En todos esos 9 años que pasaron, no sabia como hacerlo, no tenía la suficiente fuerza, el rey de picas se había apartado de los demás reinos. El reino de corazones no podía pasar, ningún reino lo podía hacer, trataron como podían, pero el tratado de paz temporal no dejaba que haya alguna intervención en el reino encerrado.

En especial para el reino de corazones, porque la reina se sentía afectada, por lo que paso, después de todo todos los reinos terminaron por enterarse lo que paso, Miguel quería ver a su hermano, aunque ahora menos podía, su pequeño hijo de 9 años estaba ahí, heredero del reino, el pequeño principe de los corazones.

Varias cosas salieron a la luz, en  algún momento tenía que pasar, la antigua reina de Picas, se había suicidado por amor, ella estaba enamorada de la reina de Diamantes, aunque la otra mujer no acepto los sentimientos de ella.

Aquella reina reveló todos su sentimientos, creyendo de que la persona amada lo aceptaría, pero envano fue, ya que la reina ya estaba esperando un hijo, del rey de diamantes, el cual aunque no lo parecía, ella amaba al rey Martin, Maria lo amaba, aunque tenía sus conflictos, en algún momento dado lograron amarse.

Eso solo destrozo el corazón de la reina de picas, le dolió, no sabia si seguir adelante en una boda de conveniencia o buscar otro camino, ella eligió el segundo, buscando un camino horrible, colocando una cuerda en la terraza más alta, para amarrar en su cuello y luego saltar, la peor parte fue el hecho de que el consejero del Rey fue el primero que la vio, aunque ya muerta.

Esos sucesos desencadenaron, la desesperada forma de que el rey de Picas busque la manera de tener un heredero, y su primer opción fue el Joker, el cual ya lo tenia como prisionero, poco le valía lo este pensaba.

Primero era tener un heredero, y así lo logro, después de matar a su guerrero numero diez, ordenar llevar al prisionero de vuelta a su habitación, hasta que despierte del somnífero. Y solo después de eso, podría buscar la forma de tener a su heredero, desde aquella noche 9 meses tuvieron que esperar, y tuvieron al príncipe de picas.

En aquellos 9 años que pasaron para el Joker fue un tortura, se le prohibió poder ver a su hijo, aparte de que se la pasaba encerrado en su habitación, solo salía a bañarse, y en algunos casos cuando el rey estaba de humor, podía salir afuera pero con él al lado y con dos guardias. Mientras que el consejero era el que cuidaba al príncipe, a veces en las noches, el consejero aparecía, solo a escondidas, para Julio poder ver a su hijo, aunque este dormía.

Ahora el Joker con sus 25 años estaba en la espera de otro hijo, mientras miraba afuera, por la ventana, quería irse, con cada que miraba al lugar donde su primer amor murió, solo podía sentir sus lágrimas caer en automático, mientras aun su corazón se apretaba, aun le dolía como aquella vez.

Se sentó en su cama, poco podía hacer ahí encerrado, odia su vida, aparte de que antes trato de quitarse su vida, pero a cambio fue descubierto, y terminaron sacando de su cuarto, lo que posiblemente podía ser utilizado para poder cometer ese acto de nuevo. Toco su vientre, sabía que en cualquier momento lo tendría, aunque no tenía idea a que hora. - Sólo quiero irme y ser libre. - Sentía que si seguía así no podría aguantar más años, lo más extraño para él era que su primer hijo no tenía ninguna marca que indicará que era el Joker, además tenía una sospecha de que el hijo que venía será el próximo Joker, y una vez naciera, Julio tendría 10 años de vida, pasado eso tendría una muerte natural. - Serás tú el siguiente. - Pensando que todo era una maldición de familia, - Creo que todos hemos sufrido, yo no quiero que eso también te pase, ya no. Suspiro, miro al piso, cuando sintió que algo se derramaba.