Y ahí estaba nuevamente Chris.

Caminando mal, debido a que hace un momento se encontraba en la habitación de woojin.

¿Hace falta decir que pasó?

Las piernas de chan temblaban, quizás no soportaría mucho de pie.

Apoyaba su mano en la pared para poder sostenerse bien.

Su cabeza gacha, para esconder su carita de tristeza y sufrimiento.

Muñequita, muñequita, ¿Rogar no funcionó?

Chan rogó libertad, rogó porque el monstruo lo dejara en paz para Siempre.

Woojin, no te lo permitió ¿Verdad?

Y claro que no había permitido.

¿Por qué dejaría ir a su muñequita?

Y Woojin ofendido por la idea de chan, lo castigo, lastimó y tomo su cuerpo de manera más violenta que de costumbre.

Un castigo bien merecido, para una muñequita malagradecida.

Chan llego a la puerta de su cuarto, y lentamente la abrió.

Con cuidado entro y cerró la puerta detrás de el.

Con una mano en su vientre y la otra apoyándose en cualquier cosa que pudiese ayudarlo a mantenerse de pie.

Al llegar a la cama se sentó lentamente, al instante pudo sentir un pinchazo en su parte baja.

Duele, ¿No es así?

Chan cuidadosamente se recostó.

Una lágrima se deslizó por su mejilla, para después terminar en la almohada.

Chan solo quería ser libre.

¿Y que puede haber para ti ahí afuera?

Tonta, tonta muñequita.