*Es invocado por medio de un pentagrama dibujado en el suelo* ¿ALGUIEN DIJO FANSERVICE?

Bueno, espero que lo hayan mencionado, porque eso es exactamente lo que tendrán en el capítulo de esa semana.

Después de haber pasado por la peor experiencia de toda su vida, Dipper está de vuelta y hay una chica de cabellos rubios que se muere por darle la bienvenida. Sí, este es uno de esos capítulos que le hacen honor al título del fanfic. Recordemos que aunque esto se haya transformado en una historia un tanto oscura con algunos toques de acción; no olvidemos que esta es una historia de amor entre Dipper y Paz. Así que olvidémonos momentáneamente del apocalipsis y dejemos que nuestros sentimientos florezcan.

Espero que les guste el capítulo y ya lo saben, nos vemos hasta abajo para comentarios finales. (Léanlos de favor, que diré cosas importantes)

Gravity Falls Es una obra perteneciente a Disney. Todo lo escrito y expresado dentro de este Fanfic tiene como propósito principal el enriquecer al Fandom de la misma. Todos los personajes utilizados dentro de esta historia son una creación y propiedad original de la talentosísima y brillante mente e ingenio del animador estadounidense: Alex Hirsch. Nada será utilizado con fines lucrativos o comerciales. ¡Disfrútenlo!

Gravity Falls Fanfic: La Novia de Dipper

Capítulo 31: "Un Lazo Irrompible"

Cuando Dipper recuperó la conciencia, lo primero que su sentido del olfato percibió fue el inconfundible olor a pino que desprendían los árboles del bosque. A continuación, su sentido del tacto se percató del conjunto de sábanas frescas sobre las que su debilitado cuerpo se encontraba reposando. Su sentido del oído fue el próximo en agudizarse, logrando escuchar a la distancia el murmullo de varias personas alteradas discutiendo entre sí. Sin embargo, había un sonido aún más próximo a él, el cual Dipper tardó un poco más en descifrar su procedencia. En cuanto lo hizo, se dio cuenta de que se trataba del característico ruido que hace un trapo húmedo al ser escurrido sobre una pileta llena de agua. Hecho que fue confirmado cuando dicho trapo fue colocado suavemente sobre su frente por alguien a quien no pudo identificar de inmediato. En ese momento, Dipper trató de abrir forzosamente sus ojos. Se sentían cansados y adoloridos; cegados levemente por el destello de una pequeña lamparita de mesa encendida y puesta en un costado de la habitación dónde se hallaba. Mientras lo intentaba, varias preguntas rondaban en su cabeza, siendo las más recurrentes: ¿Qué sucedió? ¿En dónde estoy? ¿Pude ser capaz de regresar a mi época?

—¿Dipper...? ¿Dipper, estás bien?—Preguntó de forma recurrente la peculiar voz de una niña cuya frecuencia auditiva era tan aguda, pero tan rasposa a la vez, que le ayudó a Dipper a identificar de manera inmediata a su propietaria.

—¿Mabel...? ¿Eres tú, Mabel? —Su vista se fue aclarando poco a poco, hasta llegar al punto de alcanzar a distinguir los frenos y las chapeadas mejillas de su única hermana gemela.

—¡Dipper! —Se abalanzó contra el para propinarle un fuerte apretón y comenzar a llorar desconsoladamente—. ¡Dipper, no sabes lo mucho que me alegra ver que te encuentras bien! ¡Me tenías muy preocupada, pedazo de torpe! ¡Idiota! ¡Nunca nos vuelvas a hacer esto...! ¿Me escuchaste? ¡Nunca! ¡Nunca! ¡Nunca!

—Mabel... No sé de qué estás hablando, pero... —Alcanzó a escuchar el tronido de algunos de sus huesos—. ¿Te importaría soltarme? Creo que acabas de romperme algo...

—¡Ups...! Creo que me exagere un poco. —Soltó el cuerpo de su hermano, el cual cayó como si fuera un costal de papas sobre su almohada—. ¿Cómo te sientes después de haber dormido por una semana entera?

—Me siento agotado, mis músculos me duelen, mis ojos arden, la cabeza me da vueltas y... ¡Espera! —Se conmocionó, sintiendo un vuelco en el corazón—. ¿Qué dijiste?

—Dipper, caíste en coma por una semana entera... ¿Ahora comprendes por qué nos tenías a todos tan preocupados?

—¿Una semana...? Pero... No puede ser... —Se llevó la palma de la mano a la frente, descubriendo por casualidad una aguja penetrando su muñeca derecha, la cual se encontraba conectada a una pequeña manguera que desembocaba en una bolsa mediana llena de un líquido de color azul fosforescente—. ¿Y qué es esto...? ¿Por qué tengo esta cosa? ¿Y los demás...? ¿Cómo están todos? ¡Pacifica! ¿Dónde está ella?

—Tranquilo, Dipper. No te preocupes por tu novia. —Se sentó en uno de los bordes de la cama—. Ella está bien. De hecho, todos se encuentran bien. Tú eras el que necesitaba atención inmediata. Afortunadamente Blendin contaba con conocimientos médicos básicos y temporales... ¿O eran Espaciales...? ¡Ugh! —Arrugó la cara—. ¿Por qué en el futuro siempre tienen que usar palabras tan rebuscadas para todo? En fin... Lo hubieras visto, Dipper. ¡Fue asombroso! Pudo sanar todas las heridas de Pacifica y reparar su brazo roto en cuestión de minutos. Además, pudo reanimarte luego de darte respiración de boca a boca por cuatro horas seguidas.

—¿Qué? —Dipper estuvo a punto de pegar el brinco al cielo.

—Es broma. —Le dio un pequeño empujón luego de soltar una carcajada—. Solo dijo que necesitabas reposo y recuperar todos los nutrientes que perdiste debido a la falta de alimentos. Él también dijo que tu falta de sueño combinada con el estrés y el aumento drástico de adrenalina en tu cuerpo deterioraron mucho tu salud. Ese líquido te ha mantenido hidratado durante esta última semana. Quería llenar la bolsa con jugo Mabel, pero Blendin no me lo permitió. —Se cruzó de brazos, haciendo un puchero.

—Creo que le daré las gracias por eso... —Murmuró.

—¿Qué dijiste? —La niña frunció el ceño.

—Nada... Nada... —Sonrió inocentemente.

—Como sea... Estos últimos días Wendy, Soos y yo nos hemos turnado para cuidarte. Pero... —Soltó una risita llena de picardía—. ¿Quieres saber algo? Hay alguien que no se ha querido separar de tu lado ni por un momento.

—¿Quién? —Preguntó distraído.

—¿Y todavía te atreves a preguntar? ¿Acaso tengo que señalártela? —Mabel hizo lo propio y con su dedo índice apuntó hacia el lado contrario de la cama, inclinándolo un poco hacia abajo con dirección hacia el piso de la habitación. En ese momento, Dipper ladeó un poco el cuerpo para asomarse por el borde de la cama, descubriendo así a Pacifica durmiendo cómodamente dentro de una pequeña bolsa para dormir. Acto seguido, esbozó una cálida sonrisa—. Ella te ha cuidado de día y de noche. Le insistimos en que descansara un poco, pero es muy terca y se aferraba en permanecer a tu lado para que cuando despertaras ella fuera la primera en darte la bienvenida. No puedo imaginar lo furiosa que se pondrá cuando sepa que no fue la primera en verte despierto. —Agitó los pies de la emoción—. Nunca antes en mi vida había visto algo tan tierno... Ustedes dos son a partir de este momento mi nuevo OTP.

—¿OTP? Mabel... —Suspiró, demostrando su inconformismo—. ¿Cuántas veces te he dicho que dejes de utilizar esos absurdos términos de internet en mí?

—No... —Contestó, luego de girar los ojos y pasear la mirada por todo el cuarto.

Dipper pudo fácilmente continuar discutiendo con su hermana seriamente acerca de las malas y buenas costumbres que pueden adquirir las personas al pasar horas y horas en la red. Sin embargo, el casi imperceptible quejido de esa otra persona en la habitación los distrajo del punto central. Cuando Dipper giró su cabeza hacia la izquierda, pudo observar la larga cabellera levemente despeinada de Pacifica quién finalmente había despertado de su breve siesta.

Ninguno de los hermanos Pines dijo o hizo algo, simplemente siguieron con la mirada los torpes movimientos de la joven Northwest debido a que aún se encontraba adormilada. No obstante, cuando pacifica condujo la dirección de su miraba hacia la cama, lo primero con lo que se encontró fue con la indisimulada y pícara risilla de Mabel, así como con el inevitable e incómodo saludo con la mano en alto por parte de Dipper. En ese momento, Pacifica abrió completamente los ojos, dándose cuenta de lo que sucedía, de modo que sus mejillas se tornaron completamente rojas. Luego, dos delgadas líneas de sudor recorrieron su frente hasta que finalmente su cara comenzó a deformarse en una expresión de ira incontenible.

—¡Hola, Pacifica! —Dijo Dipper justo instantes antes de que la niña se lanzara hacia él por medio de un brinco y así comenzar a llorar desconsoladamente sobre su pecho.

—¡Tonto! —Dijo entre sollozos, dejando por momentos desconcertado al joven Pines, mientras que Mabel sencillamente no podía dejar de enseñar una sonrisa de oreja a oreja—. ¡Eres un tonto! ¡Tonto! ¡Tonto! ¡Tonto! Hiciste que me preocupara por ti...

—Pacifica... Yo... —Al no saber exactamente cómo reaccionar ante tal muestra de cariño, lo único que a Dipper se le ocurrió fue utilizar sus brazos y rodear el cuerpo de Pacifica para abrazarla—. Lamento haber hecho que te preocuparas.

—No importa... —Alcanzó a decir, a pesar del interminable llanto—. Estás bien y eso es lo único que cuenta... Gracias a dios...

—¡Vaya! ¿Quién diría que Pacifica pudiera ser así de afectuosa? —Dijo Mabel, justo en el momento en el que Pacifica recobró la compostura, percatándose de que la hermana de su novio también se encontraba en la misma habitación mirando a sus anchas el espectáculo completo. Entonces, se apartó de Dipper y se levantó de la cama con la velocidad de un relámpago para darse la media vuelta y tratar de ocultar inútilmente su cara completamente roja.

—Quiero decir... —Se aclaró la garganta y se secó las lágrimas, poniendo en clara evidencia su malhumor al haber actuado de una manera poco convencional ante otra persona que según ella; jamás debió de haber ocurrido—. Es bueno saber qué al fin has despertado... Verás... No es como si yo haya estado extremadamente preocupada por ti o algo por el estilo... Lo que pasa es que...

—¡Ohh! ¡Vamos chicos! ¿No me digan qué aún se sienten "incómodos" por demostrar sus sentimientos en público? —Mabel interrumpió, dirigiéndose hacia la rubia para darle un ligero codazo en el brazo—. De acuerdo, creo que es mejor dejarlos solos unos momentos para que puedan "conversar" mejor. —Les guiñó un ojo a ambos y se encaminó hacia la salida, llevándose consigo la pequeña bandeja llena de agua—. Por cierto, sí piensan comerse a besos y aún sienten pena procuren no hacer mucho ruido... Hay muchas personas aquí afuera y podrían escucharlos.

Acto seguido, Mabel abandonó la habitación en medio de una risilla más, dejando a la pareja tranquila y completamente a solas.

—¿Jamás dejará que lo olvide, cierto? —Pacifica preguntó, sentándose sobre el borde de la cama.

—Pronto te acostumbrarás. —Contestó el muchacho—. De alguna manera que aún no logro entender, Mabel suele perder la cabeza cuando se trata de romance entre sus amigos y familiares.

—Mi vida se arruinó... Otra vez.

—¡Hey! No todo está perdido. —Dipper estiró su mano para tomar la de Pacifica—. Gracias por preocuparte por mí.

—¿Estás bromeando? —Le devolvió la sonrisa, acercándose para tomar su otra mano—. No podía permitir que a mi nerd salvador le ocurriera algo.

Como un movimiento involuntario producto de la perfecta sincronización entre sus pensamientos y sus acciones motrices, Dipper y Pacifica aproximaron sus rostros para de esta manera volver a unir sus labios y expresar libremente el amor que amor se tenían el uno al otro. Pasó cerca de medio minuto cuando ambos se apartaron, siendo Pacifica la primera en hablar.

—Veo que finalmente aprendiste a cerrar los ojos.

—¿Y cómo supiste que los tenía cerrados sí tu también debiste mantenerlos cerrados en primer lugar? —Torció la boca.

—Abrí un ojo por un segundo para confirmar que efectivamente habías aprendido a cerrarlos. —Se cruzó de brazos, excusándose gracias a su orgullo.

—Sí claro...

—Dipper...

—¿Qué ocurre?

—Me alegra saber qué estás bien... —Alcanzó a secarse las lágrimas antes de que comenzaran a rodar por sus mejillas—. Esta ha sido la peor semana de mi vida... Hubo momentos en los que pensé que te perdería para siempre. —Suspiró—. Sé que esto podrá sonar tonto y hasta un poco cursi, pero... De alguna forma... Mi cariño hacia ti ha crecido de tal manera en estos últimos días, que inclusive me siento un poco aterrada... Confundida por esta clase de sentimientos que para mí son completamente nuevos. Me es difícil creer que en tan poco tiempo te hayas convertido en una persona tan valiosa para mí... No sé qué es lo que haría si es que llegara a perderte.

—Pacifica... No tienes porque pensar en ese tipo de cosas. —Apretó su mano—. Lo importante ahora es que ambos estamos bien y a salvo. Puede que no tenga mucha experiencia en el tema, pero hasta yo sé que en una relación es normal que ambos nos preocupemos mutuamente por el otro. ¿Sabes? Cuando te rompiste el brazo y Bill le dio la orden a Giffany para atacarte con electricidad, hubo varios momentos en los que creí que mi corazón se había detenido. Me sentí impotente y abismado por no poder hacer nada por ayudarte. —Recordó las duras escenas que había presenciado en el futuro y que se quedaron muy presentes en su memoria. La primera de todas ellas, fue la imagen de la lapida colocada en la parte trasera de la cabaña—. Es por eso que de ahora en adelante no permitiré que nada te suceda. No volveré a dejar que Bill te ponga una sola mano encima.

—Dipper, a veces dices unas cosas muy locas. —Le alborotó el cabello con las dos manos—. Gracias por preocuparte por mí bienestar, tontito. Me pone muy feliz el saber que tú también sientes ese mismo afecto por mí. —Al final, Pacifica se aproximó y le dio un pequeño beso en la mejilla para enseguida apartarse y proseguir con lo siguiente en la lista—. De acuerdo, Dipper. Creo que ya es hora de que te levantes y te reúnas con el resto en el comedor. Ahora que estás despierto estoy segura de qué podrás dar una mejor opinión acerca de lo que se está discutiendo allá afuera.

—Comprendo... —Dipper cambió su expresión a una más seria—. Pero antes..

—¿Qué sucede?

—Bueno... Me apena un poco decirlo, pero... ¿Podríamos besarnos una vez más antes de reunirnos con los demás? —Pacifica permaneció inmóvil, sorprendida por lo que había escuchado—. Verás... —Se puso a jugar con sus manos, tratando de contener los apabullantes nervios—. Me gusta mucho la sensación... Y por mucho tiempo imaginé que sería imposible para mí encontrar a una chica que quisiera hacer esto conmigo... Pero ahora que por fin eres mi novia... Y ya he tenido la oportunidad de saber lo qué se siente... Creo que será imposible para mí dejarlo... Es como cuando pruebas la goma de mascar o la soda de cola por primera vez. Con el pasar del tiempo podría llegar a convertirse en una adicción.

Sin decir una sola palabra más al respecto, Pacifica tomó la cara de Dipper con ambas manos para estabilizarla y así llevar una vez más y de manera más cómoda sus labios para unirlos con los de él, fundiéndose en un cálido y profundo beso que en esta ocasión y a diferencia de los anteriores; parecía no tener fin, pero que ambos se vieron obligados a terminar luego de algunos minutos, dado a que los músculos de sus caras comenzaron a entumecerse.

—¿Feliz? —Preguntó la chica.

—Sí... —Dijo Dipper, volviendo a dejarse caer de espaldas sobre la almohada con un inmenso y pleno gesto de satisfacción.

—Dipper, te recuerdo que soy tu novia y eso significa que tienes ahora la libertad y el privilegio de besarme cada vez que tú quieras. A menos que Mabel se encuentre cerca... Tú sabes... Podría volverse loca y comenzar a tomarnos fotos a escondidas para luego meterlas en su extraño álbum de recuerdos.

—¡Claro! —Estuvo de acuerdo, sin dejar de saborear la fresca sensación en sus labios—. Por mi está bien.

—Solo un pequeño detalle.

—¿Qué sucede?

—Tal vez te gustaría lavarte los dientes antes de volver a besarme. Has tenido la boca cerrada por más de una semana...

Continuará...

Baia, baia... Me pregunto qué otras cosas le pedirá a Pacifica cuando estén más grandes... *inserte carita de oie cy*... Ok ya, volviendo a lo importante... ¿Les gustó el capítulo? Espero que sí. Ya nos hacían falta ver más momentos de besuqueo y demás cosas cursis luego de tantos capítulos enfocados a viajes en el tiempo y muertes... Muchas muertes...

He estado pensando. Ya que este fic en un principio iba a ser una comedia romántica corta, cabe la posibilidad de que una vez que termine de publicar este fic, me ponga a trabajar en la versión "Unrated" o sí así lo prefieren, en la "Director's Cut". Es decir, hacer la historia que tenía en mente desde un principio justo antes de que el espíritu sanguinario de Alex Hirsch me poseyera. ¿Les digo algo? Cupido iba a ser originalmente el villano principal de esta historia.

¡IMPORTANTE! ¡LEER!

Bueno ahora pasemos al anuncio importante... Como saben, el 2016 está por concluir y sí ya tienen un buen tiempo siguiéndome sabrán que llegado el mes de diciembre todos mis fics entran automáticamente en hiatus... *CHAN CHAN CHAAAAAAAAAAAAAN* Sí, así es. La segunda temporada de "La Novia de Dipper" está a punto de llegar a su fin y ha llegado la hora de entrar nuevamente al hiatus que durará hasta Enero del siguiente año. ¿Por qué? Porque YOLO. Bueno no, pero de vez en cuando los fanfickers necesitamos tomarnos un descanso de todo esto, para regresar con ideas más frescas y seguir sorprendiéndolos. Además, en diciembre siempre salgo de vacaciones y me ausento de mi computadora por un largo tiempo.

Eso significa que únicamente restarán 2 capítulos más para finalizar con mis publicaciones de este año, regresando con todos los ánimos para el próximo mes de Enero del 2017. Dichos capítulos los estaré subiendo los días 4 y 18 de noviembre respectivamente.

Bueno, esos han sido todos los anuncios por ahora. Espero verlas y verlos en el penúltimo capítulo de este 2016. Muchas gracias a todas y a todos por sus comentarios. Se los agradezco de corazón en verdad. A pesar de que a veces no me da tiempo para responderlos todos, sepan que los leo y aprecio todos y cada uno de ellos incluso si son negativos. ¡Chao!

*Se desaparece por medio del mismo pentagrama*

¡Hey! ¿Quién me invocó en primer lugar? o.O