— Hyejin — escuché unos susurros — Hyejin, despierta —

— ¿Humm? — pregunté abriendo mis ojos pero no del todo al ser fastidiada por la luz de la vela — ¿Qué pasa, Yonnah? —

— Te dije que te mostraría algo — dijo ella quejándose al ver que me volvía a dormir

— Pero todavía es muy temprano, está todo oscuro — dije alzando mi vista para ver la ventana

— Por eso es perfecto ahora — dijo mirándome fijamente

Me levanté por sus insistencias para salir, pensé que me llevaría tan solo ahí afuera, a unos pasos de la casa. Pero ella me agarró la mano y nos sumergimos en el oscuro bosque.

— Yonnah, creo que es demasiado — dije viendo a mi alrededor y solo llegando a obtener oscuridad

— Solo un poco más — dijo apretando más fuerte mi mano

Cuando ella paró, me sentí tranquila pues ya estamos muy lejos y temí que avanzará más, pero también tenía miedo, todo estaba completamente silencioso y oscuro.

— Hyejin, la otra vez me di cuenta de algo que yo podía hacer, me di cuenta de mi habilidad — dijo soltando mi mano para voltear y verme — mira, ahí — dijo señalando a la oscuridad

— No hay nada — dije sintiendo escalofríos por el silencio

— Sí..., ¿No lo ves? — preguntó viéndome raro — es un venado — dijo acercándose con la vela que tenía en mi mano.

— Dios... — dije retrocediendo al ver un venado muerto

— No, no — dijo Yonnah viéndome alarmada — no tengas miedo Hyejin —

— ¿T-tú lo has hecho? — pregunté horrorizada a lo cuál ella asintió con una sonrisa, eso solo me horrorizó más

— Pero eso no es todo — dijo para ver a ese venado y tocarlo — puedo hacer que haga lo que yo quiera —

— ¿Q-qué? —

— No tiene alma, Hyejin, es un títere, todos lo son — dijo sonriendo — cuando duermen es como si estuvieran muertos — dijo viendo al cielo — así son todos.... — dijo emocionada — Hyejin, ¿Te he contado lo que deseo? —

— No-o... —

— Mi sueño es ser omega —

— ¿Omega? — pregunté sonriendo, pero en realidad me moría de miedo

— Sí, me gusta un joven del pueblo, ese chico llamado Chanyeol — dijo sonriendo — si dejo de ser beta nuestro futuro será hermoso —

— ¿Pero cómo lo harás? —

— Tu prima lo hará, sé que tiene una piedra mágica — dijo acercándose a mí pero yo me alejé inmediatamente pues sus manos estaban llenas de sangre

— Vámonos a dormir — dije, no quería alterarme

— ¿Le tienes miedo a la sangre? — me preguntó con una enorme sonrisa — no le tengas miedo, es solo sangre — dijo riéndose — ¿Me ayudarás? —

— ¿A q-qué? —

— A tener esa piedra, quiero mi deseo —

En ese momento sentí como algo negro empezaba a bajar los árboles, me estaba asustando cada vez más.

— No tengas miedo, Hyejin, si estás de mí lado nada te pasará — dijo sonriendo — nada nos pasará, estarás muy bien —

Las semanas siguientes a eso fueron horribles, no podía conciliar el sueño fácilmente, siempre veía como Yonnah salía en las madrugadas y sabía para qué.

— Jade, tenemos que hablar — dije acercándome a ella sin dejar de ver a todos lados

— Dime — dijo viéndome preocupada — te ves mal —

— Eso es lo de menos, quería saber si pued... — fui interrumpida por el sonido de la puerta

Vimos a Yonnah pasar por delante de nosotras con lágrimas en los ojos.

— Lo voy a matar — la escuché decir cuando pasó por mi lado, no sé por qué solo escucharla decir eso me dió escalofríos

— ¿Qué pasó? — preguntó Jade preocupada

— No lo sé — dije sintiendo un dolor de cabeza enorme — ¿Jade, le tienes miedo a la oscuridad? — le pregunté sintiéndome desesperada

— No, no tiene por qué dar miedo, ¿Tú le tienes miedo? —

— Yo sí, le tengo pavor —

Ese día todo fue algo tranquilo, no vi a Yonnah en todo el día, todo el día estuvo en su cuarto.

— ¡Jade! — exclamó mi mamá llegando emocionada — ¿¡Es verdad lo que dicen en el pueblo!? — preguntó sin borrar su sonrisa

— ¿A qué te refieres mamá? — pregunté viendo como Yonnah salía de su cuarto con los ojos hinchados

— Sí... — dijo Jade sonriendo — estaba pensando decirlo pronto, pero el tiempo corrió sin darme cuenta — dijo riéndose

— ¿Qué pasa? — preguntó Yonnah

— ¡Estoy embarazada!, ¡Tengo seis meses! — exclamó Jade emocionada, destapando su vientre un poco — ¡Y Chamyeol me propuso matrimonio! — exclamó mientras saltaba

En ese momento mi única reacción fue ver a Yonnah quien por alguna razón desapareció en la nada.

— ¿No me vas a felicitar, Hyejin? — me preguntó Jade

— ¡Felicidades prima! — exclamé sonriendo, pero por dentro solo podía sentir escalofríos

Esa noche tampoco pude dormir, pero esta no fue igual que las anteriores. Esa noche por alguna razón me levanté y me dirigí al cuarto de Yonnah, cuando entré no había absolutamente nadie pero a través de la ventana la pude ver, dirigiéndose a otro lugar, esta vez no fue el bosque.

La seguí, algo en mi decía que no vaya, pero no le hice caso a mis instintos, otra vez. Cuando la vi entrar a una casa, me pareció raro, pero cuando me fui acercando escuché su voz.

— Todos duermen, que lindo — escuché que decía mientras reía — ¿Te querías burlar de mí, Chanyeol? —

— S-sueltame — escuché la voz de ese hombre

— No, tus padres ya están muertos y pronto los seres de la noche vendrán por ellos para dejarlos sin una gota de sangre — dijo sin dejar de reír — pero tú, amor, tú vas a sufrir mucho por esto, no simplemente te degollaré la garganta para ver como te ahogas con ella, no amor... — la escuchaba dar pasos fuertes al caminar, pero no sabía para donde — tu amada morirá al igual que tú hijo y verás todo eso —

— No-o —

— ¿No?, hiciste mal en meterte con ella, yo soy mejor que ella y eso solo lo verás cuando no exista esa mujer — dijo riéndose

— Primero me matas —

— Tienes razón, si te mato ella se sentirá tan devastada que preferirá la muerte y entonces la piedra será fácil de alcanzar, luego con esa piedra podré regresarte a la vida y hacer que me ames —

Luego de eso escuché un grito que me dejó sin aire, sentí como todo mis sentidos se paralizaban.

— ¿No piensas salir Hyejin? — escuché la voz de Yonnah cerca mío — vamos por esa piedra — dijo apareciendo frente a mí

Tenía una mirada retorcida, su vestido estaba lleno de sangre.

— ¿Q-qué hiciste? — pregunté sintiendo como empezaba a llorar por el miedo 

— ¿Quieres ver lo que hice? — me preguntó sonriendo — ¿Quieres ver la obra de arte que hice Hyejin? —

— Yonnah, ¿Qué quieres? — pregunté alejándome

— No corras, no te haré nada, no a tí, pero creo que Jade debe empezar a correr, la noche me pertenece a mí — dijo para volver a desaparecer