Jeon Jungkook

Acaso había escuchado bien, por un momento creí que era sólo una ilusión en mi cabeza y que no había escuchado, el nombre de Taehyung saliendo de los labios de esa niña de aspecto altanero.

La descripción que me había dado, no era para nada lo que yo conocía de Tae.
Ella me hablaba de alguien agresivo, pero yo conocía a alguien dulce y tímido, con el aspecto de que no le haría daño a una mosca.

—¿Estas segura? —pregunte con alguna esperanza de que se hubiera equivocado.

—Si, estoy segura.

Asentí y le dije que era libre de irse y yo me levanté para ir directo a mi oficina.
Automáticamente entraron Jisoo, Hoseok y Rosé con la expresión seria.

—No me digan nada —expresé antes de que comentaran algo.

—Sabes que si se demuestra el bullying departe de Jiwon y Félix hacia Taehyung el pasaría a ser nuestro segundo sospechoso —dijo Hoseok sentándose frente a mí.

—Sin olvidar que los amenazó de muerte —agregó Rosé con el dedo en alto— Jungkook, yo lo siento mucho, en serio, pero tenemos que investigar eso.

Me cubrí el rostro con más manos mientras meditaba acerca del asunto. Por mi cabeza pasaron todos lo momentos que pasé con Taehyung desde el día en que lo conocí.

¿Por que ahora todo me parecía tan extraño?
¿Sospechoso?

Lo conocí justo después de la muerte de Jiwon, dijo que había perdido el autobús pero tenía dinero para pagarse un taxi.

Tenía marcas de aruñones en los brazos el día de la muerte de Nayeon, cuando descubrimos que la víctima se había defendido y tenía sangre y piel en las uñas.

Se tensó aquella vez en la universidad, cuando le pregunté si había hecho algo malo.

Solía hacer muchas preguntas sobre el caso.

—Joder —susurré por lo bajo mientras frotaba mi frente— Saben.

Dije mientras buscaba en mis bolsillos el papel que había encontrado en mi devastado auto esta mañana.

—Esta mañana mi auto estaba destruido, alguien rompió los cristales y rayo la parte lateral —conté mientras le pasaba el papel a Rosé— Ese papel estaba dentro del auto.

La rubia leyó con el ceño fruncido en su totalidad, al final le pasó el papel a Jisoo para que ella siguiera leyendo.

—¿Quien crees que sea? —me preguntó Hoseok cuando terminó de leer el también la nota.

—¿El asesino tal vez? —dije mientras levantaba los hombros.

—No lo creo —opino Rosé sacudiendo la cabeza— Esa amenaza es muy diferente a las que te suele hacer el asesino.

—Dame acá, voy a mandar a analizar la letra —dijo Jisoo tomando el papel.

—Hoseok manda a una patrulla a vigilar la casa de mi madre —mandé y el chico asintió— Y porfavor, que no sea la de Hyunjin.

El pelirrojo carcajeó después de lo dicho y se fue a acatar las órdenes dejándome sólo con la fiscal.
La chica se inclinó en la mesa y me tomó de las manos.

—Ten cuidado con Taehyung, porfavor Kook.

Y sin más que decir se fue

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Kim Lana

Salir de madrugada para no encontrarme con Taehyung ya era otro nivel de escape. Era incapaz de mentirle al pelinegro y el no debía saber por ningún modo que su padre, mi tío, había escapado.
Sabía que no me perdonaría si llegara a matar a Taemin sin contar con él, pero en algún momento entenderá que lo hice por su maldito bien.

Me entretenía observando por la ventana de el autobús mientras ignoraba todo lo que Namjoon me decía.
Me había levantado más temprano de lo normal y me dirigía hacia Daegu junto a mi primo, iba a ver a la abuela y de paso investigar donde podía estar Taemin.

Aunque a este paso ya debería estar buscando a Taehyung en Busan.

Joder.

No debía tardar en el viaje hacia a Daegu, temía que ese viejo loco le hiciera algo a mi primo mientras Nam y yo estuviésemos aquí.

—Ya llegamos —habló el moreno tocando mi hombro.

¿Cuanto tiempo había pasado desde que no ponía un pie en este maldito sitio?

Daegu y Busan eran tan, increíblemente diferentes. La primera era una ciudad apagada, en cualquier esquina había un bar y en cualquier callejón un burdel, era un sitio tan distinto a los comerciales sobre Corea que pasaban por la televisión extranjera. Todos los días un asesino diferente, un violador diferente, un robo diferente.

Era el tipo de lugar donde ninguna buena madre querría criar a sus hijos.

Busan, por el contrario, era un lugar cálido y acogedor innovador, lleno de luz, en cada esquina había una cafetería personas buenas y leyes rigurosas que impedían que cosas tan malas pasarán todos los días.

Eso hasta que llegó Taehyung y sus manzanas a arruinarlo.

Ahora sólo era un sitio lleno de personas con miedo a ser la próxima víctima del "Asesino de la manzana".

Me abracé a mi mochila cuando salimos de la estación, las calles no habían cambiado nada. La abuela vivía cerca de la estación en el centro de la ciudad así que no hizo falta de un taxi para llegar allá.

La casa seguía como yo la recordaba, una mansión con las paredes desgastadas por el paso del tiempo. Parecía una de esas enormes casas salidas de una película de terror barata.

El interior no era tan diferente a la fachada, tenía el mismo aspecto viejo y tétrico de la abuela.

¿Han escuchado eso de que La casa se parece al dueño?

Pues esto era algo así.

Mi abuela se levantó de su asiento sin problemas, caminó hacia nosotros con esa gracia y elegancia que la caracterizaba, sonreí un poco al recordar a Taehyung, los dos se parecían tanto.

—¿Como estas abuela? —dije para hacer una pequeña inclinación.

Nada de afecto físico, eso no era propio de nuestra familia.

—Bien mi niña —dijo con sequedad sin importar el apodo— Cuánto tiempo Nam.

Mi primo sólo asintió, bien sabía yo que no soportaba a la vieja.

—La policía anda buscando a Taemin, pero a esta altura creen que ya no está aquí en Daegu —habló mi abuela mientras paseábamos por el jardín de la casa.

Este claramente podría ser un lugar cálido, pero las flores estaban marchitas desde la década en que la madre de Taehyung murió.
Ese día la familia Kim se apagó por completo.

—¿Crees que ya esté detrás de Taehyung? —pregunté y la vieja Kim asintió despacio.

—Lana te quiero confesar una cosa, algo que no quiero llevarme a la tumba —dijo y se detuvo en medio de la caminata— ¿Acaso sabes porque Taemin odia tanto a Tae?

Negué, la verdad nadie sabía el real motivo por el que el tío Kim quería exterminar a Taehyung de una vez por todas.

—Es más simple de lo que piensas, Tae no es hijo de Taemin.

Notita de autor

—Tomen
Se les cayó la cara👽