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XX

Capítulo 20.

La Ouíja.”

 

«Sentimiento de impulso.»

Lunes.

No es por nada pero creo que el fin de semana se fue demasiado rápido.

Y odio los lunes porque significa que tengo que volver a ir hacia la facultad y eso significa más trabajos y exámenes. Mi cerebro no puede con tanto, dios estoy contando los días para que nos den las vacaciones y así, liberarme de la Universidad aunque sea por un mes y medio.

Aunque por otro lado la Universidad me ayuda a distraerme de todo lo relacionado con Vegeta. Joder ni siquiera quiero pensar en lo que pasó anoche. Ruidos, oscuridad, soledad, suspenso, y luego ¿Qué? El despertar del espíritu tormentoso en el cuerpo del experimento que mi papá había creado meses atrás.

«¿Y ahora que pasará

Bueno es estúpido que yo me esté preguntando lo que pasará después. Es obvio que se vengará y tratará de recuperar todo lo que le quitaron. Yo se perfectamente eso.

Rayos no puedo creer que en verdad me preocupé por él al verlo ayer tirado en el piso. ¿Pero que rayos me sucede? ¿Por qué me sentía angustiada al ver como los cables se implantaron en sus brazos? ¿O la mascarilla en su rostro, o que papá llenara la incubadora de agua? No bulma, no puedes sentir preocupación por él. Sólo lo ayudarás a Goku y a él nada más bulma, nada más.

Sin más preámbulo me levanto de la cama para dejar de pensar. Froto mis ojos para acostumbrarme a la luz del día. Estiro todo mi cuerpo y enseguida escucho como mis huesos crujen. Bostezo un par de veces y siento un mal sabor de boca lo que significa que me tengo que cepillar. Volteo a un lado para ver la hora y me doy cuenta de que son las: 6;45 AM. Aún es temprano.

Camino con pereza hasta el baño y así poder cepilarme y ducharme.

[...]

—Adiós papá, cuídate— Lo abrazo con mucha fuerza mientras le sonrío.—. Te Adoro, amo, y quiero mucho.—Le beso la mejilla, y él hace lo mismo antes de recordarme el sermón de que tengo que cuidarme mucho, etc..etc.. Una vez que asiento a todo lo que dice me da otro beso en la mejilla y se va al trabajo. Cierro la puerta detrás de mí y camino sin preocupación hasta la cocina para prepararme el desayuno.

Hot cakes.

Tomo los utensilios necesarios para empezar a prepararlos. Tarareo una canción mientras empiezo a mezclar los ingredientes. Me siento tranquila esta mañana gracias a que ayer en la noche recibí un mensaje de mi grupo de clases y notificaron que la profesora de anatomía no podría asistir, por lo que mi segunda clase que es Histología y empieza a las 9;00 Am. Y aún falta unas horas para que yo me vaya a la universidad. Comienzo a batir la masa para conseguir una buena consistencia, me gusta cocinar. Admito que todos estos días he estado algo ocupada, pero ahora que tengo tiempo libre puedo tomarme el tiempo en la cocina, mi mamá fue quien me enseñó a cocinar desde pequeña, cocinaba realmente delicioso y mi padre dice que cocino con el mismo sazón que el de mi mamá, y eso si es un alago. Suspiro al hablar de mi madre, la extraño mucho, si estuviese aquí juraría que estaría a mi lado ayudándome a preparar los Hot cakes. Pero no, ahora solo puedo ver sus fotografías en los marcos, y eso duele...y mucho.

Por un momento recuerdo el día en el que bulma y yo decidimos jugar con la Ouíja para tratar de invocar al espíritu de mi mamá o también esperaba (por lo menos yo), invocar al espíritu de Goku. Pero resultó ser (Que ahora me estoy acordando) Goku se hizo pasar por mi madre y nunca le reclame por ello. Eso estuvo mal, muy mal. Eso no se hace, yo realmente estaba esperanzada de que fuese ella, hablarle, despedirme...pero al darme cuenta que respondía con palabras incorrectas supe que no era ella. ¿Será que mi madre pudo alcanzar la gloria? ¿Fue por eso que no pude comunicarme con ella por ese medio? De igual forma Goku hizo muy mal en esa parte y nunca se disculpó por haberse pasado por mi mamá.

—Tonto...—Murmuro, con el ánimo un poco más bajo. Salgo de mis pensamientos al ver la masa perfectamente batida. Así que sin esperar mucho comienzo a vertir un poco de la masa en el sartén.

Escucho un ruido detrás de mí y me volteo a ver que es lo que se trata. Me sorprendo un poco al verlo a él a unos cuantos pasos detrás de mi mirándome, o más bien observándome como se le ha hecho costumbre al parecer.

Tan expresivo como siempre;— Pienso sarcástica.

Volteo mi rostro hacia lo que estoy haciendo, dándole la espalda a Goku.— ¿Desde hace cuanto estás ahí?— le pregunto mientras volteo mi Hot cake. La verdad no le estoy prestando mucha atención a Goku, el recuerdo del que se hizo pasar por mi mamá me puso de mal humor.

Lo Suficiente para escucharte susurrar. No te ves de buen humor. — Contesta Goku desde donde está. Yo sigo dándole la espalda. Me siento enojada y es por su culpa, sé que ya pasó eso pero no debió de hacerlo.

«Aunque ya es un poco tarde para reclamarle eso ¿No, milk— Interviene mi subconsciente. Sigo concentrándome en el Hot cake ignorando la voz de mi cabeza.

—No lo estoy.—respondo con simpleza. Camino hasta la alacena para tomar un plato y regresar donde estaba sólo para sacar el Hot cake del sartén y ponerlo en el plato. Vierto otro poco de la masa en el mismo para así preparar el segundo. Sólo es cuestión de segundos para ver a Goku aparecerse frente a mí con esa mirada oscura, penetrante y abrumadora observarme fijamente, sin perder ningún rastro de lo que hago. El solo hecho de aparecer frente a mí me asustó, tanto que la paleta con que batí la masa se me cayó de la mano.

— ¡¿Pero que te sucede?! ¡¿Quieres provocarme un infarto acaso?!— pregunto exaltada con la mano en el pecho, mi pobre corazón latía a mil por hora. Respiré fuerte para tratar de calmarme y levanté la paleta que se encontraba en el suelo. Volví a mirarlo a la cara molesta y él sólo seguía observándome. Parece enojado, bueno siempre lo parece si nunca endereza su entrecejo. Además de que su forma de mirar es más intimidante, a pesar de que sus ojos reflejan dolor y angustia, hoy su mirada parece más intensificada.

Anoche no estabas así. ¿Por qué estás molesta?— pregunta sin dejar de observarme. Yo le doy vuelta a la masa de forma redonda que se cocina en el sartén. Lo miro aún molesta pero no le respondo.— ¿Qué tienes?— Vuelve a preguntar al no obtener una respuesta de mi parte, yo sigo callada ignorándolo. O tal vez es mejor decirle y ya, respiro un poco antes de hablar.

— Goku, tu nunca te disculpaste.— le respondo una vez que mi segundo Hot cake esta listo, lo saco del sartén dejándolo en el plato, y luego apago la hornilla. Subo la mirada para verlo y su mirada se torna en una confusa, es claro que no sabe de lo que le hablo.—; La primera vez que bulma y yo jugamos con aquella tabla...

Si recuerdas que yo me manifesté en tus sueños la noche antes ¿No? ya sabias que yo iba a aparecer.— Me interrumpió. Yo lo miré un poco mal porque no me dejó terminar de hablar.

— Si, pero no sabía cómo. Tú fingiste ser mi madre Goku y si no fuera porque respondiste mal a mis preguntas no me hubiese dado de cuenta que no eras ella. Yo quería hablar con ella, quería despedirme porque nunca...—La voz se me trabó, no pude continuar por el nudo en la garganta, mi mandíbula temblaba e hice un esfuerzo para no derramar lágrimas.

Milk, jamás te hubieras podido comunicar con tu madre.— Confiesa y yo lo miro sin entender.—. La Ouíja es un método de comunicación con aquellos espíritus que se encuentran desesperados por ser escuchados, o también es otro método de comunicación con los entes oscuros como los demonios, milk.— No aparto mis ojos de los suyos.— Tu madre jamás llegaría a parar a un lugar como ese.

—Pero ella murió en un accidente...

Si, pero ella no pertenece ahí— Dejó de hablar por un segundo mientras pensaba en las palabras correctas—. Mira es un poco complicado de explicar con palabras, pero sólo debo decir que el alma de madre es de aura inocente y pura. Ese tipo de almas solo van a parar a un buen lugar donde podrán ser libres.— Me quedo callada con todo lo que me ha dicho. Sus palabras extrañamente provocaron un revuelco en mi ser, y sin saberlo una pequeña sonrisa se asomó en mi rostro.—. Pero si, estuvo mal haberme hecho pasar por alguien muy importante para ti, y me disculpo por eso milk.— Añade, y por la forma en que lo dice sé que es de sinceridad, algo en mi corazón me lo dice y le creo.

— Goku ¿Sabes por qué estudio la carrera de medicina? — Él niega con la cabeza. Me mira entre confundido e expectante por saber la respuesta—. Bueno además de que a mí me gusta, a mi madre también le encantaba esa carrera, a ella le parecía algo hermoso poder ayudar a las personas y por eso quería estudiar medicina. Pero lamentablemente ella no estaba bien económicamente y el sueldo de mi abuelo no le alcanzaba para poder pagar los estudios de mi madre. Por lo que ella fue obligada a dejar los estudios y trabajar para poder subsistir, hasta que un día conoció a papá, un alto, apuesto, y muy valiente policía, se enamoraron y decidieron vivir juntos, años despues nací yo. Pasaron los años y éramos una pequeña pero hermosa familia, hasta que una noche, luego de que mi madre saliera de un supermercado después de haber hecho las compras...un auto venía a toda velocidad y...— No pude continuar hablando, les juro que no, las lágrimas nublaron mi vista y el nudo en la garganta me impidió seguir contando aquella desgracia. Las dejé salir, dejé salir todo el dolor que me abrumaba en ese momento. ¡Dios! ¿Por que tuvo que ser ella? Era tan linda y buena. Me eché a llorar sin importar que Goku me viera, yo la necesito aún, deseo tanto que ella estuviese aquí con nosotros, pero lamentablemente la vida tuvo otro destino para ella. Mi pecho duele, quema.

¿Por qué la vida se empeñó en arrebatárnosla tan rápido?

Sólo es cuestión de segundos para sentir unos brazos rodearme y es cuando me doy cuenta de que es Goku quien ahora se encuentra frente a mí abrazándome en forma de consuelo, me sorprendo un poco pero en este momento no me importa y lo abrazo de la misma manera, esto es lo que necesitaba, empiezo a llorar más fuerte en su pecho, sin importar que esté marcado con un pentágono y tenga sangre seca.—; Llora.— Le escucho decir. — Desahogate milk, saca todo lo que llevas reprimido y verás que te sentirás mejor. Créeme. — Sigo llorando sacando todo lo que llevo dentro, los recuerdos de mi madre se instalan en mí mente como Flashback y cubro mi rostro, ¡¡Joder mamá, Te quiero tener devuelta!! Grito por dentro, ella era la persona que yo más amaba en el mundo, y ahora no la tengo. Siento un ardor en mi muñeca y fijo mi vista en la marca de Goku, se ve como si él me la hubiese hecho recientemente como a un tatuaje. Levanto mi vista para verlo y lo encuentro con la mirada perdida, reflejando más dolor y desesperación que antes, aunque con una pizca de nostalgia. Y es ahí donde pienso aún en lágrimas «¿Goku estará pensando en sus padres

Es algo lógico ya que desde que está aquí jamás lo he escuchado hablar sobre ellos, Expresarse o aunque sea desahogarse sobre el tema..él se lo resguarda.

—¿Te sientes mejor?— Pregunta sacándome de mis pensamientos. Limpio mis lágrimas y asiento como respuesta. Tal vez Goku no sea tan idiota, muerdo mi labio para no reír de mi propio comentario.— Muy bien. Ahora come o se te enfriaran tus panqueques.— dicho esto rompió el abrazo dejándome una sensación de repentina soledad, se alejó unos pasos hasta estar a una distancia prudente y se voltea dándome la espalda—; Saldré, le haré una visita rápida a Paragus.— Avisa. Estaba a punto de irse pero antes lo llamé por su nombre deteniéndolo, se voltea esperando a que hable.—; Mira Goku, yo saldré de la universidad a las 12:00PM. Luego de eso pasaré a comprar unos tulipanes para dejárselos a mi madre en su tumba...tú...¿Me acompañarías? — Le pregunto esperando su respuesta, no quiero ir sola, no quiero que vuelva a pasarme lo que me pasó la última vez que fui sola.

Allí estaré.— Responde sin más antes de desaparecer.

[...]

«Joder Goku no te le acerques así a ella, lo prometiste, algo que no va a suceder y ahora te encuentras abrazándola y consolándola.  Joder, otra vez actuaste por impulso, sólo la necesitas para realizar tu cometido es todo Goku, todo—Reprendió su voz interna con desaprobación, aquel día en la piscina cuando le limpió el labio a milk prometió no volver acercársele de esa manera. Tiene que dejar actuar impulsivamente

el espectro apareció en lo que parece ser la sala de juntas de los ejecutivos. La sala se encontraba completamente vacía, miró a sus alrededores para confirmar que no había nadie. Caminó hasta salir de la sala y encaminarse hasta la oficina en donde seguro estaría Paragus presumiendo ser el jefe y restregarle a los demás su puesto.

«Inepto.»— pensó con desagrado.

Desapareció de ese piso, reapareciéndose en el piso donde se encontraba la oficina del director de la empresa. Giró su vista hacia atrás y pudo ver el ascensor dorado, lo que nunca imaginó fue que por esas puertas saliera el hermano menor de Vegeta, caminando calmadamente a una sola dirección; La oficina de Paragus.

Un revuelco en su corazón acompañado con la nostalgia y tristeza lo abordó en ese momento. Unas tremendas ganas de correr y abrazarlo comenzaron a invadirlo. Tarble...hace tanto tiempo que no lo veía, se ve más hombre e incluso más alto. Tarble...— Suspiró profundo para no actuar impulsivamente otra vez. Observo con tristeza como el susodicho se dirigía hacia aquella puerta roja donde detrás se encontraba Paragus, pero antes tarble detuvo en seco su andar y volteo la mirada hacia su izquierda, donde se podía observar un cuadro «Diferente a los demás cuadros coloridos» sobre nada más y nada menos que el fundador de la empresa; Vegeta Ouij. Un retrato donde se reflejaba el rostro del imponente hombre a través del lienzo de la pintura. Goku pudo notar la expresión de tarble al ver la pintura de Vegeta, su mirada. Se había vuelto más decaída, triste, nostálgica.

— Hermano... —Susurró tarble, mientras observaba con mucho detenimiento el cuadro.—; averiguaré lo que te sucedió, lo juro hermano, y también averiguaré la razón por la cual nuestro tío es ahora el jefe, yo jamás creí esa versión de que Goku le pasó su cargo. Algo no me cuadra, y pronto sabré lo que es.— Propuso decidido, Tarble también estaba en contra sobre lo de Paragus, siempre supo que era alguien demasiado egoísta y ambicioso, no se preocupaba por nadie más excepto por él mismo. Tarble volvió a caminar al frente hasta llegar en donde se encontraba su secretaria, quien al verlo se sorprendió mucho.

—Joven Tarble...—Susurró larissa sin poder creerlo—, Usted por aquí...— Más sorprendido estaba el espectro al ver a Larissa, su antigua secretaria, no podía creer que aún después de tanto tiempo siguiera laborando en esta empresa.

—Hola larissa, me da gusto verte a ti también.—Saludó tarble con una sonrisa. La chica cambió la expresión de asombro por una de felicidad.

—¡Que bueno que esté bien y devuelta! —Chilló con emoción la secretaria. Tarble rió un poco antes de hablar y preguntar por Paragus, Larissa le había comentado que se encontraba libre, sólo revisando algunos papeles sin demasiada importancia.—; Debo anunciarte.— habló la secretaria antes de tomar el teléfono fijo para marcarle a su jefe.

—No, espera...quiero que sea sorpresa, ¿Podrías no anunciarme larissa, por favor?

—Pero...

—Gracias larissa sabía que entenderías, eres la mejor nunca cambies. ¡Eres un sol! —Expresó tarble mientras se alejaba lentamente de allí.

—Pero yo debo de...—Suspiró—, Ay, joven tarble. Usted nunca cambia.—Rió por el comportamiento de él.— Muy bien pasé, no lo anunciaré.— Rió otro poco antes de volver su vista hacia la computadora. Tarble llegó a aquella puerta roja y sin siquiera tocar, abrió la puerta adentrándose en ella.

«¿Qué hace Tarble aquí?»—Se preguntó Goku. Y sin dudarlo mucho Él también entró a la oficina. Sólo tuvo que traspasar la puerta para no hacer ruido al abrirla como Tarble lo había hecho. Si algo presentía el espectro, era que Tarble tendría una seria conversación con su tío.

Paragus tenía puesto su vista dentro de unos papeles, muy concentrado, Tarble lo miraba sin una pieza de gracia, a leguas se notaba que no le simpatizaba su tío. No lo quería.

—Larissa ¿A caso te he dicho que pases?— Preguntó Paragus sin siquiera mirar.—, Sabes muy bien que... — Se quedó callado al levantar la vista y darse cuenta de que no se trataba de su secretaria, sino de su sobrino.—,¿Tarble?— Preguntó confundido e impresionado de verlo allí parado justo delante de él con los brazos cruzados y mirándolo profundamente. — Estás bien...—Susurró con algo de desagrado—, ¿Qué haces por aquí?— Goku pudo darse cuenta por el tono con que dijo la pregunta, que sonaba más como una queja o reproche.

— A mi también me da gusto de verte sentado en esa silla.— Enfatizó la última palabra con disgusto.—. Te ves cómodo, relajado y poderoso. Dime ¿Acaso ya te encuentras feliz y satisfecho por lograr lo que querías?— Soltó la pregunta mientras se sentaba en uno de los cómodos sofás individuales, sin despejar su vista del rostro de su tío.

—Pues que te digo tarble..No fue fácil pero tuve un resultado muy satisfactorio.— Una escueta sonrisa se asomó en su rostro causándole repulsión a Tarble y a Goku.

«Miserable infeliz»— Pensó Goku.

«Maldita escoria de dos patas»— Pensó tarble.

— Te digo que el primer año como director de la empresa no fue fácil, fue algo duro, pero poco a poco las cosas se fueron moldeando a mi modo y ahora no me quejo para nada.— Confesó Paragus mientras se acomodaba en su asiento, mirando con un aire de superioridad a Tarble.

Las ganas de acercársele a Paragus, golpearlo muy fuerte en la cara hasta dejarlo muy débil y luego asfixiarlo con un cable hasta que dejara de respirar, «tal y como se lo hicieron a él», lo invadieron por completo. Otra vez el instinto de actuar por impulso estaba allí, odiaba a ese sujeto. sentía un ardor en su pecho y agachó su vista sólo para ver el pentágono manchado de sangre. Palpitando de dolor, como si se lo acabaran de hacer, la sangre que antes era seca se convirtió en sangre fresca y escurría en su pecho. ¡Joder, maldita maldición! Cada vez que el espectro sentía el sentimiento de odio u enojo, pasaba esto.

«Juro por lo más sagrado, que haré pagar a el imbécil o imbéciles que me hicieron esto— Miró a Paragus con más odio que antes, apretando los puños y arqueando sus cejas más de la cuenta.—«Empezando por ti, Paragus— Sentenció.












Continuará.

Hola mis algodones de azúcar😍 ¿Cómo están? Todo bien? Que buenooo. Aquí otro capítulo de La Ouíja. Diganme ¿Ustedes acompañarían a Goku a matar a Paragus? Aprueban ese instinto de impulso? Que crueles son, ¡Son cómplices! :0

¡Oigan! También les recomiendo darle un vistazo a mi otra historia :}, sólo lleva dos capítulos pero prometo que será una linda novela.

Milk triste por la falta de su madre :(

Goku y sus deseos impulsivos :v

Thights no la mencioné en éste capitulo, pero si será mencionada en el otro. Ella también esta metida en el paquete de la venganza :D

El muy posible despertar de Veggi (0_0) que también será mencionado en el otro cap.

Tarble enfrentando Cara a Cara a la alimaña de su tío, y Goku siendo testigo de todo.

Y pues bulma teniendo una batalla mental con ella misma sobre Vegeta. ( Aquí entre nosotros, A bulma le gusta vegeta sólo que no lo quiere admitir. ¡No les vayan a decir que yo lo dije) jajajaja.

Nos vemos en el siguiente capítulo. ¡Dedicado a ustedes!❤😍 gracias por comentar y votar. Los adoro muchooo❤😊

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