Estaba elevándome en tu mirada, había olvidado lo que se sentía caminar por la orilla del mar una y otra vez, y ver como tus ojos desiertos me atrapaban en un Valls sin fin.

El sudor y las ventanas sabían muy bien que esto no era mentira, que la muerte formó parte de este plan, y que hoy serás más mía que nunca.

Te estreché en mis brazos con fuerza, mientras veíamos las brazas quemarse en compañía del fuego he comenzado a reflexionar, a desear que de alguna u otra forma la historia que nos atrapó, fuese una tejida por los inoportunos momentos que la vida eligió, y no porque tú lo hayas deseado así Jess.

-¿Alguna vez me buscaste...Danny? –Jesse se separó abruptamente.-

¿Y cómo responderle eso?, si tampoco sabía cuál era la razón...

-Yo...

-¡Dilo Danny! –Jesse se ha sobresaltado.-

Ella tomó su ropa y se vistió como si nada hubiese sucedido, desconcertado me he vestido y le he mirado con tristeza, de alguna u otra forma el amor se pausó y la Jesse que yo recordaba no se veía en sus ojos.

-Es algo largo de explicar...

-¡Pero debes de decirme porqué!, ¡Soy yo la que sufrió todo este tiempo lejos de ti! –Se ha abrazado así misma.-

-Te he buscado en cada rincón del mundo, por un largo tiempo estuve haciéndolo...

-¿Y qué sucedió?, ¿Porqué te rendiste? –Confundida se ha acercado hasta mí nuevamente y me ha tomado por los hombros.-

¿Cómo le podía decir en lo que me encontraba inmerso?, si lo hacía ella entraría en el círculo de John, de alguna u otra forma la perseguiría...

He puesto distancia entre los dos y le he mirado con todo valor para no llorar.

-Jesse...tú sabes bien que contigo o sin ti seguiría siendo simplemente yo, nunca te he mentido, pero tú me fallaste, pensé que serías... ¡Más valiente para enfrentar el mundo!

-¿¡Qué dices!? –Ella se ha exaltado frunciendo el ceño.- ¡Tú me engañaste en la última noche! ¡Después de todo lo que yo sentía por ti!

He reído con sarcasmo sin verle, he contestado evitando cualquier contacto visual, no deseaba hacerle caer aquí, en el tablero de la mafia.

-¿Ah sí?... Jesse, ¿de verdad crees que no me enteraría? –Hice una pausa y me voltee a verla.- ¡Tenías una relación escondida con Jim!

-¿¡Qué estupideces dices!? –Se ha sorprendido y ha reído nerviosa.-

-¡No mientas!, te olvidaste de todo con respecto a nosotros, sólo me dejaste la pluma dorada y el viejo cuadernillo donde solíamos escribir... ¿Acaso creíste que te estaría esperando?, Yo no soy un tonto Jess...

El silencio estalló en la cabaña que poco a poco se iluminaba con los rayos del sol, en el rostro de Jesse impotencia y lágrimas sin alma se desbordaban en completo silencio.

Perdóname Jesse...no puedo estar contigo, ser feliz es mi prioridad pero... ¿Cómo podré ser feliz si John te asesina?

Soy un cobarde enamorado Jesse... te quiero ver cuando tus oídos no escuchen del todo, y en tu cabello la nieve predomine...cuando las arrugas te hagan la abuelita más dulce... cuando seas feliz con un hombre que sí te ofrezca la seguridad que mereces...conmigo sólo caerías en un agujero sin fondo.

-¡VETE! –Demandé con ambas manos en los bolsillos viéndola.- ¡VETE Y NO VUELVAS MÁS! ¡No vuelvas a interferir en mi vida! ¿¡Que no ves que ya no soy libre!?

Te juro Jesse que mis manos estaban sudando y mi corazón rodando por la habitación.

Te juro que quiero detenerte y sentir más dolor por la bofetada que me has propinado, pero sin embargo he fingido cobarde y te he dejado marchar.

Me sostuve en la pared y me deslicé en ella observando la luz que entraba por la ventana, he interpuesto la mano entre ella y yo, sollocé y me abracé, era la mejor decisión...

Atormentado por mi vida y por todo lo que se hizo con ella he pensado en quitármela...

He abierto la libreta que tenía en mi bolsillo y he comenzado a escribir todo lo que debí decir a Jesse.

El fin de semana terminó al otro día, oí lo que sucedió con Jim pero él ya no estaba aquí.

Cris estaba sentado adelante con Jesse, yo conducía delante del transfer que los trajo a ellos, intenté verle por el espejo retrovisor, pero ella no me ha permitido nada, se ha ido hasta el fondo.

Yo me lo busqué, de cualquier forma, es lo mejor.

Convencido de esto aceleré y me desvié en el camino hasta Valparaíso, ellos debían ir hasta viña del mar para hacer la cena de cierre de proyectos.

Aun cuando desee ir y estar cerca de ella la conciencia no me lo permitía. ¿En verdad le engañe?, aquella mañana me desperté con resaca, podría haber sucedido cualquier cosa... o nada...

Ryan no lo sabe, él solo recuerda que se marchó sin mí... todos los restantes me observan se reojo o por sobre el hombro, sin lugar a dudas, debí haberme equivocado...

¡Pero desearía recordarlo!, ¡Al menos para saber que yo fui un completo imbécil!

Al llegar a a casa de John, he encontrado a Jessica quién me recibió con un fuerte abrazo y un beso de lo más especial, de seguro algo malo sucedería.

-¿Dónde está mi queridísimo nuero? –John me ha abrazado golpeando mi espalda.- ¿Te ha ido bien en la nieve?

No le he abrazado, me he quedado estático, el calor me invadía y las ganas de destruirle el rostro me comenzaban a ganar.

He pasado empujándole levemente, subí las escaleras y me dirigí al baño.

Aflojé mi corbata y me eché agua helada en el rostro, en verdad estaba acabado.

-¿Y ahora qué?, Papá...

Me he paseado por el pasillo del segundo piso de forma inquieta, Jessica y John estaban comenzando a poner los cubiertos en la mesa, eso les mantendría entretenidos por un tiempo.

La puerta de la habitación de John estaba abierta, me he tentado, ¿Y sí encontraba algo que le hiciera sufrir?, entonces podría estar con Jesse a cambio de aquello que lo hace sufrir...

He dudado mirando la escalera. ¿Qué dirías tú papá?, de seguro me dirías que no.

Pero ya era tarde, mi pie estaba dentro y mi existencia también.

He saltado al baúl donde él guarda algunas de sus armas, he comenzado a apartar lo que allí dentro había, me percaté de la existencia de un doble fondo.

-Así que aquí guardas tus cosas John...bueno vamos a ver hasta dónde llegas con todo esto...

He alzado una ceja mientras agarraba numerosos sobres con encargos de dudosa procedencia, bastante normal para alguien como John.

El tiempo se comenzaba a acabar, los pasos de alguien subiendo la escalera me alarmaron y he comenzado a revolver aun más rápido los sobres.

Me he quedado perplejo al leer el remite de uno de ellos.

-"Abigail"

¿Abigail?, No debemos estar hablando de la misma y luego... estas copias de unos pasajes a España...

La puerta se ha abierto, he volteado la mirada y...