Absurd of my existence
I'm aching through persistence
The pen will slit the heart, the pen will slit the heart
The void will bleed us nicht (?)

La familia de Ashton estaba en otra de las presentaciones del tío Roland, su libro de cuentos infantiles era muy demandado y estaba de evento en evento.

En esta ocasión su familia más cercana lo acompañó al mismo, sintiéndose muy apoyado por su sobrino y su pareja aunado a los niños.

Ishtar y Ashton estaban hasta enfrente sentados mientras que el señor se estaba preparando para salir al escenario y hablar un poco de los cuentos que escribió a lo largo de su vida, siendo que muchos de ellos, sino es que todos eran conocidos a la perfección por el bajista de Sk8.

El joven creció escuchando estos relatos de su tío quien tenía una creatividad muy privilegiada con un gran talento para ponerlo en tinta.

Roland se vio al espejo de su camerino, se arregló la corbata y se volvió a pasar su mano por el cabello canoso que tenía. Se sonrió, se veía muy bien.

Se escuchó un pequeño toque y la apertura de la puerta.

—Cinco minutos señor O'Ryan —dijo una chica que era la editora que lo contrató para la editorial en la que trabajaba.

—Gracias Clarisa, ya estoy listo —contestó de manera educada.

Dejó salir un respiro y se preparó. A pesar de hacerlo de manera habitual, aún le costaba mucho hablar en público de esta manera, le daba pánico escénico.

Se concentró, salió del lugar y camino hacia la parte de atrás del escenario donde ya lo estaban esperando, todo fue organizado en el hotel Ritz de Nueva York en la sala de prensa.

—¿Cómo se siente? —le preguntó alguien del staff.

—Todo bien, listo para hacerlo que debo —se dio ánimos.

La persona asintió y vio hacia el escenario donde le indicaron que ya era hora.

Roland salió con un paso firme y seguro, para dirigirse a la mesa que pusieron con varios ejemplares de su libro y un micrófono. Se sentó y vio hacia el público.

Su mirada cayó en automático en su sobrino y familia quienes le regalaron una gran sonrisa de ánimo. Esto le dio mucha confianza.

—Buenas tardes a todos, espero se encuentren muy bien —comenzó

Los flashes de las fotos se comenzaron hacer presentes mientras que él tomó uno de los ejemplares y sonrió.

—Muchas gracias por asistir a esta presentación de mi libro "Los cuentos de un tío" —dijo —, me da mucho gusto ver el nivel de aceptación que está teniendo el libro.

La gente le estaba prestando mucha atención a cada palabra, siendo que era un escritor muy respetado y que siempre mostraba mucha sabiduría en todo lo que hacía o decía, sabían qué había vivido muchas cosas, su voz era la de la experiencia.

—Cómo bien saben este recopilatorio de mis cuentos es sólo uno de los pasos que he tomado para mostrar mi trabajo, y más aún estos relatos que marcaron una de las épocas más arduas en mi vida.

La gente no dejó de prestarle atención, cada palabra se clavaba en la mente de los presentes.

—Cómo saben, fue de mi gusto poder ser el padre adoptivo del hijo de mi hermano Arnold quien nos dejó hace tiempo —relató —, es un dolor que jamás me ha abandonado, pero de esa agonía salió algo que valoro con toda mi alma.

Sus ojos se posaron en la figura de Ashton quien sonrió.

—De toda la oscuridad emergió una luz que me llevó a superar mi alcoholismo y dolor, un pequeño que se volvió mi hijo, el cual es la inspiración de muchos de mis cuentos —su voz era serena pero llena de melancolía.

Continuó contando muchas de las anécdotas que tuvo con Ashton y cómo salieron adelante los dos juntos, él apoyando al chico en sus sueños.

Llegó el momento de las preguntas e inició una reportera.

—¿Desde hace cuánto escribe?

—Llevo escribiendo alrededor de cuarenta años, un poco más o un poco menos —sonrió.

Dio la palabra a otro.

—¿En qué se inspiró aparte de su sobrino para estos cuentos? —cuestionó otro de los reporteros.

El tío se quedó callado por unos momentos y medito.

—Creo que en parte de las vivencias que tuve en mi infancia, junto a mi hermano, en casa de mis padres y aventuras que tuve ahí.

Ashton observó a su tío, había muchas cosas que conocía de él, pero otras que no, y esta pequeña entrevista que estaba teniendo lo ayudaron a comprenderlo más.

—¿Es cierto que usted está emparentado con uno de los miembros de la famosa banda de Sk8 & Dreams? —preguntó una chica.

Hubo un silencio en la sala, Ashton volteó a ver a su tío quien buscó aprobación para decir las cosas.

El azabache sólo asintió, él se sentía orgulloso de que supieran que Roland era su tío.

—Si efectivamente soy el tío del Ashton O'Ryan, el bajista de dicha agrupación, quien nos acompaña el día de hoy con su hermosa familia —señaló hacia los primeros asientos del público.

Las cámaras se voltearon hacia donde estaban los chicos y los enfocaron y comenzaron a cuchichear viendo que también estaba Isthar la famosa guitarrista de la banda Beyond The Light.

Las preguntas continuaron, Roland les explicaba su metodología de trabajo, cómo creaba los cuentos y la edición de los mismos.

Al terminar los chicos lo vieron en el camerino.

—¡Estuviste maravilloso tío! —exclamó Ashton dándole un abrazo.

—No fue nada, me puse un poco intranquilo para ser sincero —dijo.

—Lo hizo muy bien señor, créame que quedaron sorprendidos —le aseguró Ishtar.

Rolando sonrió, era una bendición tenerlos ahí, se sintió seguro a pesar del pánico escénico que siempre experimentaba.

Terminaron en el camerino y salieron del mismo, se irían a celebrar a un restaurante que le gustaba al señor.

Subieron al carro de Ashton, Roland atrás entreteniendo a los niños, mientras que sus padres enfrente.

Al llegar al restaurante ya tenían reservación entraron y ordenaron.

—Y ¿ahora que harás tío? —preguntó Ashton mientras se iba la mesera.

—Tengo un borrador de una novela, la comenzaré a editar en unos meses, cuando acabe las ruedas de prensa —comentó.

—Se que le irá bien con ella, ¡tiene una pluma maravillosa! —dijo Ishtar.

—Gracias niños, me dan más crédito del que merezco —se sonrojó un poco él señor.

—No lo creo, tú haces maravillas en todo, no hay manera de negar eso tío —dijo Ashton.

El señor se sintió muy bien con todo lo que le decían los chicos, tenía tiempo que no se sentía tan tranquilo.

—Le tengo que dar sólo sus últimos toques y quedará bien, bueno eso espero —rio el señor.

En ese momento dos chicos se acercaron a la mesa, tenían vestimenta de metaleros y estaban sonrojados.

Isthar los vio con la ceja alzada.

—Disculpen la molestia —dijo la chica.

La nipona pensó en ahuyentarlos, no le gustaba que la molestaran cuando estaba con su familia, se le hacía una falta de respeto.

—¿En qué les podemos ayudar chicos? —preguntó sonriente el tío Roland.

—Es qué, queríamos ver si la señorita Isthar se podría tomar una foto con nosotros y firmar nuestras mochilas —dijo el otro joven.

El señor volteó a ver a Ishtar y asintió con una sonrisa.

—Si claro, lo haré.

La chica primero les firmó su mochila a lo cual los dos chicos se mostraron muy agradecidos. Posteriormente se tomaron la foto.

—¿Está bien si la etiqueto en Instagram señorita Isthar? —preguntó la muchacha.

Sayumi lo medito.

—Sólo no dejen que se me vea mi panza de embarazada por favor —rio un poco la nipona.

—Si no se preocupe —dejaron salir una risita nerviosa la pareja.

Se despidieron y se volvió a sentar esta Isthar.

—Disculpen, no les iba a hacer caso por respeto a ustedes.

—No tienes nada de que pedir perdón, hermosa Sayumi —dijo el escritor —, nosotros los artistas cargamos con muchos corazones con nuestro arte, tu no sabes cómo es que tú has ayudado a esa pareja.

Isthar asintió y sintió una vibración en su celular. Abrió su Instagram y leyó la publicación de la chica.

"La mejor guitarrista de todas, gracias por salvarme de la depresión"

El corazón de Isthar latió rápido, jamás pensó que ella hubiera hecho eso por alguien, y fue que comprendió las palabras del tío Roland.