Jeongyeon sentía picar su nariz, y la luz del sol la empezaba a molestar, como de costumbre estiro su mano en busca en de caja de pañuelos, pero no lo encontró y más para su pesar tiro algo en el piso, con pesadez abrió los ojos y trató de levantar lo que había tirado, pero al moverse se percató que no llevaba nada de ropa. Con lentitud levanto el edredón blanco que la cubría y vio un brazo masculino sobre su cintura, por poco y grita a causa de todo lo que estaba viviendo en ese momento, quiso levantar su cabeza pero un dolor punzante la atravesó, obligándola a cerrar automáticamente sus ojos, el hombre que estaba a su lado aún dormido, se estiró a su lado buscándola para abrazarla por la cintura, la mente de Jeongyeon estaba por explotar.

¡¿Quién carajos era?!

Tomando un par de bocanadas de aire, cogió el brazo del sujeto y lo alejo de su cuerpo, con lentitud salió de la cama, tratando de no despertarlo. Miró por todos lados tratando de buscar su ropa y grande fue su sorpresa al verlo esparcido por todos lados, entre mezclada con la ropa de él. Se desconocía totalmente, era como si en su lugar hubiera sido un animal la que estuvo en control de su cuerpo.

Se encontraba totalmente avergonzada consigo misma, era una vergüenza para su familia y para su buen comportamiento ¿Cómo miraría nuevamente a los ojos al secretario Wang? Dios, quería que la tierra la tragara.
Y para empeorar había perdido su virginidad y ni siquiera recordaba cómo fue, le dolía todo al caminar, sus piernas se sentían como gelatina y su cabello, que en la noche pasada había estado hermosamente peinado en ese instante se encontraba asqueroso, decir que parecía un nido de pájaros sería un halago. Miró una vez más a su acompañante y el muy maldito se encontraba sonriendo mientras dormía, era demasiado atractivo para su gusto, nunca se imaginó salir con chico lindo y mucho menos acostarse con uno. Gracias a Dios, la sabana cubría lo suficiente como para no sentirse más avergonzada de lo que ya estaba. Sin pensarlo un segundo más decidió escapar de ese lugar, sin mirar atrás.

...

Taehyung estiró su cuerpo buscando el calor del cuerpo de la hermosa chica que había conocido la noche anterior, pero no encontró nada, sorprendido abrió los ojos, no estaba a su lado, su vista recorrió la habitación y su ropa y zapatos no se encontraban, poniéndose sus boxers decidió ir a buscar al baño esperando encontrarla ahí, pero el baño estaba intacto, rendido tomo aire y peino su cabello hacía atrás, había pasado la noche más maravillosa en su vida y ni siquiera sabía el nombre de aquella hermosa mujer. 

-¡Maldición!-el sonido de su teléfono llamó su atención y sabía de quien trataba- Hola, madre...-hablo cansado, ya sabía lo que se venía.

-Estás loco, desapareciste todo un día y para empeorar jamás te comunicaste con la señorita Mina.

-¿Mina?

-Así mismo, la señorita con la que debes de tener la cita, la cual se realizara esta misma tarde, coordine el horario junto a su padre, ¡NO TE ATREVAS A FALLAR!- la llamada finalizo y Taehyung sabía que tenía las horas contadas, su libertad estaba en manos ajenas.

Luego de esa llamada las horas pasaron volando, era como si su reloj estuviera descompuesto y las manecillas empezaran a girar en descontrol en su contra, sabía que la cita acordada estaba programada para ese día, así que se mentalizó en tratar de ser los más respetuoso posible a la hora de rechazarla. Su madre había mandado un correo en donde decía la dirección y la hora en donde se realizaría la cita, el restaurante era un lugar muy costoso y de alto nivel,  antes de pensarlo su prejuicio ya estaba martillando dentro suyo, temía que fuera una de esas mujeres que solo se fijan en lo artificial.
Con un resoplido y un trueno de dedos decidió bajarse del auto, se enfrentaría cualquier tipo de adversidad y soportaría a esa mujer.

Al entrar no hubo necesidad de pronunciar su nombre y lo dirigieron a una mesa apartada que se encontraba cerca de un gran ventanal que daba una hermosa vista de la noche, en la mesa podía visualizar a una mujer pero no podía ver su rostro, la carta que sostenía cubría por completo su rostro.

-Señor, esta es su mesa-pronuncio cortes el mesero, haciendo que la mujer bajara la carta y se parará para poder saludarlo con una sonrisa, Taehyung se quedó sorprendido al verla, tenía una apariencia sencilla, su maquillaje no resaltaba, era delicado, su vestuario solo consistía en una camisa color bordo y una falda lápiz negro y su largo pelo rubio caía elegantemente sobre sus hombros.

-Buenas noches señor Kim, es un gusto conocerlo-sonrío-, mi nombre es Myoi Mina- paso su mano para estrecharlo, su sonrisa lo dejo desconcertado pero acepto su mano y lo estrechó.

-El gusto es mío-dijo suavemente mientras se sentaba.

Mina soltó una pequeña risa a lo que Taehyung enarco una ceja.

-Lo siento, es que su expresión dice que no era la mujer que esperaba.

-Lo siento no quise que pensaras eso.

-No, no te preocupes, es todo lo contrario me parece hilarante, es mi culpa porque recién salí del trabajo y normalmente no me preocupo mucho por mi apariencia, y se me había olvidado completamente de que la cita estaba programada para hoy.

-Tranquila, solo tenía miedo que fueras una de esas mujeres que solo se interesan en lo superficial y en las apariencias- Mina lo miraba atentamente.

- Eres un poco prejuicioso ¿no?-Taehyung sintió su saliva atascarse en su garganta.-, todos tenemos nuestras imperfecciones, no te juzgó, yo también temía que fueras de esos hombres prepotentes por su dinero, pero parece que no eres así, creo que me agradas.

-Tú también me agradas a decir verdad.

-Y si nos agradamos podemos iniciar está relación como una amistad- dijo sin pelos en la lengua.-Taehyung quedó sorprendido pero a la vez satisfecho, era una buena idea, así se libraría de su madre por un tiempo-, perdón por mi sinceridad, pero necesito quitarme este peso de encima.

-Pienso lo mismo, así que no hay problema.

- ¿Sabes? A pesar de ser un hombre de pocas palabras, sabes que decir en el momento indicado.

- Y tú sabes hablar sin vergüenza, nos llevaremos bien.

Parte 3

...

Se me olvidó subir lo que resta de la historia, yo pienso que me apresure demasiado en presentar a los personajes, o que dicen? Jsjsjs