Jeon Jungkook

—¿Seguirás mirando el cel como un idiota? —preguntó Rosé a mi espalda— Llámalo y ya Jungkook.

—¿Y si no me responde? —me arrepentí luego de hablar, se oía mejor en mi cabeza. Rosé me observó con una pequeña sonrisa.

—Te gusta demasiado Kook —habló y en un su voz no había burla, sólo admitía por mi lo que yo intentaba ocultar— Si no te responde mando a arrestarlo.

—Gracias Rosé —hablé con una pequeña sonrisa que no era muy típica en mi— Aveces eres agradable.

La rubia me miró con mala cara y me lanzó un lápiz que había en la mesa y tomó su portafolio mirándome como si estuviera indignada, aunque la risa amenazaba en salir de ella en cualquier momento. El sonido de mi celular interrumpió la escena.
La pantalla de mi móvil indicaba ese nombre que tanto me gustaba pronunciar.

—Parece que a alguien también le gustas —la rubia me guiño un ojo antes de salir de la oficina.

Respiré profundo antes de tomar la llamada.

—Dime —hablé con calma aunque por dentro me moría de los nervios.

—Quería disculparme contigo —habló rápido— No debí irme así, perdona.

—No tienes porque disculparte.

—¿Estás libre esta tarde? —preguntó en un tono bajo.

Para ti siempre estoy disponible.

—Tengo que ver, yo te llamo —de mi boca salió lo contrario a lo que pensaba.

—Esta bien detec... Jungkook.

Colgué la llamada y esperé unos cinco minutos antes de procesar por completo lo que había pasado.
Comencé a festejar y a bailar en el silencio de mi oficina. Estaba dando vueltas cuando noté la presencia del pelirrojo parado en la puerta que me miraba como si yo fuera la momia de Tutankamón renacida.

—Si te ríes te mueres —apunté un dedo hacia él mientras mi expresión se volvía completamente seria.

Claro que Jung Hoseok ignoró todo lo que dije y se comenzó a reír como nunca en su vida.

—¿Qué carajos estabas haciendo? —habló entre tantas carcajadas que apenas pude entender lo que me dijo.

—No es tu asunto —Hablé con mala cara y el mayor sólo siguió riéndose mientras imitaba ridículamente mi baile— No es así, déjame enseñarte.

En el silencio de esa oficina comenzamos a bailar los dos con felicidad repentina, tarareando cualquier canción que viniera a nuestra cabeza.

Era hijo único, siempre quise tener hermanos y cuando conocí a Hoseok encontré en él, aquél hermano mayor que siempre había querido tener. No importaba que el pelirrojo ya tuviera más hermanos, sabía que él siempre estaría para mi y yo estaría para él.

—¿Me puedo unir yo también? —habló Jisoo desde la puerta y le abrimos los brazos para invitarla a bailar con nosotros— Tal vez después, tu ataque felicidad repentina debe ser por la noticia.

¿Noticia?

—Se me había olvidado —habló ésta vez Hoseok.

—¿De que hablan? —inquirí con confusión.

—Tenemos un testigo —habló Jisoo— de la pelea entre Nayeon, Jiwon y Félix.

—¿Porqué no me habías dicho Hoseok? —golpeé al mayor en la cabeza.

—Cuando entré estabas bailando —se defendió mientras se sobaba la parte golpeada.

—¿Quién es el testigo? —pregunté mientras me sentaba sobre el escritorio.

—Su nombre es Kang Jaehyun —explicó Hoseok— Es el hermano menor de Jiwon, el estaba en la casa el día de la discusión. Lo confirmamos cuando investigamos sobre lo que habían hecho la familia de la fallecida ese día. Descubrimos que los padres de la chica habían salido a comer y le habían pedido a Jiwon que cuidara de su hermano menor.

—Tenemos que interrogarlo ya —hablé desesperado.

—No es tan fácil Kook —dijo la doctora y la miré con una ceja levantada— Jaehyun sólo tiene 12 años, necesitamos los permisos de los señores Kang para poder interrogarlo.

—Entonces haz eso Hoseok —le dije al pelirrojo y el asintió— Haz eso.

• • •

Había citado a Taehyung en un puente que quedaba cerca de mi trabajo, lo quería llevar a un lugar especial.
Me había atrasado un poco en la delegación así que cuando llegué el ya estaba allí, esperando igual de hermoso que siempre.

—Perdona la tardanza —la situación parecía bastante incómoda luego de aquel beso.

—Yo acabo de llegar —dijo en una sonrisa tímida— ¿A donde vamos?

Dejé la pregunta en el aire y lo tomé de la mano con más confianza de la que debería y caminamos por las calles de Busan que en ese momento se encontraban algo vacías. Las personas temían del asesino y no salían por miedo a ser las nuevas víctimas.

En el centro de la ciudad había un Hotel abandonado desde hace más de 50 años. Nadie entraba allí ya que había muchas leyendas urbanas que decían que en ese lugar habitaba un espíritu maligno.

Hace un tiempo la curiosidad me había llevado a entrar al lugar que se encontraba claramente vacío, confirmando mis sospechas, que sólo era un simple edificio en ruinas.

—¿Este no es el Hotel embrujado? —preguntó el pelinegro parándose en la entrada.

—¿Tu también crees en esas historias?

—No es eso —negó con rapidez— Es que de todos los sitios a los que pensé que me traerías jamás me imaginé este.

—Te va a gustar.

El lugar por dentro estaba deteriorado y las luces no funcionaban, tuvimos que caminar con apoyo de la linterna de mi celular. Taehyung apretaba mi mano a cada paso que dábamos y miraba de un lado a otro con ansiedad, posiblemente estuviese asustado.
Llegamos a al salón del hotel, un lugar amplio con algunas mesas, un escenario y una barra. En su tiempo este lugar servían para hacer grandes fiestas. Y al contrario de todas las demás habitaciones del hotel, aquí la luz todavía funcionaba.

Confieso que había preparado el lugar en la tarde antes de irme a encontrar con el pelinegro, había cocinado para los dos y había traído algo de música.
La sonrisa del menor cubrió todo su rostro cuando vio la mesa con la cena

—Esto superas mis expectativas —dijo sonriente y luego se me quedó mirando fijo a los ojos, no había ninguna expresión en ellos.

—¿Pasa alg...

No esperaba que el menor me volviera a besar de sorpresa, está vez fue más delicado que la anterior, parecía más sensible. Le seguí el beso apretando con delicadeza su cintura.

—Deberiamos comer —dijo luego de separarse.

—Claro —se alejo un poco de mí mientras se mordía los labios.

Esa noche cenamos y pasamos juntos toda la noche en aquel hotel abandonado.

Tal vez exagero en decir que esa fue la mejor noche de mi vida.

Notita de autor

Holaaa mis amores

Planeaba actualizar mañana junto con mi otra historia, pero no me aguanté jsjsj.

Nuestro Jungkook se está enamorando😻

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Nos leemos, los amoooo
♥♥