Capítulo 8 - Broken chord
Chisako se colocaba el teléfono algo lejano a su oído, para que no le molestara por su sensibilidad auditiva.
-Por su puesto que soy yo, acaso conoces a alguien más con esta voz, tan gruesamente envejecida con un tono sexy.
Lui hablaba como un locutor de radio mezclado con la voz de Frank Sinatra, envejecida en cigarro y probablemente whisky.
El comentario hizo reír a Chisako, sus compañeros se miraban atónitos ante el distinto comportamiento de la reina de hielo como le decían en secreto.
-No seas tonto Lui, dime a que debo el honor de tu llamada.
-Siempre tan estricta mi niña, pero directo al grano del café recién molido como me gusta, mira Chisako... mira ¿entendiste?
Lui se reía de su mal chiste lo que hizo reír nuevamente a Chisako.
-Tonto, pues claro que te miro, tan claro como el color de tu piel.
La risa de Lou no paraba y era algo contagiosa.
-Esa es mi chica, ya basta de tonterías, mañana tocare en el Bar-café nuevo, ese que esta en el centro, ven a verme a las 6 de la tarde, se llama el "Las grandes estrellas cafes", y lleva el saxo, quiero enseñarte algo.
-Mañana a las seis... no importa veré como ir... oye te molesta si llevo a algunas personas... creo que tu sin duda puedes solucionar nuestros problemas.
-Que Dios me mande al infierno, y el Diablo me aspe, Chisako Yukihiro invitando a alguien más, eso si quiero verlo, pues claro como mi piel, los esperare, cundo llegues diles que te lleven a la mesa de las estrellas, ello sabrá, cuídese mi rosa en el desierto, nos olemos pronto.
-Eres un payaso Lui, nos olemos.
La llamada se cortó, todos miraban con extrañeza a Chisako por su raro comportamiento.
-¿Quién eres tú y que hiciste con Yukihiro?
Zendo le pego un pequeño golpe en la cabeza a Kou.
-Discúlpalo es un idiota sin remedio, pero es mi amigo te aseguro que tienes cosas buenas. – Le dijo Zendo a Yukihiro.
-No es necesaria la disculpa, no me molesto el comentario, estoy acostumbrada.
Sakura también miro extrañada a Yukihiro, pero prefirió no preguntar, ella aun seguía muy nerviosa por lo que había sucedido entre ellas, además el olor del perfume de Yukihiro la tenia de cierta manera embobada.
-Como oyeron, Lui es la persona que me enseño a tocar el saxofón, y también me enseño cosas en el piano, el es el musico más grande que he conocido, y si alguien puede ayudarnos es el, tiene la experiencia y madures para hacerlo, el lleva en la música muchos años, toca el piano como ninguna persona que allá oído, ama el jazz en todos sus géneros incluido el pop jazz, así que, si pueden ir mañana a las seis en Las grandes estrellas café, podríamos encaminarnos, ¿Qué dicen?
-Yo creo que es buena idea, si puedo seguir perfeccionándome y el me ayuda sería fantástico, además sonaba muy buena onda.
-Lo es Zendo.
-Supongo que no pierdo nada con intentarlo, si me sumo.
-¿Qué dices tú Sakura? – Pregunto fríamente Yukihiro.
-Yo... si voy, ¿crees que puede ayudarme con el bajo?
-No lo sé, pero si te puede ayudar con el canto, eso es seguro.
-Entonces con más razón iré... les molesta si terminamos por hoy, no he podido concentrarme durante todo el ensayo.
Kou dijo sin problemas que podíamos terminar por hoy, a Chisako no le causo mucha gracia terminar antes, porque no avanzaron nada, pero se sentía algo culpable, porque entiendo que ella podía ser la razón de la falta de concentración de Chiye, así que no protesto.
Chiye fue la primera en retirarse se despidió fríamente de todos, pero se detuvo antes de salir.
-Kou fallas mucho en armonizar, pero tienes buen ritmo cuando lo logras, trabaja en ellos, Zendo creo que de todos eres el que más siente el ritmo de lo que toca si no me cuento a mí, pero te frustras muy rápido cuando fallas y pierdes el ritmo, mejora eso, y Sakura... en serio me gustaría decir algo bueno de tu bajo, pero aparte de saber tocarlo no siento que logres sentirlo, ni meterte en la música, en cambio tu canto es hermoso, tu voz es muy dulce, aprovecha eso, y esfuérzate en el bajo... tengan buen día.
Chisako se retiró del lugar dejando a todos mudos.
-Haber, haber, haber, enserio ella nos acaba de elogiar, pellízquenme.
Zendo pellizco a Kou, lo que hizo que Sakura se riera.
-Tal vez ella no es la única que está siendo dura...
-Eso crees Sakura. – dijo Zendo irónicamente.
Yukihiro caminaba por el pasillo del colegio en dirección hacia la salida, estaba algo emocionada por encontrarse con Lui el día de mañana, pero tenia que pensar como pasar inadvertida del radar de Fumeko, así que tendría que pedirle ayuda a su siempre confiable sirvienta: Violet.
Mientras caminaba un aroma cítrico muy fragante le empapo la nariz, un aroma que hizo que se detuviera en seco, incluso casi llego a soltar el bastón de los nervios.
Una chica de cabello Albino muy hermosa, y de buena figura se acero a Yukihiro, era alguien que Chisako estaba intentando evitar porque sabía lo débil que era contra ella, con Satomi Yokubo.
-No nos veíamos hace unas semanas, me estabas evitando ¿tal vez?
-No... no para... nada Sato.
La jovencita Satomi agarro de la muñeca a Yukihiro y se la llevo a una sala de clases, ella sin darse cuenta dejo mal cerrada la puerta.
Llevo a Yukihiro sobre el mesón del profesor, ella estaba acelerada, Satomi al darse cuenta, comenzó a jugar con la oreja de Chisako, un lugar muy sensible para ella.
-¿Por qué no me venias a ver Chisako?, me tenias abandonada... dime te aburriste de mi y encontraste a otra.
La mujer que tenía contra el mesón a Chisako, sabía muy bien como jugar con los puntos débiles de la joven señorita.
-No... no es eso... Sato...
Yukihiro no pudo evitar soltar un gemido cuando Satomi comenzó a besarla por el cuello.
-No te escucho Chisako.
-Que no te estoy... abandonando Sato...solo...para...no es lugar...
Ella volvía a gemir, cuando Sato comenzó a masajearle uno de sus pequeños pechos.
-Muy bien Chisako, ya me estaba poniendo celosa. – Decía Satomi mientras acercaba sus labios a los de Yukihiro.
Ella beso muy apasionadamente a la joven señorita, Yukihiro intentaba empujar a Satomi, pero por el placer de cómo se estaba sintiendo no le venían las fuerzas para hacerlo.
Lo que no sabían las dos es que por la puerta que quedo abierta una muy confusa Sakura la espiaba con horror.
Que están haciendo ellas dos...
Satomi deslizaba su mano lentamente sobre el vientre de Yukihiro.
-No... detente... te lo pido ya no quiero esto Sato...
Chisako había comenzado a llorar.
Yukihiro... ella está sufriendo. Pensaba Sakura para sus adentros que veía con cierto dolor la escena.
-No, no, no, tú no lo decides Chisako, antes me pedias por esto, además tu eres mía, eres mi juguete favorito.
-No... soy tu...juguete...
A Sakura le habían dado ganas de vomitar por lo que decía esa fría mujer, alguien que conocía por ser la ex presidenta del consejo estudiantil, una mujer modelo intachable, que ahora abusaba de Yukihiro.
No puedo seguir viendo esto.
Sakura abrió de golpe la puerta,
Lo que hizo que Satomi se alejara de Yukihiro de golpe.
Chiye entro corriendo hacia Yukihiro con una sonrisa en la boca.
-Yukihiro te estaba buscando por todos lados, ven es tarde, tenemos que irnos.
-Chiye... yo...
-No perdamos tiempo vamos.
Sakura agarro la mano de Yukihiro mientras con la otra agarro el bastón que había quedado sobre la mesa.
-Lo lamento Yokubo, tenemos que hacer cosas con la banda, disculpa por irrumpir así. – Dijo Sakura sacando a Yukihiro de ese lugar corriendo.
La llevo hasta la salida del colegio que estaba abandonada por lo tarde que era, las dos estaban agitadas por haber corrido, estaban cansadas y Sakura se dio cuenta que aun tenia agarrada la mano de su compañera de banda.
-Lo lamento no quería tocarte sin tu permiso... ten toma tu bastón Yukihiro.
Yukihiro recibió su bastón con algo de temor.
-Tu viste todo ¿Cierto?
-No sé de qué hablas Yukihiro. - Dijo muy nerviosa Sakura.
-Gracias... por no ver lo que no viste Chiye.
La joven señorita estaba muy agitada, le tiritaba el cuerpo, incluso caían lagrimas por debajo de sus lentes de sol. Chiye se iba a acercar a ella, pero antes de que pudiera hacerlo, Yukihiro la abrazo, no porque estuviera agradecida o sintiera algo, si no porque necesitaba el calor de alguien que pudiera sostenerla en este momento, para ella poder llorar.
El abrazo tomo por sorpresa a Chiye, ella se sonrojo recordando aun el beso, pero poco le duro, hasta que escucho el desgarrador grito de Yukihiro que le desgarro el alma, abrazándola fuertemente.
-Tranquila Yukihiro ya todo está bien, te lo prometo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro