—Taehyung, ¿Cómo es posible que seas tan irresponsable? Es una deshonra que a tu edad te sigas comportando de esta manera, ya no eres un niño—escupió enojada su madre mientras lo veía arreglarse la corbata frente al espejo—, ¿Sabes lo difícil que es organizar las citas? Y tu ni siquiera eres capaz de asistir a una de ellas, eres el sucesor de esta compañía, sabes lo importante que es para nosotros que contraigas matrimonio—Taehyung la miraba a través del reflejo del espejo—, prométeme que en esta ocasión será diferente—continúo —, tu padre y yo decidimos que esta es nuestra última alternativa contigo, no nos vayas a fallar, se llama Myoi Mina y es la hija del Sr. Yuta, el dueño de revistas HighNine.—una vez que termino su pequeño discurso salió de la habitación dejándolo solo, Taehyung suspiro fuertemente, estaba harto de todo lo que se suponía con respecto al matrimonio, aún era joven y no sentía la necesidad de conseguir una esposa, pero por el bien de los nervios de su madre solo aceptaría esta vez la tan solicitada cita a ciegas.

La familia Kim es reconocida a nivel mundial por su gran participación en el mundo de la moda, siendo los dueños de la marca XhaN, cuya popularidad creció gracias al enorme esfuerzo que sus padres pusieron en él, en especial su madre Hyeri Kim , la empresa lo es todo para ella, queriendo que su hijo sea igual de apasionado que ella, mientras tanto Kim Jong Woon, es un hombre de negocios nato, es más libre en pensamiento pero muy cargado con trabajo a causa de su mujer, siempre que puede tratar de tener un momento padre e hijo con Taehyung, el cual lo ha estado evitando los últimos dos años.

...

Jeongyeon miraba sobre su libro cada tanto, sus ojos eran rápidos y nadie podía notar a donde se dirigían o más bien dicho a quién iban dirigidos, hace media hora tenía la vista puesta sobre él apuesto secretario de su ahora CEO. Sus ojos fríos e inexpresivos iban muy a la mano con su color café oscuro rozando al lado completamente negro. Aunque su reputación de chica fría la siguiere por donde iba no era ciertamente lo correcto, no era fría, solo no sabía cómo comunicarse con los demás como la mayoría de personas, aunque a ella no le molestaba aquella reputación, solo eran puras palabrerías de las personas que no la conocían, pero en esta ocasión era diferente, ahora si había alguien que llamaba su atención a lo que ahora su reputación si suponía un problema.

-Jeongyeon, podrías traerme nuevas copias de estas fotos, necesitamos compararlas con el catalogo anterior- Jeongyeon se había quedado petrificada ante el dulce sonido de su voz, pero los demás compañeros de trabajo solo vieron tensión e incomodidad.

-Muy bien Sr. Wang-asintió y se despidió dejándola sola, una vez que el secretario salió por completo de su vista las personas a su alrededor empezaron a cuchichear.

-Por Dios, Jeong, casi sentíamos como lo matabas con la mirada.

-Es cierto, la corriente de aire que expedías casi hizo que mis dientes empezaran a castañear- Jeongyeon rodó los ojos, no podían estar más equivocados.

-El secretario Wang es un gran hombre, no tengo nada en su contra, es un excelente empleado, no he visto a otro hombre más recto que él y si, si me agrada aunque no lo crean.

-Jeongyeon, te conocemos desde que estábamos en preparatoria- lastimosamente para ella, eso era cierto, se conocían desde bastante tiempo, solo que ignoraban sus gustos en hombres o eso pensaba ella, sus amigos siempre quisieron emparejarla con un hombre digno de ella, siendo alguien tan inalcanzable a sus ojos esperaban que el hombre del que ella se enamorara fuera igual o similar a su personalidad- y sabemos que él no es tu tipo de persona con quien charlarías de cosas cotidianas, tal vez de trabajo y del clima.

- Tienes razón, Jungkook ¿pero sabes que es lo que más me sorprende?- Nayeon al contrario de Jungkook sabía acerca del pequeño enamoramiento de su amiga pero constantemente la hacía pensar lo contrario, ya que no quería que se sintiera acorralada a confesar sus sentimientos.

-¿Qué?

- Que tu cabecita aún funcione, creí que solo funcionaba para aprender los nombres de los pokemon.

-Que graciosita Nayeon, ya deja de molestar que estamos hablando de Jeongyeon- Jungkook era un hombre bastante temperamental, callado y reservado pero al entrar en confianza era como una cotorra. Nay o Nayeon era la más relajada de los tres, siempre pensativa y curiosa, sabía de todo sin necesidad de chismosear, el chisme la buscaba a ella. Pero al contrario de eso, ella no divulgaba nada hasta estar en lo cierto, solo le gustaba ser burlona y un tanto metiche con sus amigos.

Mientras ellos discutían como de costumbre Jeongyeon camino hacía su escritorio y revisó en la carpeta de fotografías la foto que le habían pedido, la temporada de verano siempre solía ser la más pesada, los diseños, las modelos y los matices siempre en problemas. Acomodándose los lentes empezó a buscar.

-¿Cuánto falta para la salida?- preguntó Jungkook.

-¿Qué quieren hacer esta noche? Han pasado quinientos años desde que no salimos los tres juntos, ni siquiera para comer un helado. – Jungkook suspiró y trono sus dedos y cuello.

-Tienes razón-sonrío cansado-, pero vivimos en esta ciudad y aquí nada es divertido, siempre son las mismas cosas.

-No te desanimes, oí que hoy se inaugura un nuevo local-esbozo una sonrisa similar al del gato de Alicia en el país de las maravillas-, no desaprovechemos esta oportunidad, hace años no tomo ni un sorbo de alcohol.

-Tomaste la semana pasada en el cumpleaños de tu papá-dijo Jungkook sin mirarla-, me llamaste a las tres de la mañana y lo único que oía eran tus vómitos en el baño.

-Pero fue hace taaanto que ya ni recuerdo la sensación, necesito revivirlo, acompáñanos esta noche Jeongyeon, no te arrepentirás.

-Nayeon, sabes que no tengo ropa llamativa, sabes que solo tengo trajes en mi armario- su amiga negó con la cabeza y sonrió, camino hacia ella y la tomo por los hombros.

-De eso, querida, no te preocupes, que yo me encargaré de todo.

- Gracias, pero prefiero dormir.

Jeongyeon rodó los ojos, sabía lo terca que era y no la iba a presionar.

Como era de costumbre Jeongyeon llegó a su departamento, dejando sus cosas en la en la entrada, estaba cansada y cada musculo de su cuerpo le dolía, trabajaba duro ya que ella era muy estricta consigo misma, no se permitía el mínimo error en su vida, sin importarle nada más que un delicioso baño de agua caliente, empezó a desvestirse mientras caminaba en dirección al baño.

Completamente desnuda se miró al espejo, quitándose los lentes que usaba y ubicándolos sobre el lavabo, tal vez su amiga tenía razón, necesitaba cuidarse, su piel se veía pálida, tenía moretones por falta de buena alimentación, y sus costillas y clavículas se marcaban más de lo normal, al ver todo eso sintió pena por ella misma, no se había dado cuenta el daño que se estaba haciendo.

Su vida había dado un vuelco enorme al decidir mudarse a la ciudad para poder ayudar a su familia con los problemas económicos, era inteligente y eso la había ayudado a abrirse camino en esta loca ciudad, no lograba ver a sus padres muy seguido, sus hermanos se encargaban de ellos, y cada cosa que pasaba no dudaban en llamarla, se sentía perdida sin ellos pero trataba de sobre salir, y no dejarse machacar. Una vez más su mirada subió a su rostro, era joven y tenía permitido divertirse al menos una noche.

Parte 1.

...

Sí, esto es lo que metí al concurso xd, y faltan otros 4 capítulos :'c, y si notan parecido a otra historia es porque tome ciertos diálogos de Fiction, el fanfic de Nayeon y Jungkook que tengo sin actualizar hace más de una década xd