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Capítulo 16

—¿Dormirás en el sofá? —Juan alzó una ceja al ver que Jerry estaba hecho bolita en el sofá—. Si tú quieres —se quitó la camisa mostrando ese cuerpo perfectamente trabajado y se metió a la cama.

—Es poco caballeroso, ¿sabes?, él me debería dejar dormir en la cama y él en el sofá —Juan volteó a ver con quien hablaba Jerry y este fingía hablar con un peluche de Capibara—. Porque él es un fife y yo un Potaxie o sea, hetero y yo gay. ¿Dónde están los buenos hombres, señor Capichoncho? —Juan ignoró la pulla.

Era una noche fría, los primeros días de diciembre y ya hacía muchísimo frío, Jerry temblaba de frío. Miraba con ansias la cálida cama, pero su orgullo podía más, aunque no por mucho, pues se acercó primeramente asegurándose que Juan durmiera, este roncaba bajito.

—Excelente —se metió entre las sábanas despacito tratando de que el otro no se despertara. Qué alivio, la cama estaba calentita.

Y cómo quién no quiere la cosa se acercó lo más posible a Juan pues cerca de él, estaba aún más calentito y agradable. Se quedó dormido casi al instante mientras Juan sonreía y lo miraba divertido. Sí, notó desde que Jerry se metió a la cama.

* * * *

Según las peticiones y recomendaciones del señor Francois, debían asistir a ciertos eventos para que se impregnaran de la belleza del lugar y poder plasmarlo en la publicidad y llamar a los visitantes. Primero recorrieron el pueblo que era bonito, tranquilo e interesante.

Hicieron senderismo y navegaron en el lago, incluso Jerry logró atrapar un pescado que aún era microscópico lo llenó de orgullo.

Juan se burló pues él venía de una familia de pescadores y Jerry le confesó que ni siquiera sabía nadar.

Jerry hubiera querido hacer caminata en la nieve, pero aún no era la época. Eso sí, compraron algunas chucherías como recuerdo.

—Vaya mira esto —le entregó un volante a Juan.

—No me lo creo.

—¿Qué dice? No sé francés, ah no, atrás está en inglés. ¡Un baile! —sus ojos se iluminaron.

—¿Te gustan esas cosas?

—No —fingió—, tal vez. Tal vez he leído muchas historias y solo quiero encontrar a mi señor Darcy en un baile con vestidos esplendorosos, joyas falsas y trajes bonitos —suspiró—. Sí, soy un ridículo. Eso no nos pasa a los gays o al menos a mí no.

—Oh, es el nuestro hotel, esta noche. No te aseguro que encuentres al señor Darcy, aunque eres más orgullo y mucho prejuicio, pero será interesante.

—Habló la señorita Bennet, pero no tengo ropa para la ocasión.

—Casualmente ahí hay una tienda de ropa elegante. No compres un vestido, compra ese traje de la vitrina está chido.

—Es cierto, buen ojo.

La emoción se desbordaba tantísimo que cuando Jerry entró en el salón dio un gritito que sonó como un ratón que encontró un buen trozo de queso. El salón enorme estaba finamente ornamentado para la ocasión. Parecía una película, el baile de la presentación de alguna princesa. Los asistentes vestían con ropas elegantes de la época Victoriana, maquillaje y glamur.

—¡Te dije que me esperaras! —le regañó Juan.

—Perdón Zanahorio, «guau».

—¿Qué?

Juan parecía un hermoso príncipe con ese traje decorado con filigrana y retoques dorados, incluso el rojo de su cuerpo parecía brillar más. Muchas de las asistentes coincidían con él pues se lo comían con la mirada.

—Lo siento, vengo con él —le dijo en francés a una chica voluptuosa—. Cierra la boca que te entrará un pene, digo, mosca.

—Ojalá.

—Bueno, vamos por algo de beber.

Mientras Juan buscaba un par de copas la música sonaba, al regresar apretó con fuerza una copa rompiéndola pues Jerry estaba bailando con un tipo moreno, alto y guapo. Giraban por el gran salón.

La pieza terminó y el moreno le pidió bailar de nuevo, pero los interrumpió Juan quién le susurró algo al oído al moreno, se disculpó y se alejó.

—¡Oye, él iba a bailar conmigo! —se quejó—. ¿Qué le dijiste para que se fuera?

—Que tienes una terrible enfermedad llamada «pendejismo» y es mortal, toma tu copa —dijo gruñón.

—¡Tu mano, está herida! —se alarmó.

—Se me cayó la copa y me corté, es pequeño nada grave.

—Para tu suerte nunca salgo sin esto —sacó de su chaqueta una bolsita—. Vamos por allá y déjame curarte.

—No.

—Uy, la jirafa roja le tiene miedo a las inyecciones.

—¡Bien, vamos!

Jerry le limpió con antiséptico y luego le cubrió con una venda.

—Oye, tú eres como rarito ¿no? No conozco a nadie que ande siempre con un mini botiquín.

—Se dice «gracias», zorro mal agradecido. Bueno, iré a por el moreno, ¿cómo que para qué?, ¿si ubicas que es un baile clásico en un hotel en un lago de cuento de hadas y que el chiste es bailar? Por eso se llama baile. Eres tontísimo. ¿Qué?

Juan le tomó de la mano y lo haló al centro del salón, puso su mano en la cintura y se acomodó.

—Así es como se baila elegantemente, aprende a hacerlo bien. A demás se supone que nosotros somos los debemos hacer estas cosas para hacer una buena campaña y así —dijo sonrojado sin mirarle.

—Sí.

La música lo envolvió, se elevaron dejándose llevar por los giros y los movimientos armónicos, la luz, el ambiente, el lago al fondo. Todo era una magia sin igual. De repente ya no había nadie sino solo ellos dos, sus cuerpos muy juntos y sus manos entrelazadas.

—¿Te sientes bien, enano? Puedo sentir tu corazón latir muy rápido y violento.

—Lo mismo te digo, Zanahorio, tu horrible cara está tan roja como el culo de un mandril.

—Eres un grosero.

—Y tú un bruto, testarudo que le gusta molestar a los más débiles.

—Tú no eres débil, eres fuerte e increíble.

—¿Ah sí?, pues tú hueles a «mier»... ¿qué?

—Olvídalo.

—Miel, tú hueles a miel. Bueno no, hueles rico —Juan sonrió.

—No intentes seducirme.

—Ya quisieras. No tengo interés en un bruto, sin sentimientos, fastidioso, con cara de culo y carácter de mierda y que luego me hace gas... «gaslai»... algo así. Yo nunca querría besar a un tipo como tú... —sus labios se sellaron en un apasionado y ansiado beso.



*Gritos de perra loca*

¿Se han  besado o fue la imaginación de los lectores?

¿Ustedes que piensan ya se veía venir o ha sido inesperado?

¿Pero qué significará este beso?

¿Por que Jerry lleva un botiquín?

El peluche de Jerry, el señor Capichoncho

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