Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Nuestros caminos se separan (Final Alternativo)

Esto ocurre después del vistazo que Ariana tuvo sobre sus últimos momentos de vida (esta parte es exactamente la misma que en el final verdadero, así que pueden saltársela).

Después de haber sufrido un dolor inmenso por largo rato, mi cuerpo comenzaba a sentirse diferente. Toda la agonía se iba convirtiendo en una indescriptible paz, todo el pesar en mí había desaparecido inesperadamente. Era como aquellos días tranquilos en que mamá me dejaba dormir toda la mañana de verano y la hermosa sensación del aire fresco del ventilador mientras mis dedos tocaban el piano en la sala de estar… ¡Qué tonta! Era inútil anhelar aquella vida que poco había apreciado, en verdad pude haber sido una famosa cantante, pude haber compuesto las mejores canciones y haberme casado con el amor de mi vida, pero mi tiempo allí había terminado y era momento de decirle adiós para siempre. Incluso mi collar, el que me tenía atada a mi pasado, había sido un último regalo de Hiroki. Uno que nunca imaginó que usaría el día de mi funeral… Luego de estos cortos tristes recuerdos, una intensa luz blanca cegó mis ojos por completo…

Narra Meliodas

—¿Qué diablos fue todo eso? —dije soltando el cuerpo inerte de Estarossa, desconcertado al ver cómo se desvanecía Aria.

—Hice un conjuro que guía al alma sin problemas a una nueva vida y mantiene los recuerdos de su vida pasada, pero creo que fallé y Aria no podrá recordar a Estarossa nunca más —explicó Zeldris decepcionado mirando el cielo.

—Oh, ya comprendo —expresé con una sonrisa de satisfacción al escuchar eso último.

—Lamento no haberles sido de ayuda —dijo mi hermano menor algo severo y de la nada me dio un puñetazo en el estómago —¿Por qué hiciste eso? —dijo señalando a nuestro hermano casi muerto.

—No te preocupes, él solo está inconsciente —sonreí, pues no podía decirle que en verdad planeaba matarlo y que por eso había quedado en tan mal estado.

—Nunca cambias, Meliodas —declaró con evidente molestia mientras cargaba sin dificultad alguna el pesado cuerpo de Estarossa —andando —dijo y pronto emprendimos el vuelo.

Narra Estarossa

Mi vida era otra después de haber perdido a Ariana en aquella fatídica noche a causa mía. El terrible sentimiento de culpa me seguía a todas partes. Las cosas para mí eran muy distintas, mi vida carecía de sentido y me invadía la melancolía todo el tiempo. Aunque me era difícil e imposible olvidarla, yo había perdido la esperanza de verla una vez más, pues había perdido la noción del tiempo y quizá el ciclo de su vida ya habría terminado.

Un día Zeldris llegó a mí con una triste expresión en el rostro. Su marca demoníaca estaba desactivada y su rostro era más dulce y tierno que de costumbre.

—Oye Estarossa, me incomoda verte en este estado todos los días —dijo en tono serio y melancólico a la vez —ya no eres el mismo de antes, las cosas que te gustaban ahora las evitas.

—Solo ignórame —contesté a secas.

—No puedo hacer eso ni aunque así lo desees —sonrió acercándose más a mí —¿fuiste a buscarla hoy? —evité el contacto visual a toda costa en cuanto dijo eso, pues tenía unas inmensas ganas de llorar.

—Zel, ya perdí las esperanzas —dije —debo aceptar que se ha ido para siempre.

—Al menos inténtalo una última vez.

—No me jodas, llevo haciendo lo mismo durante años y las cosas siguen igual. No la veo por ningún lado —dije molesto —además quizá ella ni me recuerde —lo miré apenas conteniendo el llanto y la rabia juntas.

—¡Demonios, hermano! No seas tan negativo —contestó con una apacible sonrisa —mueve tu inútil trasero gordo y ve al mundo humano —rio.

—Bueno, bueno, eso haré —contesté con fastidio y sin más opción que tomarle la palabra.

—Vale, espero que al fin puedas verla…Oh, lo olvidaba, esto podría ayudarte en algo —dijo Zeldris entregándome el collar con forma de corazón.

—Creí que se había perdido —dije sorprendido con el collar de Ariana entre las manos.

—Lo guardé después de que colapsaras ese día —dijo y pronto se marchó —te deseo lo mejor, hermano —alcancé a escuchar antes de que desapareciera completamente de mi vista.

Después de emprender mi viaje y llegar a mi destino, caí en cuenta de que las cosas en el mundo de los humanos eran distintas, algunos de los lugares que frecuentaba ya no existían o algunos pocos lucían raramente iguales. Mi búsqueda no había resultado como esperaba y tuve que abarcar un espacio más amplio para continuar, ya que en Japón la presencia de ella ya no se encontraba.

Pasé largo tiempo fuera del purgatorio. Algunas veces me topaba con criaturas desagradables y extrañas que parecían provenir del mismo lugar que yo. En cada país que visitaba las cosas eran demasiado diferentes y me era un poco tedioso tener que lidiar con ello a donde quiera que fuera. Mi viaje había abarcado la mayoría de los continentes del planeta Tierra, excepto uno. Uno que había olvidado por completo. ¿La razón? Se encontraba al otro lado del mundo, más allá de los mares y océanos que conocía. Sí, me refería al continente americano. Al azar tomé un rumbo y seguí volando con la esperanza de obtener un resultado diferente.

Pronto descendí del cielo en cuanto el collar empezó a emitir una extraña luz en cuanto hube llegado a un nuevo país. La calle donde había decido detenerme estaba repleta de gente. Era una zona conurbada poco acogedora y muy ruidosa, y entre todo ese bullicio algo llamó mi atención, o mejor dicho alguien...

La figura que vi por detrás de la esquina de la calle era parecida a como eras antes. Me escabullí por la calle desbordada por la muchedumbre y rápidamente te perseguí.

En aquel tiempo yo pensaba que tú siempre estarías a mi lado, incluso seguí hiriéndote a ti que me querías.

No te dejaré marchar, no te dejaré marchar.

Incluso ahora, ¿te alcanzan mis sentimientos que no han cambiado desde aquel tiempo?

Yo todavía recuerdo el día en que te conocí, mientras el suave viento movía tu cabello, tú me mirabas solo a mí. Seguro que pensabas que yo estaría ahí contigo más que nadie. Si estaba contigo, pensaba que incluso yo podría sonreír.

No me di cuenta de que dejarte marchar sería doloroso, fingí ser fuerte y continué corriendo hasta hoy…

Tú seguiste llorando después de que te desvanecieras y yo me preocupé por ti… pero ahora, cuando te vi caminando cerca de alguien, ya no te conocía, habías crecido un poco y te reías tan maravillosamente. Comprendí que nunca más llorarías, así que por ahora déjame ver tu sonrisa una última vez.

♠♠♠

Este era exactamente el final que yo quería darle a mi historia, pero que por los motivos que les comenté no lo hice. Espero que de igual modo les haya gustado, porque a mí me encantó. Es así el tipo de final que más disfruto hacer.

Nota: para realizar este capítulo utilicé como inspiración otra canción de Gackt (mi cantante japonés favorito), titulada “Missing”, la cual reescribí cambiándole algunas cosas para que quedara aun mejor con el tipo de narración que manejé.

Pd. L@s invito a leer mis demás fanfics: "La aprendiz del Mandamiento del Amor" y mi nueva historia "Save me Mael". ¡Les encantarán!💛

¡Hasta pronto!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro