ¿a que maestro buscas?
Él comenzó a reír, hasta su risa era hermosa- ¿crees que soy de los que deja todo para el final? ¿tan malo me veo?
-No yo... Perdón -que tonta fuí, no sabía que decir ahora.
-¿Así que te gusta leer? -preguntó señalando mi libro.
-Me encanta
-Bueno yo no leo demasiado, lo mio es la música, el violín para ser específico -¿músico? Debía ser broma.
-¿Hablas en serio? -dije maravillada.
-Si, de hecho iba a practicar -señaló atrás de mi.
-Oh entonces no te quito tiempo -iba a irme pero me tomó del brazo.
-¿Te importaría si practico mientras lees? Me gusta tu compañía -esto tenía que ser un sueño- se que suena tonto, llevamos un rato juntos pero...
-Siento lo mismo -admití- me gustaría que practicaras mientras leo
-¡Bien! Te sigo -avanzó- apuesto a que tu lugar es fantástico.
Caminamos hasta llegar a ese hermoso jardín, en ningún momento abrí mi libro como siempre que estoy con alguien Jem tenía toda mi atención.
-Bien aquí es -señalé tratando de que no fuera poco para él.
-¡Es hermoso! Sabía que tú tendrías buenos gustos -guiñó un ojo y me dedicó esa hermosa sonrisa que lo caracterizaba.
-Gracias -sabía que estaría sonrojada.
-Bien, comencemos -dijo sacando su violín mientras yo me sentaba debajo del árbol para comenzar a leer.
A los pocos minutos él comenzó a tocar una hermosa melodía, no recordaba el nombre pero era de las que normalmente usaba para leer.
En verdad era bueno, su música te transportaba al lugar que quisieras estar, en mi caso, su música me hacía quererme quedar así todo el tiempo posible.
Al final terminé por recargarme en el árbol, cerrar mi libro y lo observe, observé cada detalle de su rostro, cada sombra que su cuerpo brindaba, cada movimiento que hacía al tocar, su sonrisa al sentir la música, sus ojos cerrados concentrándose en cada nota.
-Eso es trampa -habló divertido, no me dí cuenta en que momento abrió los ojos y me miraba.
-Y-yo... ¿por que? -me había agarrado desprevenida.
-Observarme no era el trato -me sonrió pero sin un rastro de malicia.
-Tocas genial -fue lo único que logré decir.
-Muchas gracias Tess -Tess nadie me decía así, siempre era Tessa pero él tenía una forma de decir mi nombre que realmente me encantaba.
-No hay que agradecer James
-Dime Jem -dijo casual.
-Jem -confirmé.
-Debo irme Tess pero me gustaría volver a verte -no sabía como estar, si triste por que se va o feliz por volverlo a ver.
-A mi también me gustaría -traté de ocultar mi emoción.
-Mañana aquí -sonrió- a las 9:00 ¿te parece?
-Me parece perfecto -dije levantándome, pero antes de hacerlo él se acercó y me ayudó- Gracias
-Nos vemos mañana -aún con mi mano entre las suyas se acercó y depósito un beso en mi mejilla, sin decir más se alejó.
Pude admirar su forma de caminar, de vestir y como tomaba su violín, como si fuera lo más valioso para él.
Sin saber porque, ya tenía una sonrisa gigante en mi rostro, deseaba que llegara mañana.
*****
Todos los días nos veíamos en el mismo lugar, era nuestra cita sin planearlo, no había día que alguno faltara.
Sábados y Domingos quedábamos en algun lugar central, a veces me acompañaba a la biblioteca pública, otras veces él me llevaba a conciertos o a sus ensayos.
No parábamos de hablar sobre temas de interes, algunos con sentido y otros no tanto.
La pasaba tan bien con él, jamás me aburría o llegaba a cansarme.
Llevamos 3 meses conociendonos y puedo decir que estoy totalmente enamorada de él, de lo que es y quién es.
Me alegraba cada que un mensaje llegaba, cada llamada, cada momento juntos me hacia querer congelar el momento.
Una semana antes de iniciar las clases me llegó un mensaje de buenas noches como era costumbre.
Buenas noches Tess.
Que tengas lindos sueños.
Oh! Lo olvidaba, ¿te gustaría acompañarme a un lugar mañana?
Jem
Su pregunta me hizo sonreír ¿a caso no nota que a donde vaya yo iré?
Me agrada la idea
Mañana nos vemos
Descansa Jem
Tessa
Apagué el celular y me dispuse a dormir, dormir para volver a soñar con Jem.
***
-¡¿Una librería?! -habíamos caminado por un rato, hablando de cosas sin importancia hasta que llegamos al lugar que Jem quería.
-Pensé que te gustaría -sonrió sincero, siempre pensando en mi, en mis gustos.
-¡Me encanta! -grité y lo abracé- gracias
-Entremos -se escuchaba nervioso pero lo ignore, esta era la librería más grande de todo Londres, siempre había querido venir y él lo sabía.
Al entrar quedé maravillada por la cantidad de libros que habían, por la variedad, los colores, los aromas, por absolutamente todo.
Al llegar al centro de la librería algo llamó mi atención; justo en el centro había una mesa con un libro único al centro, me acerque con Jem a mis espaldas.
Lo tomé en mis manos, era un poemario, el poemario de Jem; él me había dicho que escribía poemas solo cuando estaba inspirado pero que nadie los había leído, yo insistía pero él no me dejaba pero ahora verlo aquí me confundía.
Volteé a verlo confundida, él solo sonrió y asintió; volví mi vista al libro y abrí en la primera página.
Querida Tess:
Espero ahora entiendas porque no podías leerlos.
Sabes, nunca me había sentido así por alguien, en tan poco tiempo te has metido en lo más profundo de mi corazón.
Verte con un libro nuevo cada vez me hacía verte más, tus expresiones que hacías cuando leías alguna parte.
Este poemario es para ti, lo escribí pensando en ti así como una melodía.
Tess tu eres mi musa, mi inspiración y nada me gustaría más que aceptaras estar conmigo.
Theresa Gray ¿Quieres ser mi novia?
Algunas lágrimas brotaron al leer la dedicatoria, volteé a verlo y él sonreía un poco sonrojado.
Me lancé a sus brazos con lágrimas en mis ojos.
-Si, si quiero -susurraba en su oído una y otra vez.
-No sabes lo feliz que me haces -susurró, me envolvió en sus brazos, me levantó y me hizo girar.
-Gracias -dije al momento en que me bajó, él pasó su mano por el contorno de mis ojos y limpió las lágrimas que habían salido.
-Gracias a ti por aceptarme -dejó una mano en mi mejilla.
Su tacto era calido, el ambiente perfecto, un aroma inigualable y su compañía, la compañía de Jem, mi novio.
Poco a poco se fue acercando, su sonrisa tímida, su aliento golpeando al mío, nuestras respiraciones al compás, sus lentamente se posaron en los míos.
Un movimiento lento, nuestros labios encajaban perfectamente, el momento se congeló, solo eramos él y yo.
Él y yo contra el mundo, él y yo en NUESTRO MUNDO.
****
Hola! Buenos Días!
Aquí está el capítulo de ayer creo que este se va a alargar un poco.
Estoy escribiendo la siguente parte, espero subirla hoy mismo.
Espero les haya gustado.
Espero y nos podamos leer en un rato. 😘
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