Se podían ver caminando por la aldea a cuatro personas con una llamativa túnica negra, la cual llevaba pintada nuves rojas en ella

Tenían un sobrero de paja el cual cubría su rostros, ya que de este caían pequeñas tiras blancas con un cascabel que sonaba atrayendo la atención.

Las personas atraían la atención de todos, ya que los aldeanos sabían que Akatsuki era un grupo pasifista, por lo cual eran bien recibidos en Konoha.

Los del grupo no se detuvieron hasta llegar a la oficina del Hokage, donde este ya los esperaba con una sonrisa, aunque un poco sorprendido por la visita tan repentina.

-Bienvenidos a Konoha, me alegra verte de nuevo Nagato. —Le dijo Minato con formalidad aún sin dejar su lado amable. Siempre que Akatsuki llegaba a la aldea su líder Nagato venía con ellos, así que supuso que está vez sería igual aunque no los haya visto bien aun.

-¡Papa!. —Grito Naruto ya no aguantando la emoción de verlo de nuevo, haciendo que el gorro cayera al piso porque el rubio menor salto por el escritorio libre de documentos a los brazos de Minato.

-¿¡Naruto!?. —Le dijo con sorpresa, aceptando el abrazo y estrujandolo, no había dado con su paradero en tres años y había pensado lo peor, lo había extrañado tanto.—Mirate, has crecido tanto que no te reconocía..

Y eso era cierto, su pequeño niño había cambiado tanto, sus rasgos se volvieron más finos, su cuerpo un poco más delgado y era todo un adolescente.

-Minato te traje tu almuer.. —Las palabras de Kushina quedaron atoradas en su garganta al ver a quien abrazaba Minato.

Tiro el almuerzo de Minato al suelo, pero no le importo ya que corrió hasta Naruto dándole un fuerte abrazo.

Naruto aceptó el abrazo por parte de sus padres, los había extrañado demasiado, pero justo en ese momento sintió un fuerte golpe por parte de su madre.

-¡Itai!.. —Se quejo mientras se sobaba, seguro eso dejaría un moretón.

-¡Como se te ocurre Namikaze Naruto irte de la aldea!. —Le reclamo Kushina con lágrimas en los ojos. —¡Espero que tengas una gran explicación! ¡Sabes cuanto tiempo te estuvimos buscando!

-En verdad no quise irme, pero Ero-sanin..

-¡Así que fue Jiraiya-Sama!, ¡Cuando lo vea, ese pervertido me va escuchar!. —Dijo Kushina con enojo haciendo a Naruto tragar en seco, tal vez no fue buena idea echar de cabeza a su sensei.. —¿Te hizo algo? Dime por favor que no te obligó a leer sus horribles libros..

-Mamá tranquila. —Le dijo Naruto con una sonrisa. —Estoy bien y Ero-sanin no fue por la razón que me fui, prometo contarte todo. —Le dijo tomando sus manos para tranquilizarla.

-Muchas gracias por traer de vuelta a mi hijo. —Les dijo Minato a las tres personas de Akatsuki, agachado su cabeza haciendo que los tres se sorprendieran.

-Por favor levante la cabeza hokage-sama. —Le dijo Yahiko quitándose su sombrero de paja.

-Naruto nunca nos dijo que escapó, sino hubieramos enviado una carta para que supieran que estaba con nosotros. —Les dijo Konan soltando un suspiro mientras se quitaba su sombrero, para luego ver al rubio menor con enfado.

Naruto le sonrió con algo de culpa, si se le había olvidado decir ese pequeño inconveniente..

-Estuvo los tres años con nosotros, aveces viajaba con Jiraiya-sensei por unos meses pero puedo asegurar que estuvo a salvo. —Les dijo Nagato con una sonrisa. —Naruto-kun se unió a akatsuki y cuando quiera puede regresar al país de la lluvia..

Minato vio a Naruto con sorpresa, y noto que era cierto ya que llevaba la capa de la organización..

-Además quisiéramos hacer un tratado de paz con Konoha, ya que gracias a Naruto, Akatsuki tiene poder sobre el país de la lluvia. —Le dijo Konan con una sonrisa, sorprendiendo a Minato y Kushina.

Gracias a el rubio habían podido derrotar a Hanzo de las salamandras, ya que este les había hecho una trampa secuestrando a Konan, pero Naruto la salvo rápido con el jutsu de teletransportacion, haciendo que sin tener un ren, Hanzo no tuviera opción más que rendirse.

Kushina abrazo fuertemente a Naruto, estaba orgullosa de él, aún seguía furiosa por cómo se fue, pero el rubio hizo cosas muy buenas.

-Me parece excelente, cualquier apoyo que necesiten cuenten con Konoha, pero el papeleo toma su tiempo así que pediré que los alojen ya que deben estar cansados del viaje. —Les dijo Minato con una sonrisa, para luego revolver los cabellos de Naruto. —Yo pronto dejaré de ser Hokage pero mi predecesor es igual o más capas que yo, así que les juro que no habrá inconvenientes..

Naruto con esas palabras recordó que hacía ahí, si fuera por él sinceramente no hubiera regresado a la aldea, pero había prometido estar ahí..

-Seguro que quieres felicitarlo. —Le dijo Minato revolviendo su cabello, entendiendo lo que Naruto quería. —Ve, le alegrará verte..

Naruto asintió, se quito su capa de akatsuki y se despidió de sus amigos prometiendo volver para llevarlos a cenar al mejor restaurante y salió corriendo.

Mientras iba caminando por la aldea pudo verlo junto a una rubia, y sin evitarlo se lanzó hacia él.

-¡Shikamaru! —Le grito con alegría.

El mayor lo volteo a ver con sorpresa y apenas pudo sostenerlo antes de caer al suelo..

-Idiota, ¿Donde estaba?.—Le dijo con gracia aceptando el abrazo. —Que fastidio..

Temari los ayudó a levantarse y también la saludo a ella.

-Así que, ¿están en una cita?. —Les pregunto con una mirada cómplice haciendo que los dos se sonrojaran un poco.

-Claro que no, solo vine para arreglar unos papeles de los exámenes chunin. —Le dijo la pelirubia aun con su sonrojo.

-Cierto, no pude participar. —Murmuró el rubio con una sonrisa apenada.

-A Gaara le alegrará saber que volviste a la aldea y que no estas muerto.. —Le dijo Temari soltando un suspiro, haciendo que hiciera un puchero y Shikamaru riera.

-Tienes razón, tengo que ir a verlo. —Le dijo el rubio y en eso una idea llegó a él.. —Shikamaru podría acompañarme. —Le dijo sosteniendo a este de los hombros, haciendo que dejara de reir. —Así podríamos tener una cita doble..

-¿Qué?. —Gritaron los dos haciendo que el rubio se aturdiera un poco.

-Oh vamos será divertido, ¿Qué dices Shika?. —Le dijo empujando a este frente a la alfa.

-¿Quieres ir a una cita conmigo?. —Le preguntó con un suspiro, y aunque se notaba tranquilo, estaba más que nervioso..

Temari se sonrojo, agachó la cabeza un poco mientras asentia.

El rubio celebró internamente por su logro, él y Shikamaru acompañaron a Temari a la entrada de la aldea y se despidieron, prometiendo ir después de la ceremonia del nuevo hokage.

-En que me has metido. —Suspiro Shikamaru mientras caminaban por la aldea.

-Oh vamos, se que ella te gusta. —Le dijo Naruto abrazándolo por los hombros. —Que fastidio, deberías darme las gracias..

-Esa es mi frase. —Le dijo Shikamaru con gracia.— Y ¿Como piensas hacer para que te den una misión a Suna?

-De qué sirve tener un amigo que es hijo del hokage, sino utilizas estos beneficios. —Le dijo con gracia, haciendo al pelinegro hacer un puchero.

-Yo no soy tu amigo por eso..

Decidieron caminar por la aldea, el rubio le contaba todo lo que había echo en ese tiempo y pasaron por un pequeño mercado.

Naruto veía todo con una sonrisa, pegándole esta alegría a los tenderos ya que empezó a comprar golosinas y demás cosas innecesarias, mientras Shikamaru solo lo seguía logró ver a alguien..

-Mira, ahí esta Kakashi-sensei. —Le dijo Shikamaru, pensando que el rubio se alegraría..

Naruto se encontraba comiendo de una banderilla con una sonrisa y justo cuando se lo dijo, noto como paro de sonreír al ver a Kakashi..

El peliplata estaba al parecer dando un paseo con una castaña.

-Ella es Rin, ¿verdad? . —Murmuró Naruto al verla cerca de Kakashi. —En verdad es una chica linda.. —Dijo mientras hacía una mueca. —No puedo evitar sentirme celoso..

Shikamaru se quedó callado, el rubio no se dio cuenta de lo que dijo y él prefirió no hacérselo notar, ya que al ver su expresión estaba claramente dolido..

Los dos vieron como pasaron por un puesto, Rin pareció decirle algo al peliplata y este le sonrió..

-"Esta sonriendo.."—Pensó el rubio mientras veía a Kakashi . —Él nunca me ha mostrado esa expresión. —Murmuró sintiéndose miserable..

Shikamaru tomó su mano y lo saco de ahí, una vez fuera del mercado decidieron seguir caminando, su intención nunca fue hacer sentir mal a Naruto y la expresión que este había puesto por su culpa nunca se la perdonaría.

El rubio pareció no darle mucha importancia, mientras caminaban le ofreció dangos y vio cómo su sonrisa volvió.

-Naruto, perdoname.. —Le dijo Shikamaru tomando una banderilla de dangos, haciendo que el rubio lo mirara confundido.

-Nh, ¿Porque?. —Le preguntó Naruto curioso sin entender.

-Fui yo.. Quien los vio. —Le dijo Shikamaru haciendo una mueca, sorprendiendo al rubio.

-No te pongas triste. —Le dijo Naruto mientras se aventaba a él en un abrazo, quedando en su pecho mientras recordaba lo de hace un rato, Shikamaru lo había notado era demasiado listo como para no hacerlo—Yo estoy bien, se aparentar.

-¿Estas triste?. —Le pregunto Shikamaru en un murmuró aceptando el abrazo.

-Nh... Si. —Le dijo Naruto con una sonrisa, recordando a Rin. —Su cabello es tan lindo, si dejo crecer el mio no será igual.. Que envidia.

Shikamaru hizo una mueca dolida al escucharlo y el rubio río al verlo.

-Solo bromeó. —Le dijo Naruto con una sonrisa, pero Shikamaru no creyó que fuera una broma.

-Naruto.. —Le llamo Shikamaru haciendo que levantara su cabeza para verlo.

-¿Si?

-Te extrañe. —Le dijo con una sonrisa sincera, haciendo a Naruto reir.

-¡Aww! Yo también. —Le dijo abrazándolo más fuerte, haciendo a Shikamaru también reír, pero entonces logró verlo..

Shikamaru sabía que el peliplata estaba demasiado raro desde la desaparición del rubio, creyó que era normal ya que todos estaban preocupados, pero ahora sólo tenía que unir los puntos para darse cuenta.

Tomó a Naruto del mentón y lo acercó a él, el rubio lo miró con clara confusión cuando le dio un beso en la nariz.

Miró como Shikamaru le sonreía a alguien detrás de ellos, así que volteo a ver que sucedia.

-Kakashi..

-¡Vamos Kakashi! Es un mercado de pulgas te aseguro que te divertirás. —Le dijo Rin con una sonrisa.

Desde que el rubio se había ido esto había afectado considerablemente a sus dos compañeros de equipo, ella no lo entendía así que los había invitado a salir.

-Gracias por la invitación, pero prefiero quedarme en casa. —Les dijo discuesto a cerrar la puerta, pero Obito lo tomó del brazo y lo detuvo.

-Por supuesto que no, nunca quieres salir desde que se fue y no dejaremos que te pudras solo en esta casa.—Le dijo Obito casi arrastrando lo.

Kakashi suspiro que más daba, si él y Obito se sentían igual de culpables por lo que había pasado desde la última vez que vieron a Naruto..

Rin y Obito se pusieron a mirar los puestos animadamente, mientras el caminaba detrás de ellos.

-Iré por unos dangos. —Les aviso mientras se alejaba de ellos.

Rin asintio, y pudo notar que Kakashi no la estaba pasando bien.

Miró un puesto detrás de ellos y vio algo lindo que llamó su atención.

-Mira Kakashi. —Le dijo Rin con una sonrisa sosteniendo el sapito pequeño de juguete en sus manos. —¿No es adorable?

A Kakashi le llegó un pequeño recuerdo al ver ese sapito y sonrió.

-Si, lo es. —Le dijo con una sonrisa haciendo sonrojar a Rin.

Justo en ese momento llegó Obito y les entregó un dango a cada uno, pero antes de que Kakashi bajara su máscara para comerlo, logro ver algo que le hizo tirar el dango.

-Hey que pasa ¿Olia mal?. —Le preguntó Obito sin entender su comportamiento, pero Kakashi salió corriendo como un loco. —¡Kakashi!. —Le grito Obito con preocupación, y él y Rin decidieron seguirlo.

Estaba seguro que lo había visto junto al estudiante de Azuma, corrió y al no encontrarlo por ningún lado invoco a Pakun, este conocía el olor del rubio de momeria así que lo guió fuera del mercado.

-Naruto. —Murmuró al verlo, claro que estaba feliz.

Pero esa felicidad pasó enojo, y sintió como su sangre hervía al ver la escena.

Ese maldito mocoso se atrevió a besar a su rubio, y no sólo eso, si no que le sonreía triunfante..

-Kakashi..

Recuerdo que tuvo al ver el sapito..

Se encontraba entrenando al equipo siete después del ataque de Zabuza.

Les enseñó a escalar árboles usando chakra pero ya que el rubio sabía hacerlo, solo lo estaban haciendo Sakura y Sasuke..

El rubio estaba cerca de un arrolló, aprendiendo a invocar sapos ya que su padre le dijo que podía firmar el contrato.

Él por su parte se encontraba acostado en un árbol leyendo su libro, pero al lograr escuchar un grito de Naruto corrió hacia dónde estaba sin importarle nada.

-Kakashi lo logre. —Le dijo Naruto emocionado.

Kakashi suspiro aliviado, no había sido algo malo, se acercó a dónde estaba Naruto y se puso también en cuclillas, viendo que este veía un pequeño sapito.

-No es adorable. —Le dijo comenzando a reír.