Félix despertó porque de nuevo su calor le estaba jugando una mala pasada, siempre que estaba cerca de Hwang se descontrolaba tanto que apenas lo toleraba. Pero esa era culpa de su omega no de el, no le disgustaba del todo sin embargo tenia miedo de quedar preñado de Hyunjin, su fertilidad era muy alta y le preocupaba.

Los brazos Hyunjin sostenían con firmeza su cintura, impidiéndole que se moviera gruño por lo bajo despertando a Hwang que tenia intensión volver a cerrar los ojos. Sin embargo los gruñidos de Félix lo hicieron despertar de golpe.

—¿Qué pasa, hermoso?— Félix gruñe buscando de nuevo el calor de Hyunjin.

—.Celo..— responde con la voz levemente melosa y ronca a la vez. Últimamente estaba volviéndose muy raro además de mimoso. —por favor...— pide haciendo un lindo puchero.

—¿Deberia hacerte caso? — pregunta haciéndose el inocente abriendo los primeros botones de la camisa que llevaba puesta el menor. —creo que esto no debería —

Félix por su lado le pega el la mejilla para luego subirse sobre el regazo de Hyunjin, la paciencia no era un virtud de el.

—Entinces, largate yo pudo atenderme sól— no termina la frace porque los labios de Hyunjin se pusieron sobre los del menor besándolo con posesividad tomandolo con fuerza de la nuca.

Félix gimió cerrando los ojos disfrutando el beso, mientras sus lenguas se enredaban una con la otra posteriormente su ropa desapareció por arte de magia. El pecoso rostro de Félix se ruborizó separándose de los labios de mayor con la respiración entrecortada.

—Mueve ese hermoso trasero, nene— susurra mordiendo ligeramente el hombro del menor dejándole una pequeña marca roja.

El menor movía su cadera de adelante y atrás, la fricción entre la entrada húmeda del menor y la erección del mayor. Hyunjin lo toma de la las caderas penetrandolo con fuerza.

Félix apoyo sus palmas sobre el pecho del mayor, empezó a dar saltos rápidos subiendo y bajando apretando la longitud palpitante del mayor mientras sus puntos dulces eran golpeados sin cuidado. De nuevo sus labios se unieron de forma brusca con teniendo los gemidos que se perdían en la garganta del menor.

Las auto-embestidas del menor disminuyeron mientras todo su cuerpo empezaba a temblar y su orgasmo estaba a nada de alcanzarlo. Sin embargo Hyunjin no lo dejo correrse hasta que lo puso en cuatro.

Entro sin cuidado para luego empezar a embestirlo en seco y con fuerza, los gemidos del omega fueron en aumento mientras las caderas del mayor chocaban con las del menor. Y el ruido del chapoteo de sus cuerpos chocando invade hasta el ultimo rincón de la habitación.

—.Ahh, Hyunjin... voy a ahh,— termino corriéndose con un agudo grito seguido por Hyunjin que sin perder tiempo término dentro. —¿¡eres imbécil o qué!?— trato de reincorporarse sin éxito porque un nudo empieza a formarse.

—No grites, lo olvide — dijo mientras lo sotnia de la cintura para que no se moviera. —conseguire la pastilla ya...—

—Call- ahh callate— gruño mientras su paredes eran bañadas con la caliente semilla del mayor. —no te muevas, carajo—

—.Soy talla grande, no me culpes— empezó a reírse.

Felix se empezó a reír también mientras negaba con la cabeza. No es hora de hacer bromas.