Una risita salió de los labios de Severus al ver como Potter derrama sobre si mismo un poco de jugo de calabaza, Lupin le reprende por su comportamiento y Black al igual que él pega una risa muy fuerte burlándose de la mala suerte de su mejor amigo.

-Enserio James compórtate, no hagas ninguna tontería- reprendió Remus a su amigo, él no puede creer que James haga una tontería como esa y justamente ese día que Severus les invito a elegir la ropa de bebes.

-¡No fue mi error!"- chillo James ante tanto regaño de su lobuno amigo –Casi me caigo y tuve que equilibrarme para no caer directo al suelo-

Sirius se limpió algunas lágrimas que salían por reírse tanto –Venga ya dejemos en paz al pobre de Cornamenta-

-¿Cornamenta?- dijo Severus confundido por aquel extraño nombre que le había dado Black a Potter.

-Cornamenta es el nombre que le dimos a James- respondió Remus –Los cuatro tenemos apodos distintos-

-Si por ejemplo yo soy Canuto- Dijo Sirius orgulloso de su apodo –Ah y el de esos dos son Lunático y Cornamenta- señalo a sus amigos aburridos.

James dio una risa seca, a veces la actitud narcisista de Sirius salía a floté, suspiro –Mejor que tal si vamos a ver las ropas de los niños-

Remus asintió, Severus camino hasta la tienda, el azabache vio varios trajes de recién nacidos que les parecía lindo, fue hasta un perchero en esta cuelga varios mamelucos hermosos. James se giró en seco enfrentando a sus amigos.

-Muy bien aclaremos algo, quiero pagar la ropa yo- dijo James firme sin flaquear.

Sirius rodo sus ojos –Bien pero quiero que sepan que si a nuestro chico leda hambre yo pagare su comida, después de todo todavía tengo dinero-

Remus miro a Sirius y luego a James –Oigan han pensado que yo también quiero colaborar con algunas cosas- dijo Remus indignado por que el par de tontos lo hayan dejado afuera.

-Calma Lunatico, no queríamos dejarte afuera es solo que- James miro a Sirius para que le ayudara con esto-

-Estamos emocionados con que nuestro chico ya nos tenga confianza que queríamos demostrarle que lo apreciamos mucho y que mejor manera que ayudarle- Dijo Sirius con naturalidad que no se puede notar que todo lo acaba de idear justo ahora.

-Deja de idioteces, te conozco desde éramos niños, solo apresurémonos con todo esto- Remus suspiro entro a la tienda para hacerle compañía a Severus.

.

.

.

Peter sintió un como su rostro se calienta, Andrómeda le vio en ese estado y le dijo que debería de ir de inmediato a la enfermería antes de que se ponga mal. Él asintió pero la verdad no quería agobiarse tanto así que decidió irse a su habitación no le importaría que la profesora Minerva le regañase por no entrar a su clase.

Pero sintió como sus piernas flaquean, se recostó en la pared intentando calmar su respiración, se estremeció al sentir como alguien le toca su hombro miro atrás de el –Lucius- susurro algo cansado.

-Peter ¿te encuentras bien?- pregunto preocupado al ver a su novio en ese estado, se acercó a él, intento tomarlo de sus brazos pero paro al sentir un aroma extraño –Cariño te has puesto una colonia bastante peculiar- era un olor extraño jamás lo había olido.

No era desagradable más bien le fascina, negó al ver que se preocupa más por el olor de su amado que llevarlo a la enfermería, lo tomo en brazos y corrió hasta donde esta Madame Pomfrey.

Peter intento estar despierto pero no podía sentía su cuerpo pesar.

.

.

.

Era tarde cuando Severus regreso al colegio, su salida fue divertida al ver como James y Sirius peleaban por elegir un mameluco, muchos de sus disputas le toco a Remus separarlos. Apretó el libro de pociones que tanto había querido leer, aun no podía creer que Remus le obsequiara.

Miro a Lily caminar en los pasillos, se aproximó a ella –Lily- llamo Severus con felicidad tenia tantas cosas que contarle.

Lily paro en seco y miro a Severus –Oh hola Sev- dijo con tono aburrido.

-Lily no te imaginaras las cosas que pasaron hoy- dijo Severus emocionado –Fue un lío todo pero al final fue divertido- apretó el libro que tiene en sus manos –Tenias razón debí de darles una oportunidad desde el principio, yo creo que-

-Severus- Lily le interrumpió –Tengo tarea que hacer no puedo escucharte ahora-

Severus miro extrañado a su amiga –Lily si quieres te puedo ayudar con tu tarea-

La pelirroja rodo sus ojos –No quiero hacerlo yo misma, además creo que debes estar cansado por estar afuera y perder el tiempo-

-¿Perder el tiempo? No estaba perdiendo el tiempo, estaba buscando las ropas de mis hijos- dijo Severus enfadado no comprendía la actitud de su amiga.

Lily torció sus labios con molestia –Si bueno a mi parecer es perder el tiempo- ella suspiro exasperada –Sabes mejor me voy tengo cosas que hacer- al terminar de hablar se dio la vuelta y siguió su camino.

-Lily- susurroSeverus dolido por aquel recibimiento, camino hasta su habitación con pasostristes. 

Lily me dueles, :,v, ay mi pobre bebe, ¿que creen que le esta pasando a nuestra pelirroja?