Capítulo 7

Las muchachas lo notaron en cuanto volvieron al campamento el habiente estaba tan tenso que se podía cortar con un cuchillo, obviando el hecho de que tanto Inuyasha como Yue fingían estar dormidos, a lo lejos Tadashi estaba recostado sobre una roca mirando el cielo, y metros más alejados el Youkai de cabellera plateada, con su notable presencia dominante, se debía ser ciego para no darse cuenta de que estaba enfadado.

Por su salud las mujeres optaron por no preguntar nada e ir a dormir directamente, ya en alguna otra ocasión averiguaría que paso en su ausencia.

Kagome se recostó al lado del pequeño Shippo, quien estaba profundamente dormido.

Sesshomaru se puso de pie y comenzó a recorrer los alrededores, cerciorándose de que ninguna creatura se atreviera a poner un pie en el campamento, ya tenía demasiados problemas como para llevarse una sorpresa de esas, así pasaron los minutos hasta que finalmente se detuvo a la orilla de un precipicio, admiro la magnitud del cielo cubierto por estrellas titilando en lo alto, el silencio era corrompido por el repetido cantar de los grillos, mientras algún par de luciérnagas danzaban a su alrededor.

Relajo sus facciones por un momento, mientras que en su mente se repetían los hechos des hace unos días ¿casado con un ser de deplorable raza? Una humana, sin gracia e insignificante. Debía ser una maldita broma, porque él jamás en sus cinco sentidos accedería a tal atrocidad y es que ni si quiera podía matar realmente a esa mujer, eso significaría la muerte también para él, las leyes eran claras, uno vive lo que el otro, es por eso que debían traerla consigo y poder recordar el ritual para deshacerse de ella.

Y esa desagradable imagen, golpeando en su cabeza, intento descartarla minutos antes de que apareciera, pero cuanto más lo intentaba más lo recordaba.

.....................................flash black........................................

Podía saber que la mujer estaba nerviosa y enfadado, también que el miedo a que le hiciera daño crecía a cada segundo, lo sabía sin siquiera olerla, lo veía en su mirada, en la forma en que estaba de pie frente a él, se sorprendió saber que la conocía, y se molestó por eso, no le interesaba lo que pensara esa mujer.

....................(Recuerdo dentro de otro)......................

-""¿Qué crees que estás haciendo?""- era el hablando con aquella mujer, la cual estaba caminado de espaldas con una gran herida sobre su hombro izquierdo.- ""¿acaso pretendes morir?""- pregunto con desdén, al momento en que vio cómo se empeñaba en seguir luchando sin importar cuánta sangre había perdido y entonces ella se giró para verlo mientras mostraba una sonrisa en los labios, tenía el rostro cubierto de sangre, y sus ropas estaban desgarradas.

-""¿Acaso te importa el que muera Sesshomaru?""- detecto el tono de burla saliendo de entre sus labios. El frunció el ceño lo que hizo que la mujer sonriera aún más-""No soy tan débil cómo crees Sesshomaru""

-""Mujer estúpida no me interesa lo que te pase""- escupió blandiendo su espada hacia un gigantesco reptil que se acercaba a atacarlo, creía que sus palabras la habían herido y quiso verlo-""Trata de no estorbarme""- pero aquella condenada mujer seguía sonriéndole como si no le importara que el intentara dañarla.

...............................(Fin del recuerdo)...........................

Luego de recordar eso, se había quedado tan callado viéndola que empezaba a asustarla, esa mirada de terror con que lo miraba, no era como la mujer desafiante del recuerdo

-"Ya vete"- la hecho, queriendo sacar aquella extraña sensación que tenía en el pecho ¿Cómo si realmente le preocupara esa mujer? verla herida, perdiendo demasiada sangre en medio de una batalla donde algún movimiento en falso podría darle fin a su patética existencia.

¡Maldición!

¿Podía confiar en que sus propias palabras fueron sincera ""... no me interesa lo que te pase"" sonaba más a mentira, una que no quería comprobar.

Y todo empeoro cuando el estúpido de Inuyasha y Yue comenzaron a discutir sobre ella.

.............................Fin del Flash back....................................

Hecho un suspiro al aire mientras hacia un lado su bolsa de dormir, vio como el pequeño zorrito estaba profundamente dormido, hace más de una hora que daba vueltas sin poder conciliar el sueño sin razón alguna.

Decidida comenzó a caminar, daría a dar un paseo tal vez eso ayudará a que el sueño regresara, con tantas cosas que habían pasado en los últimos días, era notables el cansancio, si seguía de esta manera, pronto comenzarían a salirle unas horribles ojeras.

Rebusco en el bolsillo, hasta finalmente hallar al pequeño aparato que cargaba consigo a todos lados, y con la espalda recostada sobre un árbol se dispuso a escuchar música

Sin ser consciente de comenzó a cantar en vos alta, el bosque se llenó de su canto, el viento soplo revolviendo consigo la melena azabache, ni si quiera la profunda mirada dorada hizo que ella se detuviera, estaba tan sumida en sus pensamientos que no se percató de la presencia de Sesshomaru a tan solo pasos de ella, viéndola entre las sombras de los árboles, aquellos soles no mostraban sentimiento alguno, cubiertos por una capa de frialdad inquebrantable.

I can't run anymore (ya no puedo seguir)

I fall before you, (he caído después de ti)

Here I am (Aquí estoy)

I have nothing letf (No tengo nada mas)

Thougeh lve tried to froget (Aunque he tratado de olvidarte)

Youre all that I am (tu eres todo lo que soy)

Take me home (llévame a casa)

Im through fighting it (Estoy atravesando una lucha)

Broken, lifeless (Rota, muerta)

I give up, (me rindo)

Youre my only strength (tu eres mi única fuerza)

Without you (sin ti)

I cant go on, (no puedo continuar)

Anymore (nunca más)

Ever again (nunca otra vez)

#Evanescence-October

Pronto el aroma de sal y agua llego a la sensible nariz del demonio "los sentimientos humanos, son tan patéticos", cansado de ver como esa mujer se lamentaba por un idiota como Inuyasha, no era que le importara, solo no soportaba ver a la gente llorar, se marchó tan silencioso como vino, pero el aroma de las lágrimas de la miko aún se sentían por más que se alejó lo suficiente, ya no oía su canto.

En un principio Sesshomaru pensó que tal vez la humana estaba por cometer alguna estupidez como suicidarse, haciéndose devorar por algún monstruo, para ser sensato que clase de persona se pasea por el bosque en plena madrugada sin llevar algún arma consigo, sabiendo que ahí criaturas peligrosas ocultas en algún lado. No debió molestarse y seguirla, no la estaba cuidando, solo la estaba vigilando, porque si le pasaba algo a esa ridícula mujer él también se vería afectado, perdió valiosos minutos con ella, algo que no volvería a hacer, bajo ninguna circunstancia.

A menos que fuera una emergencia

Por otro lado la joven miko, seso su canto al igual que su llanto, limpio todo rastro de lágrimas en sus mejillas, para seguidamente ponerse de pie y regresar al campamento. Ella jamás se enteró y tal vez nunca lo aria.

El Daiyoukai gruñía con cada paso que daba, mientras iba destrozando algún que otro demonio que se cruzaba en su camino, su humor estaba por las nubes. Llego hasta una pequeña aldea, la cual parecía haber sido atacada, ya que varias casa brillaban cubiertas en llamas y los restos de los aldeanos que alguna vez vivieron estaban esparcidos por doquier.

No lo demostró pero sintió curiosidad por lo que había pasado, además de que un aroma desconocido llego a sus narices, causando desconfianza a sus sentido de alerta. Dio pasos con calma observando detenidamente cada cosa que llamara su atención, algún tipo de pista de lo que había pasado, no fue hasta que llego al centro de la aldea.

El cuerpo moribundo de un hombre se movió, entre quejas y gritos de dolor, tenía una gran herida en el pecho, la sangre salía a borbotones de él, no le quedaba mucho tiempo de vida- "¿Dime qué fue lo que paso?"- aquello sonó demandante y rudo, logrando que el moribundo hombre lo viera con ojos de espanto, balbuceando algunas palabras antes de poder emitir palabra coherente

-"Mo-Mo- Monstruos, ata-caron...la alde-a- y- y "- fue interrumpido por un repentino ataque de tos, logrando que mucha sangre saliera por su boca, Sesshomaru lo sabía, aquel anciano moría- "Se lo – lo supli-co má-teme "- débilmente llevo una de sus manos al lugar de la herida, dio un hondo respiro mientras miraba al demonio.

-"¿Quién más estuvo aquí?"- ignoro la petición mirándolo sin interés aparente alguno.

-"No era-a de este mu-undo, ese h-hombre"- silenciosas lagrimas teñidas de rojo bajaban 'por sus mejilla-"as-s-esino a todos. S-se lo su-plico máteme"- sonrió débilmente, lleno de esperanza y agradecimiento, cuando Sesshomaru elevo una de sus garras para seguidamente acabar con la vida de aquel anciano, usando su látigo.

-"¿Sesshomaru que sucedió aquí?"- la joven miko apareció de repente captando el interés del demonio, aunque no se molestó en verla. La mirada de la joven sacerdotisa no era para nada alentadora, sus ojos mostraban una mescla de tristeza y terror, tal vez decepción-"Estas personas..."- balbuceo mirando con horror las lagunas de sangre y restos de carne, apretando el puño.

La miro por encima de su hombro, segundos antes de responder-"Fueron atacados"

-"¿Cuánto tiempo?"

-"Una hora tal vez"

¿Cómo era eso posible? La aldea estaba tan cerca de su campamento y tanto el Daiyoukai como el Hanyou no habían sentido ninguna presencia extraña, ni si quiera ella pudo sentir algo.

Camino entre los restos buscando pistas de lo que ya sabía, tenía un sospechoso en mente Ryuko, la sanguinaria técnica era la misma, lo había visto antes cuando mato a sus soldados, cuando la mato a ella. Sintió la rabia y la ira recorrer cada milímetro de su cuerpo, tocando lo más recóndito de su alma.

Pequeños destellos de luz rosácea atravesaban su cuerpo.

-"No necesitas perder el control, ya están muertos"- él dijo con frialdad mirando la espalda cubierta por una abundante cabellera azabache, Aome se giró con brusquedad con lágrimas acumuladas.

-"¡No me des ordenes!"- contraataco con el ceño fruncido

-"..."

-"¡Estas eran personas inocentes!"-

-"Algo predecible"- le hace un desprecio-"Es una guerra"

-"¡Pude haber hecho algo y tú también debiste hacerlo!"- lo señalo y sus ojos mostraban dolor, aun así al demonio no le pareció de su interés. La miko estaba enojada y era obvio que no estaba pensando de la manera más coherente, y ella lo odio a un más si es que eso era posible-"¡no te importa una mierda, nada más que no seas tú y tu estúpido ego!"- y las palabras ya estaban tomando otro curso, ella estaba demasiado enojada, por ella, por el demonio, por Ryuko, por todo, necesitaba descargarse, decirle un par de cosas más a ese engreído, deseaba golpearlo-"¡Te odio, estúpido!"- de un momento a otro se vio acorralada entre los brazos del peli plata y una gran pared de madera, el estaba ahí, invadiendo su espacio, tan cerca, y se veía tan peligroso, tan asesino. Recordó su advertencia, de lo que le aria se le faltaba el respeto, el miedo cayó sobre ella como un balde de agua fría, lo sentía como una navaja sobre su cuello. Los ojos de Inu estaban sobre ella y sus garras se apretaban con lentitud en su garganta ¿sería su fin? Si la iba a matar no le daría el placer de verla suplicar y mucho menos le demostraría que le temía, fingiría aunque sabía que era inútil engañar a Sesshomaru.

-"¿te gusta desafiarme verdad miko?"- desprecio era lo único que se notaba tanto en su mirada como en su tono de voz.

Ella alzo la vista sin titubeos y respondió -"Solo, porque tratas de dominarme"- por segundos pensó en golpearlo, pero sería inútil, no le aria daño alguno y purificarlo no era una opción.

-"Eres inferior a mí, mereces ser tratada como tal"- el agarre en su garganta se hizo más fuerte

-"¡Tengo los mismos derechos que tú!"- exclamo con todo el aire que en sus pequeños pulmones había.

-"Esa manera tan ridícula de comportarte, me dice que no lo vales"- susurro, y la calidez de su aliento choco en las mejillas de Aome, quien trataba de captar el poco oxigeno que le era permitido. Comenzaba a desesperarse

-"¿Qué estas esperando Sesshomaru?"- lo desafío, ya estaba cansada de ese ridículo juego, del gato y el ratón.-"¡Mátame si eso es lo que quieres!"- estaba completamente loca ¿por qué rayos había dicho eso?

-"No recibo ordenes de una simple humana"- la soltó y se giró espaldas hacia ella, alejándose a paso lento-"Pero te lo advierto, no tientes a tu suerte"- esto último lo dijo con un tono amenazante, haciendo estremecer a la miko, cuando finalmente se perdió de su vista, Aome pudo suspirar de alivio.

-"Por un momento creí que en verdad me iba a matar"- tembló con brusquedad aun viendo el camino por el cual el demonio se había marchado.-"No debo volver hacer eso"- se dijo así misma colocando su mano derecha sobre su pecho-"Juro que no lo volveré a hacer...-comenzó a caminar de regreso al campamento- "Bueno a menos que sea explícitamente necesario, que tonterías digo"-pateo con frustración una piedra del camino-"Lo más probable es que me asesine en uno de los próximos días...ya que soy un poco impulsiva"- observo a su alrededor, dio gracias al cielo que su sentido de la orientación había mejorado, luego de haber recuperado sus poderes, de lo contario quien sabe a dónde iría a parar, masajeo su cuello aun muy adolorido -"Debí golpearlo, debí darle su merecido al muy engreído, después de todo ahora soy mucho mas fuerte algún daño debería hace-¿Qué fue eso?"- con brusquedad se giro sobre si misma mirando en todas las direcciones, buscando el origen de aquel extraño y tenebroso gemido-"¿Hola?"- instintivamente se puso en alerta, temiendo de que fuera algún tipo de monstruo, de entre los arbustos salió un hombre malherido y cubierto de sangre, ella vio con horror como se mantenía en pie aun con la pierna fracturada, estaba a punto de correr a ayudarlo, cuando Sesshomaru reapareció de repente obstruyendo su camino-"¿Q-Que?"- no hubo tiempo de racionar, ni de impedir que el Dai Youkai lo atravesara a la mitad.

Estaba en Shock, Sesshomaru había matado a ese pobre hombre a sangre fría-"¿Qué has hecho?"

-"Te salve de una muerte segura"- se giró para encontrarse con una morena de mirada incrédula.

-"¿Salvarme?"-balbuceo atónita- "Acabas de matar a un hombre"- lo miro como lo que era un perfecto asesino-"Pude haberle ayudado"

Relamió los restos de sangre que había en sus garras-"Ya estaba muerto"- respondió viéndola fijamente.

-"¡Lo mataste!"- ni si quiera había escuchado al youkai, estaba más concentrada en el cadáver frente a ella- "¡¿Cómo pudiste? No merecía eso!"

-"..."

-"Espera ¿qué has dicho que ya estaba muerto?"- el Dai youkai asintió mirando con seriedad.

........................Flash black.................................

-"¿Y bien como están las cosas?"- pregunto con la mirada seria, mientras que Yuri les serbia un poco de té, Tadashi se encontraba frente a ella, observándola aún más serio.

-"Hace menos de un año nos encontrábamos vigilando sus tierras, especialmente aquel lugar, los días pasaron tranquilos nada fuera de la normalidad... pero una mañana me di cuenta que la tumba había sido profanada, alguien había tomado restos... pero no fue esta el día siguiente que vimos al causante de eso, era una vieja anciana, una bruja... minutos antes de que Yue la destruyera ella nos dijo"

-""Inútiles, ya no pueden hacer nada –reía a carcajadas- todos morirán yo misma me encargue de que así sea"- su cabeza rodo por el suelo, por la espada del youkai ángel."

-"Después aquello no supimos mas nada, yo estaba enfadado con Yue"

-"Es verdad, estuve todo el tiempo evitando que no se mataran"- resoplo enfadada la joven Youkai

-"... y al mismo tiempo todas las regiones de Japón eran atacadas por demonios"- prosiguió su hermano.

-"¿Crees que tenga algo que ver?"- pregunto yuri.

-"Es lo más probable ya que las personas, después de recibir los ataques actuaban como muertos vivientes"

-"¡Que como zombis!"- exclamo la morena sorprendida.

-"Pues si"- en ese mismo momento Yue ingresaba por la puerta principal, cargando la mochila amarilla de kagome

.......................Fin del Flash black..................

La morena hizo una mueca por sonrisa-"He alterado mucho las cosas, no debí regresar..."- Sesshomaru no dijo nada solamente escuchaba-"debí permanecer muerta, por mi causa muchas personas inocentes morirán... no pertenezco a este mundo"

-"Es inútil lamentarse, volviste por una razón y será mejor que la cumplas"- el no sonó amable y mucho menos amigable, en sus ojos no había más que frialdad y desinterés pero algo en sus palabras hizo que la joven miko se sintiera intranquila, una ajena sensación de confianza.

Y de pronto se dio cuenta que estaba pasando más tiempo con él, que el que había imaginado, incluso estaba más comunicativo, no de una forma exagerada, pero este no era el mismo Sesshomaru que ella conocía. Se atrevió a salvarla ¿por qué?... lo cierto era que esta noche en particular tenía un humor extraño.

En un momento quería matarla, al otro la salva.

"¿Sesshomaru has recordado algo, sabes algo que yo no?"- pregunto a la nada misma, solo en sus pensamientos.

-"En la maña llegaremos al castillo, será mejor que te duermas no necesito retrasos"- Aome asintió, le molesto el comentario pero prefirió no hacer caso a sus provocaciones y lo siguió en silencio, tal como ella lo supuso, el demonio la dejo con sus compañeros, para seguidamente perderse en la negrura del bosque.

Cerró los ojos, no tardo en dormirse; Yue había visto el momento en que llegaron juntos, no podía hacer nada más que aparentar el puño y fingir que dormía. Ella no le pertenecía, pero los celos eran casi incontrolables, debía buscar la manera de acercase antes de que sea demasiado tarde.

Horas más tarde.

-"Mi señora"-Yuri la toco con suavidad-"es mejor que se levante, pronto retomaremos el viaje"- Aome parpadeó y murmuro cosas incoherentes antes de reaccionar, sentándose de golpe.

-"¿Cuánto tiempo dormí?"- miro a ambos lados solo encontrándose con Sango y Kirara.

-"El amanecer ocurrió cerca de dos horas"

-"¡¿Qué?"- se levantó y comenzó a guardar sus pertenencias con rapidez-"Perdimos mucho tiempo!"

-"Mi señora debe comer algo antes"

-"Comeré en el camino"- doblo la colchoneta y lo puso en la mochila, Sango miraba sonriente aquella escena-"¿por qué no me despertaste antes?"- regaño.

-"Aome debes tranquilizarte, aún es temprano..."- Sango comento acariciando a la gata entre sus brazos.

-"Lo siento, pero el amo me pidió que no la molestara"

Se detuvo de manera inmediata, sin creer lo que había escuchado-"¿He?"

-"Fue una orden del amo"

-"Quién lo diría, tu esposo se preocupa por ti"- La exterminadora dijo entre risas, ganándose una mirada molesta de la joven sacerdotisa.

-"El amo siempre está cuidando de mi señora"- comento la aprendiz, sin darse cuenta de que eso trajo la intriga a las dos mujeres.

-"¿qué?"- dijeron al unismo, mirándola como si estuviera loca

-"Lo siento no debí decirle eso, olvídelo por favor"

-"¿Cómo que lo olvide, Yuri a que te refieres?"

-"No es nada"- respondió sonriendo tontamente, "El amo va a matarme si se lo digo" pensó con pánico.

-"Estas mintiendo"- Aome dijo ahora un poco molesta, porque sentía que le ocultaban cosas.

-"No y lo siento pero debo irme"- y salió lo más rápido posible de ese lugar, prácticamente corriendo.

-"Al parecer tu esposo está lleno de sorpresas"

-"No es mi esposo"-Chillo con el rostro rojo, la exterminadora no supo si era por vergüenza o enfado.

-"Lamentablemente si lo es Aome"- se puso de pie la castaña y Kirara salto cayendo con gentileza en el suelo.

-"No por mucho tiempo"- Respondió viendo como la gata se estiraba perezosa.

-"Pero mientras tanto ve acostumbrándote"- una sonrisa burlona se dibujó en su rostro.

-"¡¿Sango de qué lado estas?!"

-"Del tuyo claro"- se burló aún más-"pero es divertido verte enfadada, Ahora entiendo porque Sesshomaru e Inuyasha siempre lo hacen"- cubrió una risilla con la mano.

-"No tiene nada de divertido"- y se cruzó de brazo haciendo un desprecio-"¿Por cierto dónde está ese par?"- sonó desinteresada

-"¿Te preocupas por tu esposo?"

-"¡Hoy estas imposible!"- chillo alejándose de la castaña, murmurando maldiciones.

Fue la gota que derramo el vaso.

-"¡Pero tranquila no debe tardar en regresar!"- Sango grito al aire viendo como su amiga se alejaba aún más enfadad. Entonces dio rienda suelta a su risa.

"Anoche vi cuando la señorita Aome y el señor Sesshomaru regresaban juntos"- recordó las palabras que Miroku le dijo-"y puedo asegurarte que pasaron mucho tiempo en el bosque"- con un toque de una pervertida picardía al final de la oración-"Seguramente tuvieron mucho de qué hablar y hacer"- y luego ella lo golpeo por mal pensado, aun así sus palabras hicieron eco.

La actitud de su amiga confirmaba todo lo que Miroku dijo

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-"Inuyasha ¿en qué piensas?"- la voz de Kikyo atrajo la atención del medio demonio, esta estaba entre sus piernas recostada, aprovechando los últimos minutos que tenían para descansar.

Pero el joven peli plata estaba muy callado, era mala señal.

Porque la Sacerdotisa ya se imaginaba el motivo.

-"Estoy preocupado por este nuevo enemigo"- respondió

El rostro de Kikyo se ensombreció, mostrando una diminuta sonrisa -"¿solo por eso?"- no era necesario, pero necesitaba que él se lo dijera.

El sabia a donde iba la conversación, suspiro y agacho la mirada en ella-"También por Aome... temo que Sesshomaru pueda hacerle algo"- agrego al final mostrando los colmillos-"Sé que es capaz de matarla"

-"Sesshomaru no puede hacerle daño, las leyes Youkais protegen a Aome, tu mejor que nadie deberías saberlo"- ella dijo con el tono más amable posible, aunque por dentro deseaba matar a un hanyou.-"El cuidara de ella, están unidos"-Inuyasha hizo de su mano un puño-"Si Aome muere, él también lo hará"- las uñas rasgaron su piel, pero la miko no lo noto.

-"Pero a ese maldito no le importara"

Kikyo suspiro, debía ser muy idiota para no darse cuenta que el medio demonio estaba sufriendo, por perder a Aome, además los celos lo estaban comiendo vivo. Ella había tomado una decisión el peli palta seria suyo, por completo, así tuviera que reunir paciencia de quien sabe dónde.

Inuyasha no podía hacer nada.

Tanto su reencarnación como Sesshomaru, tenían su destino forjado.

Dependía de las decisiones que tomaran de ahora en adelante, y aunque era conocido que la Higurashi amaba a Inuyasha, tampoco podía hacer nada, era Kikyo quien tenía la marca, Inuyasha era suyo, y no estaba dispuesta a entregárselo.

Si Aome recordaba a Sesshomaru tal vez se olvidara del Hanyou.

Ella debía darle una pequeña ayudita, a su nueva amiga.

¿Qué pasaría si recordara? ¿Qué pasaría si ese amor del que tanto hablan sus guardianes regresara?-"¿serias capaz de dejarlo ir aun así?"-murmuro en voz baja, sabiendo de ante mano la respuesta. No

-"¿Dijiste algo?"- pregunto distraído

Se incorporó mostrando una sonrisa-"Si, que ya debemos regresar con los demás"- y dejo un ligero beso en los labios de su amante.

Era su reencarnación.

Sentía tanto deseos de amar y ser amada como ella.

La conocía, Aome no dejaría ir a Sesshomaru.

Continuara...