"Confesar atracción"

—¿Discurso? — preguntó TaeHyung.

—Listo — respondió JungKook, guardando una hoja en su pantalón. TaeHyung tachó 'discurso' de su lista.

—¿Rosas?

—Listas — guardó tres rosas rojas en su chaqueta.

—¿Rubor? — tachó 'rosas'.

—Espera un poco... — se maquilló las mejillas con rubor rosa. También le colocó a TaeHyung, pero a él le puso rubor rojo —. Listo.

—¿Lágrimas? — estornudó por el polvo rojo en su cara. Jeon se quedó callado, concentrado, hasta que pequeñas lágrimas salieron de sus ojos y usaron sus mejillas como tobogán para caer. JungKook alzó su dedo pulgar.

—¿Ganas de besarme? — preguntó el azabache burlón. TaeHyung tachó las últimas cosas de la lista antes de responder.

—Faltan — dijo indiferente.

Hoy tendrían que llevar a cabo un paso muy importante para su plan. Tendía que salirles bien Yes or Yes, era un pase para los últimos dos pasos, ergo, para obtener la mesa.

—Mira, Jeon. Que si no resulta tu estúpido plan voy a patearte el trasero que no tienes, ¿entendido? — amenazó el castaño, apuntando acusatoriamente con su dedo índice la narizota de tucán de su amigo.

—Va a funcionar, va a funcionar. No te escames — le dijo, rodeando sus hombros con su brazo y comenzando a caminar a el lugar de su próximo objetivo.

Entraron por las puertas que daban a la cafetería, respirando hondo tratando de disipar sus nervios. TaeHyung se fue a comprar su comida disimuladamente mientras JungKook caminaba hacia el centro de la sala.

"¡Vamos, JungKook!" se dijo mentalmente. "¡Para algo viste tutoriales en youtube! ¡Tú puedes, eres la verga!".

De un saltó se subió a una mesa, haciendo saltar la comida de las bandejas y ganándose gruñidos de molestia de sus hyungs NamJoon, Jin, YoonGi, Hoseok, Jimin, Jackson, BamBam, Yugyeom, y otros que la verdad le valían verga en ese momento.

—Okey, hazlo ahora... — se dijo casi sin aliento — ¡Escuchen, gente bonita y fea! — la mirada acusatoria de los estudiantes se posaron sobre él. TaeHyung ya sentía su rostro comenzando a enrojecerse —,¡Chicas con pechos y tablas! — se escucharon gruñidos femeninos —, ¡Hombres con anacondas y gusanitos! — risas burlonas hacía los conocidos pito-chico — ¡Inteligentes y pendejos!, ¡Amigables y grinchs!, ¡Heteros y gays!, ¡Humanos y unicornios!, ¡Perros y gatos!, ¡Fujoshis y fudanshis!, ¡Cereal y leche!, ¡Hotel trivago!, ¡Kpop y-

—¡Ya dí lo que vayas a decir, mamón!  — se escuchó el grito de fastidio de alguien. JungKook hizo una pose de ofendido bien jota.

-¡Vieja zorra, cortarste mi momento motivacional! — lloriqueó un poco —. Bueno, ¡hoy me gustaría hablarles de algo muy importante para mí! — dijo, enfatizando cada palabra con un movimiento corporal —. ¡Kim TaeHyung, tú, el que se está comprando los sándwiches insalubres de la señora de la tiendita! — ahora las miradas se posaron sobre el castaño.

—Ay, wey. No mames... — se cubrió el rostro con una mano, mirando al pendejo de su amigo por sus dedos entre abiertos.

—¡Quiero que sepas algo muy importante, y es necesario que los demás también lo sepan! — dio un giro señalando a los alumnos —. ¡TaeHyung! — llenó sus pulmones de aire, todo el que pudo —¡TE AMOOOO! — gritó tan fuerte que hasta las ventanas se agrietaron — ¡Te amo, no como amigo, ni como hermano. Te amo como una fujoshi ama al yaoi, osea un chingo! — las chicas gritaron en apoyo, afirmando eso —. ¡Quiero que seas mi novio, TaeHyung! — gritos femeninos de emoción — ¡Seamos novios y luego casémonos, tengamos nuestra luna de miel y cojamos felices por siempre! — una lagrimilla de emoción cruzo por el rostro de JungKook —. ¡Haremos todos los fetiches sexuales que quieras, como por ejemplo, podrías tener lencería mientras yo te embisto suavemente hasta el aman-

—¡OH, DIOS, JEON. CÁLLATE MALDITO JOTO, ESO NO SE CUENTA! — le gritó el castaño. La verdad no necesitaba maquillaje, estaba tan rojo que opacaba el cabello teñido de Hoseok. Igual Hoseok es un bebito precioso y nadie brilla más que él.

—¡Oye, no seas egoísta! ¡Mis detalles! — se quejó una chica.

—Cómo sea... — continuó JungKook — ¡Kim TaeHyung, ¿quieres ser mi novio y futuro esposo?! — TaeHyung se encogió en su lugar, completamente avergonzado.

Jin y Yeri corrieron hacia el castaño, cada uno a un costado de su moreno cuerpo agitándolo con emoción. Esperando su respuesta.

—¿Qué dices, Tae? — preguntaron. El mencionado susurró un débil 'sí' — ¡Dijo que sí! ¡DIJO QUE SEEHHHHH! - Gritó un sobre emocionado Jin.

—¡También dice que quiere hacer el sin respeto, Jeon! —gritó esta vez Yeri. Ah, ¿cómo no amar a esa tierna chica?

Un grupo de chicas y chicos se amontonaron alrededor de TaeHyung para luego alzarlo entre todos como si el castaño fuera una estrella de rock que saltó a las manos de su público. Algunos aprovechando y tocándole el culo, pero shhh, no le digan a Jeon porque luego arma la tercera guerra mundial.

El alocado grupo cargaba a TaeHyung hacia la mesa donde seguía JungKook, este se encontraba festejando alegremente bailando twerk.

—¡A todas y todos que aman verme con Tae! — los mencionados gritaron — ¡Los invito a mi boda, yeaaahh! — se lanzó de espaldas a los estudiantes, para que estos lo cargaran igual que a TaeHyung.

Pero estos se hicieron a un lado, dejando caer a Jeon al piso.

—Aaayyyy, wey — se quejó adolorido, sentándose lentamente. — ¡Se pasan de lanza, culeros! — su cara representaba completamente al pacman bien emputado. — ¡Ya no les paso mi vídeo porno con Tae, por mamones! — sentenció.

Namjoon y Jackson lo ayudaron a levantarse, subiéndolo a la mesa de nuevo.También subieron a Tae a la mesa junto a Kook.

-¡Beso, beso, beso! - gritaban a coro las y los KookTae shippers.

Con obediencia, JungKook tomó a Tae de la cadera, pegándole la boca y el paquete de una vez también, cómo no. Besó profundamente al castaño, dejándolo sin aliento y con los ojos dando vueltas por la intensidad y la vergüenza. JungKook comenzó otro beso con los aullidos de lobos de los estudiantes como música de fondo romántica.

La señora de la tiendita grababa y el director del plantel entró a la cafetería, viendo el desmadre de los alumnos y luego dando la vuelta para salir de ahí mejor. El director era buena onda, no había que preocuparse de reportes, tranquis.

-¡Ahora cojan! - gritó una chica una vez el beso de los chicos terminó.