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Capitulo 4: 👇

"El misterio de la vida no es un problema a resolver, sino una realidad a experimentar"...



Narra Cleo.

Habíamos decidído visitar el gran descubrimiento de Alex, mamá tenía puesto un vestido blanco largo con un tajo al costado de su pierna y un tapado del mismo color muy elegante, papá con un saco color negro, y yo un vestido largo color azul marino. Decidimos rentar un carro pero era algo pequeño e hibamos algo apretados, Papa manejaba, mama a su lado, Alex atrás de papa yo en el medio ya que mi tío hiba a mi lado contra la puerta del auto, habia cambiado mucho pero no lo podia ver de esa forma aunque no fuera mi hermano de sangre lo era igual suspiré rendida a mis pensamientos.

—Hubiera sido mas rapido en un carrito Rickshaw.—Se quejo papá.

—Es el año nuevo Chino.—Le comento mamá obvia.

—¿No te encanta un país con tantos días festivos?, y beber es obligatorio.—Explico mi tío, que hiba al lado de la puerta.

—Es increíble que vayamos a ver tu primer descubrimiento, es increíble.—Exclamo mamá orgullosa dándose vuelta y viéndolo Alex sonrió orgulloso, rodee los ojos.—Hija, ¿Acaso no estás orgullosa de tu hermano?.—Me preguntó mamá viéndome Alex también me miro y sentí la mirada de papá sobre el espejito.

—Claro, ya que no pudo hacer otra excavación como el quería.—Lo mire cruzada de brazos este levantó su ceja entendiendo mi mensaje.—Espero y este no cobre vida, solamente eso.

—Despues de lo de anoche, me sorprende que quieran ir a ver.—Comento ironico Alex.

—Mama... Espero y te guste lo que descubrí.—Le dijo su hijo con una sonrisa.

—Llegamos a nuestro destino.—Aviso papá.

—Les parece que pase por ustedes en una hora.—Propuso Jonathan mientras nos bajamos del auto.

—¿No nos acompañaras?.—Le pregunte llegando a su lado.

—No, no ya eh visto suficientes momias en mi vida.—Dijo mi tío, lo ví irse, mamá tomo mi mano a si que la seguí entrando al museo y viendo cada reliquia que se encontraba allí.

—Ahi está.—Dijo Alex señalandolo con sus brazos mamá y yo lo obserbamos sorprendidas.

—Es el emperador Dragón.—Dije yo más Serca de la tumba, acariciando un caballo de hierro.

—Mi cielo es sorprendente.—Le dijo mamá acariciando su espalda.

—¿Cuando abrirás el sarcófago?.—Le pregunto papá.

—Cuando corte la cinta roja oficial.—Dijo Alex.

—La frase "Descanse en paz", significa algo para ustedes.—Comento papá.

—Oye mamá, por qué no se quedan unos días y la abrimos juntos.—Propuso Alex, mamá me miró y luego a su esposo ella si quería.

—No gracias, haber si revive y ahí que acabar de nuevo.—Dije viendo la estatua.

—Hija.—Me regaño mamá.

—Dejala mamá, ella está celosa ya que nadie hace expedición con ella.—Entendi esa referencia y me aserque a él muy molesta.

—Repite lo que dijiste.—Dije entre dientes, mamá se puso entre nosotros.

—Calma niños ya es suficiente.—Exclamo ella, Alex rio victorioso, decidí ir para otro lado.

—Alex quieres contactar al profesor Wilson y decirles que estamos aquí.—Comento Rick.

—Si papá.—Dijo Llendose pero se giró viéndonos.—Oh por cierto, no lo despierten.—Dijo chistoso, rodee los ojos molesta, papá se rió por el chiste haciendo una x en su pecho luego me miró borrando su sonrisa.

—Oye Alex.—Papa se dirijio a su hijo y este se detuvo viendolo.—Esto es algo muy... Muy significativo.—Le dijo papá dando todo de si, levantándome su pulgar.

—Si lo que tú digas.—Dijo Alex llendose, papá mira a mamá y está suspira llendose yo solo rodee los ojos una vez más molesta  "Hombres", pensó mi vos interior.

—¿Qué?, ¿Qué dije?.—Dijo el a la nada.



Narra Alex.

Decidí ir en busca del profesor caminando por un pasillo largo  me detuve en una esquina ya que sentí pasos y me voltee a ver pero no había nadie. Seguí mi instinto.









Narra Evi.

Estaba observando atentamente la estatua cuando siento que mi esposo me silvo, a si que lo mire.—¿Qué?.—Le dije sin entender.

—Que te rodea un resplandor que hace años no veía en ti.—Me dijo, mi hija estaba sentada a un sofá de el y nos miró raro.

—Las momias sacan lo mejor de mi.—Dije y el se asercó muy Serca de mi para besarme.

—Aish consiganse una habitación, por favor.—Escuche el susurro de mi hija sonreí.

—¿Se desviaron del Cairo?.—Llego un hombre cortando el momento.—Hola siento interrumpir.

—Roger.—Lo saludé.

—Prof. Roger Wilson.—Saludo mi esposo estrecharon mano.

—Hola Rick.—Saludo el.—Cuando Alex me dijo que usted estaba aquí no lo podía creerlo.

—Bueno, ahora saqueo tumbas de la conservacion, Nathifa.—Dijo el profesor.

—Evelin.—Tomo mi mano.

—Felicitaciones por el reciente descubrimiento.—Lo felicité.—Oh, ella es mi otra hija.—Solo le sonreí al hombre no me agradaba.

—Alex merece todo el crédito, exelente muchacho.—Alago, "Chupamedias", exclamó mi voz interior.

—Vaya es idéntica a su madre, adivino ¿Futura arqueóloga?.—Me preguntó, mi madre me miró con su cara de contesta o hablo yo.

—Puede ser.—El hombre sonrió.

—Si igual que Alex, como el hijo que nunca tuve.—Comento orgulloso de él "DEPASO ME COMPARO CON ALEX, AHHSSS", grito mi vos interior.

—Si y el único hijo que tenemos a si que la próxima vez que lo envíae a una excavación avísenos.—Comento papá.

—Si, si desde luego ahora creo que tienen algo que me pertenece.—Dijo el profesor.

—¿Que será?.—Pregunto Mamá.

—Aahh, habla de esto.—Dijo papá lanzando el huevo y atrapandolo, al viejo casi le da un infarto.

—Lo siento.—Lo atrapó con su otra mano.—Lo siento todo suyo.—Dijo y el huevo cayó en lasanos del anciano, este suspiró aliviado.

—Aaah ustedes si que son de confianza.—Dijo alagandolos.

—Creo que su misión no ah concluido Sr. Y Sra O'cconel.—Dijo la voz del hombre  entrando interrumpiendo, era una mujer y un hombre con su uniforme de soldados, mamá me puso atrás de ella para protegerme.

—Quiero presentarles a dos amigos míos.—Dijo el profesor y saco su arma.—El General Yang.—Dijo apuntandonos, papá se coloco en frente de nosotras.

—Yo sabía que no era de confiar.—Le grite al viejo y este me apunto, mamá se puso al frente mío. El general le hizo reverencia a la tumba.

—El es quien finanzio la escabacion de Alex somos socios, tenga general.—Dijo y le lanzó el ojo.

—Registrelo.—Ordeno y Roget se asercó a mi esposo para sacarle todas sus armas.

—No, el ojo le pertenece al pueblo de china no puede hacer esto.—Le dijo mi hija.

—Oh, Roger traidor como cuanto Ying y Yang te pagaron.—Le hablo Rick.

—Suficiente para mover algunos hilos, suficiente para que ustedes devolvieran el ojo, hacia atrás.—Ordeno dando vuelta a mi esposo.

—El ojo guarda el elixir del estanque de la vida eterna en su interior.—Dijo el general observando su huevo.—Necesito que lo habrá Sra. O' cconel.

—No, solo quieren despertar al emperador.—Hable.

—Oh a su ejército también, esa es la idea.—Comento el profesor.

—Despertar un ejército de momias es una locura, escuche Yang.—Dijo Rick, en eso lo golpean voy sacando mi navaja de mis medias cuando la voy a lanzar la mujer agarra del cuello a mi hija y de un movimiento brusco toma mi navaja llevándola al cuello de mi hija.

—No crean que es algo real revivir a una momia.—Dijo mi hija.

—Haz pasado mucho tiempo con tus padres no es cierto.—El General se asercó a mi la mujer sonrió sarcastica.

—Ni se aserque.—Me quise asercar a mi hija pero Roger me apunto deteniéndome.

—Es hora de abrir el cofre, muévete.—La mujer llevo arrastras a mi hija Serca del cofre, mi esposo tomo una palanca para poder abrirlo y mi hija trato de leerla.

—Esta en chino, esa lengua no es mi fuerte.—Sonrei, esa era mi hija.

—Le daré un poco de inspiracion.—Dijo el General.—Wilson.—Ordeno al viejo.

—No Roger.—Grite viendo cómo Roger apuntaba a mi esposo, mi hija vio la escena, suspiré.

—No Cleo, no lo hagas de todas formas me matará.—Le grito Rick.

—La inscripción dice: Que solo una gota de sangre pura podrá abrir el ojo.—Leyo mi hija y pude ver cómo cerro sus ojos.

—Su esposo tenía razón.—El profesor apunto a Rick.

—No.—Baje el arma a mi pecho.—Solo los puros de corazón se sacrificarían por el ser amado.—Hablo el general.

—Habrelo.—le ordenó Roger a Rick y este hace fuerza con la palanca.

Narra Alex.

Me asome por el pasillo y me apoye en el viéndola.—No me hablaste después de la última cita.—Le dije viéndola.

—No ahí tiempo para bromas, Alex.—Me dijo ella, viendo algo.

—¿Sabes mi nombre?.—Pregunte curioso y me aserque a ella.—Pero yo no el tuyo.

—Soy Lin.—Se presento ella.

—Te gustaría explicarme por qué querías matarme.—Le explique incrédulo.

—¿Quieres que te explique eso, o salvamos a tus padres y hermana?.—Me pregunto y me aserque a ver, estaban en problemas la mujer tenía atrapada a mi hermana, papá estaba obligado abrir el cofre y mamá estaba siendo apuntada por el hombre.

—Wilson, ¡Hijo de perra!.—Dije molesto.








Narra Cleo.

La mujer china con una cicatriz en su ojo me toma del brazo y se lo saco bruscamente pero ella lo sostiene y me sonríe
Ndo su cuchilla pero no lo pienso dos veces y le pegó en su megilla ella hace lo mismo y después me sostiene fuertemente el brazo quedando detrás de ella mientras miro a mamá apenada. La mujer hace un corte en mi mano y empiezan a salir unas gotas de sangre veo a mi madre con mucho horror y preocupacion el ojo se habre sacando todos sus hilos dorados dejando salir un esplendor rojo para luego transformarse en diamante y como se habre y se vuelve como azul.

—Continua O'Cconel.—Le ordena el profesor.

—Como usted diga.—Papa sigue haciendo su trabajo.

—Cuando esto haya tocado al emperador despertara y gobernará la tierra.—Dijo, mi hija se asercó a mi nerviosa.

—Lo siento mamá yo no quise.—La tome de sus megillas.

—Fuiste obligada cálmate, si, todo va a estar bien.—Le dije tranquilizandola. En eso vimos como Alex con otra chica aparecieron sobre unas sogas empujando al profesor, y haciendo caer a los soldados papá fue rápido por las armas, justo tenía una a mi alcanze a si que tome una ya que me habían enseñado

—No es el emperador, es un señuelo.—Dijo la chica que había en la tumba, todos miramos a todos lados.

—¿Dónde está el emperador?.—Pregunto mamá, luego de un rato se empezó a escuchar ruidos extraños, yo estaba a un costado pero Serca y señale al emperador.

—Ahi.—Dije señalandolo.

—Quietos.—Ordeno papá preparando sus armas.—Aqui vamos de nuevo.—Dice viendo como el emperador sale de su escombro, este lanzo una bola de fuego.

—Creo que nuestro amigo controla los elementos.—Dije y Alex me jala saliendo de ahi.

—Hay que acabar pronto con esta momia mientras más nos demoramos más fuerza tomara.—Explico papa su plan bajando las escaleras.—Abran las rejas, abran las rejas.—Llego corriendo mientras que los guardias la abrían se subió a un auto, bueno mejor dicho obligo a bajar al dueño dándole dinero ya que el chino se quejaba, mamá y yo nos subimos mientras papá conducía.

—Amo las que conducen camiones.—Dijo feliz papá.—Lo siento amigo y feliz año nuevo, conduce cielo.—Golpeo el techo del auto.

—Jonathan rápido sube atrás.—Le ordenó mamá a mi tio.




1960 palabras.

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