Narra Skylar

-Ay Chicas, al fin tenemos tiempo para nosotras. Las extrañaba -hablé mientras las abrazaba a todas.

-Sí, hace tanto que no nos veíamos, yo también las extrañé -menciona Blair.

-Igual yo -le siguió Pidge.

-¿Como vas con tu hermano, Pidge? -nos sentamos en nuestra mesa en aquella cafetería.

-Muy bien, siento que ya hemos recuperado nuestro tiempo perdido. Somos más unidos que nunca ahora.

-Y Zoe, ¿cómo vas con Rubén? -cuestiona Kat.

-Increíble, es el mejor de todos, les aseguro -nosotras nos burlarnos en broma de su sonrisa embobada mientras pensaba en su Mate. Ella rueda los ojos mientras ríe y nosotras le acompañamos.

-¿Y? ¿Qué hay de Ale y Tess, Skylar? -Eva toma la palabra.

-Todo normal, Ale está muy atento a las cosas de la manada y Tess pasea por el bosque, como siempre -respondí sonriendo.

-¿Cuántos años ya tienen? Perdí la cuenta -se pregunta Blair.

-Ale diecinueve y Tess diecisiete ¿Y sus hijos?

-Ángel dieciocho recién cumplidos y Jime diecisiete también -responde Zoe.

-Ethan ya está por cumplir diecinueve, mientras que las gemelas tienen dieciséis -le sigue Kat.

-Marcelo tiene dieciocho -continúa Pidge.

-Y Ceci va a cumplir sus dieciséis a finales de éste año -finaliza Blair.

-Qué gusto, chicas -sonreí.

-¿Eva, qué hay contigo? -pregunta Pidge.

-¿Qué conmigo? -se cuestiona confundida.

-¿No hay nadie por allí? ¿Ni... un Mate? -pregunté.

-Nop, nada de nada -hablaba sin darle importancia a aquel detalle.

Nosotras suspiramos pero no preguntamos más ya que conocíamos a Eva, no es como si le importa mucho a decir verdad.

"-Mamá, ¿podrías volver a casa? Necesito comentarte algo... -" habla Ale usando nuestro link.

"-Voy para allá."

-Chicas, debo irme, mi hijo me necesita. Quisiera quedarme más tiempo... -me excusé levantándome apenada.

-Está bien Skylar. Te entendemos.

-No te preocupes, te guardaremos un poco de lo que pidamos.

Me sonríen y yo a ellas antes de alejarme y salir de la cafetería. Me transformé y corrí hasta la casa, llegando en minutos; volví a transformarme en humana y entré en casa. Allí estaban todos.

-¿Qué sucede? -cuestioné.

-La manada del Alpha Connor y la Luna Scarlett, junto con la manada de el Alpha Zeth, nos piden ayuda. -anuncia Alejandro.

Al instante hice una mueca de confusión. ¿Qué habría pasado para que dos manadas importantes necesitasen de nuestra ayuda?

-Expliquen. -pedí cruzándome de brazos.

-Los del consejo y muchas manadas no aceptan la idea de que cazadores y lobos coexistan juntos, y menos que el Alpha Zeth provenga de uno... Nos piden ayuda porque también formamos parte de las manadas más fuertes, como ellos -habla Ryan.

-¿Qué dices mamá? -Tess me mira.

Los miré un momento mientras analizaba todo en mi mente tan rápido como podía. Mencionando los pros y contras de involucrarnos en este problema. Finalmente resoplé y tomé mi decisión.

-Ustedes me conocen mejor que nadie, deberían de saber que siempre apoyaré al que lo necesita. Y si esas manadas nos piden ayuda para poder prevalecer donde están y como están... nosotros los ayudamos.

Mis hijos sonríen ampliamente y me abrazan rápido. Yo sonreí al igual que ellos y besé sus cabezas mientras correspondía a sus abrazos.

-Sabía que elegirías ayudar. -Ryan se me acerca tomando el lugar de mis hijos y sujetando mi cintura.

-Claro que sí.

Me besa los labios tiernamente antes de separarnos y volver mi mirada a mis hijos.

-¿Cuándo vendrán? -pregunté.

-Mañana estarán aquí. -responde Ale.

-Bien, pero desde ya quiero decirles que... enfrentar al consejo no es fácil, necesitamos más que tres manadas para que dejen éste caso. Y probablemente haya una guerra... Ahora yo les preguntaré ¿Están seguros de esto?

-Si no hacemos algo... esas manadas serán destruidas. Yo no quiero eso así que pelearé. -afirma Tess.

-Igual yo. Concuerdo con Tess, esas manadas no hicieron nada malo. Sería injusto para ellos -le sigue Ale.

-A dónde tú vayas, yo voy, mi Luna - Ryan me abraza de nuevo-. No importa que tan peligroso sea, estaré contigo siempre.

-Gracias...

-Bien, entonces veré con Ángel y Ethan las cosas qué hay que preparar para la reunión -menciona Ale antes de irse.

-Yo iré con las chicas para avisarles sobre esto -Tess también se va.

Nos quedamos solos en aquella sala, pero Ryan me abraza por detrás y besa mi cuello.

-¿Película?

-Película.

Sonreí dándome la vuelta y sujetando su mano para ir hasta el solá y sentarnos juntos. Teniendo tiempo libre con mi hijo al mano era bueno de vez en cuando.