A la mañana siguiente despertó algo mareado, odiaba el celo, esto era algo horrible..

Escucho un ronquido que lo hizo asustarse un poco, y se dio cuenta que estaba Obito a su lado dormido.

Sonrió, agradecia el echo de que se hubiera quedado a su lado, vio varios frascos con medicamento especial al lado del tocador, lo que le comprobaba que el mayor los había estado tomando para estarlo cuidando y evitar oler sus feromonas.

Se levantó de la cama y fue a lavarse la cara ya que aún se sentía desconcertado, además conocía la casa como la palma de su mano ya que paso ahí gran parte de su niñez.

Al llegar mientras se limpiaba su cara en el lavamanos, alzó el rostro viendo su reflejo en el espejo y gracias a que tenía la yukata un poco desarreglada vio una marca roja en su cuello.

Las que Kakashi le había hecho ya habían desaparecido gracias a Kurama, por lo cual era más que obvio que era la de Obito..

Esta no se había curado gracias a que no podía hablar con Kurama, este le había dicho que por el celo su comunicación se vería interferida y por ello también el chakra que lo ayudaba.

-Juro que eso fue lo único que te hice. —Le dijo el mayor viéndolo desde el marco de la puerta, la cual estaba abierta.

Ni siquiera sabía cuánto tiempo llevaba ahí parado..

-No importa sólo voy a ocultarla. —Le dijo mientras la tapaba acomodándose la yukata.

-En verdad lo siento Naru. —Le dijo Obito soltando un suspiro. —Casi te muerdo..

-Pero no lo hiciste. —Le dijo Naruto con una sonrisa. —Así que no te preocupes.

El rubio fue hacia la cocina y sin importarle nada hizo el desayuno, sabía que el mayor no le diría nada..

Mientras desayunaban el silencio era algo incomodo, algo que molestaba al mayor y por ello decidió romperlo.

-Hoy es tu salida a Suna ¿No es así?. —Le pregunto Obito haciendo al rubio sorprenderse ya que lo había olvidado.

-Si, pero podré manejarlo. —Sabía que podría controlar su celo con supresores, o eso esperaba..

-Iras con un alfa, puede que algo llegue a pasar. —Le aclaro con preocupación Obito.

-Shikamaru no me hará daño. —Le respondió con seguridad.—Ademas usará el medicamento, no hay manera que pueda olerme..

Obito no dijo nada más, sabía que el rubio no cambiaría sus planes y aunque se lo prohibiera, encontraría la manera de irse.

Después de lo de anoche, Naruto de verdad quería salir de la aldea..

Una vez desayunaron el rubio se despidió de su Hokage con un fuerte abrazo, y fue hacia su casa.

Había veces que amaba sus kunais ya que así pudo aparecer en su habitación, tomó un baño para quitarse cualquier rastro de olor de Kakashi y hasta de Obito..

Tallo su piel hasta que ardió, no quería tener el olor de nadie, menos de Kakashi.

Al terminar uso supresores, y coloco un collar en su cuello por si acaso, odiaba usar eso, aunque el collar era lindo, un regalo de su madre..

Pero aún asi nunca lo había usado, era algo demasiado denigrante para él, pero se mentía si decía que lo de anoche no le había dado miedo.

Cuando salió de su cuarto fue interceptado por los tres miembros de Akatsuki, quienes al parecer ya tenían que irse, nunca había querido tanto ir con ellos.

Se estaba despidiendo de Nagato, Yahiko y Konan en la puerta de la aldea, sabía que tendría que alejarse de ellos pero no pensó que dolería tanto.

-Konan ya suelta lo. —Le dijo Nagato soltando una carcajada.

-¿Cómo quieres que suelte a alguien que crié como mi hijo?. —Le dijo Konan apretando más a Naruto entre sus brazos. —Que Kushina-San me perdone, pero te robare..

Naruto no pudo evitar reír, Konan siempre lo cuido demasiado ya que estaba enfermo aún cuando llegó con ellos, además de que fue como una hermana sobreprotectora siempre.

-Sabes que vendrá de visita una semana al mes. —Le dijo Yahiko entre risas. —Además lo estás acaparando yo también me quiero despedir.

Konan le saco la lengua a Yahiko de manera infantil y entre queriendo y no, soltó al rubio.

-Solo promete que iras. —Le dijo Konan con un puchero.

-Cada semana de fin de mes. —Le dijo Naruto dándole una brillante sonrisa que hizo sonrojar a Konan.

-¡Kyaa! Naruto eres muy lindo. —Le dijo Konan apretando sus mejillas. —Si no supiera que tu corazón está ocupado, correría a tus brazos. —Le dijo con gracia haciendo sonrojar a Naruto.

-Hey. —Les reclamo Yahiko con un puchero.

-A cierto, y si no tuviera un lazo con Yahiko. —Le dijo entre risas Konan al ver al pelinaranja molesto.

Nagato al ver discutir a Konan y Yahiko como siempre, aprovecho para despedirse de Naruto.

-No dejes que nadie más te lastime. —Le dijo Nagato con una sonrisa comprensiva, resibiendo un asentimiento del rubio y un abrazo.

-Y si llega a pasar de nuevo creeme que descubriremos quien es tu destinado, para golpearlo. —Le dijo Yahiko soltando un suspiro—Aunque también si no te sientes comodo puedes irte con nosotros..

-Gracias chicos, pero me quedare. —Les dijo Naruto con una sonrisa, para después de separarse de Nagato también abrazar a Yahiko.

-Sabes que somos tu familia, así que sabes donde ir si pasa algo.—Le dijo Yahiko dejando un beso en la cabellera rubia mientras lo abrazaba ya que Naruto era más pequeño.

-Lo sé, chicos..

Después de ver como sus amigos se iban, decidió ir camino a su casa para prepararse para su viaje.

Mientras caminaba hacia su casa, pudo ver a Kakashi, se escondió, agradeciendo el que no lo haya notado.

Ya que este hablaba con su madre, lo único que se le ocurrió fue usar sus kunais para aparecer en su cuarto.

Solo se sintió seguro de salir cuando escucho la puerta cerrarse.

-¿Quién era mami?. —Preguntó con inocencia bajando las escaleras.

-¡Naruto!. —Grito Kushina dando un salto, ya que ella pensaba que no estaba en la casa. —¡Un día de estos me vas a matar del susto!. —Le regaño pegándole con un trapo de cocina, haciendo reír al rubio.—¿Cuantos les cuesta a ti y a tu padre entrar por la puerta?

-Lo siento, no era mi intención asustarte. —Le dijo con una sonrisa acercándose a ella y dándole un beso en la frente.

Kushina lo abrazo con cariño, para después dirigirse los dos a la cocina y sentarse a comer lo que había preparado la pelirroja.

-Kakashi vino a verte. —Comentó Kushina haciendo que Naruto se tensar a un poco, pero intento actuar lo más normal que pudo.

-¿Así? ¿Te dijo porque?. —Le dijo mientras seguía comiendo, sin mostrar mucho interés.

-Sabe que hoy es tu misión a Suna y quería despedirse de ti. —Menciono la pelirroja mientras examinaba sus expresiones. —No me dijiste que estuviste con él anoche..

-Solo estuve un tiempo, luego él se fue con Rin. —Le dijo con simpleza, sintiendo una incomodidad en el pecho al recordar lo ocurrido.

-Naru.. —Le llamó su madre para que la mirara a los ojos. —Sabes que puedes contarme todo lo que te pase..

Naruto vio a su madre, había tantas cosas que querían salir de su boca pero sólo pudo decir un "lo se" con una sonrisa..

Kushina le devolvió la sonrisa, ¿Si ella sabía de la relación de su bebé con Kakashi?, por supuesto, pero no quería presionarlo para que le dijera, sabía que Naruto lo diría cuando estuviera listo.

Al terminar de comer, Naruto ayudó a su madre a lavar y secar los trastes antes de irse..

-Sabes que puedes ser el omega de quien quieras. —Le dijo Kushina apretando una de sus mejillas, para después salir de la cocina.

Naruto por inercia llevó su mano al collar, ese era el problema, él no quería perteneserle a nadie.

Sin más fue a preparar sus cosas y una vez acabó salió rumbo hacia la entrada de la aldea, ya que ahí habían quedado de verse Shika.

Al llegar lo saludo y mientras planeaban irse por la ruta más larga, ya que era un viaje más para perder el tiempo que una misión, sintieron como alguien los abrazaba de los hombros a cada uno..

-¿¡Y tu que rayos haces aquí.. —Exigió saber el rubio, viendo mal al azabache.

-No seas tan malo con tu Hokage Naru. —Le dijo Obito dolido tocando su pecho.

-¿Hokage-Sama porque saldrá de la aldea?. —Le pregunto Shikamaru soltando un suspiro, para evitar que los dos pelearán.

-Tampoco sean tan formales.. —Le dijo Obito haciendo una mueca. —Y con respecto a tu pregunta, tengo que ir a Suna a firmar de nuevo la alianza, ya que soy el nuevo Hokage me tengo que presentar con nuestros aliados..

Naruto lo vio con una venita en su frente, el idiota de Obito solo quería vigilar que nada le pasara, lo agradecía, pero a la vez también lo odiaba por no confiar en él..

-Bien chicos, ¿Qué les parece viajar con su fuerte y atractivo Hokage?. —Les dijo haciendo que Shikamaru y Naruto se vieran entre sí..

-Difiero con eso de atractivo.. —Murmuró Naruto a Shikamaru quien río ante su comentario.

-Oye, te escuché. —Le dijo Obito haciendo un puchero. —Vamos será divertido.. —Les dijo con una sonrisa

Naruto y Shikamaru solo suspiraron y avanzaron siguiendo a Obito, quien había tomado la delantera.

El rubio se tenso al sentir una mirada en él, uso su modo sabio para ver quién podría ser y pudo sentir su energía..

No se sorprendió, sabía que sí Obito se convertía en Hokage, Kakashi sería su primer elección para ser su anbu.

Suspiro y siguió su camino junto con Shikamaru y ahora Obito..

El mayor hacia todo mas ameno, aunque él aún seguía enojado todo iba bien.

Cuando él sol estaba por ocultarse hicieron un pequeño campamento, ya que no esperaban que el Hokage se quedara con ellos..

Naruto hizo una pequeña fogata y Obito la encendió.

-Bien, creo que hay un lago cerca podemos pescar unos peces ahí. —Propuso el mayor con entusiasmo, pero los dos más jóvenes sólo lo vieron como si le hubiera salido un tercer ojo.

-Si quieres comer pescado adelante. —Le dijo Naruto sacando un pergamino, hizo un par de sellos y de este pergamino salieron dos platos, una toper con barbacoa y un pequeño cazo para calentarla.

Obito los vio ofendido, y le se sento a su lado haciendo un puchero, Naruto calentó la barbacoa la cual era la preferida de su amigo y después comenzaron a comer, claro, compartiendo le al Hokage..

Shikamaru se propuso para hacer la guardia primero, él aceptó y le dijo al pelinegro que lo despertará pasado cuatro horas, para así seguir vigilando y que Shikamaru pudiera dormir algo.

Obito había caído dormido enseguida después de cenar, suspiro y lo cubrió con su manta, él ya tenía una capa para el frío así que no importaba.

-Pará ser el Hokage, parece más un niño. —Menciono con gracia Shikamaru, al ver que cubría a Obito.—Si pasa algo gritas.. —Le dijo con una sonrisa.

Naruto hizo un puchero, pero antes de reclamar, el pelinegro ya se había ido para hacer guardia a unos 10 metros de ahí.

Se recostó en un árbol, el collar le incomodaba, era algo que nunca había usado así que decidió quitarlo para dormir.

No tardó mucho en caer en el mundo de los sueños, pero no supo en que momento de la noche despertó, por unos labios sobre los suyos.

Abrió los ojos como platos al ver que Kakashi lo besaba de manera dulce, ni siquiera pudo corresponder, se sentía tan confundido.

-Naruto te amo. —Le dijo el peliplata una ves se separaron y lo abrazo.

El rubio aún seguía en shok, el peliplata nunca le había dicho aquello, sentía sus mejillas arder, pero ese momento pasó rápidamente a segundo plano..

Supo que lo había logrado ver, Kurama aún no podía curarlo y aún con la tenue luz de la fogata Kakashi vio la marca que Obito le había echo en su cuello la noche anterior.

Cuando se separaron tembló un poco por la reacción del peliplata, estaba molesto, vio como frunció el ceño y apretaba sus puños.

-No es lo que crees.. —Murmuró sin pensarlo, pero Kakashi solo se levantó puso su mascara anbu y se fue.

Quiso gritarle, ir tras él y explicarle, pero al recordar el beso con Rin no se movió, el que tenía que explicar algo ahí era Kakashi no él..

Asi que sin más volvió a dormir, sin importarle el ruido del árbol cayendo a unos metros que despertó a Obito..